Reseña: El Sendero de la Guerra, de Marc Bourgne, Didier Pagot y Zielinska

Un género que me apetece mucho leer en verano es el western. Dentro de las novedades, tanto en cómic como en formato literario, a estas alturas son obras difíciles de encontrar. La moda pasó. Pero a poco que busques se encuentran cositas en alguna buena editorial que edite cómic europeo. Y mira por donde di con Yermo Ediciones y cómo este mismo mes de calores publicaba El Sendero de la Guerra en un volumen recopilatorio de tapa dura y en calidad máxima como suelen hacer. Tres álbumes en un sólo ejemplar que nos llevan a una aventura romántica en el corazón de las guerras indias. ¿Romántica? En el sentido evocador. Pues El Sendero de la Guerra evoca la vida del gran jefe sioux Toro Sentado asi como el de una chica que intentaba luchar de algún modo por el derecho y la igualdad de las personas. Una entrañable heroína que nos permite descubrir a través de la ficción la cruenta y compleja historia de las guerras indias en las que se escribió la leyenda del Lejano Oeste.

1864, Washington DC. Diane Myers, de 22 años, es una joven pintora talentosa que es absorbida por la buena sociedad. Su sueño: pintar los paisajes del Far West asi como la forma de vida de sus habitantes, los indios de las llanuras. Una chica ferozmente opuesta a las ideas políticas de su padre senador que sólo quiere el exterminio de estas personas. Por lo que Diana decide encontrarse con ellos, irse con los indios con la idea de sacar bastante material dibujado bajo el brazo. Con la ayuda del explorador Missouri, logrará integrarse en la tribu del mismísimo jefe indio Toro Sentado. Una hermosa aventura artística y humana para Diane, descubrir una cultura fascinante amenazada por las siempre temibles conquistas históricas del hombre.

Cuando vi el dibujo mientras ojeaba los álbumes, inmediatamente me entusiasmé con este nuevo western que prometía ser un hermoso fresco sobre la cultura de los Sioux Lakotas y otras tribus de esta gran nación india. Podemos decir que la serie hace un poco de trabajo antropológico porque los autores identifican bien esta cultura como la de los White Sioux de Oriente y Occidente, al situar la historia en un contexto histórico real. Me gustó también mucho cómo la heroína se posiciona como alguien que comprende y admira a los indios, oponiéndose a la voluntad de su padre, un senador de Washington que aboga por la erradicación de los «salvajes» incapaces de adaptarse a la política gubernamental que favorece el progreso. O eso dicen ellos. Diane Myers huye a ese Oeste tan atractivo y se sumerge como pintora que simboliza también el papel que jugó Frederick Remington, el gran pintor americano que supo captar el alma de los pioneros pero también la de los indios de las llanuras.

El contexto histórico es el de las Guerras Indias que duraron aproximadamente desde la Guerra Civil (alrededor de 1861) hasta 1890, donde una de las más famosas batallas fue la de Little Big Horn. Una trama en formato cómic que se ha tratado bastante en Blueberry, y que es un tema ideal para representar la apoteosis narrativa y gráfica de estos hechos tratados también con asiduidad en muchas películas, incluido el famoso tríptico de John Ford sobre caballería (Fort Apache, Carga Heroica y Rio Grande). Todo el contenido de este cómic es genial. Salvo algunas ingenuidades (y no lo digo por el papel de una mujer blanca viviendo entre indios en completa serenidad porque se llegó a descubrir que sí que ocurrió en ocasiones, sobre todo, con las féminas raptadas). Esta historia utiliza personajes ficticios pero se apoya en hechos y personajes similares a los de Diane y Missouri, el aventurero que la acompaña, dentro de hechos que realmente sucedieron, las masacres de niños y mujeres en aldeas por brutos borrachos, por ejemplo. Eso pasó y la prueba es la triste masacre de Sand Creek. Además, nuestra heroína se encuentra con personajes reales de este conflicto como el gran jefe Toro Sentado e incluso el presidente Grant y el general Custer que también cometerá masacres gratuitas.

Un buen western, sólido, bien contado, muy bien dibujado y cuya obra completa te puedes llevar a casa de un tirón si te decides por este genial volumen de Yermo Ediciones.

Reseña: Wonder Woman. Black and Gold, de VVAA

Wonder Woman: Black and Gold es una de esas miniseries de la Chica Maravilla que no te puedes perder. Seis numeritos reunidos en un tomito integral en tapa dura propio de ECC Ediciones pero también una historia para conmemorar y celebrar el 80 Aniversario de Wonder Woman. Con cinco impactantes historias cortas, cada una de un equipo creativo diferente, Black and Gold incluye una combinación bien seleccionada de tramas que arrojan luz sobre una faceta diferente del legado perdurable de Wonder Woman como personaje y heroína. Desde luchar contra bestias míticas hasta salir con mamá a dar un paseo o charlar en la cama, seguramente estemos ante un cómic que por la naturalidad con la que se trata al personaje, sea uno de los cómics DC actuales más recomendables para leer y que más tipos de lectores puedan disfrutar.

