Reseña: La Casa de las Sombras, de Adam Nevill

Exacto. Estoy on fire con los libros de Adam Nevill y con todas estas publicaciones de su obra que están llegando de nuevo a nuestro país gracias a Minotauro. El talento de este autor británico para el Terror resuena ominosamente en cada escena de sus libros, y lo que es mejor, me inspira. Que puede ser casi lo que más busque personalmente a la hora de leer. Inspiración para las historias que escribo.

Hablamos del autor cuyas obras y estilo, bien se pudieran categorizar de gótico moderno. En La Casa de las Sombras este señor tiene, lo que considero, un ritmo absolutamente perfecto. Lo espeluznante y lo «erróneo» que enfrenta nuestro personaje principal, Catherine, se acumula constantemente a lo largo de toda la novela. No nos bombardea el autor con demasiada información a la vez. Solo la suficiente para dejarnos salivando por más. Un libro como este mantiene el interés del lector y hace que sea casi imposible que encuentres el momento idóneo para dejar de leer. No me importa decir que he perdido horas de sueño por culpa de este libro y no solo por el horror que produce la historia. Nevill no es un autor que te golpee en la cara con un resultado obvio. Escribe con la intención de hacer que su “audiencia” piense y establezca algunas de las conexiones por su cuenta antes de pasar a la siguiente escena de revelaciones. Ese es el mejor Terror explicado en mi opinión. El No-Obvio.

Catherine Howard es una tasadora de anticuario. La enviaron a Red House, «una casa de estilo gótico perfectamente conservada» cerca del pueblo inglés de Magbar Wood, que está condenada a ser un mausoleo pues “honra la pérdida y la locura». La casa está repleta de obras de M. H. Mason, un recluso que convirtió la taxidermia en arte. Los dioramas de Mason son una ventana al infierno, cada uno de los cuales muestra ratas disecadas dispuestas como soldados atascados en las trincheras de la Primera Guerra Mundial. Más grotesco aún, hay un dormitorio repleto de marionetas que mezclan partes humanas y animal. Edith, la sobrina de Mason de noventa y tantos años y única sobreviviente, le dice a Catherine que Mason regresó de la Primera Guerra Mundial sin parte de su cráneo y se encerró allí creyendo que la humanidad al completo eran alimañas.

La historia de fondo de Catherine se entrelaza a lo largo del relato con sus recuerdos. Fue adoptada y criada cerca de una escuela abandonada donde se recogían niños discapacitados. Para más inri, en su pueblo hubo secuestros de niños. Uno de los cuales fue el de su mejor amigo. Esa tragedia envió a Catherine a una espiral emocional, y la fragilidad plagó su vida adulta temprana, que estuvo plagada de matones, engaños y romances fallidos. El escenario y el ritmo de Nevill son perfectos, y los personajes secundarios, como la silenciosa y rechoncha Maude, el ama de llaves de Edith, son perfectamente espeluznantes. A primera vista, Catherine cree que las glorias de Red House harán bien a su reputación profesional. Luego vienen las revelaciones de los malvados homenajes de Mason al horror y ahí ya casi se te para el corazón con cada escena.

Una de las razones por las que Nevill se está convirtiendo en uno de mis autores favoritos es porque termino relacionándome con sus personajes. Lo hice con Luke de El Ritual (https://www.planetadelibros.com/libro-el-ritual-ne/363804) y lo hice de nuevo con Catherine Howard. Entendí esa infancia de ostracismo y falta de sentido de pertenencia. La soledad sin fin que he sentido en algún momento de mi vida. Nevill creó un personaje simpático en Catherine y yo estaba involucrado en su destino.

Otra razón es que Nevill sabe cómo escribir Terror exquisitamente bien. Creo que La Casa de las Sombras se ha convertido en mi libro favorito de Adam Nevill y eso que El Ritual para mí es su obra cumbre.

Una buena colección de un autor que nunca desmerece.

Reseña: Cita con Rama (Edición Ilustrada), de Arthur C. Clarke

Cita con Rama es una de las obras más premiadas de uno de los mejores escritores de Ciencia Ficción de todos los tiempos. Galardonada con los premios Hugo, Nebula, Locus, John W. Campbell y BSFA; empezando por ahí, la lectura ya está ultra-recomendada, ¿no? Después bueno, unas buenas ilustraciones de la historia como las que hace para la ocasión el artista Gabriel Björk Stiernström y el dato de que este gran clásico será llevado al cine en breve nada más y nada menos que por el gran Denis Villeneuve (Prisioneros, La Llegada, Blade Runner 2049, Dune), creo que con esto ya está todo el pescado vendido.

