Reseña: De Ratones y Hombres
En este nuevo título que publica en nuestro país la siempre interesante editorial de libros ilustrados Edelvives, tenemos una adaptación visualmente impactante de la famosa novela de Steinbeck, realizada por Rébecca Dautremer. Donde revivimos la trágica historia de Leny y George a lo largo de casi cuatrocientas veinte páginas en los Estados Unidos de la Depresión.
Cabría preguntarse si esta obra puede considerarse una novela gráfica. En mi opinión, sí, porque incluso sin bocadillos de diálogo, las viñetas fluyen con fluidez, intercaladas con magníficas ilustraciones (escenas de la vida cotidiana, parodias de anuncios, etc.). Y es que este título evoca inevitablemente la obra de Chris Ware o Bill Sienkiewicz, quienes se niegan a ceder a las convenciones del cómic franco-belga tradicional… Pero esa es otra historia y debe contarse en otro momento.
La novela original De ratones y hombres se publicó en 1937, tras los años amargos que obligaron a miles de estadounidenses a abandonar sus hogares e irse a trabajar al campo. Os puedo decir como nativo de allí por muchos años que: ¡De Ratones y Hombres es esta América! De lo que se cuenta aquí vienen los verdaderos norteamericanos o mejor dicho estadounidenses, la USA inmortalizada, entre otros, por Dorothy Lange, con sus hordas de jornaleros explotados y a merced de la recesión y la hambruna. Por eso Steinbeck, con su prosa sobria y su puesta en escena minimalista, retrató con fuerza a estos individuos anónimos abandonados a su suerte en un drama de inquietante universalidad. El maestro supo describir, sin pestañear, la pobreza, la soledad, la cobardía humana y los sueños destrozados, y expresar con maestría la esperanza y las frustraciones que albergan sus personajes.
Pero claramente, el enfoque de Rébecca Dautremer es muy diferente porque lo tenemos todo visualizado con su estilo aunque cabe destacar que no se trata de una adaptación, ya que el texto del Premio Nobel estadounidense se reproduce íntegramente, hasta la última coma, aquí. La ilustradora demuestra su capacidad para multiplicar por diez el poder evocador de las páginas de Steinbeck, así como, a través de los sutiles matices de una maquetación que hace bailar palabras e ilustraciones, capturando en su papel de acuarela las imágenes que evocan la lectura de este relato largo. Para lograrlo, Rébecca Dautremer emplea todas las variaciones gráficas a su disposición y alterna hábilmente estilos en un mosaico de dibujos de una virtuosidad sorprendente.
Tenemos aquí una obra imperdible bajo ninguna circunstancia para el buen amante de la literatura y del cómic europeo.
De ratones y hombres es, tanto un encuentro gráfico como literario, que nos permite (re)descubrir a un gran autor además de poder admirar la obra de una artista verdaderamente excepcional.
Perdérselo no es una opción.