Reseña: American Vampire Vol. 1, de Scott Snyder, Rafael Albuquerque y Stephen King

«Se siente mucho en American Vampire, la presencia del Rey del Terror».

Es la frase que se me viene a la mente cuando me pongo a leer esta serie. Contaré tambié que una de las novelas de Stephen King que más me marcaron y que aún hoy me inspira mil es, sin duda, El Misterio de Salem´s Lot. La historia de vampiros de King por excelencia. Creo que recordaré toda mi vida cuándo, cómo y dónde estaba cuando la leí por primera vez. Es lo que sucede con los grandes libros, con las grandes historias y esta trama crea una odisea maravillosa sobre el horror del vampirismo dentro de la ruralidad de un pueblo que… ooohh. Contando la vida de cantidad de personajes, la vida de todo un pueblo, la virtud de mostrar de cada uno lo justo para conocerlos, odiarlos y amarlos. Y los acontecimientos que se le vienen encima a todos con la llegada de un nuevo inquilino. O de dos. O mejor dicho, de tres. Pero, en realidad, lo que me encantó de aquella novela, fue como King había conseguido crear su Drácula, unos muy buenos personajes vampiros, sin que recordáramos el clásico de Bram Stoker casi en ningún momento. Por eso, cuando me enteré de que King volvía a la carga con aquellos seres y encima guionizando un cómic me llené de expectativas. Y hago bien en deciros que las altas expectativas son muy peligrosas pero cuando el resultado cuadra con lo que esperas, se te abre un mundo realmente maravilloso.

En American Vampire nos enfrentamos a una historia que tendrá lugar a finales del siglo XIX y principios del XX. El Oeste Americano y la Edad Dorada del Cine. Es ahí dónde nos encontramos con un joven Skinner Sweet y una venganza. Entonces, todo se nos viene encima. Vampiros europeos, dos chicas deseosas de alcanzar la gloria como actrices e inmiscuidas en una trama sangrienta, una ajuste de cuentas, una historia de amor resuelta, una historia de amor sin resolver, un escritor presentando su novela de Terror ante el público (¿de quién será esta idea?) y atestiguando que no es ficción lo que cuenta…

El dibujante brasileño Rafael Alburquerque brillando con luz propia también. Un deleite de dibujos en casi cada página. Y para colmo, Scott Snyder y King atosigándonos con constantes giros argumentales, diferentes transformaciones y vampiros fuera de ley con nuevos poderes y debilidades. Como si de un duelo se tratara, se retan y cada uno elaborará un capítulo de cada ejemplar. Pasado y Futuro, Presente y Pasado, dónde obviamente sólo veremos envejecer a los humanos. El paso del tiempo, resolviendo cabos, finales de número, de arcos, de tomo, magníficos que dejan con la miel en los labios. Y con la máxima en la frente marcada que indica que ésta es la historia del primer vampiro americano. Tenemos así el primero de los volúmenes recopilatorios que ECC Ediciones publica en nuestro país. Los once primeros números de la serie, casi cuatrocientas páginas que narran la historia de una nueva raza vampírica, en una épica generacional que muestra la sed de sangre que subyace bajo una de las épocas más distintivas de los Estados Unidos.

Astuto, despiadado y malo como una culebra, Skinner Sweet es un pistolero completamente corrupto. Cuando los vampiros europeos llegan al Viejo Oeste americano, convierten a Skinner en una auténtico monstruo: el primer Vampiro Americano. Pero, ¿cómo os quedáis si os cuento que Skinner se convertirá en algo completamente diferente a lo conocido? Una nueva raza de vampiro más fuerte e inmune a la luz del sol, que odia a todos y cada uno de sus aristocráticos ancestros europeos. Y viene con ganas de hacer estremecer a la tierra de las oportunidades.

Aparte de Salem´s Lot…, American Vampire es un cómic que podría ser también una continuación y/u off-topic perfecto del libro de King, la genial The Stand (Apocalípsis). Tiene ese poderoso ambiente de desgracia y cuenta muy bien lo que nos espera cuando el mundo que conocemos empieza a irse al garete.

Reseña: GOOMER (Edición Integral), de Nacho y Ricardo

Cuando tuve el cajote en mis manos por primera vez entonces fui consciente del sueño cumplido. Aparte de mega-integrales de cómics de ROM, de Astro City, Zarpa de Acero, Concrete… y otros muchos que espero, deseo y alento cada no mucho a las editoriales para que los publiquen; uno de los de ese podium de deseos… era, sin duda, tener la colección completa algún día de un eterno cómic, una serie que marcó mi juventud como fue Goomer. Cuando me enteré que se publicaba fue de esas cosas que uno piensa que nunca van a pasar y cuando pasan, casi crees que está viviendo un sueño. ¿Sentirá lo mismo al que le toca la lotería por fin después de tantos años imaginándolo? Debe ser una sensación parecida.

Joya, tesorito, Integral del Año, edición eterna, maravilla del cómic publicada, sueño Cumplido, Norma Editorial petándolo de nuevo con la edición de un cómic tan esperado… Así lo definí en redes sociales. Y es que siempre digo lo mismo. Viva la Ciencia Ficción cuando se brinda por el humor. Las pocas historias que tengo publicadas de Ciencia Ficción siempre fueron sazonadas con humor. Me salieron de dentro asi y quizás sea porque para mí es la mezcla perfecta de géneros. Y Goomer es eso en esencia. Y no solo magnifíco esta idea yo. Son muchos los autores y artistas que a lo largo de su carrera han optado por ello y les salió bien. Insisto, no solo lo digo yo. El Prólogo que aparece en el primer tochal de dos de esta edición calentita que vio la luz el pasado Salón del Cómic de Barcelona y ya está en librerías, viene escrito por un friki de cuidado. Pero también uno de los grandes actores, directores y guionistas de este país. El amigo Santiago Segura «habla el avangelio”, en dos paginítas y dice cosas que me tocaron el alma porque describen perfectamente a como me siento con esta publicación entre manos. Dos cositas en concreto. Una es que, si esperáis un reseñador (prologuista) ideal que se fan de esta obra, ese soy yo. Pero si se necesita un reseñador (prologuista) crítico, sesudo y experto en trasfondos gafapastas con ella, buscad en otro lugar. Y dos. “Cuando supe que por fin podría tener TODAS las aventuras de Goomer reunidas en una sola colección, di literalmente, saltos de alegría”.