Qué más decir de un gran clásico e indispensable obra de la CF dicho por todos. La reseña podría acabar aquí. Recomendable sí o sí, ya sabéis, sólo los superlativos servirán para hablar de una historia de exploración deslumbrantemente pulida y maravillosamente original del maestro Arthur C. Clarke donde en 2077, una gigantesca nave espacial alienígena pasa brevemente a través del Sistema Solar en su camino hacia un destino inimaginable. Y bautizada como Rama por sus descubridores humanos, ese “mundo pequeño” que parece muerto al principio, vuelve a la vida de manera sorprendente y peligrosa cuando una tripulación de terrícolas investiga sus misterios. Pero cuando Rama deja el Sistema Solar tan precipitadamente como llegó, quedan más preguntas que respuestas.

El lector, al igual que los exploradores que visitan Rama, verá maravillas inimaginables para la mera filosofía humana. Se trata de un cilindro perfecto de unos cincuenta kilómetros de largo, que gira a una velocidad fuera de lo normal y viaja por el espacio en línea recta. Ante esas evidencias, los investigadores se preguntan si están ante el primer visitante procedente de las estrellas.

Cita con Rama (Rendezvous With Rama) fue publicada por primera vez en 1972. Tuvo una repercusión enorme tras otra obra famosa de Clarke como fue 2001: Una Odisea en el Espacio. Un libro asombroso, uno de los mejores libros de CF que puedes leer si no el mejor. Sigues a la tripulación de la nave espacial Endeavour mientras aterrizan en la nave alienígena y se abren camino hacia el interior para encontrarse cara a cara con un terreno increíble e inexplicable de ciudades y pasarelas y un mar circular gigante congelado, que forma una banda alrededor de la mitad de la nave… Hay toda una gama de peligros a medida que la nave se acerca al Sol y es una carrera contra el tiempo para que la pequeña tripulación encuentre sentido a algo que la humanidad nunca antes había experimentado. Pero, ¿quién la envía? ¿Atacará a la Tierra? ¿De dónde vino?

Uno de los mejores libros de CF. Muy de acuerdo con aquel que dijo que estamos ante una novela de CF perfecta.

Reseña: Red Room. La Red Antisocial, de Ed Piskor

Antes no sé pero ahora si me preguntaran y tuviera que responder ante un título o cómic potente de terror sangriento diría Red Room: La Red Antisocial, de Ed Piskor. Un viñetaje completo mix de género futurista y horror con el que el autor Ed Piskor se ha forjado una reputación dentro de los fans del Terror. Aparte de ser el señor Piskor ya conocido por haber creado algunos de los cómics visualmente más ingeniosos en los stands, cómics de las grandes casas como el rediseño que hizo de los X-Men, en La Gran Novela de La Patrulla-X (https://www.cronicasliterarias.es/?p=1671) con el Grand Design.

Ahora Piskor da el salto al horror y yo no me lo iba a perder. Y menos cuando Planeta Cómic traduce y publica en nuestro país la que está considerada su primera obra dentro del género que más amo. Red Room es una miniserie de Terror dentro del denominado «splittercore». Su trabajo dentro de Fantagraphics. Pero Red Room: La Red Antisocial no es otra cosa que un homenaje a los cómics de terror clásicos de los años 50, años de los que este autor parece saber demasiado. Ya sabéis, antes de la llegada de la Comics Code Authority que lo prohibió o censuró todo o casi todo. ¿Y qué cuenta? En este mundo retorcido, el asesinato se ha convertido en una de las formas de entretenimiento más populares. Los asesinatos brutales se transmiten en vivo en la web oscura a una audiencia cada vez mayor, y la criptomoneda hace que matar sea un negocio lucrativo. Red Room es una antología. Una variedad de historias independientes pero interconectadas que exploran este sórdido mundo de muerte y depravación en el que no dudéis que se pueda convertir nuestro mundo en un futuro.

“Red Room es un cómic cyberpunk, depravado y salpicado de horror que no puedes dejar de ver una vez que consigues deleitarte con el caos”, estas fueron las palabras del propio Piskor en el comunicado de prensa de Fantagraphics. “Piensa en Red Room como en los EC Comics pero hoy en día, infundido con el aliciente de la serie Black Mirror. Historias subversivas e independientes que forman parte de una narrativa más amplia y retorcida. Una caricatura de nuestra sociedad sin restricciones”, continuó Piskor. Además añadió que Fantagraphics era la editorial perfecta para este cómic porque él se siente un luchador al igual que Gary Groth (co-fundador de The Comics Journal y Fantagraphics Books). Y por último añadió que tenía pensado traspasar los límites con esta serie de historias y sabía que debía tener un editor que le apoyara inequívocamente.

