Reseña: Los Gnomos, de Wil Huygen y Rien Poortvliet

¿Tuvisteis como yo de pequeño el anhelo de poder adquirir un libro que por una cosa o por otra vuestros padres se negaban a comprarlo por lo caro del ejemplar? ¿Y más aún por ver “una tontería” gastarse el dinero en tal cosa? Eso dolía. No era el caso y mi caso fue el de El Gran Libro de los Gnomos. Ese ejemplar que cada vez que iba al supermercado veía allí en una esquina, poca gente lo miraba, un ejemplar que acabó medio roído por tantas veces que pasaron por mis manos mientras mis padres compraban… Ese fue mi caso y por eso se me abrieron muchos los ojos al ver que Ediciones Maeva lo retomaba y lo ponía de nuevo en librerías en un genial formato en tapa dura. Un libro que me inspira lo más grande y del que deriva gran parte de la novela infantil que tengo aún por publicar. Y es que tengo una teoría y se vuelve a cumplir. Los libros que más me han influido, que más me han llegado, vieron la luz el año que nací.

Wil Huygen (1922 – 2009), fue un escritor neerlandés de literatura infantil conocido principalmente por su serie de libros sobre gnomos ilustrada por Rien Poortvliet. De ellos, el primero, Los gnomos, este que os reseño hoy, fue el más conocido. Publicado originalmente en 1977, estuvo en la lista de más vendidos de The New York Times durante más de un año y luego recorrió toda Europa como éxito de ventas. Y no es para menos porque con él lo sabrás todo sobre estos seres que en España se hicieron muy famosos gracias a dos series de dibujos animados pero que nacen del folclore más tradicional de la Europa del Norte. Seres mitológicos elementales de la tierra en cuyas entrañas moran, trabajando en minas, custodiando tesoros subterráneos y cuidando de los metales y piedras preciosas que alguna vez llegarán al ser humano o no.

Los hay de todos los tipos y ver uno puede ser síntoma de que te viene algo bueno o algo muy malo, según el país en el que te encuentres. Pero nada quita que son y se conocen como seres fantásticos que aparecen en nuestros cuentos, canciones, dibujos animados, etc. Y que molan verlos representados en cerámica en muchos jardines del mundo occidental. Pero, ¿sabías que los gnomos viven entre nosotros? ¿O que un gnomo es siete veces más fuerte que un humano? ¿O que siempre tienen gemelos? Una gnómida es la mujer del gnomo, que al contrario de este, se supone dotada de gran belleza. El término «gnomus» (en latín medieval) fue utilizado por el alquimista suizo Paracelso en su Líber de nymphis, sylphis, pygmaeis et salamdris, et de caeteribues spiritibus, de 1566. Los gnomos poseían la presciencia, conocían los secretos de la Tierra y eran el alma de ésta. Los cabalistas aseguraban que el aire, la tierra, el agua y el fuego se agitaban a merced de los seres invisibles que animaban estos elementos.

Los gnomos, aunque no pertenecen propiamente a la mitología sino a la superstición, recuerdan a los telquines y a los cabiros, genios que representan el trabajo en los metales adorados por los griegos en localidades de naturaleza volcánica. Y… ¿qué? ¿Qué no existen? ¿Qué son un cuento más creado por el ser humano? En el año 1.200 d.C. un noruego llamado Frederik Ugarph encontró una escultura de madera en la casa de un pescador pobre en Trondheim. Frederik Ugarph le compró la escultura, hecha de una madera muy dura, más fuerte que el roble, y con una altura de 15 cm (sin contar el pedestal). En la base estaba escrito Nisse, riktig storrelse, que significa ‘gnomo, estatura real’.

Las preciosas ilustraciones de Rien Poortvliet y las minuciosas observaciones de Wil Huygen sobre los hábitos, la anatomía y el estilo de vida de estas criaturas son una delicia para todos los lectores que han disfrutado de este libro durante generaciones. Y ahora vuelve a estar disponible, friends.

Yo no me lo perdería.

J. J. Castillo nació una fría mañana de invierno en la que el murmullo del viento hizo temer al más valeroso. Enamorado de esa sensación, dedica su tiempo a escribir y leer historias que increpen el alma. En el ámbito de las letras ha ganado premios y ha colaborado con cantidad de editoriales especializadas en los tres grandes géneros.