Los vellos de punta.

En fin. ¿Qué o quién es Goomer para quién (oh dios) no lo conozca? Goomer fue una serie de historietas de humor creada a finales de los benditos años 80 por el guionista NACHO Moreno y el dibujante RICARDO Martínez para El Pequeño País (una revista infantil que acompañó al suplemento dominical del periódico El País entre 1981 y 2009). Tuvo tal éxito que fueron muchos los padres y abuelos que compraban el diario el fin de semana sí o sí porque tenían detrás a hijos o a nietos esperando con ansia esta publicación. Y hablo de abuelos-nietos porque me consta que no sólo fue mi caso. Pero lo más curioso-chulo y a la vez casi indignante es que cada publicación era únicamente una página, un gag, un chiste ultra-corto que rara vez tenía más de una sola carilla. Hecho que fomentaba el ansia por conseguirlo todo-todito-todo del personaje y leerlo más de una vez. Y llegaron entonces recortes, encuadernaciones particulares…, pero no mucho después aparecieron más historias en otras revistas y fue adaptada a película de animación e incluso llegué a verlo no hace mucho en serie web. Pero no es lo mismo. Lo que sí que triunfaron fueron los álbumes al estilo cómic europeo que publicó en su día Ediciones B. Recuerdo a un amigo que apenas salía con nosotros porque guardaba la paga para comprarlos…

Goomer narra las aventuras de un astronauta terrestre que se adapta a vivir en un planeta lejano habitado por una civilización inteligente. En la historieta se dan a conocer diferentes tipos de sociedades, personajes escalofriantes y formas de vida desconocidas, pero a veces de una gran inocencia comparadas con el «terrorífico» habitante procedente de la Tierra. Son chistes, son gags “a lo periódico”, con un transportista espacial que se convierte en inmigrante casi no deseado en un planeta alienígena de una galaxia muy muy lejana. Calvo, perezoso y de pocas luces, Goomer encaja en ese entorno como un guante, comportándose como un Han Solo de pacotilla, sin nave, princesa ni gloria. Un antihéroe que nos representa porque es como somos, no como nos gustaría ser… Pero el caso es que por fin Goomer, el mítico aventurero espacial, perezoso y caradura puede estar en vuestras cómictecas de forma completa con todas sus historietas publicadas en una edición integral. Un cofre-caja contenedora de dos tochales que incluyen las mil doscientas treinta páginas publicadas en diferentes revistas semanales, además de numerosos extras. Una ocasión inmejorable para que las divertidas peripecias de Goomer conquisten a nuevos lectores con su humor atemporal para todas las edades.

Los magnificos guiones de NACHO le perseguirán siempre allá donde esté. Nacho Moreno fue guionista de cómics, viñetista político, escritor, editor, cocinero y restaurador español con esa gracia de la mezcla explosiva que puede salir de alguien nacido en el País Vasco y llevarse decenas de años viviendo en Cádiz. Fue creador también de Mot junto al gran Azpiri. Otra obra que espero Norma Editorial rescate, ¡pliiiiiiiiiiiiisssssssssssssssss! El maestro guionista nos dejó en 2021 víctima de una horrorosa enfermedad.

Por otro lado, pero no muy lejos, RICARDO (Ricardo Martínez – Santiago de Chile (1956)) sigue dando guerra aún como ilustrador editorial y humorista gráfico en nuestro país.

¿Qué más decir entonces? OBRA INDISPENSABLE. Nadie -y digo nadie- debería perderse esta oportunidad. Con una muy chula lámina en su interior.

A las pruebas me remito.

Reseña: Daredevil Amarillo, de Jeph Loeb y Tim Sale

Daredevil es uno de los grandes superhéroes callejeros del mundo del cómic. Uno de los más famosos héroes de Marvel. Y uno de los personajes a los que hay que recurrir cada poco. En especial, el Daredevil, de Frank Miller y Klaus Janson, la joyita que publica este mes Panini Cómics en formato Colección Frank Miller (tomaco de los buenos: https://www.panini.es/shp_esp_es/colecci-n-frank-miller-daredevil-de-frank-miller-y-klaus-janson-sfrmi003y-es01.html). Aunque también existen otras chuladas como es el Daredevil Amarillo, del tandem de maestros Jeph Loeb y Tim Sale. Pues desde 1964, Matt Murdock ha defendido las calles de Hell’s Kitchen de gente como Kingpin y otras amenazas. La mayoría de los lectores de historietas reconocerán al héroe ciego por su traje rojo, el mismo que ha usado a lo largo de su historial de publicaciones. Pero no muchos saben que, sin embargo, comenzó su carrera vistiendo un traje amarillo. Un traje recuperado y que se ve de manera más prominente en la miniserie de Jeph Loeb y Tim Sale que hoy os reseño y que acaba de rescatar Panini Cómics para este mes que ya casi se nos va. Un dueto de autores famoso por su trabajo en Batman: El Largo Halloween (obraza), Spiderman Blue (obraza), Capitán América Blanco (entretenido), Hulk Gris (curioso), entre otras muchas.