Red Room: La Red Antisocial se publicó al otro lado del charco en números sueltos y no recopiladas en un solo tomo como Planeta Cómic la ha editado aquí. Así que la oportunidad es enorme. Doce números en total donde encontrar asesinatos brutales y torturas en vivo para que los asquerosamente ricos (énfasis en *asqueroso*) donan criptomonedas para verlo todo en primera fila. Cada número nos muestra el vasto elenco de personas repugnantes que están en la cima de la red negra y antisocial. Y ya al principio se nos presenta la más malvada de todas, Señorita Pentagram. El tipo de orquestador del negocio que vemos analizar las salas rojas y a su vez, obtenemos diferentes perspectivas de cada situación sobre lo que sucede en dichas salas de horror secretas.

Tened cuidado porque empieza fuerte pero no se detiene. Y si puedes soportarlo, al final terminaréis encontrando un cómic de terror visto de modo objetivo muy creativo. Ed Piskor demuestra que es un verdadero hombre del Renacimiento dentro del cómic, ya que aborda cada parte del trabajo: escribir, lápices, entintar, colorear… En Red Room, Piskor entregó un beso de chef al género de Terror.

Reseña: La Cabaña del Fin del Mundo, de Paul Tremblay

Una obra impactante de horror psicológico y Terror del bueno que evita el parpadeo durante la lectura, es la nueva novela del fantástico autor del momento en USA, el señor Paul Tremblay. Su nueva novela, La Cabaña del Fin del Mundo, es un thriller muy elogiado por la crítica que ha sido llevado al cine por nada más y nada menos que Michael Night Shyamalan (El Sexto Sentido, El Protegido, Señales, El Bosque, La Visita, Tiempo…). Ahí es nada. Con el título de Llaman a la Puerta aún la podéis encontrar en cartelera.

Tremblay es un autor que siempre que puede basa sus argumentos en la lógica de la situación. Algo muy difícil de hacer dentro del género de Terror. De conseguir que quede bien. En La Cabaña del Fin del Mundo despoja su narrativa de los elementos más raídos en una historia que es casi imposible de revisar sin revelar algunos momentos críticos. Pero lo intentaré. Algo os tendré que contar, ¿no?

Lo hablaba con una compañera hace nada, aunque es una conversación que incluso ya es redundante entre los fans de la literatura de Terror. Debemos estar muy atentos a lo que se publica, porque literatura de Terror en nuestro país, se edita poquísimo, pese a la enorme demanda de adeptos (algo ocultos, eso si) que existen. Nocturna Ediciones, de hecho, es una de las editoriales en las que debéis poner el ojo casi cada mes. Y aunque sí que es cierto que llegan cositas, la verdad que bastante buenas, queremos más. Fuera de nuestras fronteras se publica MUCHO Terror del bueno. Y aquí no llega para satisfacernos.

En La Cabaña del Fin del Mundo hay una pareja que lleva muchos años juntos. Eric y Andrew se conocen bastante bien y deciden tomarse unas merecidas vacaciones en una cabaña remota cerca de un lago en la zona rural de New Hampshire. Les acompaña su hija Wen, una niña china adoptada y muy querida con casi cualquiera que se cruza. Wen es entrañable y auténtica como pocas personas existen. Y ahora, pese a encontrarse los tres en un lugar tan apartado que podría ser desconocido para muchos, aparece un desconocido, de tamaño descomunal, que hace migas con la pequeña y le advierte con terribles palabras sobre algo que va a suceder.

Una historia de pocos personajes en la que de pronto aparecen más desconocidos de dispares puntos del país, dos hombres y dos mujeres portando armas de aspecto medieval, que llegan para trasmitir un mensaje insoportable a la familia. Y que pese a su apariencia común, no hay nada particularmente extraordinario en estos extraños: un cantinero, una enfermera, un cocinero y un matón que puede o no ser quien dice ser. «Tus padres no querrán dejarnos entrar, Wen. Pero tendrán que hacerlo. Diles que tienen que hacerlo. No estamos aquí para lastimarte. Necesitamos su ayuda para salvar el mundo. Por favor».

Una elección grave que cumple con todos los principios dramáticos de Anton Chekhov. ¿Cómo acceder a desconocidos que llevan armas de por medio?

Paul Tremblay cambia magistralmente perspectivas durante los momentos más dramáticos de la novela. Hay ciertos puntos que están mejor descritos que en el film. Y, por supuesto, cosas diferentes y añadidas. Es el ejemplo claro de: Mejor lee el libro. O por lo menos, antes de ver la peli. En la novela se crea una trama frenética que te mantiene en vilo hasta el final, cosa que el film solo logra en ciertas partes. Un guion que solo ofrece pistas de cómo se originó la extraña misión de tan extrañas personas que, insisto, en la peli apenas se cuenta.

