Os dije que os pensaba reseñar toda la saga y aquí estamos. Hoy vamos con The fortune o Fortuna, la quinta entrega de la saga Blackwater, esta historia del gran Michael McDowell que por fin llegó a nuestras tierras gracias a la siempre maravillosa Blackie Books.
Y… ¡sí! La quinta parte de la saga Blackwater tiene lo bueno. Al principio, parece desagradable lo maravilloso que les va a los Caskey, pero al final parece que McDowell está construyendo un castillo solo para poder derribarlo al final. Esa es la sensación o espero que esa sea la dirección en la que se dirige. Si esta es una historia de todos felices y comieron perdices, me decepcionaré. Pero también la inquietud, el ansia, es querer saber cómo termina todo esto. Porque la saga Blackwater es una de las tramas más extrañas y menos convencional que uno se puede echar a la cara. Fantástico del bueno donde el terror subliminal esplende. Novela de algún modo costumbrista donde el miedo a lo desconocido está muy presente. Y personajes plenamente realizados y desarrollados, aunque no dejan de ser o representar gente común de los años 50 del pasado siglo. Unos personajes espeluznantes -cada uno a su modo-, es otra de la tensiones sutiles que aporta esta saga, y cuando crees que sabes algo con certeza viene algo que lo vuelve confuso.
Fortuna tiene un nombre acertado. Tan rico en la fortuna de los Caskey como en revelaciones, tuve un gran placer al ver cómo se desvelan más cositas de la historia de las familias y para colmo tenemos una entrega con cliffanger al final más grande que una casa.
Pero si os habéis dado cuenta apenas he contado nada sobre lo que se cuenta aquí. Es para descubrirlo uno mismo por completo. Solo diré que en el último capítulo de la historia Caskey se presenta una impronta de horror más acentuada y se debe al personaje de Frances. La familia vivió para siempre gracias a la determinación de Miriam y a la intuición de Eleonor…
Sé que Fortuna es para muchos lectores norteamericanos, su parte favorita de toda la serie . Y creo que es por la cantidad de datos que aporta. En una trama con tantos misterios, de pronto, una parte así se agradece. Yo la hubiera llamada Revelaciones o algo así… jajaj. De hecho, a nivel de escritura goza de una inspiración maravillosa. Diría que es la mejor junto con el primer volumen. El poder de enganche es tremendo. Como dice un colega italiano: Da legere tutto de un fiato! (Obra para leer de un tirón).
Loco por meterle mano a la sexta y última entrega. Lluvia, se llama. Y ya sabemos que la lluvia en ciertas historias representa un apoteósis final tremendo. Y en abundancia, en un sitio que recientemente sufrió una riada, debe dar mucho miedito, ¿no?