Un cómic el Daredevil Amarillo donde se aborda el origen de El Hombre Sin Miedo o como muchos otros llaman el Diablo de Hell’s Kitchen. Pues el dispositivo de inicio es Matt Murdock escribiendo una carta a su difunta amada Karen Page, como una forma de superar su fallecimiento. Decide escribir la historia de cómo su origen de Daredevil lo lleva a ella. Un tiempo en la Facultad de Derecho donde con su amigo Foggy Nelson andan cerca de graduarse. Pero el padre de Matt, Battlin’ Jack Murdock, decide inspirarle una noche llevándolo a un gran combate de boxeo. Y él, sabiendo que su padre se dedica a las peleas “arregladas”, accede e incluso le insta a nunca caer. Y después de ganar el combate, Jack le da a su hijo su túnica de boxeo de color amarillo brillante. Y poco después de eso, Jack es asesinado por gánsteres por no ceder en el combate que estaba pactado perder… Pero Matt y Foggy intentan acabar con esos mafiosos en las juzgados, pero debido a las coartadas dadas y el dinero bajo cuerda, salen impunes. Matt esa noche crea su primer atuendo de Daredevil con la túnica alimonada que va a empezar a dar miedo a muchos, muchos…

Lo más importante a tener en cuenta aquí es que, a diferencia de otras narraciones de su origen, esta versión del origen de Daredevil está bien fundamentada. No nos enfocamos en Daredevil. Nos enfocamos en Matt Murdock. La mayor parte de la historia sigue la vida de Matt sin necesidad de secuencias de acción. Si bien las peleas están chulas, una simple escena en la que Matt, Foggy y Karen van a un bar…, los autores consiguen mostrarla interesante. Es esta quema lenta y más centrada en los personajes lo que hace que Daredevil Amarillo brille. Otro aspecto fantástico es ver la dinámica entre el trío de amigos en estos primeros tiempos. El lector sentirá la tensión a su alrededor mientras los chicos intentan ganarse el corazón de Karen. Es una dinámica que es poco común en los cómics hoy en día, ya que la niña elige al héroe. Sin embargo, dado que nos enfocamos más en el lado humano de las cosas, ves que ambos chicos tienen oportunidad de ganarse el corazón de ella y llevan una pelea limpia por ello. Encontraréis momentos en los que estaréis de parte de Matt y otros en los que preferiréis a Foggy Nelson como ganador.

Tim Sale ilustra la historia. Su estilo es único, se remonta a historias clásicas en lugar del estilo más suave de hoy. Pero la conclusión es que Daredevil Amarillo es una excelente historia de Matt Murdock, ideal para empezar con el personaje. Da un poco más de luz a un superhéroe que parece más oscuro que la mayoría. Un origen tan clásico como maravilloso.

Reseña: Voodoo (1952-1953), de Craig Yoe, Robert Farrell y Mike Howlett

Lo ideal de todo esto, lo que tengo súper claro es, que la oportunidad que le está dando Diábolo Ediciones al verdadero fan del Terror es tremenda. Los mejores cómics de la historia, los grandes clásicos que nunca llegaron a este lado del charco, los imperdibles que se perdieron con el tiempo… Todos y cada uno de ellos recogidos en sendos y gloriosos tomos en tapa dura por edición, colección, años o publicaciones donde vieron la luz. Todos en una genial y eterna colección como es la Biblioteca de Cómics de Terror de los Años 50. Además de que también están rescatando los Tales From the Crypt y las Weird Science a todo color… Pero bueno ahí no entro que el babeo ya se convierte en riachuelo.

¡Voodoo te ha hechizado! Tenemos por fin en nuestro país uno de los cómics Pre-Code más extraños, geniales, rarunos, extraños y sangrientos de la historia del Terror dentro del noveno arte. Un tipo de cómic duro en tiempos que se imprimió originalmente en Canadá y se importó a USA, dicen algunos que por un intento de evitar la censura (¿probablemente merecida?) de aquellos años de posguerra, entre-guerras, en definitiva, MIEDO. Pero ideal para los amantes de las historias horripilantes donde el sexy Good Girl Art en cuanto al tema gráfico ayuda bastante. De la mano del maestro de la vieja escuela Matt Baker y sus asociados del infame grupo de horror los denominados en su día The Iger Shop, en este caso.

Dentro de la colección que Diábolo Ediciones publica, Voodoo correspondería al noveno volumen dentro de la Biblioteca de Cómics de Terror de los Años 50. Recopila los primeros números de la mítica y bizarra revista publicada originalmente por Robert Farrell a principios de aquella década. Para muchos, las mejores historietas de terror publicadas después de las que vieron la luz en la EC. Un volumen de casi doscientas páginas llenas de espeluznantes cómics de pulp-fiction como Zombie Bride, The Weird Dead y The Crawling Horror. Un volumen que incluye clásicos pre-Code como They Couldn’t Die!, Torture Travelogue, Vanishing Cadavers, Voodoo Canvas, Good Bye World!, Satan’s Plaything, Blood Revenge y Skulls of Doom. Así que anímense, friends, tenemos horrores y males de todo tipo. Plantas devoradoras de carne humana, langostas invocando demonios de Marte, alfombras poseídas, hombres cambiando de cerebro, mujeres perdidas en cementerios, una estantería llena de calaveras en la parte de atrás de la mansión de un ricachón… Cómics rápidos de leer y que son tan divertidos como chiflados. Y que en sensaciones. me recuerdan bastante a un placer culpable que tengo cuando leo mínimo uno o dos al año, mis queridos cómics de Terror de ATLAS, que son menos conocidos pero que también están al nivel de los de la EC.

