Reseña: Motorista Fantasma. Autopista al Infierno, de Garth Ennis y Clayton Crain

Hoy vamos con un nuevo Must-Have, uno de esos títulos que como bien el nombre de su colección indica, son cómics indispensables de leer y por tanto tener. Un cómic que en este caso también sirve para leer por primera vez o adentrarse al Motorista Fantasma para todos aquellos que alguna vez mirasteis a este raruno superhéroe de soslayo. Lo dicho. Una de las historias o arcos argumentales cortos que más se pueden disfrutar de Ghost Rider es, sin duda, este Autopista al Infierno al que le viene ni que pintada la famosa canción de AC/DC. A aquellos con un conocimiento rudimentario del personaje de Johnny Blaze, Autopista al Infierno le funciona como una buena historia de Origen para uno de los superhéroes más extraños de Marvel que te puedas echar a la cara. Pero para aquellos que seguimos a este ser, mitad hombre, mitad ente fantasmal, desde siempre, nos encontramos aquí una trama en seis partes que viene de lujo tener recopilada.

¿De Origen? Sí, Autopista al Infierno está registrada como una de sus historias de origen canon. Y es cierto que la primera parte tiene un potencial enorme, pero después decae. Pero el camino merece la pena, ya que vas a vivir al menos uno de los grandes momentos que ha protagonizado Johnny Blaze en el mundo del cómic. La trama principal sigue al Ghost Rider mientras es engañado para cazar al malvado Kazann, un poderoso demonio que intenta traer lo peor de otros mundos (¿el verdadero infierno?) a la Tierra. Sin embargo, su búsqueda no es fácil, ya que existen agentes del Cielo como Ruth, un poderoso ángel, y del infierno, Hoss, un ser del Inframundo invencible, que también intentan derribar a este gran mal que acaba de hacer acto de presencia en la Tierra. Lo curioso de todo esto es que aunque estamos en una historia de Origen, el Motorista Fantasma tiene un protagonismo algo débil en una historia que a los amantes de John Constantine, por ejemplo, van a disfrutar un montón. Y se nota eso por quién está detrás del guion. No os descuidéis lo más mínimo, estamos hablando de un guion del siempre genial Garth Ennis, archiconocido por sus diálogos magistrales y sus historias apretadas llenas de sarcasmo y humor negro.

A lo largo de la miniserie, encontraréis ese humor negro tan característico al que hago referencia donde Ennis ataca como siempre a la religión organizada. Aunque es cierto que al ser un cómic Marvel se le ve algo retraído en ciertos temas. Pero no hay duda de su estilo de escritura, ese que atrapa mediante la empatía lectora con temitas con los que te identificas. Y se huele en ciertos momentos ese estilo que sacó a relucir con The Punisher en el que un malo caído en el suelo…, sólo es basura fácilmente pisable. Además, hay que felicitar a Clayton Crain por hacer un arte lo suficientemente bueno como para recomendar este TPB -ahora publicado en tapa dura por Panini Cómics-, sólo por su diferente dibujo. Utilizando su técnica de pintura digital, el mundo de Ghost Rider parece más real que nunca.

Johnny Blaze está pagando un precio incalculable por el trato que hizo con el Diablo. Pero ¿está condenado a correr por las autopistas del infierno durante toda la eternidad? Su última esperanza descansa en un inesperado aliado. Está es la sinopsis y la premisa perfecta para la miniserie. Si hablamos de si Autopista al Infierno vale o no tú dinero, pensad en un par de factores clave. En primer lugar, ¿te gusta el estilo de escritura de Ennis? Si te gusta la violencia excesiva y el caos, entonces puedes disfrutar del estilo en el que se presenta esta historia.

En segundo lugar, ¿disfrutas de la obra de arte de Crain? Si babeaste con Veneno vs. Matanza (https://www.cronicasliterarias.es/?p=5409) y estás deseando más de su trabajo, no te sentirás decepcionado. Pero se cuela un tercer factor aquí. ¿Estás buscando una historia reflexiva de Origen sobre un personaje del que sabes poco o nada? Con haber respondido un solo sí a estas preguntas, tienes excusa para hacerte con el tomo.

