Reseña: Marvel Omnibus. Tierra X. Omega, de VVAA

Tierra X: Omega concluye la oscura visión de Alex Ross sobre el futuro del Universo Marvel. La Capitana Marvel encabezó una carga contra La Muerte y la mató. Y ahora nadie puede morir. Pueden retorcerse de dolor, sus cuerpos están destrozados sin posibilidad de reparación… pueden clamar para que termine su sufrimiento… pero no perecerán. La muerte está verdaderamente muerta. ¡¿Qué?! ¿Qué ha hecho Mar-Vell? Los héroes restantes de Tierra X deben unirse para poner fin al tormento del paraíso que ayudaron a crear. Y entonces, ¿tendrán éxito en su desesperada búsqueda para revivir a La Muerte?

Recopilando el clímax épico completo de Tierra X: Alpha (https://www.cronicasliterarias.es/?p=13084), además de la historia detrás de las visiones demoníacas de Nighthawk, protagonizada por Daredevil y Mephisto (Paradise X 0-12, Heralds 1-3, X, Xen, Devils, A, Ragnarok 1 y 2 y Marvels X 1-6), tenemos en librerías un nuevo Marvel Omnibus con el que deleitarnos y cerrar una buena saga en conjunto. El segundo y último volumen de la obra maestra de Alex Ross, dos enormes tomos y dos maravillas publicadas en esta gloriosa época de los integrales que estamos viviendo. Un final que a muchos puede dejar con el culo torcido porque la trama continúa en su proceso arduo donde entremezcla divesas temáticas. Múltiples ideas abiertas que no se terminan de cerrar al estilo Perdidos (Lost). Un tema que a muchos cabrea, descoloca o incluso gustar como es mi caso. El mundo siempre estará dividido entre los que disfrutaron Lost y los que no. Además de que tenemos una saga que queda abierta para secuelas.

Es curioso cómo los personajes de los cómics pueden ser «malvados» o tomar «malas decisiones» o vivir una vida de estupidez o vender su alma al diablo y, sin embargo, un acto de altruismo de alguna manera los redime. ¿Esto es real? Cada uno tendrá su opinión. La realidad que yo veo día a día, diría que es así. Perdonamos cada vez con más facilidad. Los actos más desoladores siempre, de algún modo, la justicia los perdona. Hasta que a uno o una le toca lo suyo. La madre del Doctor Doom vendió su alma a Mephisto para que Victor von Doom pudiera ser «un hombre importante». Ella nunca le pidió que fuera un «buen hombre». Sin embargo, aparentemente cuando el Doctor Extraño se une a Doom para salvar a su madre del tormento de Mephisto, su madre realiza un acto de altruismo que la «redime». Lo mismo ocurre con Silver Surfer y algunos personajes más en esta saga. Los autores mostrándonos la idea de que no existe el Bien sin el Mal, y no al revés. Y una conciencia cósmica, una «perspectiva cósmica», de que siempre hay algo por encima de nosotros.

Sinceramente, Omega no es un tomo tan bueno como Alpha. Aunque degustable su contenido algo más complejo, especial para fans de Marvel de toda la vida. Recoge las consecuencias del primer volumen y las desarrolla a limites insospechados que casi nadie esperará. Diría que incluso merece una relectura para entenderlo mejor. Pero esto no nos quita tener a Jim Krueger, Alex Ross y Doug Braithwaite con Steve Sadowski, Tom Yeates, Steve Yeowell y Well-Be nuevamente dándolo todo, en una saga digna de ser llevada con coherencia al UCM (Universo Cinematográfico Marvel). Siempre que se ponga al nivel de entendimiento del público general, claro. Una macro-saga que provoca una sonrisa eterna al fan de Marvel.

Reseña: MARVELS Anotado, de Alex Ross, Kurt Busiek y VVAA

No sé si sois conscientes algunos de lo que es realmente disfrutar de un cómic Marvel. De lo que es…, llevar haciéndolo tantos años y que el gusto no decaiga. Si en algún momento os paráis a pensar fríamente, no es otra cosa que COMER. Tragarnos cosas que nos gustan y muchas de las veces, cuando ya alcanzas un nivel de paciencia (y tienes tiempo), pararte a masticarlo. Eso es el disfrute, eso es apostar por algo que nos gusta: saber de mundos, aventuras, arcos argumentales, historias llenas de actividad… eso es. En definitiva, leer un buen cómic Marvel. Son las reflexiones que me han venido a la mente al terminar esta maravillosa miniserie como es Marvels. Ahora en un volumen, una edición de lujo anotada (Marvels Annotated 1-4, Marvels Epilogue y Marvels 25th Tribute Variants), una maravilla que acaba de publicar Panini Cómics y que recoge desde los orígenes de los superhéroes a la trágica muerte de Gwen Stacy, la llegada de Galactus a la Guerra Kree-Skrull, la irrupción de los mutantes a la boda de Reed Richards y Sue Storm… ¡Los Prodigios están aquí! Todos los números que compusieron la genial serie del siempre maravilloso Alex Ross. Historias modernas con sabor clásico.