Ahora una cosa IMPORTANTE. Este volumen de Voodoo se indica que correspondería a lo publicado en dicha revista entre los años 1952-1953. Pero no es otra cosa que el segundo de los tres volúmenes publicados por Craig Yoe y su equipo de rescatadores. Y está claro que por eso cuadra bastante bien dentro de la colección Biblioteca de Cómics de Terror de los Años 50. Pero a ver, a ver, a ver. ¿Existieron dos volúmenes más de esta colección denominada en USA, The Complete Voodoo? Sí.  Repito. Este que os reseño y que recién publica Diábolo Ediciones correspondería al Volumen 2. El segundo de tres. Repito. A ver, a ver, a ver, amigos de Diábolo Ediciones, por favor, por favor, por favor, no nos hagáis esto. Queremos más. El zombie sediento de sangre y cerebros siempre quiere más. El vampiro…, bueno, ya sabéis. Así que por favor, por favor, por favor, sé que quizás no tendrían cabida dentro de la Biblioteca…, o sí, no lo sé. Pero por el Amor del Mal tenéis que publicar los otros dos volúmenes. Tenemos que dejar esto cerrado. Tenerlo todo-todito-todo de la extinta Voodoo. Es de ley. En la época de los integrales, en la época de los omnibus… Dioses. Donde uno/a se lo puede llevar todo de una colección casi con un pago… Uno no se puede comprar un chalet junto al mar sin ventanas. ¡Queremos más! ¡Tenerlo todo-todito-todo de publicaciones así! ¡Ansia viva!

Este volumen recopila los seis primeros números de la revista Voodoo y cuenta con una fascinante introducción del especialista Mike Howlett que añade todas las portadas de las revistas originales.

ADVERTENCIA: ¡ESTE CÓMIC NO ESTÁ APROBADO NI POR LA ASOCIACIÓN DE PADRES, NI POR EL GOBIERNO, NI POR EL COMICS CODE AUTHORITY. Esto les hicieron poner en la portada. Así lo presentaban. Venga ya, hombre. ¡Venga, ya!

Manjar de manjares para el fan del Terror.

Reseña: Die! Die! Die! Vol.1, de Robert Kirkman, Chris Burnham y Nathan Fairbairn

Habría que decir que Robert Kirkman y Scott M. Gimple ya están en la lista negra de algunos fans a juzgar por el estado actual de The Walking Dead y su spin-off Fear the Walking Dead. El friki-fan-zombie siempre quiere más y mejor y no entiende que las ideas se agotan. Es por eso que yo alento y aconsejo de alguna forma, leer otras obras de Kirkman para que se vea que calidad sigue teniendo como autor. Y que sigue sorprendiendo en la medida de lo posible con cómics chulos al estilo de Die! Die! Die! su nueva serie de cómics en curso que recientemente acaba de publicar ECC Ediciones en nuestro país. Con una trama que se centra en el tema del asesinato libre y sin control, derramamientos de sangre, balas por doquier, y un constante caos en un mundo que no está muy lejos del nuestro… Con una trama que comienza con unos pequeños esbozos, pero que se vuelve más y más convincente cada vez y que nos lleva a saber de un servicio secreto dentro del gobierno norteamericano con una especie de Jigsaw aprobado por el estado.

El negocio es administrado por un senador que definitivamente no es un análogo de Hillary Clinton (no señor, seguramente no), y entramos directamente a un comienzo aterrador con una sangrienta escena de apertura. Un primer número, un jugueteo nihilista y empapado de sangre que en realidad es divertido si no te da asco ver a una persona sin nariz deambulando como si nada. Y es que aunque nos cueste admitirlo, vivimos en un mundo malvado lleno de gente malvada que hace maldades todo el rato. Por eso se crea esta camarilla secreta dentro del gobierno de Estados Unidos que opera al margen del sistema para influir en los asuntos del mundo mediante asesinatos selectivos.

Tampoco quiero asustaros demasiado. Die! Die! Die! promete desde la primera página. Una historia irreverente empapada de sangre, sin restricciones, llena de acción y directa para los fans del horror sangriento. El mundo que nos rodea es manipulado justo delante de nuestras narices, principalmente para mejor… y a veces el beneficio individual de los grandes no afecta, si no machaca, a los débiles. Y esa es una maldición que persigue al ser humano desde el inicio de los tiempos. Entonces, si haces daño a la gente, haciendo que el mundo sea mejor, ¿tema resuelto? Opinen ustedes. ¿Hasta qué ponto el ojo por ojo es bueno? Y… ¿qué sentido tiene todo si tu muerte fuera del paso de los años no depende de ti? Esto dijo Robert Kirkman cuando anunció la serie en su inminente salida en 2008:

«En las tiendas MAÑANA tendréis el primero número de Die! Die! Die! Queremos volver a ver que ir a una tienda de cómics vuelva a ser emocionante. ¡Un lugar para descubrir! Internet ha eliminado toda sorpresa y anticipación de los cómics. Todos escuchan sobre nuevos proyectos emocionantes y luego tienen que esperar meses o años para que estén en sus manos… Y la mitad del tiempo al final de esa acumulación, las historias se echan a perder en un intento poco convincente de obtener una mayor atención de los medios. Entonces… ¡Sorpresa! Aquí tenéis una nueva serie mensual (que ECC Ediciones publicará en nuestro país en tomos recopilatorios), y os aseguro que será genial para todos. Esta es, literalmente, la única manera en que me puedo parecer a Beyoncé…», aseguró.

Y con estos tintes oscuros y enigmáticos yo os hago la reseña. Aportando el mínimo sobre su argumento y contando muy poco de un cómic que como fan del género de Terror, para mí ha sido toda una sorpresa. El primer número de Die! Die! Die!, como habéis visto, llegó a las tiendas justo después de un anuncio sorpresa. Cortesía de Image y Kirkman’s Skybound, y con arte de Chris Burnham y Nathan Fairbairn, es una serie que comenzó en 2018 y que llevamos desde entonces requiriendo por este lado del charco. En definitiva, es una historia que hará que te preguntes si realmente te gustan las tramas de asesinatos brutales o las películas de violencia extrema. Y qué piensas cuando esas escenas incómodas pasan por delante de tus ojos.