Una genial historia de supervivencia y sacrificio que combina el poder de la fe con el potencial del hombre para una violencia desenfrenada. Hablamos de unos libros más recomendados por Stephen King.

Reseña: Última Frontera, de Leo e Icar

Un western futurista… a quién no le va a gustar. Leo es ese autor hecho para que te guste la Ciencia Ficción clásica en formato cómic. El tipo de CF que le mola al que viene leyendo este género desde desde hace años y brinda por las aventuras espaciales y los héroes venidos a menos que resulta que sí que valen para algo. Desde 1994, Leo ha declinado su muy original concepto de ciencia ficción con una tendencia ecologista y humanista introduciendo siempre «suspense» y, sobre todo, nuevas y singulares criaturas. Un claro ejemplo es Última Frontera, el último álbum del autor publicado por ECC Ediciones, aunque existen otros tantos títulos por ahí que también corroboran estas dichas. Aun así, este cómic que hoy os reseño deja un poco de lado la ecología y se centra en las diferentes relaciones humanas que miran de lleno a la trifulca.

En Última Frontera, si quitamos el contexto futurista, de todas-todas es un western. Leo utiliza todos los códigos del género: pequeño pueblo natal donde un pez gordo sujeta a todos por las pelotas, tipos siniestros a sueldo que juegan inteligentemente, un orden que intenta ser restaurado por un par de polis… Pero todo transponiéndolo a un contexto de ciencia ficción. Un ejemplo es que las las motocicletas reemplazan a los caballos. Y algunas rarezas son divertidas, como esas extrañas prótesis de metal que llevan algunos y el pequeño vehículo de John con sus pequeños artilugios. Como dicen los franceses: “C’est dans les vieux pots qu’on fait la meilleure soupe» (La mejor sopa está hecha en ollas viejas). Leo no tiene miedo de usar un guion occidental básico con esa historia cliché convencional que hemos visto en innumerables películas del Oeste. Se las arregla para salpicarlo todo de ese toque fantástico, eso si, pero mejor que lo implementado en aquella aberración de Will Smith que era Wild Wild West. Porque aquí molan también los bichos raros y algunas ideas ingeniosas que introduce así como su heroína que está muy en la línea de la serie anterior. Estamos en el planeta Tau Ceti 5 (que existe en realidad) y allí se encuentra la ciudad de Erechim, la última frontera antes de llegar a los territorios inexplorados. Los habitantes de esta ciudad perdida viven aterrorizados por los esbirros de un rico propietario y deciden recurrir a dos mercenarios de lo más insólito: los hermanos Jane y John. Este último tiene una discapacidad física que lo obliga a utilizar un aparato locomotor que deja boquiabiertos a los colonos, pero cuando la pareja se enfrenta a Burton y su banda, cualquier atisbo de duda que pudieran tener sobre él, desaparece. A pesar de su juventud y su frágil apariencia, Jane también resulta ser un personaje temible… Pero ¿qué secreto esconden las extracciones de Burton? ¿Qué hay que hacer para sobrevivir en estos territorios?

Para el dibujo, Leo decidió contratar a un diseñador con el que tiene afinidad gráfica. Y aunque el de Icar es un poco menos “educado”, con aspecto de dejarse llevar, en fin, no está tan pulido como el de Leo que de algún modo aguanta lo que exige como mínimo un lector de cómic europeo. Aquí, a veces, hay expresiones faciales extrañas. De todos modos, se ve que ha evolucionado un poco desde Terres Lointaines. Recuerdo oír que con esta serie estaba la gente tan hypeada al otro lado de los Pirineos que comentaban que leían y releían los álbumes constantemente hasta la salida del siguiente número. Lo que queda es una historia puramente entretenida que engancha y que gracias a que ECC la publica de forma íntegra (cuatro álbumes en un solo tomo), tenemos doscientas páginas en la que sumergirnos y degustar toda la historia de un tirón. Una vez más, un planeta exterior, fauna y flora desenfrenadas, la lucha contra una sociedad injusta. Después de leer la mayor parte de la serie de Leo, tengo que decir que Leo es siempre Leo. Te guste o no. El dibujo cambia pero muy poco el escenario. ¿Me gusta lo que hace una y otra vez? Sí. Y no puedo explicar porqué.