Marvels ya entra por los ojos con la enorme portada de mi amado Alex Ross, ese ilustrador primigenio universal el que es llamado Aquel Que Es Capaz de Hacer Real Todo Lo Que Ilustra. Que da paso a una trama donde nos vamos a un mundo donde todas las personas están obteniendo súper poderes y un joven encontrará que el mundo de la heroicidad no es tan bonito como imaginaba. Y es que David ama a los superhéroes, pasa horas jugando con sus favoritos Capitán América, Spider-Man e Iron Man, para disgusto de su familia. Mas, en medio de su sueño de ser un héroe con poderes, el mundo tiene otros planes: un virus misterioso comienza a transformar a los humanos comunes en seres con habilidades especiales y la familia de David decide aislarse y esperar poder sobrevivir a lo que se avecina. No obstante, el virus se apodera de los padres de David cuando este se encuentra al cuidado de su hermana y abuela. El cambio afecta a todos y de diferentes maneras. Su hermana se niega a ser vista y su abuela se está muriendo. A medida que el mundo continúa derrumbándose a su alrededor, David se encuentra en un mundo peligroso lleno de seres que ya poseen lo único que siempre deseó: súper poderes. Un chico que va de un lado para otro con una máscara del Duende Verde…

Todo esto se cuenta en la precuela Marvels X, precuela a su vez de Tierra X, aunque la serie principal la tenemos aquí. Alex Ross mostrando el mundo de los superhéroes a través de los ojos de ciudadanos comunes. Un tema que me interesa muchísimo, de hecho, podría decir que es el tema dentro del pijameo que más me mola. Por eso, una edición de Marvels como nunca has visto, con todo el material creado para el vigesimoquinto aniversario de esta obra maestra. Un emocionante recorrido por los momentos que sirvieron para forjar el Universo Marvel bajo la visión única del fotógrafo Phil Sheldon, es un volumen más que indispensable.

La narrativa de un futuro distópico (no necesariamente nueva), para ver qué sucedía con los superhéroes en un arco donde todo el mundo tenía poderes. Supongo que lo veis: esto no es otra cosa que un modo de convertir a los superhéroes en personas normales. En Marvels, sus creadores Alex Ross y Kurt Busiek, vuelven a juntarse para contarnos cómo ese mundo se hizo pedazos. Una colección de precuelas en realidad que empiezan aquí, con la historia de un joven, una mirada profundamente humana y realista de un joven enamorado de los superhéroes que navega por una realidad donde lo extraordinario se vuelve corriente. Vais a encontrar desde un primer momento en Marvels, una historia bellamente diseñada que recuerda de todas-todas a los cómics de mis queridos años 80. Los personajes son convincentes. La historia tiene un ritmo perfecto y atrae con la promesa de una trama emocionalmente satisfactoria. El mundo que Ross y Busiek han creado para toda la serie me alucina pues tiene ese toque maravilloso y peligroso que gusta de los cómics de antaño. Uno quiere seguir sabiendo de este viaje.

INDISPENSABLE.

Reseña: Control de Daños. La Colección Completa, de Dwayne McDuffie y VVAA

Control de Daños puede ser la serie Marvel que llevo más tiempo esperando ver recopilada. Una de mis más preciadas rarunadas dentro del noveno arte, porque si hay alguien que no aboga por seguir solo lo mainstream, uno de esos siempre he sido yo. Amante de lo diferente y original, Control de Daños fue una de las series que más disfruté a finales de los 90 en su idioma original. La misma que de un modo extraño mi cerebro olvidó con los años e incluso me perdí o pasé por alto los siguientes especiales que salieron. Pero una serie que regresó a mi mente cuando caí en la cuenta (y me encantó el detalle) cuando los vimos aparecer al inicio de Spiderman: Homecoming. Desde entonces, los que andamos por aquí no hemos parado de dar calor…, de reclamársela a Panini Cómics por RRSS porque, sin duda, esta serie debía estar nuevamente disponible. Y sueño cumplido. Y no solo se ha publicado La Colección Completa con las tres miniseries ochenteras-noventeras que leí, también contiene todas las apariciones de este genial departamento en el Marvel Age Annual #4 USA (de donde parte la idea), Marvel Comics Presents #19 USA, el especial de Los 4 Fantásticos así como la miniserie de tres numeritos donde vuelven a encontrarse con el gigante verde, la genial World War Hulk Aftermash!: Damage Control de 2008. Indispensable se mire por donde se mire.