El número debut de la serie, escrito por AJ Mendez y con arte de Ming Doyle, cuenta la historia de Diana y su madre, Hippolyta, pasando ese tiempo de calidad con su madre que muchas jóvenes necesitan. Después encontramos temas varios como el intentar reconciliar la ira de Wonder Woman con su pasión por la justicia; el análisis maravilloso de John Arcudi y Ryan Sook sobre la visión del mundo de Diana y la fuente de su icónica compasión; una carta de amor increíblemente ilustrada al mundo de los cómics del día de nacimiento de la Chica Maravilla; y otra trama donde se trae a Wonder Woman de vuelta al presente, ofreciendo una historia de origen elegante y con estilo para hablar sobre una de las armas más icónicas de todo el Universo DC como es el Lazo de la Verdad.

Las historias recopiladas en Wonder Woman: Black and Gold abordan al personaje de Diana desde perspectivas muy diferentes. Y eso es lo que mola. Y como debería ser cualquier antología que se precie, el tomo en general muestra varias capas de la personalidad de la superhéroe. Vamos a ver cosas como una mirada extraña y relajada de Wonder Woman, la guardia baja, lo que lo convierte quizás en el capítulo más singular dentro de la edición. Esto en la historia que abre el tomo. Pero después veremos versiones muy diferentes de Wonder Woman, donde se muestra cómo Diana ve el mundo que la rodea y su propio lugar dentro de ese mundo. Y tras un número que simplemente destaca por su poder gráfico como es Golden Age (Edad Dorada) por su poca profundidad narrativa, finalmente, llega un relato duro con el porqué Wonder Woman se ha mantenido como una de las presencias más intimidantes y poderosas de DC durante las últimas ocho décadas.

Y visualmente, Wonder Woman: Black and Gold, un tomo magníficamente atractivo.

Un ejemplar que se recomienda muy mucho, en especial, para fans impertérritos de los buenos cómics que buscan tratar algo diferente de un personaje en cuestión. Y obviamente, para los fans de toda la vida de la Chica Maravilla.

Un bufete de historias, claramente escritas e ilustradas con inmenso amor y respeto por un personaje icónico que se ha mantenido al frente de los cómics durante ochenta años.

Y que no muestra signos de desaceleración.

Eso no es decir poco.

Reseña: Al Otro Lado del Instituto. La Isla de los Monstruos, de R. L. Stine, Kelly y Nichole Matthews

Tenía curiosidad y optimismo cuando escuché sobre BOOM! y el lanzamiento de una serie de novelas gráficas escritas por R.L. Stine que…, mmmm…, ¿tengo que contar quién es R.L. Stine? No, ¿no? Bueno, diré lo básico para no ser redundante. Robert Lawrence Stine (1943-) es un escritor estadounidense de novelas de terror para jóvenes. Literatura de terror infantil. Y de sobras conocido en todo el mundo por su colección de títulos Goosebumps, denominada en nuestro país Pesadillas y en hispanoamérica Escalofríos. La popular serie Goosebumps no fue un elemento básico de mi infancia, ya era mayorcete cuando empezaron a llegar por aquí, pero sí que leí bastantes cuando me estuve “instruyendo” un tiempo para escribir literatura infantil. ¿Qué mejor referente qué leer al mejor? Y recuerdo con cariño leer esos libros en mi habitación por la noche y sentir pequeños escalofríos de miedo y carcajadas porque sinceramente muchas de las historias son muy buenas. Otras muy típicas. Cierto. Pero las buenas -pensaba-, si me hacían pasar miedo a mí que no harían con un adolescente. Podía imaginar pasándolo mal a un chico de nueve o diez años leyendo lo mismo que yo en otra parte del mundo. Fueron divertidos de leer en su mayor parte, tenían suficientes giros y elementos sobrenaturales para entretener, eran lo suficientemente misteriosos como para ser buenos thrillers para principiantes y, lo que es más importante, me ayudaron a exponerme a una literatura de terror y suspense interesante por ser más compleja -soy de esa opinión, sí-, más compleja de escribir. Una serie de libros que fueron entrada segura para pasar a mejores libros de Terror después; enganche por lo sobrenatural para niños, hoy adultos, que seguro que siguen disfrutando de autores como Stephen King, Lovecraft, Rice, Poe, Jackson, Christie y muchos otros.

Por eso, la intención de revitalizar después de los años trasladando algunas historias y elaborando otras nuevas en formato novela gráfica es una terrorífica a la vez que magnífica idea. Un golpe de genialidad para RESUCITAR. Y una de las últimas la acaba de publicar en nuestro país Editorial AstroNave. Al Otro Lado del Instituto: La Isla de los Monstruos, nos lleva a la idea de que ir a una isla exótica de vacaciones, no siempre puede ser una buena idea. Puede resultar más agotador que relajante o más terrorífico que otra cosa. Karla y su hermano Benny acompañarán a su tío en una expedición científica a través de esta misteriosa isla: su misión consistirá en estudiar a especies por identificar, pero un golpe de «mala suerte» los llevará a descubrir las letales criaturas que habitan la ciénaga…

Una intensa fuga que cambiará la vida de todos.

