Reseña: Irresistible, de Mark Wheatley y Marc Hempel

Los estrenos televisivos o cinematográficos siempre traen cosas buenas para el comiquero de pro. Un ejemplo claro es el estreno y éxito que ha tenido la primera temporada de Sandman en Netflix. No conozco a nadie que no haya quedado encantado y conozco gente que se ha hypeado muchísimo y (ahora) quiere saber más. ¿Qué ocurre? Pues que aparte de todas las reediciones y en diferentes formatos que están llegando a librerías para el interesado, para los que ya hemos leído todo y más de Sandman, encima ven la luz (algunas por primera vez) cositas relacionadas de algún modo con todo lo creado por el maestro Neil Gaiman. Irresistible es la prueba de ello. Una obra que como bien indica Dolmen Editorial fue publicada en el pre-inicio del sello Vértigo de DC Comics, y que fue una obra auto-conclusiva con la que muchos quedaron encantados por su originalidad (me consta), y que ni decir tiene que muchos (también) la estábamos esperando tener así en formato integral, tapa dura, como está de moda ahora tenerlo todo-todito-todo.

Mark Wheatley y Marc Hempel, pioneros creativos que lanzaron Blood of the Innocent, Mars y muchas otras creaciones, exploraran un tema súper atractivo en Irresistible. A pesar de sus vibrantes e increíblemente variadas carreras en solitario, Mark Wheatley y Marc Hempel han sido colaboradores frecuentes y con éxito. Su trabajo conjunto ha incluido a Tarzán, Jonny Quest, Titanic Tales y Doctor Cyborg, entre otros proyectos. ¿Lo último? Esta reedición completamente restaurada y lujosamente producida de su aclamada novela gráfica Breathtaker (Irresisitible) que hicieron para Titan Comics y que Dolmen Editorial ha tenido a bien publicar en nuestro país para deleite del aficionado. Una obra agotada hace tiempo, originalmente serializada y luego recopilada en tomo que fue uno de los títulos más vendidos por el sello Vertigo en sus más de veinte años de historia.

Sirena, tentadora, sensual, come-hombres; podéis llamar a Chase Darrow como queráis pero tened cuidado. Sea cual sea la etiqueta que se elija, nada quita que ella sea hermosa, atractiva y una potencia sexual. Una chica agradable que posee el poder de amar a un hombre hasta la muerte. Chase Darrow es una súcubo y si no conoces ese término…, o por el contrario sí que lo conoces, estaremos de acuerdo en que suena a peligroso. Cosa que es cierta y si eres hombre o mujer, si caes de bruces ante la hermosura de un ser que te sube la libido con tan solo mirarte… o rozarte; estás perdido.

Perdido en la naturaleza del placer.

¿Pero qué es Irresistible? Por un lado es una historia de Terror. Una mujer con el poder de drenar a los hombres su fuerza vital… pero con mucho de romance por medio porque esos hombres son víctimas voluntarias. Pero también estamos ante una historia de género negro porque Chase ha sido designada por el gobierno, criminal en busca y captura. Por otro lado, también tenemos una historia de superhéroes pues The Man -una figura popular de la televisión y el merchandising que también tiene poderes y habilidades más allá de los del hombre promedio-, usará sus dones para intentar cazar a Chase. Necesita darle un empujón a sus índices de audiencia.

En 1990, Mark Wheatley y Marc Hempel se unieron y crearon un cómic como nunca antes se había visto. Breathtaker: Love Death Sex Power era una novela gráfica en Vertigo antes de que existiera una impronta de Vertigo. Ahora, más de veinte años después, el dúo regresa y remasteriza su serie original e incluso me consta que se preparan para hacer la tan esperada secuela. Y aquí está. Ha llegado. Una edición conmemorativa del 30º aniversario de su publicación con más de sesenta páginas nuevas y material exclusivo, incluyendo un nuevo enfoque de la historia del Puto Amo.

Perdérsela no es una opción.

Reseña: DC Icons. Batman. El Hombre Murciélago, de José Luis García López y VVAA

Los amantes del buen cómic ochentero, el mejor, el mejor de lo mejor, sabrán que están de enhorabuena si se hacen con joyitas recopilatorias de la obra José Luis García López, en este caso, con el orejas picudas en la época dorada de DC. Qué no la Edad de Oro, ¿eh? Con nombre y apellidos muy comunes, pero con un don para el noveno arte nada habitual, el señor García López es y fue un maestro español que triunfó al otro lado del charco en la potente DC de los 70-80. Aun nacido en Pontevedra, pronto emigró a Argentina junto a su familia y a mediados de la década de los setenta se trasladó a nuestra amada Nueva York, donde todavía vive y sigue dibujando cómics y realiza arte promocional, principalmente para DC. Como bien indica ECC Ediciones, por sus talentosas manos han pasado los grandes iconos de la editorial, como Batman, Wonder Woman y el Hombre de Acero. Destacando las historias recopiladas en Grandes Autores de Superman: José Luis García-López- Superman contra el Mundo o Superman y los mejores superhéroes del mundo; dos tomos súper indispensables y de buena calidad como este que os reseño hoy.