Lo dicho. Si buscas una serie diferente con la que reír un rato pese a que toca de forma general un tema obvio, un tema que curiosamente muchos lectores nunca se han preguntado pues: ¿Qué ocurre con todo lo que superhéroes y villanos dejan tras una tremenda lucha? ¿Quién paga toda esa destrucción? ¿Quién corre con los gastos? O como dice la sinopsis de este volumen: ¿Galactus se ha comido tu casa? ¿El Helitransporte de SHIELD se ha estrellado sobre tu coche? ¿Los alienígenas han destrozado Manhattan… otra vez? ¡Será mejor que llames a Control de Daños! Si no habéis caído ya, os lo digo yo, Hulka tendrá un papel importante en estas miniseries. Su primo es el principal «arrasador de lugares» cuando se encuentra en batalla y ella… Bueno, ella es abogada defensora de profesión, y de vez en cuando también se le va la mano, ¿no?

Un comienzo genial. Los Vengadores (Thor, Hulka, Black Knight y Spiderman) están luchando contra un robot gigante en el centro de Nueva York. El Bug-Bot alternativo (así se llama) crece hasta tres veces su tamaño y aplasta a Thor a varias calles de distancia, derribando un edificio. Entonces Spidey logra meterse dentro de la boca del robot hasta la sala de control y lo apaga…

El atasco que rodea la aventura del superhéroe amenaza con hacer que John Porter llegue tarde a su nuevo trabajo, por lo que corre por las calles hasta el edificio Flatiron y las oficinas de Damage Control, la empresa que repara lo que los superhéroes y villanos destrozan. En el vestíbulo, John se encuentra con el villano Thunderball, que perdió su característica bola de demolición y cree que Control de Daños podría recuperarla (también se encargan de cosas así). Un primer capítulo que os cuento porque representa bien el humor de aventuras posteriores. El gigantesco robot derribado por Spiderman (con un solo click) está tendido en pleno Manhattan entre múltiples edificios, con la cabeza y los hombros apoyados contra el World Trade Center y… ¿quién demonios quita esa chatarra de ahí?

Ya estás enganchado/a. Y en caso de que estuvieras preocupado/a, Thunderball recuperó su bola de demolición. Considero que Control de Daños, de Dwayne McDuffie, es uno de los cómics más divertidos que Marvel ha publicado jamás. Y aunque sé que muchos marvelitas no le dan valor, lo tiene, y mucho por lo original y diferente, además de tratar un tema real llevado al mundo del pijameo. Pero también lo que siempre nos ha atraído del mundo de los superhéroes. Mi parte favorita es la del trabajador que descubre una esfera brillante y tiene un «Origen», convirtiéndose en un nuevo súper… alguien.

Maravilloso, se mire por donde se mire.

Reseña: Días del Futuro Pasado, de Chris Claremont y John Byrne

Días del Futuro Pasado es de esas grandes historias que nunca se ha podido representar bien en la gran pantalla. Y sabiéndolo el personal del séptimo arte, se han limitado a hacer variaciones de la idea principal o contar en pelis lo anterior o lo posterior a la principal trama en la que se basa esta joya del cómic de superhéroes. Arco argumental que solo se recogió en cuatro grapas pero que todo el mundo comprendió como una única aventura y entonces ya solo la podemos encontrar como historia única pese a ser publicada por primera vez en los X-Men #138-#143 y el Annual 4. Por lo que súper lógico encontrarlo ahora dentro de los Must-Have.

Tras los acontecimientos de la saga Fénix Oscura (otra joya del pijameo), los X-Men dejan descansar a Jean Gray. Y después de perder a la mujer que ama, Cíclope abandona a La Patrulla-X (icónica portada). Los X-Men: Bestia, Ángel, Cíclope, Profesor Xavier, Coloso, Banshee, Tormenta, Rondador Nocturno y Lobezno; junto con John y Elaine Grey, Lilandra y Moira están en el funeral de Jean. Y Cíclope hace un viaje al pasado…, recordando al primer equipo de los X-Men, el día en que Jean llegó a la Mansión X y su primera misión contra Magneto. Piensa en cuánto amaba a esa chica desde el principio, pero no podía hablar con ella debido a su poder y responsabilidad de liderar a La Patrulla-X. Su encuentro con Ka-Zar en la Tierra Salvaje, con el extraterrestre llamado Stranger, y con Juggernaut, a quien habían vencido con la ayuda de la Antorcha Humana. La llegada de Los Centinelas y el sacrificio final…