El requisito de un relato ilustrado significa que tienes que sacrificar la incertidumbre por la claridad visual y ese es el auténtico poder de la literatura no ilustrada. Sin embargo, para el Terror se magnifica lo visual, el susto de ver sin ver, de sentir que tras aquella puerta, o detrás de aquellas palmeras hay algo que no logras comprender. Además decir que en La Isla de los Monstruos hay un giro importante y de los gordos en cuanto a los personajes que conocemos primeramente, un giro que no contaré aquí. Pero un giro importante que puede poner algo de distancia con la historia a los lectores poco acostumbrados a leer, pero originalidad que obviamente a mí me encanta. No os encariñéis con nadie.

Las artistas Kelly y Nichole Matthews brindan una estructura sólida para esta novela gráfica. Son hermanas gemelas y eso querrá decir algo porque se conjuntan a la perfección. Trabajan como dibujantes e ilustradoras de cómic al norte de Seattle y han trabajado en cositas chulas que también Norma Editorial ha publicado. Personajes expresivos, el movimiento realista, el diseño gustoso a la vista y los colores y la iluminación nítidos. Boom! Studios eligió a la pareja perfecta de ilustradoras para dar vida a esta novela gráfica.

Reseña: Midnighter y Apolo. La Búsqueda, de Steve Orlando, ACO y Fernando Blanco

Después de una ruptura algo larga, el equipo vuelve a estar unido. Uno es prácticamente Superman, el otro tan rudo como Batman pero con la voluntad de romperte todos los huesos del cuerpo si hace falta. Parece un equipo dulce, ¿no? Un dueto que puede con veinticuatro o treinta y dos, ¿no? Oh sí, la complejidad de las peleas que puedan surgir ponen a prueba a estos dos enamorados de las patadas voladoras y de las máscaras más pijameo. Entonces, ¿esta miniserie de DC Saga que ECC Ediciones publica en nuestro país en un genial tomo en tapada dura denominado Midnighter y Apolo es tan buena como dicen? La sinopsis dice: «Midnighter es la máquina de matar perfecta gracias a sus capacidad físicas y a un cerebro que le permite prever los movimientos de sus adversarios. Su próxima misión consiste en recuperar unos artefactos perdidos mientras empieza una nueva vida. Y es que acaba de romper con Apolo, su novio de toda la vida, un hombre cuyo poder rivaliza con el del mismísimo Superman. Pero a lo largo de las aventuras que incluye este volumen, Midnighter está llamado a volver a toparse con su antiguo amor… siempre que alguno de los dos no muera por el camino…».

Más o menos lo que he contado. Pero es que el resumen de DC oficial cuenta: «¿Tu lo quisiste? Pues ahora lo tienes. ¡Seis números más de locura de Midnighter! Juntos de nuevo, después de demasiado tiempo separados, Midnighter y Apolo se enfrentan a piratas del metro en Los Ángeles y demonios en Opal City… ¡Pero su reunión está a punto de dar un giro impactante y enviarlos a ambos en un viaje épico más allá de toda creencia!».

La suma de las dos sinopsis es la que debéis asumir. ¿Y por qué me importa a mí una serie así? Es obvio, si me conocéis. La originalidad, el cambio, lo diferente, lo que hasta ahora no se ha hecho con un cómic, una nueva visual de un dueto del que sabía poco… Bastantes cosas me atraían de Midnighter y Apolo y ahora puedo decir que he disfrutado a tope de lo que se considera una de las parejas más poderosas del Universo DC. Sumando el guionista Steve Orlando (que me encanta) y los dibujantes ACO y Fernando Blanco, dándolo todo.

¿Y qué tiene de bueno? Steve Orlando hace muchas cosas bien en el guión donde lo primero es, que se brinda por el entretenimiento y el diálogo rápido. Además de la increíble secuencia de lucha que muestra cuán quirúrgico es Midnighter y cómo de inefable es Apolo enfrentándose a un golem maldito dentro de un tren. Pero Orlando es bueno para eso pero también para mostrar una relación amorosa y comprensiva entre dos personajes de forma muy natural. Orlando inicia la trama con una acción vertiginosa, presenta algunos personajes secundarios y luego intensifica al Sr. Bendix y todo lo que conlleva su aparición. Sólo para destruir a Midnighter y Apollo para siempre… O esa es la idea.

Dada la propensión de los villanos a idear planes locos, el plan de Bendix, en realidad, es bastante inspirador e interesante. Utiliza los poderes de teletransportación de Midnighter contra él y potencialmente prepara el escenario para que Midnighter pase de la violencia desenfrenada a la locura violenta. También hay un buen uso de montajes en el tema que ayudan a transmitir cuánto trabajo tiene por delante Mr. Bendix para que sus malvados planes salgan bien.