Reseña: Tarzán de los Monos, de Edgar Rice Burroughs

Estoy bastante de acuerdo en lo de… «Burroughs tenía un don que muy pocos escritores poseen: puede describir la acción vívidamente». Durante mis años lectores no hubo novela de este señor maestro que no haya disfrutado. Sin embargo, me quedaba una importante por leer. De las más quizás, de las que aún no había disfrutado por haberse metido por medio cine y cómics del personaje. Sí, Tarzán de los Monos, una historia que a mi entender (y antes hubiera pensado lo contrario), se disfruta más cuanto más curtido estás en las novelas de aventuras. Pues con Tarzán de los Monos, Edgar Rice Burroughs ideó uno de los íconos más perdurables de la cultura popular, quizás solo superado por Sherlock Holmes en términos de impacto y reconocimiento universal.

Nacido en Chicago en 1875, Burroughs pasó sus primeros años como soldado de caballería, vaquero y buscador de oro. No comenzó a escribir de manera seria hasta los treinta y cinco años, edad en la que consiguió vender su primera obra de forma profesional (A Princess of Mars). Ese inesperado éxito comercial se vio eclipsado rápidamente y al año siguiente por la publicación de Tarzán de los Monos en la revista pulp The All-Story. Con el tiempo, Tarzán pasó a ser un personaje protagonista de nada más y nada menos que veinticuatro novelas escritas por Edgar Rice Burroughs que fueron publicadas entre 1912 y 1966, seguidas de varias novelas coescritas o autorizadas oficialmente por su patrimonio. También hay dos obras escritas por Burroughs especialmente para niños que no se consideran parte de la serie principal. Y bueno, qué decir de Tarzán de los Monos: novela indispensable de leer, joyita de la literatura de entretenimiento, súper recomendable para todo tipo de público… Serie y personaje considerado un clásico de la literatura y, por supuesto, la obra más conocida del autor. Aunque hablamos de un autor prolífico que tiene otros tantos títulos a recomendar.

¿Qué cuenta? Conocemos a John y Alice Clayton, Lord y Lady Greystoke de Inglaterra, los cuales terminan perdidos y accidentados en las selvas costeras occidentales de la África ecuatorial de 1888. Después de una cantidad de tiempo no declarado, nace su hijo John Clayton II. Y cuando el peque alcanza el año, su madre muere y poco después su padre es asesinado por el rey simio salvaje, Kerchak. El niño Clayton, posteriormente adoptado por la simia Kala, empieza a ser llamado Tarzán («Piel blanca», en el lenguaje de los simios) y se cría ignorando su herencia humana. De niño, sintiéndose alienado por sus compañeros monos debido a sus diferencias físicas, Tarzán descubre la cabaña de sus verdaderos padres, donde tiene noción por primera vez de otros seres como él. Y usando libretos con palabras e imágenes durante años, se enseña a sí mismo a leer inglés, pero al no haberlo oído nunca, no puede hablarlo.

A medida que crece, Tarzán se convierte en un hábil cazador, despertando los celos de Kerchak, el líder de los simios, quien finalmente lo ataca. Tarzán se enfrenta a él y… Toma su lugar como «rey» de los simios. Y a partir de aquí, el novelón se desata con toda una serie de sucesos que provocará que con poco, termines enganchado al personaje. Porque no solo son aventuras, hay luchas individuales e incidentes selváticos y también hay amor. Una relación que os pondrá el corazón en un puño.

Tarzán fue llamado a ser uno de los personajes más conocidos a nivel mundial. Tocado por una varita y gracias también a la adaptación de Disney, diría que no existe persona viva de cualquier edad que no lo conozca. Y eso se dice pronto. Tarzán ha sido adaptado muchas veces, completo o en parte, para radio, televisión, teatro y cine. Curiosamente, más veces llevado al cine que en formato literario. Cosa que también se dice pronto.

Libro de los súper indispensables de leer. Señores profesores, por favor, recomienden y trabajen más con literatura de este tipo. Menos problemas y más aprobados. Estoy seguro.

Reseña: He-Man y los Masters del Universo, de VVAA

Con la esperanza de encontrar en formato cómic una obra sobre los Masters del Universo nostálgicos de muchos de nosotros que fuimos niños en los 80, entré en este tomo que publica ECC Ediciones que me pareció tener una pinta tremenda. Toda una ola de rescate nostálgico se abatió no hace mucho sobre esta franquicia y algunas otras, una rama más de ese árbol de la nostalgia (insisto) que los americanos de pro así como las empresas de frikismo especializado se han empezado a dar cuenta qué es, lo que realmente. Porque al adulto de 2022 hay que tenerlo contento, porque paga y porque quizás las juventudes de hoy en día andan algo perdidas entre tanto móvil y tablet. Asi que es obvio pensar que se piense en nosotros… porque ya iban tarde tanto en libros, cómics, pelis y series. Y el momento maravilloso que estamos viviendo lo refleja. Todo o casi todo para ese público maravilloso que tanto reivindico en esta web de reseñas diarias: los niños de los 80.