Pero Días del Futuro Pasado es un viaje a un futuro distópico, donde Los Centinelas acechan el planeta cual historia de Terminator. Y donde los X-Men son la única esperanza de la humanidad… ¡hasta que mueren! Treinta años después de lo contado anteriormente, USA está totalmente controlada por estos seres. Los pocos mutantes sobrevivientes son: Kitty Pryde, Tormenta, Coloso, Lobezno y Franklin Richards (hijo de Mr. Fantástico y la Mujer Invisible), ah, y Magneto. Y juntos planean cambiar la historia haciendo que Rachel Summers intercambie la psique de la Kate Pryde adulta con esa de su yo más joven. La idea está clara. Conjuntar un inmenso poder para aniquilar la dictadura a la que están sometidos. En este futuro, los X-Men escaparon del campo de concentración, sufrieron dos muertes y planean contraatacar. Un cómic para revivir el legendario viaje hasta el futuro distópico de 2013, donde Los Centinelas han conquistado la Tierra y todo se torna en desgracia. Una edición especial imprescindible, con una de las más inolvidables aventuras de los mutantes.

Días del Futuro Pasado fue una especie de milagro en la franquicia mutante. El último arco de una serie que tuvo muchos altibajos. Pero esta historia no solo continúa la trama de un film que salió hace diez años, sino que ofrece lo que podría ser la película de mutantes más satisfactoria en pantalla si alguna vez le dan la oportunidad a alguien con criterio para hacerlo bien. Tan solo si lo hicieran con decencia y sin altos miramientos como hicieron con la maravillosa X-Men: First Class (2011) o cualquiera de las pelis de Spiderman, pienso que quedaría algo muy digno de ver ahora que casi todo cómic tiene su reflejo en series de TV o cine. De hecho, si hicieran una miniserie de cuatro capítulos de esta aventura, sin duda, saldría muy beneficiosa la trama. Tenemos aquí, de todas formas, uno de los mejores arcos argumentales de los mutantes en la etapa Claremont/Byrne. Para muchos, los mejores autores que han tratado a los mutantes. Un relato que se divide entre presente (1980) y futuro (2013), y debo decir que me parece una maravilla como se hacen los saltos en el tiempo en este guion.

Historia del cómic. Digno de estudio.

Reseña: Los Nuevos Vengadores. La Edad Heroica, Acuña, Immonen y Bendis

Mola ver en un cómic, franquicia o género que la cosa después tantos años, de pronto, cambia. Por eso mola encontrarse con una nueva serie de Los Nuevos Vengadores, descubrir su nuevo punto, y sobre todo, te peta la cabeza cuando descubres que Vengadores Oscuros se han unido a sus filas y qué un demonio interdimensional amenaza nuestra existencia. Los Nuevos Vengadores vuelven a nosotros de un modo fresco e interesante de la mano de Daniel Acuña, Stuart Immonen y, por supuesto, Brian Michael Bendis. Un primer arco de una serie regular que se ha llamado por estos lares La Edad Heroica.

Durante bastantes años, Brian Michael Bendis consiguió que Los Nuevos Vengadores fuera la serie de Marvel más seguida. Y eso no es moco de pavo. Por eso vais a agradecer, sobre todo, los que aún no os habéis puesto con estos cómics, la publicación del primer arco de esta serie dentro de la colección Must-Have. Por lo menos, económico sale ahora darles un tiento, por si existiera la ínfima posibilidad de que no os gustara. Pero ya os digo que vería muy raro que un lector de pijameo de toda la vida no se enganchara a la serie tras degustar el primer arco que brinda esta serie. Y es que cuando Tony Stark, también conocido como Iron Man, actuaba como un completo imbécil y se nombró rey de los superhéroes, Luke Cage y otros que habían sido parte de Los Nuevos Vengadores pasaron a la clandestinidad y contraatacaron. Ahora que la Civil War de Marvel y sus secuelas finalmente terminaron y la llamada Edad Heroica ha comenzado, Steve Rogers quiere que Luke continúe liderando un equipo de Vengadores…, y esto mola que te cagas. Pero de pronto, en la nueva sede, Dr. Strange y el nuevo Hechicero Supremo Dr. Voodoo aparecen poseídos por demonios. Y tras ello una entidad poderosa de otra dimensión queriendo hacerse con el Ojo de Agomotto. Para ello, dispuesto a destrozar nuestro universo para conseguirlo.

Me divertí especialmente con estos cómics porque aporta muchos de los superhéroes Marvel que me gustan: Luke Cage, Spiderman, Lobezno, La Cosa, Iron Fist, Miss Marvel y mi amada Pájaro Burlón. Todos juntos pero no revueltos, creando una dinámica de equipo interesante y jugando con la principal fortaleza del diálogo ingenioso de Brian Michael Bendis. Y simplemente, porque se muestra una alineación sólida de personajes geniales con un buen guionista y dibujante, que eso raras veces sale mal. Un nicho interesante que había que rellenar en el Universo Marvel.