He revisado la serie pasada de Midnighter (también escrita por Steve Orlando), que hizo bien en establecer la relación convincente de un hombre que mata y otro que es demasiado puro para hacerlo. Hacer que ese tejemaneje funcione, os digo como escritor, es un tema bastante difícil de elaborar, de hacer que parezca natural. Y al verlo como lo consigue, ya con eso la serie me ganó.

Aparte de que Midnighter y Apolo son los típicos superhéroes divertidos a más no poder.

Reseña: Tinieblas, de Christophe Bec e Iko

Las obras creadas por Christophe Bec son de película. De película hollywoodiense. A lo grande, con portadones de cine de verano y de temática atractiva, como mínimo palomiteras. Los de Yermo Ediciones deben sentirse tan atraídos como yo por la obra de Bec porque es obvio que van intentando traer al menos sus obras más representativas o quizás, las que de momento, pueden. Pero que agradecido les estoy, eso sin duda. Tinieblas (Ténebres) era uno de las que más ganas tenía de disfrutar y aquí estoy, en pleno calor de agosto, escribiendo esta reseña después de haber alucinado un poquito-mucho con una nueva obra de este señor que en este caso, junto al gran Iko y sus Studios hacen un magnífico trabajo.

En Tinieblas, desde el principio, estamos inmersos en un universo visual muy inspirado por El Señor de los Anillos (hay réplicas de Minas Tirith y la Puerta Negra, por no hablar de las estatuas gigantes que recuerdan a los grandiosos Argonath). Visualmente es magnífico, Iko desarrolla toda su capacidad como diseñador para complacer a un lector/comprador que quiere magníficas ilustraciones en un genial tomo de tapa dura de cómic europeo. Grandes viñetas, splash-pages y vigorosos relieves todo con la intención de meternos de lleno en el mundo fantástico que se propone. Una maquetación que contribuye a la dinámica de esta serie que se publicó originalmente en cinco álbumes y que ahora Yermo publica de forma recopilada en un único integral. Insisto, dibujos sublimes de reptiles y criaturas, así como sobre rostros que…

Una historia de fantasía escrita por Christophe Bec (Prometeo: http://www.yermoediciones.com/producto/prometeo-vol-1/, Olympus: http://www.yermoediciones.com/categoria-producto/catalogo/olympus-mons/), Tarzán: https://www.cronicasliterarias.es/?p=6867), que se puede contar incluso como una curiosidad en una reunión con amigos. ¿Qué es un homenaje, una evocación, a aquellos relatos fantásticos de los años 60 o 70 del pasado siglo en los que se mezclaban o casi se hacía difícil diferenciar si eran de Ciencia Ficción o Fantasía? Exactamente eso. Tinieblas tiene como objetivo declarado reencontrarse con esas historias y con los lectores adolescentes que fuimos, muchos adultos viejóvenes de hoy en día. Quiere ponernos de nuevo en el mapa, y no solo lo digo yo, lo reconoce el propio Bec. Y eso que el autor también declara que la Fantasía no es su género favorito. Y aclaro que por lo menos yo, no lo veía por allí desde Dragan, su primer cómic lanzado en 1993.

La receta de Tinieblas es sencilla y clara, como es la buena literatura fantástica. Y si os fijáis, con tres influencias de películas de renombre muy claras: El Señor de los Anillos, Superman y Alien. Aunque hay otras influencias que quizás mencione más tarde. Pero insisto en las referencias a la enorme obra de Tolkien. El inhóspito reino volcánico es tierra gemela de Mordor, y su capital Kirgräd con su sublime arquitectura gótica es solo una imagen de referencia quizás extraída de Minas Morgul. Y para delimitar la frontera de este reino baldío con el resto de la civilización, una especie de Argonath, la puerta de los reyes, que se reutiliza de forma idéntica. El mimetismo se empuja incluso a las luces de alarma de Gondor cuya guardia retoma el diseño de los cascos de los soldados de Osgiliath y, a la altura del saqueo, las mismas líneas de diálogo que en La Comunidad del Anillo, de Peter Jackson, con el “ Mira esta nube negra (…) viene en nuestra dirección (…) va demasiado rápido (…)”. Pero si te alejas de todo esto o si lo disfrutas como yo porque obviamente la Fantasía, rara vez las obras no se asemejan unas a otras (rara es la que no tira de la Tierra Media y el ejemplo claro es Dungeons & Dragons sin ir más lejos); si lo disfrutas con intencionalidad, Tinieblas te molará mil.