Comenzaré diciendo que ya sólo por tener un one-shot como fue El Corazón del Vampiro, número que estuve años buscando para mi colección como amante del género de Terror en todas sus formas… Ya sólo por eso, este tomo era indispensable para mí. Una historia donde Alfred y Bruce están a millas de distancia de la civilización cuando su automóvil se calienta misteriosamente y acuden a pedir ayuda a casa cercana abandonada que tiene todas las ventanas tapiadas. Buscando agua para el radiador (¡Años 80!), en el interior descubren un ataúd y un candil muy antiguo que Bruce rompe accidentalmente. Al separarse para continuar con la búsqueda, son atacados por un vampiro. Gustav Decobra sale del ataúd y ataca a Bruce, quien se pone en modo Batman rápidamente y…

Tenéis que haceros con esta joyita.

Y más, obviamente, bastantes números más en un volumen de casi quinientas páginas que vale su peso en oro. Encontraréis aventuras donde Superman y Batman investigan la muerte de tres mafiosos y cuando se dan cuenta se topan con un complot para asesinar a todos los criminales de la Tierra. Pero no es una trama muy loca, todo lo contrario, molona a mil cuando te enteras que el cerebro criminal de este plan es un viajero del tiempo llamado Robespierre Two, que quiere evitar un futuro catastrófico destruyendo a las peores lacras de la humanidad. Y más. Bruce Wayne y/o Superman siendo testigos de horribles tramas como la de que muchos de los superhéroes de la Tierra están siendo sustituidos por clones. Y… ¿todo indica a qué los culpables es una oculta tribu africana? Giro tras giro. Wonder Woman destruye un misil guiado a Londres. El Dr. Psycho usa su poder mental sobre el sargento Rock, ¡y Rock apunta su arma a la Mujer Maravilla! Un jefe pandillero amante del wrestling entrena a dos luchadores profesionales y los instruye en movimientos capaces de evitar todos los golpes que Batman es capaz de dar después de haberlo estudiado a fondo. Y cómo no, one-shots que eran un disparo al corazón, de fuerza poderosa para el atractivo en kioscos como ¡El verdadero Batman será el siguiente en morir!, donde en una recaudación de fondos de una fiesta de disfraces, un hombre vestido como Batman muere en los brazos de Bruce Wayne; se le quita la capucha y se le identifica como el teniente Bucky Dunlop. Las palabras EL VERDADERO BATMAN SERÁ EL SIGUIENTE EN MORIR ha sido tatuado en su frente. Gordon está allí y ordena a todos los asistentes, incluido Bruce, que se aparten pues sabe algo que nadie sabe y…

Con una grandiosa carrera detrás, José Luis García López es todo un referente en el mundo de los superhéroes. No conocerlo, a poco que ames el pijameo, se puede considerar delito. Se encargó del apartado gráfico de grandes títulos como Jonah Hex, Hercules Unbound y Deadman, entre otras muchas. Desarrolló la serie limitada de ciencia ficción Twilight junto a Howard Chaykin, una maravilla que espero que se recupere pronto en nuestra querida tierra de conejos.

También colaboró en las cabeceras Batman Confidential, Universo DC: Legados, y participó en las antologías Wednesday Comics y Batman: Black and White. Pero más. Bastantes más. Un autor del que te enamoras fácilmente y que marcó el estilo de la Casa DC a finales de los 70 principios de los 80. Y eso no es moco de pavo.

Reseña: Tarzán 1979-1981, de Archie Goodwin y Gil Kane

Pelotazo en gordo que esto llegue así a nuestros días, en este formato, en una edición genial en tapa dura y a todo color como debería estar siempre el mejor Tarzán en formato cómic publicado. Gil Kane y Archie Goodwin dándolo todo en su mejor época comiquera. El que llegó después de otro potente como fue el de Joe Kubert pero que realzó más si cabe la figura del hombre-mono más popular de todos los tiempos. Publicadas en USA entre 1979 y 1981 esta tiras de cómics son las aventuras de Tarzán más fáciles de recomendar por su potente atracción y enganche lector a poco que te pongas con su lectura. Gozan de ese no-sé-qué que tenían los cómics ochenteros en los que con casi cualquier aventura en las exóticas junglas africanas de gente que llega, que viene con malos propósitos, con buenos o les son indiferentes porque ya viven allí; todas y cada una son aventuras atractivas que querrás terminar de leer.

Lo dice la sinopsis; bien sea tras el rescate de un niño malcriado, la persecución de un feroz león herido, la lucha contra un grupo de mercenarios con armas modernas por salvar a una joven de un multimillonario despechado…, los autores se permiten el lujo de convertir de nuevo a Tarzán en Lord Greystoke y mudarlo a Nueva York por cuestiones de negocios. Y allí juegan a enfrentarlo con King Kong, o a todo lo que puede parecerse a King Kong en la forma de uno de los amigos simios del pasado remoto de nuestro héroe, ahora convertido en atracción de feria y asesino. Mejor contado -sin mucho spoiler-, imposible.