Bendis también muestra su poder de narración en una trama de misterio de varios hilos y de formato largo que te mantendrá enganchado y querrás a volver a casa rápido a leer si no lo terminaste la primera vez de una atacada. La forma en que el tomo comienza con ¡Vengadores Desuníos! (¡Avengers Disassembly!) me hizo pensar: «Tío, me espera un regalo aquí».

Y lo tuve.

Reseña: Kull El Conquistador, de John Buscema, John Bolton, Charles Vess, Tony De Zúñiga y VVAA

El regalazo que muchos de ustedes pueden esperar para mañana podría ser este nuevo Marvel Limited Edition de Kull El Conquistador que trae Panini Cómics y SD. Todo lo que correspondería al volumen dos más diez números del volumen 3 más la Marvel Graphic Novels #47 Kull: The Vale of Shadow. Ahí es nada. Para más inri: el último de los tres volúmenes que recopilan los cómics originales completos de Kull en Marvel. El cierre. Aventuras fantásticas y épicas de este gran personaje creado por Robert E. Howard que aunque no tuvo tanto éxito como Conan, para mí, en ciertos aspectos, es mucho mejor y más creíble de aquí a Lima. Tomazo de casi seiscientas páginas de sangre, muerte y destrucción a espadazos entre la racionalidad y la irracionalidad propuesta antaño por seres oscuros manejantes de la brujería. Porque fue antes de crear a Conan, que Howard ideó a un rey bárbaro con muchas cosas en común con su personaje más popular. Y cuando fue trasladado al noveno arte, también os digo que protagonizó algunos de los mejores cómics del género, como los incluidos en los magazines en blanco y negro de Marvel, que han sido recogidos en estos volúmenes por las magníficas editoriales antes mencionadas. Tomos imprescindibles a día de hoy a poco que puedas económicamente: cómics eternos.

En el primer volumen de la colección se repasa la llegada de Kull al trono y a partir de ahí asistíamos a los numerosos complots que intentaban destronarlo. Cantidad de números que entre aventuras y desventuras tienen ese trasfondo. En este tomo que sale este mes que se va, se ofrece las últimas series en color del personaje, los últimos momentos en todos los sentidos, con algunos de los mejores artistas de la década, como John Buscema, John Bolton, Charles Vess, Butch Guice y Bill Sienkiewicz, y finalmente culminamos los años ochenta con una impresionante novela gráfica de Alan Zelenetz y Tony De Zúñiga. Aunque nunca olvidemos que fue el mítico guionista y editor de Marvel, Roy Thomas, el encargado de llevar a Kull a las viñetas, al igual que antes había hecho, con gran éxito, con Conan El Bárbaro.

¿Y cuál es la guinda, el regalito del roscón de reyes, el verdadero tesoro que contiene este tomo? Se llama Kull: The Vale of Shadow. Una buena novela gráfica, elegante, brillante, una historia espeluznante, lírica y poética en la que el anciano Rey lucha contra su mayor enemigo de una manera característicamente bárbara e inquebrantable. Donde Kull está muriendo, sudando y esforzándose en su lecho de muerte mientras las heridas infectadas parecen llevarlo al Más Allá. Y reunidos para la guardia de la muerte están sus asesores más confiables que mientras, recuerdan individualmente al gladiador salpicado de sangre que se convirtió en el mayor monarca de Valusia, ese ser que se muere frente a ellos. Inconsciente, el cuerpo de Kull se agita y se retuerce. Sigue luchando, su alma atrapada en un reino etéreo, bailando un dúo erótico con el oscuro y seductor ángel de la muerte que ha venido para llevarlo ante los dioses…

Y hasta ahí puedo contar. Una magnífica novela gráfica que sirve para conocer al personaje por primera vez, para degustar en cualquier momento en el que uno/a quiere tener una buena sentada de lectura de literatura fantástica. Por supuesto, bellamente ilustrado en la manera grandiosa y ostentosamente humana de los artistas filipinos que se convirtieron en un pilar de DC y Marvel durante los años 70 y principios de los 80. Exempli gratia: Tony de Zúñiga, el primer artista de cómics filipino que trabajó con una editorial estadounidense y permitió que muchos otros artistas de su país entraran en la industria internacional, además de ser creador de Jonah Hex y Orquídea Negra con John Albano.

En agosto de 1929, tres años antes de que Conan naciera en las páginas de la revista pulp Weird Tales, Robert E. Howard (1906-1936) ya había creado a otro bárbaro con muchas cosas en común. Lo llamó Kull, el rey de Valusia, que vivió miles de años antes. Desgraciadamente, Kull no tuvo la misma popularidad que Conan, por lo que su autor lo dejó después de publicar tan solo dos relatos, para centrarse en nuestro bárbaro favorito. Esos relatos de Kull fueron The Shadow Kingdom (agosto de 1929) y The Mirrors of Tuzun Thune (septiembre de 1929) y fueron adaptados al cómic, así como decenas de historias, que fueron recuperadas y publicadas en el noveno arte.

