Reseña: Veneno vs Matanza, de Peter Milligan y Clayton Crain

No es ningún secreto que a mis años Venom (Veneno) se está convirtiendo en mi personaje favorito de Spiderman. Realmente no tengo ningún tipo de base racional para esto… O quizás sea, que aprovechando que Panini Cómics está publicando en tomos recopilatorios todas sus aventuras, decidí ponerme con un personaje del que no sabía nada y curiosamente nunca me atrajo. Pero ahora sí sé que me encanta leer todo en lo que se inmiscuye. Van unos cuantos títulos ya a mis espaldas. Y eso que algún que otro amigo me dice siempre que ciertos dibujantes no lo han hecho nada bien con el personaje. Sin embargo, nadie o casi nadie me comenta alguna pega para con sus guiones. Y pregunto yo: ¿Es un villano del que apenas se quiere saber y solo te fijas en cómo lo han ilustrado? En realidad, no hay ninguna razón para no disfrutar de las buenas historias que se están publicando ya que, insisto, se están editando todas y, en principio, las mejores, en tapa dura, colección que queda de maravilla en la cómicteca. Dos cosas: primero, Veneno no es un villano es un antihéroe. Y segunda, si queréis ver una somanta de palos de las buenas con una idea original solo tenéis que leer este Veneno vs Matanza que os reseño hoy.

Un 100% Marvel HC que contiene la miniserie Venom vs. Carnage 1-4. Una historia que se centra en la premisa o preguntas retóricas: ¿Qué es peor que un simbionte alienígena malévolo? ¿Dos? Y que es peor que eso… ¿Tres? Así es: el asesino y descendiente de Veneno llamado Matanza (Carnage) está a punto de dar a luz a una criatura simbiótica de indescriptible poder y apetito. La pregunta es, ¿quién va a criar al BEBÉ? Pues el asesino en serie Cletus Kasady dice que ni loco (jajaj), el psicópata asesino quiere terminar con la vida de su «hijo» antes de que comience a ser incontrolable. Y mientras Veneno y Matanza chocan en los cielos entre patadas, mordiscos, arañazos y puñetazos, la terrible progenie, el simbionte recién nacido, reclama un anfitrión. Y ha puesto sus primeros ojos en un oficial de policía de la ciudad de Nueva York al cual lleva a un mundo de locura y caos. Mientras tanto, Spiderman y la Gata Negra se unen a la refriega pues los simbiontes rojo y negro están demasiado enfrascados en su lucha a muerte como para percatarse que un hombre de vida sencilla y normal, está luchando por su alma.

No me gusta el dibujo de Clayton Crain. Llamadme antiguo o rancio pero un dibujo en un cómic debe ser “un dibujo en un cómic”. No me gustan los renderizados a lo videojuego o a lo film animado. No sé, me sacan de la historia. Y una historia con bastante potencial como la que se marca aquí el maestro Peter Milligan, no lo merece. Milligan es uno de los grandes guionistas británicos de los 80 que comenzaron a trabajar para el mainstream estadounidense junto a grandes como Alan Moore o Neil Gaiman. Un guionista que me gusta porque aporta frescura y atrevimiento a un mercado yanqui que en ciertas épocas se encasilla. Su trabajo con la serie de X-Force supuso una revolución para el propio género superheróico, y me pareció brillante. Y eso es, en mi opinión, lo que hace que el barco no se hunda. La historia. Lo que hace que Veneno vs Matanza pueda ser leída de una buena sentada, uno de estos días de tanto calor donde solo apetece cerveza bien fría o té helado, lugares con sombra y olor a césped, mar o piscina, cerca.

Es posible que hayáis oído que este titulo trata sobre los orígenes de Toxin. EL BEBÉ con más colmillos que una fiesta de cocodrilos. Mira, los simbiontes alienígenas se reproducen de manera poco inusual, y aparentemente, tocaba que Matanza diera a luz algún día. Sin embargo, esta nueva descendencia podría ser la número mil de la línea de simbiontes y nadie nunca dijo nada al respecto. Es Peter Milligan quien desvía un poco la idea y surge la originalidad. Con el añadido de, decir que Veneno quiere entrenarlo y Matanza solo quiere matarlo. Ahí es donde entra la parte «versus» del título. Pero el bebé de Carnage termina uniéndose a un policía de Nueva York para convertirse en Toxin. Si este no es el cómic de origen del bIChO, al menos, es el primer titulo donde lo he encontrado yo.

¿Queréis saber de qué es capaz este hijo de mala madre? Esta es vuestra lectura.