Reseña: Bolchoi Arena. Caelum Incognito, de Boulet y Aseyn

Caelum Incognito es el primer volumen de un tríptico que me han archirecomendado de la BD denominado Bolchoi Arena. En especial, por su forma de tratar la Ciencia Ficción, una gran sorpresa, qué álbum, qué primer tomo, friends. Aunque conociendo a Boulet solo por reputación, ya me embarcaba con ganas en esta obra que publica en nuestro país Nuevo Nueve Editores. Y he de decir que a primera vista no me inspiró más que sus gráficos. Aunque bueno, lo primero que siempre nos llama del mundo del cómic es eso, ¿no?

Admito que como con las buenas historias de CF, no solté el álbum hasta que lo terminé. El Bolshoi es una red global de realidad virtual que ha suplantado a Internet y prácticamente al mundo real. Esta réplica idéntica del mundo real donde todos pueden evolucionar allí en la forma de avatar que elijan. No se detiene en nuestro pequeño guijarro terrenal, sino que abarca todo el universo conocido. Se trata, por tanto, de un simulador perfecto donde se incluyen todas las nuevas tecnologías que han permitido relanzar la conquista del espacio. Y la joven Marje, una estudiante de astrofísica que antes había permanecido “desconectada”, acaba dando el paso para poder «ir a ver en el acto» lo que está estudiando. Pero esta novata no entra a su primera conexión con sus datos. No quiere hacer ruido. No quiere hacerse notar por los mejores buscadores de jugadores y mucho menos por las grandes firmas que reclutan a los grandes usuarios profesionales con gran futuro. ¿Y esto traerá consecuencias? Obvio.

Si el tema no es súper original, no recuerdo que se haya explorado en este sentido concreto en otras historias, mucho más lejos de la trama de Desafío Total o la más reciente Ready Player One, el pelotazo de libro de Ernest Cline, o si queréis, peli de Spielberg. Como cómic, en Bolchoi Arena encontramos un cómic al que nos enganchamos rápidamente a la historia y al descubrimiento de este nuevo mundo por parte de Marje. Al igual que ella, rápidamente nos volvemos adictos. Se convierte de un modo gustoso en lo que uno busca en este tipo de historias. Una serie prometedora que mezcla aventura, acción, humor y misterio en un universo de gran riqueza mientras empuja silenciosamente la reflexión sobre nuestra dependencia del mundo virtual. Este primer volumen, por supuesto, presenta a los personajes pero también me gustó mucho la alternancia de pasajes entre la vida real en la Tierra y sus evoluciones en el mundo virtual. Existe un trabajo detallado para describir el Universo, las relaciones entre los múltiples personajes, su vida real y su vida interpretada.

¿Y el dibujo de Aseyn? Bastante minimalista. Un estilo cercano al manga que da la sensación de contener pocos detalles. Pero cuando te acostumbras a él, se aprecia bastante el estilo. Todo va en relación a la coloración algo apagada en tonos pastel que recuerda en cierto modo a Moebius. Impone una atmósfera particular que evoca a la CF de antaño y al final resulta ser de lo más efectiva. Por eso, qué placer encontrar este tipos de universos tan particulares donde uno como lector termina haciendo sus cábalas porque, que duda cabe que este sí es uno de sus futuros que terminará llegando. ¿Estaremos aquí para verlo? Dudo que muchos nosotros sí. Pero Boulet y Aseyn llevan su historia aún más lejos para ofrecernos una historia inteligentemente equilibrada y de este modo podemos perdernos viviéndola junto a la protagonista.

Entre la épica (que satisfará a los gamers) y la reflexión (para los amantes de los cuentos clásicos de Anticipación) el futuro del dominio de lo digital y los grandes grupos que se formarán está mostrado. Y yo no quedaré contento hasta que no lea esta obra al completo.

Reseña: La Espada de Hielo, de Massimo De Vita

Puede ser perfectamente uno de los grandes cómics publicados del año. La recuperación de esta obra así en formato recopilatorio y en tapa dura casi cuarenta años después de su publicación no es otra cosa que una gran oportunidad de leer/tener lo que seguramente fue el primer arco argumental largo de los principales personajes de Disney. Y en sentido adulto, si lo miramos con los ojos que observan que cualquier saga de fantasía heroica más o menos extensa lo podría ser, la obra maestra de Massimo De Vita es donde Mickey y Goofy son los principales partícipes de lo que se presenta como una gran epopeya. La famosa historia que nunca me decidí a leer, La Espada de Hielo, que Panini Cómics y SD traen a la luz desde las sombras del pasado, en un volumen único. Volumen y primera recopilación en castellano de esta mítica saga que obviamente contiene la historia original así como las secuelas que aparecieron poco después de su publicación e incluso la nueva entrega aparecida en 2022.