Lo que os reseño hoy es otra edición que viene acompañada de numerosos extras, como una larga introducción del guionista Roy Thomas, en el que analiza los números de la colección, además de otros interesantes artículos, bocetos, portadas, anuncios de la época… Perdérselo es delito.

¡Felices Fiestas!

Reseña: Motorista Fantasma Cósmico. Doble Identidad, de Phillips, Vilanova y Cabal

Si una idea promueve Motorista Fantasma Cósmico es la de que las deudas deben pagarse. Tenemos un cómic que desde el principio te coge por sorpresa con ese misterioso dibujo del astronauta con una calavera en llamas que llevas viendo hace tiempo por cantidad de sitios y no sabes qué realmente es. ¿Es el Motorista Fantasma de siempre o algún pretendiente?

El título del primer arco, el que da inicio a la serie (Doble Identidad) es un juego de palabras que descubrirás al leer el argumento. Pero vaya que nadie diga que este nuevo tipo de calavera en llamas no es contundente al presenciarlo por primera vez. Stephanie Phillips hace bien en presentar al personaje primero y luego cerrar la historia principal con él, consolidando tu interés para que vuelvas a por más. Esta misteriosa figura también es decididamente más malvada que la que todos conocemos. Que ya es decir bastante. Sin embargo, en Motorista Fantasma Cósmico, de pronto nos enteramos que el prota está trabajando en un bar y tratando de pasar desapercibido. ¿Tiene doble personalidad o hay algo más? Es una pregunta que te harás cada vez que este nuevo personaje ocupe la página.

Una vibra europea impregna la primera parte de la historia, que se completa con un cazarrecompensas y algunos habitantes inocentes que no merecen la ira que se avecina por Frank Castle. ¿Cómo? Has oído bien. El Castigador (mi primo) con el que uno/a puede imaginar que se producirá un duelo al mediodía en algún momento del futuro de este arco. Ya que si no lo sabéis, en un rincón remoto del espacio profundo, el antiguo Frank Castle ha llevado una vida tranquila: sus días como Motorista Fantasma Cósmico han quedado atrás. Pero ese despiadado cazarrecompensas al que me refería antes está dejando un rastro de cadáveres a su paso por todo el universo y habrá que hacer algo, ¿no? Frank Castle debe regresar para enfrentarse al peor enemigo que uno mismo puede tener.

Al igual que en El bueno, el feo y el malo, la historia principal tiene un ritmo más lento al principio y va «in crescendo». El arte de Cabal es súper limpio y agradable a la vista. Los fondos tienden a estar en blanco y los diseños tienden a ser más sencillos. Un simple movimiento puede ocupar cuatro viñetas. El enfoque visual de pantalla ancha le da a la narrativa una sensación cinematográfica pero también hace que su ritmo se sienta poderosamente lento y embaucador. Mentiría si dijera que no esperaba un poco más de la historia principal, al principio. Cosa que obtuve al final del tomo. La miel en los labios, ganas de más. Mucho más.

Este nuevo Motorista Fantasma Cósmico se enfrenta a una amenaza desconocida que parece tener más poder que la mayoría de aniquilados a estas alturas. La guionista usa ese poder para recordarnos los horrores que Frank presenció en la guerra y la pérdida de sus hijos. También es una muy buena manera de demostrar que ha dejado de odiarse a sí mismo y que está listo para seguir adelante. Eso es refrescante, ya que el personaje ha tenido mucho bagaje en el pasado.

Estoy listo para más Cosmic Ghost Rider, por favor. Doble Identidad contiene los primeros cinco números de esta miniserie a la que me he enganchado.

Reseña: Spiderman. Negocios Familiares, de Mark Waid, Robinson, Dell’Otto y Dell’Edera

Muy venido arriba últimamente con el arácnido quizás por haber disfrutado mucho de Mudanza, decidí meterme más arañas en vena y me puse con Negocios Familiares, aprovechando que Panini Cómics lo recopila en su maravillosa colección Must-Have. Un arco que no había leído y que curiosamente tenía más trepamuros y más Kingpin como en el volumen antes mencionado. Así que parecía casi lógico que tenía que ponerme con él, ya que hablamos encima de un Original Graphic Novels, es decir, un postre de cuchara y atracón.