Una historia no siempre tiene que ser profunda, también puede ser entretenida, brutal y simplemente contada de forma totalmente exagerada. Si esperas una trama poderosa y llena de acción entre agentes y organizaciones secretas, has venido al lugar correcto. Die! Die! Die! aporta eso. Cómic descarado a la vez que convincente. El mensaje de la historia es claro. Una vez que los humanos tienen demasiado poder, pueden destruir el mundo y esto debe detenerse… Por otros humanos, en teoría.

Reseña: Los Guardianes de la Galaxia. Jinetes en el Cielo, de Gerry Duggan y Aaron Kuder

El domingo pasado por la noche pusieron en la tele Guardianes de la Galaxia Vol. 2 y la volví a disfrutar un montón. Las dos primeras partes me encantan. Está muy bien trasladado el concepto Guardianes de la Galaxia así como personajes alternos como EGO, trasladados al UCM para comprensión de los no lectores de cómics e hijos. Pero también vale como actualización de lo clásico. Y eso, si está bien hecho como en este caso, mola bastante. Por lo que dejé lo que tenía entre manos para ver la peli. Y eso que curiosamente estaba deleitándome con más o menos lo mismo pues estaba disfrutando en formato papel de este grupo dentro del tomo Jinetes en el Cielo que Panini Cómics publicó hace poco. Cambié una cosa por otra solo para pillar detalles y para ver lo bien que están trasladados -esta vez si- los personajes. No es que sea la misma historia pero los Guardianes de la Galaxia que Gerry Dugan propone en Jinetes en el Cielo, sí que son los mismos a encontrar en el UCM. Lo que aporta este genial Marvel Now! Deluxe serían los doce numeritos que comprendieron el All-New Guardians of the Galaxy asi como el Free Cómic Book Day (2017) que serviría como precuela para la aventura que pronto meterá a este nuestro querido grupo en una extraña guerra que se ha desatado entre El Coleccionista y el Amo del Juego.

Si alguna vez hubo un momento para lanzar una nueva serie de Guardianes de la Galaxia, ese momento es ahora. Por el momento, la atención de casi todo el mundo sigue con Star-Lord y su tripulación como nunca antes ya que se viene peli para el año que viene pero ya hay cantidad de datos en internet. Y es que después del exitazo de la primera peli de 2014, Brian Bendis modificó el concepto de Guardianes para alinearlo con las películas. Y ahora Gerry Duggan ha ido aún más lejos. Quiero decir, seamos realistas, tienes Baby Groot, la música de Star-Lord y una página de introducción psicodélica. Claro, en un giro extraño, el artista Aaron Kuder le ha puesto barba a Star-Lord, pero esa es la única diferencia. Ahora, no me malinterpreten; eso no es algo malo. Lo cierto es que, hasta 2014, Guardianes de la Galaxia eran una nota a pie de página en la historia de Marvel y ahora siempre son noticia y eso se debe en gran parte al genio James Gunn. No culpo a Marvel por querer aprovechar esto, pero los fans del cómic sabemos de donde viene todo, ¿o no?

Dicho esto, debo admitir que Gerry Duggan le ha dado a esta aventura un atractivo toque tradicional. En particular, me encanta la página de introducción que proclama audazmente que estos compis son el ‘Equipo A’ en el espacio: “Si estás en problemas (o crees que conoces a alguien que pudiera estarlo) en la Vía Láctea, ¡puedes llamar a Los Guardianes de la Galaxia!”. Asi nos encontramos con un cómic divertido. Una serie de doce números que tiene de todo. Comienza con el equipo intentando realizar un atraco «imposible». Lo hacen de una manera que solo encontrarías en los cómics, y funciona muy bien. Francamente, a primera vista estás tan confundido como las víctimas de los Guardianes. Duggan se toma el tiempo para establecer el nuevo status-quo de sus personajes, aunque solo da pistas mínimas sobre las razones de estos cambios. ¿Por qué Drax es pacifista? ¿Qué le pasó a Groot? Y luego grandes momentos con un Star-Lord imponente y no tan dicharachero como el de las pelis. Luego, la historia nos lleva al cliente de los Guardianes, y desde allí Duggan pone al equipo justo en medio de un conflicto entre dos de los Primigenios del Universo como son El Coleccionista y el Amo del Juego.

Artísticamente, Jinetes en el Cielo (All-New Guardians of the Galaxy) es satisfactorio pero no extraordinario. Aaron Kuder tiene una actuación bastante sólida, pero en realidad no hay momentos destacados. Aun asi mola, es un cómic que entretiene y eso es lo mínimo siempre a conseguir en el noveno arte.

Si eres fan de las películas (¿y quién no lo es?), seguramente encontrarás este cómic gustoso muy gustoso de leer. No es la historia más-mejor que vas a leer, pero tiene el estilo y el tono que convirtió a esta banda heterogénea en súper estrellas cinematográficas.

Reseña: Batman. Gotham Underground, de Frank Tieri y Jim Calafiore

Batman: Gotham Underground es otro de esos geniales tomos de franja amarilla que recoge uno de los nuevos arcos de la última larga lista de títulos para explorar la deportación de Checkmate de los supervillanos de la DCU a un planeta lejano (¿Se puede decir prisión de la Zona Negativa?). Otro vínculo superfluo con la bestia gigantesca y fea conocida como Máscara Negra. Y por eso precisamente quería leer este tomo. Me encanta este villano y todo lo que se está contando sobre él antes, durante y después de su muerte. Sí, muerto, porque Máscara Negra ha muerto, y el trono de los bajos fondos de Gotham City ha quedado vacante. Sin embargo, los diferentes malhechores locales no tardarán en disputarse el control de las calles, de las mafias y, en general, de todo aquello a lo que se pueda hincar el diente. Y como siempre, corresponderá a los justicieros de la ciudad hacerles frente mientras Cerillas Malone se infiltra en los dominios de El Pingüino a fin de destapar que Oswald Cobblepot no es un empresario tan respetable como pretende aparentar…