Aventuras de Tarzán que en un principio y a nivel europeo sólo se ofrecieron a lectores de habla francesa en folletos distribuidos en kioscos y que poco después comenzaron a aparecer en el resto de países del viejo continente en formato álbum europeo. Creo recordar que comprendieron dos volúmenes. Tarzán 1979-1981 es una vez más, una celebración, un integral, un tomo, un volumen, de esos que muchos jamás pensábamos volver a ver publicado como novedad. Y es que pocos artistas son capaces de representar escenas de acción con tanto dinamismo e intensidad como las que forman en su conjunto (guión-dibujo) los señores Archie Goodwin (1937-1998, maestro de maestros que nos dejó de forma inesperada) y Gil Kane (grandioso el artículo de Abrahan García que contiene el tomo donde nos habla de la calidad de los trabajos del señor Kane nacido en Estonia y que nos dejó ya en el lejano año 2000). Como dice Rafael Marín (coordinador de esta genial colección de grandes recuperaciones del cómic que está elaborando Dolmen Editorial en su Colección Sin Fronteras), Gil Kane nos entregó un Tarzán joven, ágil y moderno. Hoy en día lo denominarían fibroso y a-tope-de-power, y esto último lo digo yo. Y también alego que (insisto) se nota bastante que los dos maestros estaban aquí en el apogeo de su arte. Firmaron en estas aventuras las adaptaciones consideradas entre las más fieles de la obra de Edgar Rice Burroughs, confirmando un Tarzán entre las leyendas que habían pasado del formato literario al noveno arte con gracia y salero. Al igual que Conan.

Historias clásicas de la jungla, entretenidas, luchas contra monstruosos animales, nativos, hombres blancos malvados y codiciosos con tramas no muy profundas pero que te hacen pasar un buen rato de lectura orientado a la acción. Son viejos cómics de aventuras con esos códigos, esa magia que no pasan desapercibidos para nadie. El dibujo de Kane es uno de los que tienen sitio en mi panteón personal. Historias que ganan obviamente por el color.

Reseña: Robin y Batman, de Jeff Lemire y Dustin Nguyen

Soy de esos que nunca le gustó el Robin clásico. Pero también el mismo que cada vez que ve una obrita que me puede reconciliar con él, lo intenta. Siempre dije que tiene que haber un autor, un guionista, a las malas únicamente un dibujante, que me satisfaga con las aventuras de lo que se supone un Robin clásico como tal. Las evoluciones del personaje sí que me gustaron la mayoría y hay por ahí aventuras maravillosas sobre ellos que he leído. Y os tengo qué decir que el día ha llegado. El primer cómic que he disfrutado a tope con un Robin clásico como referencia es este que hoy os reseño: Robin y Batman, de Jeff Lemire y Dustin Nguyen. Con sólo cambiar una cosita de la historia primordial, lo que me ha gustado esta mini novela gráfica.

El guionista Jeff Lemire y el dibujante Dustin Nguyen nos traen este conmovedor relato sobre los inicios del primer Chico Maravilla en un volumen que recopila íntegra la miniserie original Robin & Batman. El cómic que recomendaría leer como origen del personaje. A groso modo, Dick Grayson ha venido recientemente a vivir con Bruce Wayne y está entrenando con él. Bruce siente que ese chico tiene demasiado rencor por el asesinato de sus padres (le recuerda a alguien) y no está listo para estar en el campo de batalla luchando contra el crimen con tanto odio dentro. Dick Grayson tiene una vida nueva. Ha presenciado el asesinato de sus padres y, ahora, está a cargo de Bruce Wayne. Pero el millonario no es un hombre normal. Es Batman, el héroe de Gotham City, y Dick está llamado a convertirse en su ayudante en la lucha contra el crimen. El joven Robin va a empezar un viaje repleto de personajes siniestros como Killer Croc, de prodigios como la Liga de la Justicia y de amigos como Alfred Pennyworth o los futuros Jóvenes Titanes. Pese a todo, esencialmente, la historia trata de los sentimientos de Dick y de cómo tiene que adaptarse a su nueva vida con el señor Wayne.

Aunque hay muchas versiones de la historia en las que Dick vive con Bruce Wayne y se entrena para convertirse en Robin, esta es una de las versiones menos convencionales de esa historia. Bruce no es tan amable con Dick como lo han retratado otros autores, los dibujos animados o los tebeos antiguos. Y luego están All-Star Batman y Robin, de Frank Miller que ufff… He leido reseña norteamericanas que se centran especialmente en comparar la versión de Frank Miller con la de Lemire y sacarle bastantes más pros que contras a esta última. Y también entiendo porqué a algunos fans no les gusta esta versión de Bruce Wayne. Pero en mi caso no me importó porque se nos está hablando, sobre todo, del personaje-persona Dick Grayson.

También me gustó que el villano de la historia fuese Killer Croc y que desarrollara un poco su origen en este cómic. Es un ser que está conectado con el pasado de Dick Grayson antes de que se convirtiera en Robin, ya que Killer Croc tiene vínculos con Haly’s Circus (en esta historia, por supuesto). Mola esa relación creada por Lemire. Tiene una motivación interesante.