Respecto a Masters del Universo, He-Man, Skeletor…, los muñecotes, qué decir. Quién de nosotros no tuvo, al menos, uno de esos seres fortachones en plástico duro tan caros pero que tanto nos gustaron junto a la serie de dibujos animados que disfrutábamos muchos en aquellos años (al menos, en mi caso), en vídeos comunitarios. Y no me pararé a explicar qué es eso de “video comunitario”, porque a los que le hablo, lo sabrán. Tan solo diré que sin haber leído todos los otros tantos cómics que se han publicado a estar alturas de esta franquicia, puedo decir que hoy os reseño el mejor de ellos para entrar y disfrutar de nuevo en aquello de lo que una vez disfrutaron. Un primer volumen que acompaña a nuestro héroe en esta nueva edición de He-Man y los Masters del Universo, que recupera las diferentes etapas de la saga publicadas por DC, y que recopila la miniserie original publicada en 1982, obra de Paul Kupperberg y George Tuska, así como las seis entregas del relanzamiento acometido en 2012 por autores de la talla de James Robinson, Keith Giffen, Geoff Johns, Howart Porter, Philip Tan o Pop Mhan.

Sin haber podido encontrar datos, me atrevería a decir que estamos ante una obra inédita en nuestro país. ¿El arco de tres números de 1982? Pues bueno, es lo que es y de la época que es. Aquí, Skeletor amenaza con matar a la Diosa a menos que He-Man lo ayude a obtener lo que necesita para recuperar las mitades rotas de la famosa espada (power sword). Skeletor extorsionando a He-Man fue un concepto novedoso, aunque en realidad no hay muchas formas diferentes de hacerlo. La historia es bastante decente, pero está cargada de una gran cantidad de exposición, lo cual no es inesperado para los años 80. La escritura incorpora el diálogo rígido, formal, del género de la fantasía clásica, y el arte tiene un estilo pulp adecuado que a muchos de nosotros nos resulta molón por su enorme parecido con las historias de los cómics de Conan. Un comienzo prometedor de lectura, eso si, no se lo quita nadie. Y si alguna vez has sentido que «me revelaron unos fabulosos poderes secretos» es una mala excusa para una historia de origen, DC creó el siguiente cómic para ti. Masters of the Universe: The Origin of He-Man arroja luz sobre cómo el príncipe Adam adquirió sus poderes, esa conversión que tiene cuando grita la famosa frasecita con la poderosa espada entre sus manos. Un número que no esperaba y que me ha parecido una delicia. Una historia de origen en toda regla que cuenta de He-Man y los Masters del Universo, lo que muchos llevábamos años preguntándonos.

El guión de Fialkov sobresale cuando se trata de diálogo.

Como dice la sinopsis, los seres más letales de Eternia aguardan en este mundo de aventuras por el que va pasando Adam y sus amigos, gente de un reino que no es para nada tranquilo. Y mejor que no lo sea porque si no Beast Man, Mer-Man, Trap Jaw, Evil-Lyn… y Skeletor, el mismísimo Señor de la Oscuridad, se aburrirían y sería peor. No obstante, está ese chico guapo, rubio, con músculos tras las orejas y su blusa ochentera blanca que esconde algo y grita: ¡Por el poder de Grayskull!

Creía haber olvidado esta máxima y los grandes momentos que en mi infancia me dio. Colección imperdible para nosotros, friends.

Reseña: MLE. Capitán Britania. El Nacimiento de una Leyenda, de VVAA

Un Best of Marvel Essentials es el nuevo tomo a recomendar de Capitán Britania que ha publicado Panini Cómics hace nada junto a SD. Ya sabéis los aquí llamados Marvel Limited Edition que están haciendo estragos (de los buenos) para con nuestras cómictecas. Y es obvio, ¿no? Es esencial para muchos de nosotros leer el origen, el inicio de ciertos superhéroes de los que sabíamos nada o muy poco. Y aunque Capitán Britania es un héroe que irrumpió en USA como aquellos guionistas e ilustradores que brotaron de tierras anglosajonas para dar «el salto a la luz», también es un personaje que tuvo grandes momentos en el Viejo Continente. Porque friends, ¿de dónde parte todo si no es de aquí? Menos el primer homo sapiens considerado como tal, todo parte de nuestro lado del mundo. Eso que quede claro. Y así de egocéntricos pero es la verdad.