Una serie hipnótica con un poderoso final. La idea es clara: En un mundo desolado por el fuego de los dragones, que atacan en bandadas las aldeas de campesinos, los reyes están esperando la llegada de un héroe que pueda liberarlos, un héroe legendario con armadura de hielo que pueda soportar las temperaturas del aliento ígneo de los reptiles alados… Pero cuando llega ese héroe, ¿es señal de salvación o de una destrucción completa? Una sinopsis que va a tira hecho. Lo que están haciendo Bec/Iko en Tinieblas se llama simplemente homenaje a las grandes obras de la literatura fantástica. ¿El mérito? Hacerlo entretenido y visualmente espectacular como hicieron.

Reseña: Hellblazer. Entre Rejas, de Richard Corben, Brian Azzarello y Tim Bradstreet

No veo tan descabellado que los números de Hellblazer del #146 al #150 se hayan publicado como tomo único y en una versión Deluxe porque es muy cierto que es todo un lujo en su conjunto la historia de Entre Rejas (Hard Time). Una miniserie que junto a grandísimos autores ahora en ciertos momentos, para mí, de Vertigo y diría que de todas, es la única que ha conseguido juntar a la crême de la crême de la historia del cómic americano. Y decir que se puede encontrar ahora mismo una trama donde el maestro del guión Brian Azzarello y Richard Corben trabajan juntos. No friends, no es moco de pavo.

Llevando a John Constantine a la cárcel.

Asesinos, violadores, mafiosos, pirados… a su alrededor. Un lugar al que si metes al ingrediente Constantine se acaba de convertir (como bien dice la sinopsis) en todo un polvorín. En lo que fue su primer trabajo para esta gloriosa serie, el legendario ilustrador y guionista de Terror, Richard Corben, se unio a Brian Azzarello (100 Balas, Johny Double…, entre otras miles), cuando lo estaban petando con casi todo. Recuerdo que fue un notición cuando nos enteramos los que seguíamos la serie mes a mes. Loquitos estábamos por completarla. Por que Entre Rejas es un historia en cinco numeritos que lleva a John Constantine a un nuevo tipo de infierno. Una penitenciaría de máxima seguridad. Y sí que es cierto que quién lo conozca pensará que Constantine no es fácil de asustar. A lo largo de su sórdida carrera, un tío que se ha enfrentado a todo tipo de monstruos, ángeles descarnados y demonios del averno… ¿qué mojonero ladrón de bancos o qué idiota mongolo asesino en serie le va a asustar? Pero aquí, my friends, el tema es otro.

Mientras Constantine ha estado en libertad, ha tenido sus cigarrillos y sus historias para soportar su calvario. Con eso, siempre ha mantenido el control. Pero, ¿qué sucede cuando sus topes de locura y control le son arrebatadas? Despojado de su gabardina característica, su paquete de Silk Cuts y la red de seguridad de sus conexiones personales, Constantine debe adaptarse a un entorno diferente a cualquier otro que haya experimentado. Un lugar duro gobernado por hombres sin escrúpulos, donde la debilidad… se extingue como el paso de un cometa. Uno que va directamente del Sol.

Las respuestas inesperadas las tenéis en esta joyita llamada Entre Rejas, publicada mes por ECC Ediciones en el formato Edición Deluxe con sobrecubierta que nadie se debe perder. Si no la tienes o nunca la leiste está claro que esta edición es la ideal para ti. Pero si ya la posees, por ejemplo, en las ediciones integrales por autor que se publicaron de Hellblazer (https://www.ecccomics.com/comic/hellblazer-brian-azzarello-1623.aspx), como es mi caso; decir que es un magnífico regalo para alguien que aprecies de verdad y/o que quieras que se enganche de una vez al personaje. Y vea todo lo que supone haber leido alguna vez una buena historia de Hellblazer.

Lo mejor de lo mejor.

Ese fue mi caso.

La etapa de culto de Brian Azzarello y Richard Corben al frente de Hellblazer por primera vez recopilada en un único tomo y de lujo. ¿Y qué decir de las portadacas del señor Bradstreet?

Esto se recomienda solo.

¡Disfrutad, qué el verano se acaba!

Reseña: Spiderman. De vuelta al negro, de Straczynski, Garney y Reinhold

De vuelta al negro es uno de los volúmenes que Panini Cómics no se cansa de reeditar y es obvio, porque es una de las historias más recientes de Spiderman que más vende y que más impacta. Alta calidad concentrada. Yo pude leerla allá por 2007 cuando se publicó por primera vez en USA y, de hecho, es otra de las que sólo habia leido en inglés y nunca en el idioma de Cervantes. Y cómo me pasó con el must-have de Miedo Encarnado (https://www.cronicasliterarias.es/?p=10270), tenía ganas de hacerme con ella para recordarla y de paso contrastar. Ver si el paso del tiempo había hecho mella en ella como para no ser recomendable. Aparte, creo que mucho de esto tiene que ver con el hecho de que rápidamente me interesé más en los números #600 numerados en lugar de los #500, ya que se nota el cambio bastante en la colección de Spiderman en esa transición. Mmmmm…, nada, nada, olvidad esto último. Es uno de los tocs que tengo con ciertas colecciones de Marvel y que casi sólo entiendo yo.