¿Las ilustraciones? Pues qué os voy a decir del crack Dustin Nguyen. Agradables, excelentes, recrean la acción de forma maravillosa cuando toca y captura muy bien las emociones de Dick Grayson. Me encanta la estética y la paleta de colores usada para la ocasión.

Buena historia, personajes y construcción del mundo. ¿Bruce es demasiado malvado y se siente fuera de lugar? Quizás es que a algunos no les gusta ver la realidad. Imaginen a una persona que ha sufrido en la vida todo lo que ha sufrido Bruce. A ver si va de sonriente y bonachón por la vida.

Reseña: Centaurus, de Leo, Rodolphe y Janjetov

Lo digo ahora y lo diré siempre. Nada como tener recopilada una obrita en un genial tomo en tapa dura, llevadero y magnífico para disfrutar en cualquier parte. Además, de un cómic europeo de buenos autores y con tema apocalíptico de por medio como es este volumen de Centaurus, de Leo, Rodolphe y Janjetov que publicó ECC Ediciones el pasado mes de agosto y que por lo que sé para muchos ha pasado desapercibido.

Como bien se cuenta, Leo es todo un referente de la ciencia ficción contemporánea en el cómic europeo gracias a Los mundos de Aldebarán (https://www.cronicasliterarias.es/?p=6223); pero ahora se reencuentra con su compañero de equipo creativo en Kenia, Namibia y Amazonia (https://www.cronicasliterarias.es/?p=8187): el guionista Rodolphe. Junto al dibujante Zoran Janjetov, dan forma a Centaurus, una fascinante saga recopilada íntegramente en este volumen que os comento y del que paso a desglosar alguna de sus virtudes pues…

…entre la esperanza de haber llegado finalmente al final de un largo viaje de cuatrocientos años y la responsabilidad de garantizar la seguridad de los sobrevivientes de la Humanidad, la presión que descansa sobre los hombros de los líderes de Mundo-Nave se hace insoportable. Y eso sin contar con misteriosos elementos ajenos que van surgiendo en la comunidad de sobrevivientes que aún queda mientras recorren ese vacío interestelar que ha logrado engullir la mente de cantidad de valerosos exploradores. Y es que para el equipo destacado en el potencial planeta anfitrión que acaban de encontrar, la situación es al menos igual de crítica, incluso sangrienta… y ha llegado el momento de las elecciones. A pesar de sus tics, su guión en principio facilón y sus estereotipos, Centaurus es una obra cuya lectura engancha y despierta rápidamente la curiosidad con lo que propone. La fuerza de la serie radica en la continua mezcla de géneros: space-opera, aventura clásica pulp, thriller y politiqueo del bueno.

Leo y Rodolphe logran conducir varias intrigas en paralelo y unirlas en una conclusión explosiva. Evidentemente, algunas situaciones y protagonistas son más que caricaturescos que otros. En este punto, puedes tener la sensación de estar viendo una de esas pelis de acción que se saca de la manga Amazon o Netflix con un protagonista de moda y no deja ser una aventura más de CF, palomiteo del bueno y con intrigas de palacio de las que quieres enterarte de todo mientras echas un par de horas en el sofá de tu casa. La psicología de los personajes en Centaurus puede sacarte una sonrisa ya que resultan simples y monolíticas, sí. Tenemos a cabezas de turco para casi cada uno de los puestos de trabajo fuertes del nuevo gobierno. Pero es que por mucho que quieras innovar, esto es así. ¿O no somos los humanos y nuestros sistemas, trocitos cortados de un mismo patrón? Pero con el paso de las páginas la mermelada se asienta, el suspense está ahí y los objetivos más que conseguidos. Y gustan. Por eso ya se ha anunciado un segundo ciclo (Europe) para esta obra de CF que a muchos nos ha encantado.

Gráficamente, el clan Janjetov (Zoran en los dibujos, Jr. en los colores) se ha aclimatado a la perfección a las exigencias de la saga. Si la huella de Leo permanece visible aquí y allá en el recodo de un bosque o de una discusión llena de lágrimas, el estilo planteado, al límite de lo estático, de las ilustraciones, aporta cierta gravedad a la narración y refuerza el lado desesperado de esta emigración forzada. Un buen ejemplo de cómo hacer buen cómic. A lo que debéis sumar la narrativa épica más clásica, un atractivo para cualquier lector que se precie.

Reseña: Planetary. La Saga Completa, de Warren Ellis y John Cassaday

Todos aquellos que aún desconocen de qué va realmente Planetary y están pensando en hacerse con esta maravilla de cómic de una vez por todas…, harán bien en aprovechar la oportunidad que brinda ECC Ediciones de hacerse con toda la obra en un sólo tomo. Recién publicado este integralazo, los que sepan y puedan, terminarán sabiendo que nunca se arrepentirán. Y diría que por varios motivos. Por que el desconocimiento es dañino, pero también bueno en el sentido de que insta a estar constantemente intentando encontrar joyitas que le marquen. Y por mor del destino es cierto que podemos pasar por alto algunas. No obstante, diría que raro es el lector acérrimo comiquero que no ha oído hablar alguna vez, y bien, de Planetary. Pues estamos ante una de las obras punteras de uno de los mejores guionistas en activo como es el señor Warren Ellis.