Un viaje cinematográfico salvaje que envía a Peter Parker a una aventura por todo el mundo al más puro estilo James Bond. Los secretos familiares, los tesoros enterrados y los dispositivos mortales significan peligro para Spidey y para bien o para mal. Y Kingpin está involucrado. Y Mark Waid dándolo todo. Seré sincero. No es una trama extraordinaria, no es fenomenal, lo que quiero decir es que esta historia no sacudirá tu mundo con su historia increíblemente loca. Pero. Creo que Waid tiene una comprensión perfecta de la voz y la personalidad de Peter Parker, y tanto es así que coge lo que parece ser una historia bastante simple, en principio, y la convierte en algo muy agradable de leer. Nada especial, pero hace su trabajo. Peter es contactado por una tal Teresa que dice ser su hermana. También dice que sus padres eran de la CIA y que alguien va a por ellos dos. Entonces, ella, descubre quién es Peter en realidad. Y le comunica que es cierto, alguien ha puesto a Spiderman en el punto de mira, y la única persona que puede salvarle es… ¿la hermana de Peter?

Y Kingpin en la sombra. Una historia con giros y traiciones inesperadas de las que se suelen ver bastante en las pelis de espías. Una lectura rápida y divertida es ver a Kingpin ir contra ellos. Siempre mola. Además de ser una historia que presenta a Teresa, quien jugará un papel importante en la obra de Zdarksy y luego en la carrera de Spencer posteriormente.

Negocios Familiares también fue la primera novela gráfica del Hombre Araña en décadas. Pero ahora os voy a decir lo que prima en este cómic. EL ARTE. El tremendo dibujo de Gabriele Dell’Otto que hizo un trabajo increíble con las ilustraciones. Parece una especie de pintura de acuarela, pero se siente nítida. No esperaba ver escenas tan ricas en matices y detalles. Cada página que pasaba ante mis ojos…, son un tesoro. Un primer plano aquí, un toque de color saturado allá, mucha acción cinética, sentido intuitivo de dónde colocar el enfoque para obtener el máximo efecto… Magníficos paisajes de Dell’Otto y Dell’Edera.

Otra virtud (o defecto) es que esta es una historia bastante corta, así que si estás buscando un rapidito, esta sería una opción. Pero como te encante demasiado, estarás en un aprieto… a no ser que decidas irte a la librería a pillar más Spiderman. Waid le escribe a Peter como si hubieran pasado demasiados años alejado de él. Se percibe el empuje de querer hacerlo bien. Pero a Waid le diría que nunca bebas cerveza con el estómago vacío. No si después vas a picar verduritas.

Reseña: La Telaraña de Spiderman. Mudanza, de VVAA

De los cómics que recuerdo con más cariño de Spiderman son los de esta etapa, argumento que envidiaba como la vida misma, e momento tras la larga etapa de Peter Parker como soltero llegando a su fin y llegando la hora de mudarse a vivir con su amor Mary Jane. A un apartamento chulo. En plena ciudad. Una que me enamora desde que la conocí. ¿Quién demonios no ha soñado con eso? De hecho, al ver que Panini Cómics publicaba un Marvel Héroes de La Telaraña de Spiderman llamado Mudanza, sabía que concretamente se referían a esaa etapa que en su día me había marcado tanto.

Como dolió la despedida de la encantadora señora Muggins. ¡Dios mío, no podía creer que tendría la oportunidad de volver a revisar estos cómics otra vez! Cuando uno piensa que la hermosa Edad de Plata ya pasó al recuerdo irrescatable, Panini Cómics te los vuelve a poner en bandeja. Bandeja de plata. Gloriosa la época del traje negro… cuando solo era eso. En el confesionario, Richard Fisk le cuenta a un sacerdote su ascenso como La Rosa. El legado de Ned Leeds y su paso a un nuevo Duende (Hobgoblin) para perseguir al trepamuros el resto de su vida. E insisto, Kingpin está de vuelta. Parker se compromete a volver a ser Spidey. La gata negra se ha ido y Pete decide pedirle a MJ que se case con él. Ned está muerto. Fue asesinado por unos tipos en Berlín, por lo que Kingpin aprovecha para decirle a Spidey que ese Duende que va tras él era el mencionado Ned Leeds. Pero no puede ser, ¿no? Hay otro Duende por ahí dando por saco. ¿O por qué Flash Thompson está en el hospital? Flash salvó a Spidey atrapando una bomba de calabaza y arrojándosela al mismísimo Hobgoblin. Pero Flash está en el hospital y Spidey buscando como loco el trasero de ese nuevo villano para patearlo.

La época de la vuelta al traje rojo y azul. Volumen que también aporta un gran arco argumental o saga como fue la denominada La secta del amor. Un tomo que, en general general, está muy bien pensado porque aporta algunas aventurillas para que entres en el tema, o mejor dicho, en los cómics de aquella época, para en última instancia meterte en una saga contra unos delincuentes que promueven las drogas y los convencionalismos de una secta destructiva que atacan el libre albedrío de las personas. Dos de los temas más cruciales en mis queridos años 80. Raro es la cabecera que no trató estos temas. Una época que quién la vivió, raro es si no conoce alguien que terminara sufriendo por estos dos casos…

Así de triste. Pero gracias a grandes autores que promovieron la lectura con sus libros y cómics como el que hoy os traigo, muchos supimos que había vida más allá. Querer vivir más años de felicidad que de desasoiego. Que este suele venir solo.

