Reseña: Sam Wilson/Capitán América. Capitán Anti-América, de Nick Spencer, Daniel Acuña, Mark Bagley, Jesús Saiz y VVAA

Este es el cómic que debéis leer si os gustó o, en tiempo real, os está molando la serie de Falcon y el Soldado de Invierno que está emitiendo Disney +. Esta es la serie a la que hace referencia, de algún modo, historias que se disfrutan tras la serie de TV, y sobre todo, post-serie visualizada. Este tochal es el bueno y no otros que he visto comentar por ahí. Por que Sam Wilson: Capitán América parte de la idea que nos dejó a todos con el culo torcido, sobre todo, a los que no leen cómics y vieron en el final de Los Vengadores: Endgame, a un Capitán América viejo, cansado de todo, dejando su puesto libre y escudo a unos sorprendidos Falcon (Sam Wilson) y Bucky. Pero cuando Steve Rogers hace esta declaración, sus ojos están puestos en su viejo socio Falcon para sustituirlo. Y Sam no es Steve. Duda. Y la opinión pública no está de su lado y el destino lo colocará en una de las situaciones más complejas que haya vivido jamás. En especial, todo empieza en el apacible pueblecito de Pleasant Hill donde está a punto de estallar una crisis como ninguna otra…

Así comienza, y esto dice la sinopsis de Sam Wilson: Capitán Anti-América, el tremendo integral de esta miniserie que Panini Cómics acaba de publicar este mes. Que me corrijo a mi mismo, no incluye una miniserie sino dos: Este no es mi Capitán América y Punto Muerto, las dos que comprenden la idea central que marcan la serie como una de las mejores series Marvel que se pueden leer actualmente. Aparte de unos one-shots, por grandes autores, que también aportan su granito de arena al final. Donde encontrar a Sam Wilson como el centinela que promueve la libertad y el orden. Entregado el escudo por el propio Steve Rogers, el ex-Falcon se une a su nuevo socio Nómada para hacer frente a amenazas que incluyen al temible Scarecrow, Batroc y la recién ascendente y nueva H.Y.D.R.A., liderada por el Baron Zemo (villano que en breve se va a poner muy de moda). Pero ponerse en las botas de Steve no es fácil y Sam pronto lo sufrirá en sus propias carnes. Pronto se verá inmerso en problemas con su nuevo compañero así como con S.H.I.E.L.D. Además, los Hijos de la Serpiente, el Doctor Malus, ¡y el nuevo Halcón! Y un grupo en el que se presentan Spiderman y Los Inhumanos; con todo, Sam Wilson intentará encabezar los titulares que siempre dieron vida al poderoso y súper conocido Capi.

Punto Muerto (o Avengers Standoff: Welcome to Pleasant Hill) es quizás el eje central más interesante de este integral. Cuenta algo nuevo, o mejor dicho, una historia que se separa bastante de la serie de TV y aporta una trama de superhéroes ya con Sam como Capitán América completamente independiente (cuando lo leáis me entenderéis). Además de ser refrescante poder sumergirse en un nuevo arco Marvel sin saber casi nada sobre la historia o los personajes involucrados. Y es curioso como Marvel guardó en su día silencio con respecto a los detalles de Assault on Pleasant Hill. Quizás, por que se revelaba argumento posible para un film, o por algo que jamás sabremos. Solo comentaron (en mayo de 2016) que Pleasant Hill se trataba de una ciudad misteriosa cuyos secretos provocarían un conflicto divisivo entre Los Vengadores y S.H.I.E.L.D. Y en Punto Muerto se arroja toda luz posible sobre ello. Ahí lo dejo.

¿El misterio? En la línea de The Prisoner o Twin Peaks.

Sam Wilson debería haber sido el Capitán América por mucho más tiempo del que le dieron. El hecho de que su mandato duró solo lo suficiente para dos grandes obras en solitario (las denominadas Colecciones Completas) es un hecho asombroso tras ver lo bien que funciona.

¿Qué tenemos? Potencial de narración fantástica, magnífico Sam Wilson como Capi, las ilustraciones de varios dibujantes potentes donde destaco a los patrios Daniel Acuña y Jesús Saiz (que será el futuro dibujante de la serie del Capitán América, y no me extraña); un argumento social y político muy a tener en cuenta y todo en un magnífico Marvel Now! Deluxe que nadie debería perderse ahora que está tan de moda el personaje.

Otra perspectiva.