Planetary, quizás considerada una obra de culto, o mejor dicho, una las obras de culto de Warren Ellis, es una serie limitada de cómics ideada por el guionista británico e ilustrada por John Cassaday, que fuera publicada en su día por la editorial norteamericana Wildstorm y a la postre en diferentes formatos en nuestro país de la mano de ECC Ediciones. Y ya os aseguro que el formato ideal es el que hoy os reseño por llevadero, por completo y porque presenta toda la obra bien recopilada en un formato que se disfruta. Y es que la huella de Wildstorm en DC aún queda pese a que ya no existe. Wildstorm fue una editorial que en su apogeo, albergó una serie de proyectos estupendos, muchos de los cuales fueron cortesía de Warren Ellis. Una serie de títulos donde descubrir el amor de este guionista por la Ciencia Ficción y la sátira mordaz de la que goza este señor. Universos perfectos orientados a un público adulto, al que ya entramos muchos hace tiempo. Y mientras Stormwatch y The Authority podrían ser las contribuciones más duraderas de Ellis a la casa DC, Planetary es, sin duda, su logro más importante en Wildstorm y del que oirás grandes palabras de todo aquel que la haya devorado por ser “fácil” de asimilar, original, diferente, atractiva, tocando a su vez temas que en muy pocos (poquísimos) cómics se tratan.

Pongámonos en situación: Planetary narra las aventuras de un trío de misteriosos personajes que se denominan a sí mismos Arqueólogos de lo Imposible y que trabajan bajo la consigna de Es un mundo extraño…, mantengámoslo así. Tres personajes que recorren el mundo en busca de rarezas y prodigios y que van descubriendo hechos, sucesos, pruebas… que ciertos departamentos y gobiernos mundiales nunca quisieron que fueran desvelados. Son arqueólogos del misterio, exploradores de la historia secreta del planeta, los que trazan las fronteras invisibles de un mundo fantástico que nos rodea aunque normalmente muy pocos pueden verlo. Con personas a las que preguntarles sobre la veracidad de cualquier leyenda o conspiración de cualquier lugar del planeta, seres que rara vez no tienen información sobre ello. Una serie que destaca por lo actual y puesta al día de sus argumentos, personajes y lugares comunes de la ficción del siglo XX. Tratando desde cultos secretos, grietas en el tiempo, pasando por monstruos clásicos o historias chinas de fantasmas. Tramas plagadas de referencias a otras historias, si bien se cambian nombres y situaciones tanto para crear un universo propio como para dejar de pagar derechos de autor, seamos sinceros. Un cómic hecho cien por cien para los que nos gusta lo paranormal.

Más allá de la narración y la ambición de alto concepto, lo que hace que Planetary sea una de las mejores obras de Ellis y del cómic, en general, es que trata lo sobrenatural en el sentido inusitado del optimismo sobre todas esas leyendas que circundan nuestro planeta, muchas de las cuales aún a día de hoy no podemos explicar. La escritura de Ellis tiende a ser oscura y cínica. Aquí encontraréis protagonistas sarcásticos y amargados, los mundos que habitan están llenos de corrupción…, pero no hay que olvidar que Cassaday a los lápices, fue una de las principales razones del éxito creativo de Planetary. Desde los primeros números el arte de Cassaday fue algo tosco pero es de esos cómics donde se nota una enorme evolución en el proceso de creación en una  trama o serie de tramas muy de estilo cinematográfico, sinceramente no sé como Netflix o HBO no se han fijado ya en este cómic ahora que buscan argumentos para satisfacer a los aficionados al fantástico.

Planetary: La Saga Completa recopila los veintisiete números de la colección original, así como los especiales Planetary Preview, Planetary/Authority: Gobernar el mundo, Planetary/JLA: Terra Occulta y Planetary/Batman: Night on Earth, que cuentan con la colaboración de autores como Phil Jiménez, Andy Lanning o Jerry Ordway.

Una joya.

Reseña: Vacaciones de Ensueño (Integral), de Vittorio Giardino

En esta maravillosa época de los integrales que estamos viviendo, a poco que te mole el cómic europeo, Norma Editorial debe ser uno de tus referentes en cuanto a compras, o como mínimo, un lugar dónde poner el ojo cada mes si no quieres pasar por alto títulos muy chulos que se están publicando. Van a la moda, van con la temporada, tienen en cuenta cantidad de cositas con cada publicación mensual y a las pruebas me remito con Vacaciones de Ensueño, de Vittorio Giardino. Un ejemplo de tomo chulo para leer y disfrutar este mes de calores que ya casi se va. Un único volumen integral con las doce historias serializadas anteriormente bajo el título de Vacaciones Fatales, todo un clásico del incomparable maestro italiano Giardino en una edición cargada de extras que incluye una historia totalmente inédita. Eso sin contar el genial tomo en tapa dura llevadero y piscinero que es.