Tenemos así en Mudanza, cómics que se las arreglan para atar cabos sueltos y provocar que asientas mientras lees cuando devoras las historias. Finales agradables y otros que no lo son tanto. La vida misma. Pero cómics que están muy bien escritos, son divertidos, devastadores y cautivadores moralmente. Si te gusta el verdadero Spiderman, disfrutarás de este tomo.

Reseña: Capitana Marvel. La Saga de Monica Rambeau, de Roger Stern y John Romita Jr. y VVAA

Os traigo hoy el tomo que más recomiendo leer si queréis poneros al día con lo que es, representa y se está desarrollando sobre el personaje de Capitana Marvel. Además un cómic, una saga, que hace un sándwich mixto perfecto con el film The Marvels que se estrenó la semana pasada en nuestro país. Y además de además, un 100% Marvel HC que no es otra cosa que un completo volumen cronológico con la trayectoria de Monica Rambeau desde su debut como la nueva Capitana Marvel, poco después de la muerte de Mar-Vell, y todo, de la mano de dos grandes como son Roger Stern y John Romita Jr.

Anteriormente en Amazing Spider-Man, la muerte de Mar-Vell, la Capitana Marvel original de Tierra-616, en 1982, fue un tema impactante. Nunca se había visto entonces a un superhéroe que criara malvas por algo tan mundano…, y ahora tan corriente y fatal como es un cáncer. Mundano para alguien tan poderoso, claro. Sin embargo, lo que pasaba era que el Capitán Marvel fue una marca muy controvertida de llevar en el mundo de los cómics, por lo que estaba claro que la falta de una Capitana Marvel en Marvel Comics no era una situación que iba a durar. La historia de este número donde “regresa a su cargo” comienza con Peter Parker en la terminal de autobuses de la Autoridad Portuaria de Nueva York (el número con el que abre este tomo), cuando se cruza con una hermosa mujer y él la mira de reojo. Se vuelve contra ella de forma poco amigable y un poco… ¿acosador? En defensa de Spidey, tengo que decir que Mónica no está en su radar por su cuerpazo, más bien, su sentido arácnido le advierte de algo sobre esa chica. Pero es algo foráneo, ya que la chica la seguimos hasta un barrio chungo y cuando le quieren arrebatar el bolso, ella demuestra que es algo más que una cara bonita. Una inminente sensación de perdición para todo aquel que ose atacarla.

Acaba con los matones en poco tiempo pero cuando Spiderman aparece, lo lanza contra una pared con una especie de explosión de energía. Al quitarse el traje ahora destrozado, revela que ella lleva un uniforme plateado y negro, y se eleva hacia el cielo para revelarse en una página completa con la dramática leyenda: «¡Llámala Capitana Marvel!». Nada como un buen cómic clásico para llenarte de emoción con una sola viñeta. El caso es que para la policía del puerto de Nueva Orleans, Monica Rambeau, es alguien que se niega a seguir los protocolos, pero cuando un viejo amigo de la familia le pide que investigue a un posible señor del crimen que buscaba canalizar algún tipo de energía extradimensional, ella se involucra… y ya estás metido con el personaje de todas-todas. Ya empiezas a amarlo. Y más cuando ves que termina en la mansión de Los Vengadores y Mónica es capaz de hacer buenas migas con La Cosa, alguien que tiene cero en socializar. Por lo tanto, todos los héroes reunidos conocen y saludan a Mónica, ahora llamada Capitana Marvel (como la llamaron los hombres de una plataforma petrolera que acaba de salvar), quien incluso ayuda a negociar la paz entre La Cosa y Spiderman (los famosos Marvel Team-Up y Marvel Two-In-One parten de aquí). Es decir, todos los guionistas de Marvel yendo a una con un universo, como ha ocurrido en el UCM, de ahí todos los éxitos.

Hay muchas personas jovenzuelas, lectores de cómics, a los que no les importa la grandilocuencia de los cómics ochenteros o de finales de la Edad del Bronce. Pero ir a ello es ir a la fuente, al germen de lo que son los cómics que hoy en día se venden. La Saga de Mónica Rambeau es un compendio de historias que proporciona un buen equilibrio entre el melodrama exagerado y la narración anticuada del universo compartido. Capitana Marvel es una gran adición al Universo Marvel. Pasando por su ingreso en Los Vengadores y sus aventuras en solitario, en dos especiales inéditos en España, junto a otras apariciones nunca antes publicadas, tenéis aquí un volumen que merece la pena pillar a poco que os llame la atención saber más de esta chica. Desde lo clásico a lo nuevo de un personaje que siempre mereció más.