Ahora, antes de ir y hacer algo loco como asumir que la gran historia de Countdown, en realidad, volvía a crecer en ramales diferentes (no es así), me siento obligado a señalar que Gotham Underground funciona a pesar de su conexión con Countdown y su continuación real en la Salvation Run; donde Grant Morrison abordaba unos conceptos locos y exagerados para las páginas de Detective Comics. Bueno, a ver, me paro y para que nadie que no esté muy puesto se líe, Gotham Underground se cuela o deberíais colarla en vuestro orden de lectura entre el Batman: Detective Comics vol. 01 – Archivos Secretos y el Batman vol. 4: El Guante Negro. Y si no mirad, os paso el orden de lectura que propuso ECC Ediciones, el mismo que yo, por ejemplo, tengo impreso en el tablón de mi despacho y al que recurro más de una vez: https://www.ecccomics.com/contenidos/guia-de-lectura-batman-saga-11705.aspx

Escrita por Frank Tieri y dibujada por Jim Calafiore, Gotham Underground recopila la miniserie homónima en la que tienen cabida los peores elementos de la ciudad de Batman, incluidos El Espantapájaros, Hugo Strange y El Acertijo. Y Catwoman se centra directamente en las luchas emocionales recientes de Selina y Nightwing en Nueva York (realmente no ha habido muchas historias recientes que presenten a Gotham City de forma tan realista). Como cualquier gran escenario ficticio, Gotham es prácticamente un personaje secundario por derecho propio, y el escritor Frank Tieri aprovecha al máximo ese hecho, arrojándonos directamente a la mezcla de otra noche mortal en Gotham. Por lo que Tieri nos lleva de un lado a otro entre la última guerra de pandillas de Gotham y nos da un paseo por el Penguin’s Iceberg Lounge, una reunión entre dos de las familias criminales más poderosas de la ciudad en un club nocturno, donde los clientes pueden apostar en peleas de superhéroes (la Guerra de los Sinestro Corps se reproduce en la pantalla central). Y como adicto a Batman cuando se presentan estos detalles, uno no pude evitar sonreír en cada parada.

Tieri también se toma tiempo para divertirse con algunos elementos básicos icónicos de las historias clásicas de Batman, y una reunión en la azotea entre el comisario Gordon y Robin, depara en un diálogo excelente, al igual que la interacción entre Dos Caras, El Pingüino y El Acertijo.

El artista Jim Calafiore captura muy bien la atmósfera de Gotham City, y dado que está libre de la estructura rígida de Countdown, puede estirar un poco las piernas con algunos diseños de viñetas más creativas. Aunque no tiene nada nuevo que decir sobre Gotham o el Caballero Oscuro. ¿Y quién lo tiene?

Los fans del orejas picudas disfrutarán de este tomo porque sí y ya está.

Para el que no esté siguiendo la colección será un “agradable” recorrido por la ciudad más oscura, más peligrosa y con más mafiosos por metro cuadrado que uno se puede encontrar en el mundo de los cómics.

Reseña: Flash. La Muerte de Irish West, de Cary Bates, Rich Buckler, Don Heck y VVAA

Dicen que “uno de los momentos oscuros de la trayectoria de Flash” pero yo añadiría que si no el mejor, está muy cerca de ser el mejor arco argumental de Flash. Muy cerca. Al menos, uno de los más impactantes. Pues para los que seguimos al Velocista Escarlata desde siempre, La Muerte de Irish West fue uno de los giros más desconcertantes leidos en mucho tiempo en un cómic. En uno cuya prioridad era la sonrisa. Y la pregunta quizás debiera rondar en torno a: ¿Podrá El Hombre Vivo más Rápido del Mundo escapar de su peor pesadilla? Flash no puede escapar de la pérdida de su esposa y cree que nada ni nadie le impedirá cazar a su asesino. En un buen tomito recopilatorio, ECC Ediciones publica en tapa dura un magnifco volumen donde seguir “las carreritas” de Barry Allen para averiguar quién es el responsable de la muerte de su esposa Iris. Y responsabilizarle o responsabilizarlos si no mat…

Flash: La Muerte de Iris West recopila los números The Flash #270-#284 publicados entre 1979 y 1980 por Cary Bates, Rich Buckler, Don Heck y otros autores míticos de la DC Comics de entonces. La Muerte de Irish West es una colección de grapas que tiene mucho valor nostálgico para mí. Tuve (y todavía tengo) algunos de los números impresos de aquellos años cuando vivía al otro lado del charco. Cumplí seis años una semana después de esta publicación y cumplí doce un par de meses después de acabarla por completo. Es una historia particularmente importante para la historia de DC pero también para mí. Por lo que no puedo ser muy imparcial. Barry Allen es Flash, el Hombre más Rápido del Mundo, un héroe respetado por sus enemigos y querido por sus amigos de la Liga de la Justicia de América. Y en su vida privada, no le podría ir mejor: está casado con Iris, la mujer de sus sueños, la tía de su pupilo Kid Flash. En resumen, es feliz. O lo era, porque todo eso está a punto de cambiar. Durante el transcurso de una fatídica fiesta de disfraces, Iris aparece muerta, y Flash emprende la carrera más desesperada de su vida en busca del asesino de su esposa…

Barry Allen, el Flash de las Edades de Plata y Bronce, se habría casado con Iris West en 1966, convirtiéndose en uno de los primeros personajes DC en casarse mientras mantenía activamente una carrera de superhéroe. Otros siguieron su ejemplo, como Elongated Man (Randolph «Ralph» Dibny, el Hombre Elástico cuya primera aparición fue en el The Flash #112, premio en más de una ocasión al «Mejor Personaje Secundario»); y también se casó muy pronto Átomo (Dr. Ray Palmer, uno de los primeros superhéroes de la Edad de Plata que debutó en el Showcase #34, de 1961). Desafortunadamente, el matrimonio de Flash e Iris fue también uno de los primeros en terminar. Y aquí se cuenta.