De vuelta al negro no lo recordaba tan increíble, pero como estoy tratando de recopilar los setencientos números, en mi lista estaba. Y está claro que al igual que Vuelta a casa, De vuelta al negro es un cómic centrado en problemas del personaje que se necesitan solucionar. Con originalidad y prestigio y no tocándole los cimbalines al fan clásico de toda la vida como pasó en One More Day. Y no sé si en su día disfruté tanto de De vuelta al negro (juraría que no) pero ahora ha sido maravilloso porque es de esas miniseries que te hace amar al personaje como en tu juventud. Donde Straczynski muestra una vez más lo maestro que es. Y es que J. Michael Straczynski y Ron Garney continúan inmediatamente donde lo dejaron, con Peter y MJ horrorizados porque le disparan a tía May. Después de arrojar un jeep (sí, un jeep), al francotirador, Peter se apresura a llevar a May al hospital. Una vez más, tenemos una historia en la que el bienestar físico de la tía May está en peligro y, esta vez, no se debe a una enfermedad o un infarto. Peter sabe que este ataque es fruto de reciente desenmascaramiento. Es su culpa… Bueno, recuerdo una vez en que la tía May enfermó porque Peter le dio una transfusión de sangre que ella necesitaba, y su sangre radioactiva hizo más mal que bien, pero todo el asunto de «recibir un disparo en el estómago» parece un poco más sombrío y doloroso todo, ¿no?

Siempre es increíble cuando los escritores hacen que Spiderman se apresure a tomar decisiones que obviamente vuelven al personaje más humano si cabe. Otros personajes tienen que volar rápido o correr como una hormiguita; los mortales comunes nos vemos obligados a conducir automóviles y tomar autobuses, limitados por sus velocidades. Pero Spidey se balancea por el aire con sus magníficas telas de araña y todo abotargado en sus pensamientos con la tensión creada por Straczynski. ¡Tal vez no llegue a tiempo! Y todo elaborado de manera realmente creativa. El resto de la historia es donde tía May lucha por sobrevivir en un hospital donde ingresó con un nombre diferente porque si no Parker en nada ya tendria a SHIELD sobre sus cabezas. Peter es un fugitivo aquí, no lo olvidemos, por lo que decide ponerse su viejo traje negro -sí ese que usó durante un tiempo después de ser aislado del simbionte Venom-. y a adopta un enfoque decididamente más despiadado para combatir el crimen. Mientras tanto, Kingpin en su celda de la cárcel, siente una abrumadora sensación de orgullo por su logro.

Esta es otra cosa que hacen los escritores con Spidey. De vez en cuando, se deshace del rollo amistoso del buen vecino Spiderman y se canaliza en la sangre de Peter Parker un rollo-oscuro-Bruce-Wayne-Batman que da miedito. Sobre todo, interrogando a matones. Atrás queda el buena-gente y sale el superhéroe serio con el que no quieres cruzarte si te saliste del camino recto. O si hiciste daño a su familia. Spiderman: De vueltal al negro es esa versión oscura del trepamuros que siempre quisiste ver.

Nunca hagan daño a la familia de nadie y menos a la de un superhéroe.

A golpes brota la sangre.

Reseña: La Época de Botchan Vol. 1, de Jiro Taniguchi y Natsuo Sekigawa

Nunca había escuchado el nombre de Natsume. Pero a Sôseki sí que lo conocía de la Era Meiji y, vamos…, conocerlo…, lo conocí en parte gracias a la película El último samurái, donde Tom Cruise es el héroe americano por excelencia. Sin embargo, me recomendación desde ya es ir algo documentado a mangas como La época de Botchan porque ahora que lo he vivido me consta que así se alcanzaría el disfrute máximo de esta nueva obra que recién publica Ponent Mon. Pese a todo, estamos ante un manga muy bien documento, y una cosa lleva a la otra. Se puede incluso decir que este manga es verdaderamente una tesis histórica, o al menos una biografía real, precisa y bien documentada de un escritor en concreto, en un momento dado de su vida y en un entorno real y en parte sacado del trabajo de diseño que el gran Jiro Taniguchi tuvo que elaborar. Porque mi amado Taniguchi aquí tiene un dibujo realmente excelente que, de hecho, encuentro muy occidental, tanto en su estilo como en sus trazos. Se refleja bastante bien en La época de Botchan, su eterno amor por el cómic europeo. Lo que aporta facilidad para disfrutar de todas-todas la lectura así como el placer que todos buscamos a la hora de leer un manga.