Pelotazo de cómic. Todo de un tirón para la saca. Y cierto es que nunca fui mucho de Disney y sus personajes. Los niños de los 80, sobre todo, los “niños”, atendíamos a otros héroes con pijama entonces. Pero también es cierto que este que os escribe jamás se ha negado a leer y degustar lo que está considerado como una gran saga homenaje al género fantástico. Por tanto, ¿Mickey y Goofy involucrados en algo de Espada y Brujería? De cabeza, ¿no? El tiránico Príncipe de las Sombras gobierna la tierra sobrenatural de Argaar, y solo un héroe ha sido predicho por la leyenda, por la profecía, sólo uno puede destronarlo siempre que sumerja la poderosa Espada de Hielo en una piedra mágica. Eso está ahí. Bien. Pero hay un mago venido a venos que busca a ese héroe. Lo necesita. Y decide llamar a esos dos que pululan por ahí, a un tal Mickey y Goofy, quienes pronto se ven envueltos en una pelea real contra gigantes, dragones y peligros imposibles… ¿Y consiguen salir indemnes? Apostad a que no.

Massimo De Vita (nacido el 29 de mayo de 1941) es un dibujante y guionista de cómics italiano, ahora retirado. Nació en Milán y su padre era el reconocido Pier Lorenzo De Vita, quien solía dibujar historias de Mickey Mouse y Donald en la era temprana de los cómics italianos. Massimo siguió sus pasos y comenzó su carrera trabajando en animación. Luego, en los 60, se involucró en la producción freelance de cómics de Disney y se encargó de ilustrar a otros guionistas de la franquicia. Donde se especializó en el personaje de Mickey Mouse, a veces asumiendo funciones en los guiones. Lo que vengo a decir es, que estamos ante un autor con bastante experiencia en lo que hizo. Sus historias de Mickey a menudo tienen un escenario histórico o de fantasía, o incluso las hay que se basan en aventuras arqueológicas. Consiguió lo que todo artista busca. Que su obra fuera reconocida a simple vista. Después de pasar por este tomo, ya no verás a Mickey Mouse con los mismos ojos. Reconocerás en otros lares cuando un Mickey es suyo o no. Su estilo artístico curvilíneo, a veces incompleto, lo que le ha convertido en uno de los artistas más distintivos de Disney.

Este tomo incluye más historias y a destacar también para un lector adulto El Torneo de Argaar, donde Mickey y Goofy regresan a la tierra mística donde desafían volcanes, a torbellinos e incluso dinosaurios. ¡De nuevo a las espadas! La que da nombre al tomo es cuento de fantasía clásico sólido con una trama atractiva, algunas ideas ingeniosas y hermosos dibujos. La secuela tiene un alcance mucho menor: la épica está venida a menos como si a De Vita le hubiesen dado un toque desde las altas esferas. Quita de en medio al potente némesis-enemigo-villano de la primera historia y eso resta. Pero está bien leerlo y sacar conclusiones. Así podrás ver también la decisión del autor de hacer algo diferente aquí en lugar de repetir viejas ideas.

Pero el mayor placer para mí fue aprender (del ensayo que lo acompaña) acerca de cuánto de una figura más grande que la vida resultó ser Massimo De Vita. Eso y dos excelentes cuentos donde Mickey y Goofy son llevados a otro mundo, donde emprenden una aventura casi como las de Asterix, con Mickey como Asterix y Goofy como Obelix, a los que me recordaron bastante. Un verdadero clásico, un genial tomo para regalar y leer en vacaciones.

Reseña: Chaplin. Príncipe de Hollywood, de Laurent Seksik y David François

Me hubiera gustado un integral pero no está mal tampoco poder leer la obra como se publicó originalmente en formato álbum. El caso es poder tenerlo en español, cosa por la que debemos dar gracias a Desfiladero Ediciones. Porque Príncipe de Hollywood es, sobre todo, el apoteosis de este tríptico o donde creo que alcanzará la historia su máxima expresión. Guion y dibujo por parte de Laurent Seksik y David François, segundo cómic de un tríptico que como os dije en la anterior reseña estaba deseando conocer al completo. Y es que si todo el mundo conoce a este icono del cine mudo que es Charlot, pocos conocen realmente al personaje que lo encarnó, Charlie Chaplin. Y estos son unos cómics donde vamos a conocer de cerca al hombre y sus pensamientos antes que al personaje creado para la ocasión. Donde se demuestra que su decisión de irse a USA fue lo mejor que pudo hacer en su vida porque consiguió estar en el punto exacto en el momento concreto. Tierra de sueños, de posibilidades, un lugar ideal para el que le obsesiona hacerse rico y famoso a la ligera.