Leí algunas de estas historias en la edición de Casterman de 1991 de la colección Studio, ya que estas historias se publicaron por primera vez en la revista A To Be Followed entre 1988 y 1991. Obviamente, apenas recuerdo nada de las historias leídas en aquellos años en los que empezaba a «sufrir» a mi tito americano instruyéndome en el maravilloso mundo del cómic europeo y directamente en francés que, por cierto, provocaba sobresalientes en mis notas de aquella asignatura en el cole. Pero bien, dejémonos de historias de abuelo-cebolleta para decir que al igual que Voyages de rêve, estos cuentos cortos de extensión desigual conquistan a poco que leas un par de ellos. Simplemente, por tratar el género policíaco en la mayoría de ellos. Son tramitas detectivescas que evolucionan de la misma manera en tierras exóticas, lujosos resorts reservados para gente adinerada, y se basan en historias sorprendentes que uno puede tener la duda de si no estamos ante sucesos que de verdad ocurrieron. Ese el verdadero poder de Vacaciones de Ensueño. Porque estas “vacaciones de ensueño” para algunos personajes se van a convertir en pesadilla. ¿Las vacaciones de los ricos para tener algo de interesante deberían volverse trágicas de algún modo? No me arriesgaría a hacer ese tipo de afirmación. Pero cuando ya los tienes todo-todo…

El diseño de Giardino es clásico y fino. ¿Huele a añejo… a BD añeja? Creo que muchos de los que estáis leyendo esta reseña ahora mismo es porque amáis con todos vuestros sentidos ese olor añejo al que me refiero. Ese dibujo que tiene ese no sé qué que atrae, que os engancha a querer saber qué hay detrás de esos rostros, de esos paisajes que parecen fáciles de dibujar pero que desde la nada sólo los maestros saben traer a la viñeta. Un dibujo clásico que nos pone. Giardino es un maestro en eso.

Vacaciones de Ensueño aporta un ambiente de sensualidad, deseos carnales, gracias al calor del verano que a todos nos enciende, destacando a la mujer con bastante frecuencia y su deseo de libertad. Como os decía, el título se justifica por el hecho de que Giardino ambienta todas estas historias en lugares de vacaciones (safari en Kenia, encuentros y desencuentros en los rincones más soleados de la bella Italia, en particular, Venecia…; tramas que son mini-thrillers, que terminan mal para algunos protagonistas casi siempre… Aventuras que la mayoría son agradables de leer donde destaco por encima de todas Fuera de temporada. Me pareció un pelotazo de historia que bien merece o podría ser una buena base para un guión de peli a lo Hitchcock. Y otro punto fuerte es como nos lleva de todas-todas a vivir (¿a reírnos?) de cómo eran los personajes de la famosa jet-set de los años 80.

Mujeres exudando sensualidad, miradas cargadas de tensión sexual no resuelta, objetos de deseo o instrumentos para el crimen tanto de hombres como mujeres…Un integral viejoven de lo que es la buena BD. Y elaborado por uno de los maestros italianos del cómic europeo. ¿El principal defecto de estas historias es que son demasiado breves? Pero lo bueno, si es breve…, bueno, ya sabéis.

Reseña: Wonder Woman. Black and Gold, de VVAA

Wonder Woman: Black and Gold es una de esas miniseries de la Chica Maravilla que no te puedes perder. Seis numeritos reunidos en un tomito integral en tapa dura propio de ECC Ediciones pero también una historia para conmemorar y celebrar el 80 Aniversario de Wonder Woman. Con cinco impactantes historias cortas, cada una de un equipo creativo diferente, Black and Gold incluye una combinación bien seleccionada de tramas que arrojan luz sobre una faceta diferente del legado perdurable de Wonder Woman como personaje y heroína. Desde luchar contra bestias míticas hasta salir con mamá a dar un paseo o charlar en la cama, seguramente estemos ante un cómic que por la naturalidad con la que se trata al personaje, sea uno de los cómics DC actuales más recomendables para leer y que más tipos de lectores puedan disfrutar.

El número debut de la serie, escrito por AJ Mendez y con arte de Ming Doyle, cuenta la historia de Diana y su madre, Hippolyta, pasando ese tiempo de calidad con su madre que muchas jóvenes necesitan. Después encontramos temas varios como el intentar reconciliar la ira de Wonder Woman con su pasión por la justicia; el análisis maravilloso de John Arcudi y Ryan Sook sobre la visión del mundo de Diana y la fuente de su icónica compasión; una carta de amor increíblemente ilustrada al mundo de los cómics del día de nacimiento de la Chica Maravilla; y otra trama donde se trae a Wonder Woman de vuelta al presente, ofreciendo una historia de origen elegante y con estilo para hablar sobre una de las armas más icónicas de todo el Universo DC como es el Lazo de la Verdad.

Las historias recopiladas en Wonder Woman: Black and Gold abordan al personaje de Diana desde perspectivas muy diferentes. Y eso es lo que mola. Y como debería ser cualquier antología que se precie, el tomo en general muestra varias capas de la personalidad de la superhéroe. Vamos a ver cosas como una mirada extraña y relajada de Wonder Woman, la guardia baja, lo que lo convierte quizás en el capítulo más singular dentro de la edición. Esto en la historia que abre el tomo. Pero después veremos versiones muy diferentes de Wonder Woman, donde se muestra cómo Diana ve el mundo que la rodea y su propio lugar dentro de ese mundo. Y tras un número que simplemente destaca por su poder gráfico como es Golden Age (Edad Dorada) por su poca profundidad narrativa, finalmente, llega un relato duro con el porqué Wonder Woman se ha mantenido como una de las presencias más intimidantes y poderosas de DC durante las últimas ocho décadas.