Panini Cómics y SD ponen en librerías este maravilloso tomo. Como os decía, el considerado y presentado como  ¡El Mejor Superhéroe de Todos! (sus cojones ahí), irrumpió en los quioscos con su propio cómic semanal allá por 1976 de la mano del legendario guionista y ser súper prolífico Chris Claremont (La Imposible Patrulla-X), con Herb Trimpe (El Increíble Hulk), al dibujo. Un personaje que apareció por primera vez en la Captain Britain Weekly #1 (octubre de 1976), el comienzo de una serie que impactó en lectores de la época, una serie tantas veces recordada por Chris Claremont, Alan Davis o alguien que también a llegarle a darle su toque mágico años después con fue Alan Moore (https://www.panini.es/shp_esp_es/marvel-h-roes-capit-n-britania-sclmh092-es01.html).

Aquí tenemos nada más y nada menos que el primer cómic del Capitán Britania, sus treinta nueve primeros números recopilados, más algún añadido que ayudará a enamorarse del personaje clásico. ¿Darle una oportunidad dicen por ahí? Eso si no supieras a ciencia cierta que estas aventuras no te van a encantar. Y mira que soy medio americano pero de ingleses… pufff, para nada. Pero conocía al Capitán Britania, su traje, su carácter y cómo se comportaba con los enemigos. Pero de su leiv motiv o de cómo consigue su traje (algo que los niños de los 80 nos preguntábamos siempre), nada de nada. Pero ahora sí. Un tomo con el que retroceder a la vida de Brian Braddock antes de que… ¡MUERA! 😱 ¿Spoiler? No, no se me escapó. Lo siento pero hay cosas que se saben y SE SABEN. Eso si, no hablaré del cómo, eso tenedlo claro. Y es que la historia de origen del Capitán Britania parece un cuento al azar. Y ahí su grandeza. Porque, ¿cuántas cosas no ocurren día tras día en las que pensamos si no son pura casualidad?

Ya en el segundo número, Brian Braddock toma una decisión que cambiará su vida. Tras convertirse en el héroe conocido como el Capitán Britania de una forma que no os voy a contar para que lo descubráis vosotros mismos; antes de que pueda apenas probar sus poderes ya es desafiado por un villano que… ¡Ha obtenido los mismos poderes (pero opuestos) a los suyos! ¿Cómo? También tendréis que averiguarlo. ¿Y por qué empiezo comentando el segundo número? Porque leer esta grapa sin grapa, te lleva hasta las primeras páginas del primer número y continúa la historia con un modo de retro-guión nunca antes visto (a finales de los 70). Una muy buena historia. Un tomo así, por supuesto, contiene bastantes cosas chulas más. Algunas muy locas pero interesantes como fue la primera aparición de Betsy Braddock (Captain Britain Weekly #1), un número que llegó a estar súper cotizado en el mercando de segunda mano en su día; donde aparece Betsy, la hermana gemela de Brian Braddock, quien (unos años más tarde) se convertirá en la poderosa Psylocke de los X-Men. Aquí tiene un arco argumental completo, ella solita, contra el Dr. Synne.

Y más. El Capitán Britania descubre el secreto de Mastermind mientras que Nick Furia envía al Capitán América a localizar un presunto complejo informático creado por los comunistas en la acosada y medio derruida Gran Bretaña. Mastermind es uno de los villanos clásicos que más me gustan de toda la vida…, por si no lo dije alguna vez. ¿Y dije cositas locas? Sí friends, porque tenemos un número donde aparece Merlín, que le explica al Capitán Britania la razón por la que se le otorgaron sus poderes… (ups, se me escapó). O no. O sí a a medias. En fin, aprendemos más sobre el gran Merlín además de que Britania descubre que todas sus peleas anteriores han sido pruebas para prepararlo para una confrontación contra un Mal mayor. La historia en Camelot es otra joyita ochentera de las que uno tiene que tener en la colección.

Y así todo.