Taniguchi y Sekikawa lograron llevarme a una época de la que sé poco y me gustaría saber más. Con gran cantidad de figuras históricas de las que no sabía nada y anécdotas reales y bien definidas que me habrían parecido desagradables si no supiéramos de la Era con la que estamos tratando. Porque La época de Botchan es un manga histórico, lleno de referencias y personajes famosos (famosos al menos para aquellos que están muy interesados en la literatura y la política de principios del siglo XX en Japón). Por lo tanto, está muy, muy lejos de una historia de aventuras que podría cautivar al lector medio. Es un manga serio, muy trabajado a nivel de documentación, capaz de fascinar al aficionado a la Historia de países orientales (de ahí el consejo de compra). La época de Botchan es un manga que se disfruta sólo si esto último te fascina…, o si te haces preguntas existenciales sobre la literatura y cómo se crea y, sobre todo, si te gustaría conocer al gran Natsume Sōseki (1867-1916), de primera mano.

Natsume Sōseki (seudónimo literario de Natsume Kinnosuke) fue un escritor japonés y profesor de literatura inglesa. Sus obras más conocidas son las novelas Soy un gato, Botchan (¿os suena?) y Kokoro. Sōseki nació en el seno de una familia de funcionarios públicos, descendiente de una familia de samuráis en decadencia. En 1884 se matriculó para cursar Arquitectura en la Universidad Imperial de Tokio a instancias de su familia, aunque acabó estudiando Literatura Inglesa. En 1886 conoció y trabó amistad con el poeta Masaoka Shiki, que lo inició en el arte de la composición de haikus, momento en el que adoptó el seudónimo de Sōseki, que en chino significa “terco”.

En La época de Botchan encontramos placer sabiendo sobre la vida de este señor. Placer por el trabajo de Taniguchi y el período Meiji, que es verdaderamente fascinante. Una mezcla del Japón tradicional y Occidente moderno. Para aquellos que estén un poco interesados en la sociedad japonesa y su historia, este manga es una mina de información que, en mi opinión, justifica su recomendación lectora.

Taniguchi y Sekikawa nos regalan aquí un fresco histórico de Japón a través de uno de sus autores emblemáticos. Es bello, sensible y poético, todo lo que engloba a este manga.

Reseña: Marvel Must-Have. Miedo Encarnado, de Matt Fraction, Stuart Immonen y VVAA

Que a la colección Must-Have que Panini Cómics está publicando le va bien no es noticia. Es obvio que esto iba a funcionar porque como dice su nombre son títulos que has de tener y leer sí o sí. Pero es que de verdad, se están editando cositas tan molonas, en tapa dura y en una colección que queda tan bien en la cómicteca, que indispensable no, lo siguiente. Y es que puedes encontrar desde miniseries o one-shots que lo petaron hace años hasta obtener algunas más recientes. Autores de antes, de ahora y de los que pegan fuerte sí o sí con cada cosita que publican. Un buen frito variado para degustar donde este mes de calores que tenemos podemos encontrar el Miedo Encarnado, del siempre genial Matt Fraction y Stuart Immonen.

El evento cruzado importante de Marvel que Asedio no fue. Siete numeritos que ahora tenemos recopilado en este Must-Have que además incluye un largo epílogo que más tarde se completó en una miniserie. Miedo Encarnado -al igual que Asedio– es una historia centrada en Thor dado que el villano a batir tiene origen nórdico asi como sus avatares. Se podría decir que es un recuento de lo que fue el Ciclo Ragnarok, algo que Walter Simonson tocó al menos dos veces en su carrera legendaria con Thor. Por lo que Miedo Encarnado tiene como eje central el mito donde Thor lucha contra la Serpiente. Asi que para aquellos que son conocedores de las sagas nórdicas literarias esto sería un buen spoiler.

¿Sensaciones? Disfruté de una historia que no esperaba sinceramente que me fuese a gustar tanto. Y mirad que nunca fui de Thor. Es uno de los superhéroes que nunca me terminaron de gustar aunque es obvio que el que me conoce sabe que intento leer de todo, en especial, lo mejor de cada personaje Marvel y DC. Pero es que Miedo Encarnado tiene alcance épico ya mostrando desde un principio que los tres puntales de lanza en esta trama van a ser el noventa por ciento de Los Vengadores como son el Capitán América, Thor y Iron Man. Cada uno tiene sus momentos de heroísmo y sacrificio; un alto precio a pagar por una guerra que posiblemente no pueden ganar. El momentazo espectacular de esta historia es cuando el Capi, con un escudo que acaba de ser destrozado en mil pedazos, recoge el martillo caído de Thor con lo que invoca a sus fuerzas regulares.

Recuerdo cuando salió este evento en 2011 y como entré apor él como un venado desubicado en San Fermín. Más que que nada por el hype tremendo que teníamos muchos con el inminente estreno del film de Los Vengadores. En aquellos años yo estaba volviendo a leer cómics de pijameo dejados años atrás por la ajetreada vida del casado, padre con hijos, trabajador y a la vez estudiante. Volvía a mis adorados cómics Marvel entre cabezadas de sueño. Y recuerdo que me gustó bastante Fear Itself, que por cierto lo leí en inglés. Al leerlo ahora, once años después, lo he vuelto a disfrutar. Creo que para los que tuvieron algún problema con la historia es porque quisieron verla entonces como un enorme evento Marvel y, en realidad, tienes que tomártela como una buena historia que incluye a una parte de Los Vengadores. Recientemente he estado leyendo mucho Thor aprovechando que Panini Cómics está publicando cositas muy jugosas gracias al boom del último film. Me estoy enamorando poco a poco de él. Y Miedo Encarnado ha sumado a eso porque es de las pocas historias donde se le ve una curita de humildad.