Seamos claros: el tema está bien documentado y es bastante interesante. Y el estilo de François llega un momento en que llega a encandilar. Y me gusta su modo de ver que la mayoría de las personas de la época tenían la cara y nariz alargada. O había mucho malote interesado o pasaban hambre… Pero también están muy bien retratadas las distintas mujeres que compartieron su vida. Y a mí mola este tema y no como he oído por ahí que son repetitivas. Veo bien que las mujeres con las que tiene trato carnal se parezcan mucho unas a otras. Hay una teoría por ahí sobre eso.

Mientras acaba de perder un hijo al nacer de su primera esposa Mildred, Charlie está filmando The Kid, la historia de este niño al que no habrá visto crecer. La película es un gran éxito. Charlie, reconocido por todo Hollywood como uno de los más grandes artistas de su época, disfruta de su ascenso y ya trabaja en su próxima película, The Gold Rush, que será un auténtico triunfo. A los treinta y cinco años se casa con la jovencísima Lita, ya embarazada de su primer hijo. Sin embargo, tras cuatro años de unión y dos hijos, Lita, traicionada en repetidas ocasiones, pedirá el divorcio y esta vez todo se tornará en desgracia (imagino que de forma eventual) para el protagonista. Todo este ruido dañará bastante la imagen de Chaplin para con la opinión pública. Lo que llevó a que mientras aparecían las primeras películas con sonido (1928), su película Le Cirque, ya se anunciaba como un fracaso. La América puritana haciendo estragos en la carrera de Sir Charles Spencer Chaplin. Pero la leyenda sigue. Los grandes no se dan por vencidos nunca. Durante aproximadamente doce años, el número de eventos destacados es denso pero sus secuencias son, en su conjunto, fluidas. Contadas cronológicamente, destacan varios elementos de la personalidad de la estrella. Y te enterarás de grandes cosas de su vida íntima que muy pocos saben fuera del fan de toda la vida que se haya interesado en él. No conozco a nadie, por cierto. Su terquedad para escribir y filmar, su gran desparpajo -a veces demasiado, como durante el surgimiento del «hablador»-, la relación con su hermano, el pesar que crea el estado de su madre, todas las etapas que esmaltan su carrera como su vida quedan así narradas y añaden profundidad al mito en este cómic.

El segundo volumen tras Chaplin en América (https://www.cronicasliterarias.es/?p=12083), otro cómic de lectura fácil que se disfruta mucho en gran parte por el estilo de David François, que hace palpable los cambios de humor del héroe y restituye el exceso de ciertos decorados cinematográficos. Príncipe de Hollywood es una confirmación de que esta saga hay que terminarla y poseerla.

Reseña: Easy Breezy, de Yi Yang

¿Sabéis de esos cómic o libros que engañan por su apariencia? ¿Qué crees que son infantiles, que no son tu rollo, que quizás son mangas insípidos o copias de ellos y muchas otras cosas más… y qué luego para nada lo son? Me ha ocurrido con Easy Breezy. Menuda road movie-thriller de película, que se marca con este título Yi Yang, una autora china afincada en Italia, que muestra claramente el don que lleva dentro, el buen manga que debe haber mamado desde pequeña.

China. Años 90. En el lugar equivocado, en el momento equivocado, el talentoso estudiante de secundaria Yang Kuaikaui se convierte en cómplice involuntario del robo de una camioneta. Li Yu y el tío Ya, dos sinvergüenzas locales de bajo perfil, pensaron que podrían ganar algo de dinero rápido revendiendo el vehículo peeeeero…, mala suerte, la situación se complica cuando el equipo se da cuenta de que hay una chica oculta en la parte trasera de la furgoneta. Le puede haber pasado a muchos, pero le ocurrió a ellos. Y ahora tienen entre manos un secuestro que nadie planeó y obviamente la pena no es la misma que si te pillan robando un vehículo. Peor aún, esto es solo el comienzo, el que sí planeó el secuestro de esa niña les persigue. Y hará cualquier cosa por recuperar a su presa.

Y es un verdadero villano.

Hay que pensar rápido.

Vi publicada hace un tiempo Easy Breezy en francés. Creí que era otra cosa, como os decía al principio de la reseña. Ahora gracias a que Nuevo Nueve Editores la ha publicado en nuestro país, he comprobado que es un cómic súper recomendable de los que dejan muy buen sabor de boca. Y eso que el escenario se reduce a una larga persecución por la ciudad donde se grita, se insulta, se sangra y uno se maravilla de quién es más-mejor como personaje tras verlo resolver sus pasos. Casi ciento ochenta páginas donde te fluye la sangre como lector. Y contiene ciertas partes, lapsus, diferentes momentos que se intercalan para que conozcamos al trío, a cada uno de los personajes, más en profundidad. Hermosos retratos que aportan paz a la intensa narración. A pesar de todo, estamos hablando de buenos muchachos involucrados en un lío de cojones.