Y visualmente, Wonder Woman: Black and Gold, un tomo magníficamente atractivo.

Un ejemplar que se recomienda muy mucho, en especial, para fans impertérritos de los buenos cómics que buscan tratar algo diferente de un personaje en cuestión. Y obviamente, para los fans de toda la vida de la Chica Maravilla.

Un bufete de historias, claramente escritas e ilustradas con inmenso amor y respeto por un personaje icónico que se ha mantenido al frente de los cómics durante ochenta años.

Y que no muestra signos de desaceleración.

Eso no es decir poco.

Reseña: Midnighter y Apolo. La Búsqueda, de Steve Orlando, ACO y Fernando Blanco

Después de una ruptura algo larga, el equipo vuelve a estar unido. Uno es prácticamente Superman, el otro tan rudo como Batman pero con la voluntad de romperte todos los huesos del cuerpo si hace falta. Parece un equipo dulce, ¿no? Un dueto que puede con veinticuatro o treinta y dos, ¿no? Oh sí, la complejidad de las peleas que puedan surgir ponen a prueba a estos dos enamorados de las patadas voladoras y de las máscaras más pijameo. Entonces, ¿esta miniserie de DC Saga que ECC Ediciones publica en nuestro país en un genial tomo en tapada dura denominado Midnighter y Apolo es tan buena como dicen? La sinopsis dice: «Midnighter es la máquina de matar perfecta gracias a sus capacidad físicas y a un cerebro que le permite prever los movimientos de sus adversarios. Su próxima misión consiste en recuperar unos artefactos perdidos mientras empieza una nueva vida. Y es que acaba de romper con Apolo, su novio de toda la vida, un hombre cuyo poder rivaliza con el del mismísimo Superman. Pero a lo largo de las aventuras que incluye este volumen, Midnighter está llamado a volver a toparse con su antiguo amor… siempre que alguno de los dos no muera por el camino…».

Más o menos lo que he contado. Pero es que el resumen de DC oficial cuenta: «¿Tu lo quisiste? Pues ahora lo tienes. ¡Seis números más de locura de Midnighter! Juntos de nuevo, después de demasiado tiempo separados, Midnighter y Apolo se enfrentan a piratas del metro en Los Ángeles y demonios en Opal City… ¡Pero su reunión está a punto de dar un giro impactante y enviarlos a ambos en un viaje épico más allá de toda creencia!».

La suma de las dos sinopsis es la que debéis asumir. ¿Y por qué me importa a mí una serie así? Es obvio, si me conocéis. La originalidad, el cambio, lo diferente, lo que hasta ahora no se ha hecho con un cómic, una nueva visual de un dueto del que sabía poco… Bastantes cosas me atraían de Midnighter y Apolo y ahora puedo decir que he disfrutado a tope de lo que se considera una de las parejas más poderosas del Universo DC. Sumando el guionista Steve Orlando (que me encanta) y los dibujantes ACO y Fernando Blanco, dándolo todo.

¿Y qué tiene de bueno? Steve Orlando hace muchas cosas bien en el guión donde lo primero es, que se brinda por el entretenimiento y el diálogo rápido. Además de la increíble secuencia de lucha que muestra cuán quirúrgico es Midnighter y cómo de inefable es Apolo enfrentándose a un golem maldito dentro de un tren. Pero Orlando es bueno para eso pero también para mostrar una relación amorosa y comprensiva entre dos personajes de forma muy natural. Orlando inicia la trama con una acción vertiginosa, presenta algunos personajes secundarios y luego intensifica al Sr. Bendix y todo lo que conlleva su aparición. Sólo para destruir a Midnighter y Apollo para siempre… O esa es la idea.

Dada la propensión de los villanos a idear planes locos, el plan de Bendix, en realidad, es bastante inspirador e interesante. Utiliza los poderes de teletransportación de Midnighter contra él y potencialmente prepara el escenario para que Midnighter pase de la violencia desenfrenada a la locura violenta. También hay un buen uso de montajes en el tema que ayudan a transmitir cuánto trabajo tiene por delante Mr. Bendix para que sus malvados planes salgan bien.

He revisado la serie pasada de Midnighter (también escrita por Steve Orlando), que hizo bien en establecer la relación convincente de un hombre que mata y otro que es demasiado puro para hacerlo. Hacer que ese tejemaneje funcione, os digo como escritor, es un tema bastante difícil de elaborar, de hacer que parezca natural. Y al verlo como lo consigue, ya con eso la serie me ganó.

Aparte de que Midnighter y Apolo son los típicos superhéroes divertidos a más no poder.