Y esa es la otra razón por la que esta historia es notable. En el mundo de los cómics, la muerte va pasando cada poco. La muerte siempre ha sido ese efecto ¿grave? de trasfondo en una historia. Pero claro está que estos personajes, esas posibles muertes, siempre se deshacían al final de la trama. A menudo era un engaño, el personaje estaba en un estado de muerte, o se levanta milagrosamente de entre los muertos. Pero Iris aquí realmente muere. Y deja hundido a Barry lamentándose por la pérdida sin saber como continuar con su vida. Os podría hacer un spoiler gordo sobre lo que ocurrió varios años después, concretamente en 1985, pero prefiero que lo descubráis por vosotros mismos. El caso es que la muerte de esta chica fue un gran shock para los jóvenes lectores de cómics de entonces. Además, Bates preparó muy bien la historia para que tuviera un gran impacto. Su matrimonio fue una trama secundaria recurrente hasta que de pronto salta a la palestra con la muerte de ella. No te lo esperas. Comenzamos a ver un poco de fricción en su matrimonio, seguido de una reconciliación e incluso se habla de tener un hijo. Bates pone cuidadosamente a los Allen en su momento más feliz antes de que ocurra la tragedia. Preparó “el momento” para que fuera todo lo doloroso posible.

El arte de los cómics es maravilloso.

Fue una grata experiencia e interesante para mí volver a leer esta historia-arco argumental y en una edición íntegra como esta. Una hermosa reimpresión de un importante punto de inflexión en la historia de Flash.

Reseña: Marvel 1602. Edición Grimorio, de Neil Gaiman, Andy Kubert y Richard Isanove

Edición joyita que ya se puede adquirir en el Salón del Cómic, tomo maravilloso que en breve ve la luz en librerías en formato cómic integral, edición de lujo maravillosa allá por donde la mires y edición en formato grimorio de lujo y (para colmo) limitada. Esa es la edición de Marvel 1602 que hoy domingo os reseño. Serie tremenda de arco completo, novela gráfica fantástica, en general, casi doscientas cincuenta páginas para perderte en ellas cual serie de televisión.

Marvel 1602 es uno de esos cómics que aparece con bastante frecuencia en las listas de «Lo Mejor De…». Y está claro que sí; escrita por Neil Gaiman (el maestro escritor inglés colmado de premios y una buena cantidad de elogios por parte de la crítica), en mi caso, una historia que disfruté en su día en inglés pero siempre quise volver a ella alguna vez y de forma cautelosa, optimista, porque sabía a lo que iba. Sobre todo, a poder ser, en una buena edición. Y oye, sueño cumplido, nunca imaginé disfrutarlo de un modo así. Marvel 1602 tiene una premisa tan interesante que absorbe desde la primera página.

Una obra de Neil Gaiman (guionista-autor), Andy Kubert (Ilustrador), Richard Isanove (ilustrador digital) que combina la acción y las aventuras clásicas de Marvel con el escenario históricamente preciso del reinado de Isabel para crear una serie única como ninguna otra publicada antes en la Casa de las Ideas. Gaiman eligió una alineación interesante para determinar una lista aparentemente interminable de héroes y villanos de Marvel, para seleccionar un elenco de personajes que gustará ver en este plano temporal. Caras familiares aparecen en casi todas las viñetas. Sus rasgos distintivos se modifican para adaptarse al período de tiempo y al entorno, mezclándose con el trasfondo histórico casi a la perfección en la mayoría de los casos. Si bien jugar a «detectar al personaje» puede ser divertido para el fan de Marvel bastante versado (y, sin duda, es uno de los encantos de este cómic), algunos personajes son inmediatamente reconocibles debido al diseño que traen. Pero otros, os lo aseguro, os costará identificarlos, en especial, por su papel poco característico en la trama. Y, en algunos casos, sus nombres cambiados.

Se dijo en su dia y lo recuerdo ahora, que el ritmo de este cómic fue un problema para algunos lectores de cómics de superhéroes. Diré lo mismo que en aquella web en la que escribía entonces: «…creo que Gaiman lo hace intencionadamente en homenaje al ritmo típico y habitual de una novela histórica». Y el que sea lector de ellas, lo sabrá. La prosa de Gaiman emite esa naturalidad lenta y con no mucha acción (fuera de las batallas) que rememoran la tramas históricas donde brilla más el contexto y la evasión del entorno al pasado tácito, por encima de escenas trepidantes e intensas (fuera de las conversaciones verbales). Los primeros capítulos de 1602 te arrastran a través de la construcción del mundo y las introducciones de personajes, jugando más como un «quién es quién» que con una historia real. Es de esas historias que leídas como números individuales, pudo tender a la sosez y al desvarío argumental que provoca que mucha gente piense mal de lo que tiene entre manos. Por eso la importancia de ser -porque lo es- una novela gráfica/histórica en su complejidad. Y es que Marvel 1602 cobra fuerza a partir del tercer número…, encuentra un ritmo importante después de la introducción y aparición (adecuadamente dramática) de Doom. Principalmente por que (como siempre) Doom hace lo que Doom quiere hacer. Un primer momentazo bien elaborado y teatral de mi megalómano favorito.

Por otro lado, a destacar un personaje creado por Gaiman que brilla entre tanta celebridad. Recuerdo que cuando lo vi por primera vez pensé: «Será mejor que alguien empiece a explicarme por qué hay un nativo norteamericano blanco en esta historia, y rápido». Ese personaje es Rojhaz, guardaespaldas de Virginia Dare, que ha venido a Inglaterra como embajadora del Nuevo Mundo, y en busca de audiencia con la reina. Rojhaz es un personaje que por lo que sé, no gustó a cierta parte del público en su día. Pero a mi me encanta durante la mayor parte de la historia. Y cuando finalmente llega la gran revelación sobre quién es… Uff, momentazo. Quise abofetearme por no darme cuenta antes. Y por llegar tarde a un giro de trama que dejará en evidencia a la inteligencia de más de uno/a.