Diría también que la sombra tutelar de Otomo acecha la obra, tanto en contenido como en estilo. Personajes que no encajan en la sociedad, furia gráfica que mezcla pura acción y expresión de la urgencia de los sentimientos, en momentos, recuerda bastante a la genial Akira. Por tanto, lectura punzante de alta intensidad que sabe dar cabida a la emoción. Mezcla de géneros y estilos muy potente para crear un cómic que deja con ganas de más.

Muy recomendable.

Reseña: Ojiva, de Bruno Zago y Guilherme Petreca

Para todos aquellos “jóvenes” que habéis flipado de lo lindo con la serie Last of Us, no pensad ni por asomo que este tipo de argumentos son nuevos e innovadores. Quiero pensar que no pensáis así, valga la redundancia. Aunque imagino que por lo que se brinda aquí es por la comodidad de degustar una historia mientras se está agustito en el sofá y solo tienes que mantener los ojos abiertos. Pero os diría que casi lo mismo, se puede hacer leyendo. Y que existen cantidad de historias apocalípticas tan buenas o más que la que propone esa historia sacada del videojuego, que todo sea dicho, les ha quedado muy bien.

Ojiva, de Bruno Zago y Guilherme Petreca, es un claro ejemplo de ello. Y sí, sé que “sabéis” que hay grandes novelas de CF que tratan el tema apocalíptico fuera de los zombies clásicos como la genial La Tierra Permanece, de George R. Stewart, y que tratan más el tema de un virus que acaban con la población. Ese miedo lo tenemos ahí. Y por tanto, monstruos. Ojiva es el último relato de este tipo que me ha impactado y me veo en la necesidad de contároslo. Donde el mundo ya no nos pertenece. Monstruos que se alimentan de humanos han aparecido y se han apoderado de todo. Una década después de la invasión, los pocos que quedaron luchan por sobrevivir en una tierra devastada. Entre ellos, Pilar, una mujer que asumió la responsabilidad de cuidar a Sara, una niña huérfana, y acompañarla en un largo y peligroso viaje hacia su único pariente vivo…

¡Dioses! Cómo huele a Last of Us, ¿no? ¿Qué fue antes el huevo o la gallina? ¿Quién inspiró a quién? Un gran trabajo inicial de Bruno Zago como guionista donde Guilherme Petreca no se queda atrás. Le da vida a la obra con brillantez. Diría también que de inspiración lovecraftiana, por eso más que nada me atraía esta lectura. Un cómic que se desarrolla en un futuro donde somos invadidos por monstruosos forasteros y la humanidad necesita vivir (sobrevivir, sería el término correcto) entre ellos. También utiliza elementos distópicos como que el hombre pierde su humanidad y tiene que pensar solo en sí mismo para conseguir recursos. Y no queda más que unirse por el bien común. Difícil de conseguir eso de un hombre, no siendo un lobo para el hombre.

Ojiva, a pesar de tener algunos clichés propios de este tipo de obras, muy reconocidos, especialmente, para los que leemos literatura fantástica; aun así, aguanta bien. Entretiene lo suficiente para decirlo. Me recordó en sensaciones también a Un Lugar Tranquilo. Aquella peli apocalíptica de monstruos que te devoraban al menor ruido. Este fue el primer cómic escrito por uno de los tres miembros del canal y editorial Pipoca & Nanquim. Zago y Petreca concibieron un rico escenario pos-apocalíptico para ambientar una gran historia de acción con tantas páginas como para considerarse novela gráfica. Una genial álbum que ha publicado Ponent Mon en nuestro país. Me habían dicho que la historia se inspira en algunas de mis películas favoritas: Aliens, Mad Max, Cloverfield, Monsters, The Mist, etc. Es cierto que se puede comparar a muchas tramas. Pero poco más allá de alguien en busca de alguien y para ello atravesar un infierno llamado Tierra. Por tanto, Ojiva no defraudó. Además, la historia comienza con un preludio fantástico que fácilmente podría haber sido escrito por Robert Kirkman. Tiene momentos de horror, heroísmo, esperanza, desesperación, amor y tristeza. Y aunque no está exenta de defectos (creo que tiene algunas páginas de más), ha sido una lectura bastante amena que además ha servido para poner entre mis ilustradores favoritos al señor Guilherme Petreca.

Pinta a secuela en no mucho tiempo.