Reseña: Universo Sandman. El Sueño, de Neil Gaiman, Simon Spurrier y Bilquis Evely

Para los frikis de la literatura fantástica y especialmente de los cómics de mi generación (digamos… los que son denominados ahora viejóvenes), The Sandman, de Neil Gaiman, fue una lectura esencial en nuestra juventud, años de instituto en mi caso. Años en el que término emergente «novela gráfica» pegaba fuerte además de otros tantos títulos del momento como el trabajo de Alan Moore y Dave Gibbons en Watchmen, el Maus de Art Spiegelman o el siempre reconocido El Regreso del Caballero Oscuro, de Frank Miller; obras que si no habías leído no estabas a la moda, no eras cool. Pero con la diferencia de que estamos hablando de, por muy gafapastas que se consideraran esos cómics en su momento, molaban, molaban un montón y tu vida comiquera atravesaba (y atravesará) una línea, un antes y un después, tras haberlos leídos.

La grandiosa construcción del mundo de Sandman, combinada con el hábil trabajo que tiene todos y cada uno de los personajes, y la capacidad que demostró Neil Gaiman para unir mitologías dispares, hizo que la lectura de dicha obra en su día fuera emocionante e inolvidable. Marcaba. Y encontrabas gente flipada con la serie pero también otros que la miraban con desdén porque les daba miedo entrar: gente que leía pijameo y poco más. Era algo diferente, innovador, chulo, un cómic que aplastaba panteones religiosos en caliente, y que además presentaba personajes DC con la misma naturalidad con la que se deslizaba entre números que lo mismo eran one-shots que disfrutabas junto a un vaso de leche con galletas, que lo mismo era válido para comentar en una quedada con tus amigos frikis un sábado por la noche mientras intentabas «comerte algo» en la discoteca. Números, historias, que bien tenían personajes nuevos o gente tan conocida como William Shakespeare y/o Christopher Marlowe por nombrar algunos.

Por eso y no otra, voy a leer y coleccionar todo-todito-todo lo que pueda de esta serie en lo que me queda de vida. Y ECC Ediciones es el lugar donde encontrarlo. Una de las partes más atractivas de la serie The Sandman es que es de esos raros cómics de larga duración que tienen un final definitivo. Se publicaron un total de 75 números y, por un tiempo, eso fue todo. Sin embargo, a lo largo de los años, Gaiman regresó varias veces al universo para escribir breves spin-offs, precuelas…, pero nunca hubo nada importante que se expandiera en el mundo de Sandman, mucho más allá de la serie básica. Aunque por parte de otros autores sí que se crearon cositas súper chulas como la serie Lucifer, de Mike Carey (de igual duración: https://www.ecccomics.com/comic/lucifer-integral-vol-01-de-3-3430.aspx). Fue entonces cuando se anunció que Gaiman se asociaría con Vertigo para lanzar Sandman Universe, una colección de cuatro series inspiradas y ampliadas en la carrera original de la famosa serie y de los cuatro títulos que se revelaron hubo, sobre todo, uno que me llamó mucho la atención por las metáforas en las que se movía. Obviamente, The Dreaming (El Sueño), el título que hoy os reseño.

El Sueño es la serie más aclamada de Universo Sandman y ECC Ediciones nos la trae en una edición integral (las veinte entregas de la colección) que además contiene el especial inaugural The Sandman Universe #1. El señor guionista Spurrier nos lleva de regreso al reino donde Daniel, el actual Señor de los Sueños, ha desaparecido justo cuando las cosas van mal. La ausencia de Lord Daniel desencadena una serie de crímenes y calamidades que consumen la vida de quienes ya están enredados en su destino. Hasta que lo encuentren, los residentes del reino deben proteger solos sus quebradas fronteras. Para más inri, los narradores más veteranos están atormentados por secretos invasivos, el alcaide Lucien está dudando de su propia mente, y más allá de las puertas, algo horrible aguarda con dientes y garras intentando entrar… Solo Dora, la monstruosa, encuentra oportunidades en la locura, robando sueños al mejor postor. Pero ella no tiene idea de cuán profundo yace el peligro. Mientras tanto, algo malvado sigue creciendo, haciéndose fuerte, a la espera de poder entrar…

Simon Spurrier (Motherlands, Suicide Squad) demuestra aquí todo su don apoyado en el arte impresionante de la señorita Bilquis Evely (Batman, Wonder Woman). Gran parte de la trama de Spurrier me recordó la forma en que la carrera original de Gaiman era tanto una historia sobre la narración como una historia por derecho propio. Alegórica. En El Sueño hay frecuentes metacomentarios sobre quién está narrando en un momento dado y quién de forma omnisciente. Una forma muy interesante de contar una historia. El Sueño se basa en gran medida en los personajes; aquí, la búsqueda de Dora para conocer su identidad y convertirse en ella misma, constituye gran parte del drama. Junto a la crisis de fe de Lucien y el fuerte deseo de encontrar Sueño y devolverlo a su magnificencia.

The Dreaming es definitivamente una lectura obligada para los fanáticos de Sandman, una buena historia heredera así como una digna continuación de este enorme universo. Y, por supuesto, un complemento ideal para alternar con la visual de la serie de TV en ciernes que acaba de estrenar Netflix.