Por si no lo habéis pillado aún, para con el tema histórico, en Marvel 1602 acudiremos al glorioso tema de los viajes en el tiempo y quizás por ser un fan eterno de este tipo de historias, sumando superhéroes Marvel y un fiel seguidor (y aprendiz) de la prosa de Gaiman; decir que Marvel 1602 me ha maravillado una vez más. De hecho, es la que siempre recomiendo cuando alguien me pregunta por una buena historia de viajes en el tiempo dentro del Universo Marvel. Entonces: ¿Qué hubiera ocurrido si las grandes criaturas que pueblan el Universo Marvel, desde Los 4 Fantásticos a La Patrulla-X, desde el Doctor Extraño a Hulk, desde Spiderman a Nick Furia, hubieran irrumpido en el siglo XVII, en lugar de hacerlo en el siglo XX?

Neil Gaiman, el genial creador de The Sandman, tiene la respuesta, en un imprescindible cómic dibujado por el equipo artístico de Lobezno: Origen, Andy Kubert y Richard Isanove. Un volumen de lujo que además contiene todas las secuelas de la miniserie original, protagonizadas por los pioneros del Nuevo Mundo, Spiderman y Los 4 Fantásticos.

Creo que es el único tomo de cómic de la historia, que únicamente con letras en la portada, se recomienda solo.

Reseña: Proctor Valley Road, de Grant Morrison, Alex Child y Naomi Franquiz

Evolution Comics es ese sello con el que Panini Cómics nos publica cada mes, cómics situados fuera de la todopoderosa Marvel. Un lugar donde encontrar cómics de otras editoriales, entre las que se encuentra BOOM! Studios, una editorial estadounidense de cómics y novelas gráficas, que publica de vez en cuando títulos la mar de chulos. Y con grandes autores en su haber. Como por ejemplo esta Proctor Valley Road que viene de la mano del maestro Grant Morrison. Un cómic al que entré de cabeza al saber que contenía una escalofriante miniserie de Terror. Porque sí friends, el cómic encajaría dentro de mi muy amado género pues sigue a cuatro adolescentes en la USA de los 70s, que por una cosa o por otra, terminan teniendo que buscar a gente desaparecida. Esta es de esas historias que hay que tratar de mantener los spoilers al mínimo, pues se pierde mucho, a poco que cuentes. Y ahí voy:

August, Rylee, Cora y Jennie han organizado un «Spook Tour» con sus compañeros de clase en el tramo de carretera más embrujado e infestado de espectros de todo el país. La idea es conseguir pasta, financiar la asistencia al concierto de sus sueños, pero dicha empresa se verá truncada, de hecho, se volverá mortal. Estos cuatro amigos terminarán corriendo, intentando rescatar a estudiantes desaparecidos… temiendo por sus vidas. Deberán acabar o salir indemnes de los males que deambulan por la Proctor Valley Road…; habitat de monstruosidades que acechan en el corazón de la América profunda.

Mis primeras impresiones sobre Proctor Valley Road fueron buenas. No es mi cómic favorito y quizás para algunos sea demasiado sangriento, pero no para un lector asiduo de Terror. La trama es interesante de principio a fin con estos cuatro adolescentes intentando estafar a otros niños que luego escapan y desaparecen. El primer grupo de niños tiene que salir y averiguar qué le pasó al segundo grupo antes de que se metan en serios problemas. Y entonces la historia rompe de todas-todas hacia el terror puro y mezcla criaturas sobrenaturales de forma brillante. Lo bueno de este tomo es que recopila los cinco números que tuvo esta miniserie, por lo que vais a poder disfrutar de la historia al completo, al más puro estilo serie de Netflix. Cuento esto porque sé de gente que anduvo loca un tiempo esperando la siguiente grapa tras la publicación de la anterior.

Proctor Valley Road no es diferente. Es una historia de Terror con temas ya tratados en otros medios; pelis, novelas, cómics… Pero entretiene, gusta leerla y nunca te hace verla prototípica. Es el don de Grant Morrison. Con el escocés, yo por lo menos, nunca me aburro. Pero sí que tiene eso que duele a muchos que justo cuando la trama está mejor, termina. Y no solo jode que no puedas saber más, deja la sensación de que quizás sí que hubo más pero se decidió cortar en el quinto número porque quizás estaba pactado así.

Franquiz proporciona el arte y los colores para la serie, y tengo que decir que me gusta el modo cómic europeo/amerimanga/pixar que propone. Eso si, la portada del tomo no es nada destacable. La del número #2 le da mil vueltas, por dios. Pero tiene un estilo que, aunque en mi opinión no se adecua al cien por cien para una historia de Terror, mola la pequeña sensación de yuxtaposición de dibujos animados y colores brillantes que aporta. Un arte curioso.

Para vuestra información (FYI) esta carretera de la que se habla en el cómic existe de verdad. Ha sido el foco de muchos documentales de fantasmas y leyendas urbanas que afirman que las entidades oscuras realmente deambulan por dicha área que circunda a California. Y también se cuenta que uno de los seres que se aparece es la viva imagen de un Minotauro; una enorme bestia con cuernos que deambula por la noche en busca de personas para alimentarse. Un lugar al que llaman realmente Proctor Valley Monster.

Tenemos así, una historia al estilo Stephen King en como centra una historia potente en los alrededores de un pequeño pueblo de Estados Unidos para retratarlo como fuente única del Mal. A lo Salem’s Lot o IT.

Cómic de terror en toda regla. Hay que publicitarlos sin miedo. ¡El Terror vende!