En esencia, se trata de Thor, Odín y la Serpiente. Pero, ¿y el villano? Mucha gente tuvo problemas con él pero a mí, sí que me gusta aunque sea cierto que no tiene mucho trasfondo. ¿Y eso no le da cierto atractivo? Por otro lado, hay algunas muertes importantes que pudieran haber tenido más impacto entonces, pero al leerlo ahora y si estás muy puesto en temitas Marvel, puede ser un tema negativo el saber que dichos superhéroes vuelven a estar vivos otra vez.

Mi parte favorita es cuando Thor admite que nunca podría vencer a Hulk. Y así es, señores y señoras guionistas de Marvel. Eso es imposible por mucho que se le quiera dar al guaperas de las pelis demasiado protagonismo.

Muy recomendable.

Reseña: Noir Burlesque Vol.1, de Enrico Marini

¡Pero qué bueno es este álbum! Algunos pueden decir de Noir Burlesque que no es muy original pero… ¿qué trama de género negro a estas alturas lo es? Les digo alto y claro que no hay nada nuevo bajo el sol. Y si lo hay… dificil encontrarlo. Pero esta historia del gran Enrico Marini viste claramente de forro negro, chaqueta sublime y borsalino. Y tiene todo lo que tiene que tener una historia de este tipo donde además visualmente es sublime. El ambiente gráfico es impresionante. Donde se nos lleva a los “felices” años de la época dorada de Hollywood muy a lo La Dalia Negra o L.A. Confidential: cadillacs, mafiosos, garitos y femme fatales…, y un tipo que no duda en ponerte una bala en la pierna porque claramente antes de irte para los pinos tendrás que confesar. Y donde la guinda del pastel es esa pin-up por la que se desafían entres sí dos tipos duros de roer.

Una de las joyitas que Norma Editorial publica este mes de calores es el Noir Burlesque, de Marini. Un cómic donde el maestro suizo del cómic europeo se adentro en el género negro con su primera novela gráfica. Rapaces, La estrella del desierto (https://www.cronicasliterarias.es/?p=6518), El Escorpión… son obras de este autor que uno puede devorar para ver la calidad que profesa, aunque Noir Burlesque es perfectamente un ejemplo de cómo hacer un cómic de género negro con todos los estereotipos marcados para deleitar al verdadero fan de este género tan clásico como inmortal. Y donde al autor nos lleva bajo las luces de neón de los barrios marginales de una bien reconstruida Filadelfia de los años 50. El bueno, el feo y… ¡la vedette en busca de la gloria! Donde los negocios se arreglan con un tiro, un primer álbum que deja con hambre a los tipos codiciosos de buen cómic europeo como yo. Impaciente por acariciar de nuevo con mis ojos las enloquecedoras curvas de la bella Caprice…

Noir Burlesque habla de Terry Cole. Un atracador con principios que asume una deuda que no le corresponde. Mientras lucha por cancelar esa cuenta, se reencontrará con una mujer a la que había decidido olvidar hace mucho tiempo y juntos participarán en una intriga policial de alto voltaje donde se mezclan delincuentes de poca monta, femmes fatales, policías íntegros, matones a sueldo y mafiosos sin escrúpulos sobre el telón de fondo de los Estados Unidos a finales de la década de 1940.

Esto dice la sinopsis y no pudiera estar mejor resumido… sin spoilers.

Hacía tiempo que no leía un álbum dibujado por el propio Marini. Debo decir que arroja una atmósfera muy hermosa a cine negro de USA en los dorados años 50 del pasado siglo. Solo el color rojo del cabello de la chica provoca que abramos mucho los ojos cuando sale en escena. Un detalle muy bien conseguido en un cómic que versa en viñetas en blanco y negro. Todos los parámetros clásicos del thriller están aquí: la femme fatale, la banda de matones, el héroe ladrón y verdadero rompecorazones que desapareció hace varios años y tiene una deuda que pagar. Y el amigo de la infancia convertido en policía a lo Mystic River.

Noir Burlesque es un claro homenaje a este género, un primer volumen que insisto: no tiene grandes sorpresas pero que plantea personajes y nos deja un final del primer volumen donde se prevee giritos para el siguiente. Lo suficientemente atractivos como para querer profundizar en este escenario de película. Para salivar. Así que si lo tuyo es el buen y viejo thriller policiaco, si te interesa principalmente el dibujo de Marini y te pierdes por una buena historia de estos años de atracos, sexo de «aquí te pillo, aquí te mato», tiros y desenfreno; ese cómic está hecho para ti.

Estás calentando el sitio.