Reseña: Dos Hermanos, de Fábio Moon, Gabriel Bá y Milton Hatoum

Si bien los cómics en su mayoría ahora tienen color, la novela gráfica original más reciente publicada por Planeta Cómic de los hermanos Gabriel Bá y Fábio Moon está representada en un llamativo blanco y negro. Eliminar el color en el cómic elimina una sensación de familiaridad con el comiquero actual, cuyos ojos agradecen los colores por encima de todo. No obstante, el blanco y negro nunca fue un problema para el fan del cómic de toda la vida. De todos es sabido que es el mejor marco para los detalles. En Dos Hermanos, esta adaptación de la obra de Milton Hatoum (reconocido como uno de los escritores contemporáneos más importantes de Brasil, con novelas premiadas y algunas pendientes de ser llevadas al cine), el dueto de hermanos gemelos Fábio Moon y Gabriel Bá, imbuyen gran parte del arte y guión de calidad en un viñetario que desarrolla muy bien esa sensación de simplicidad y escasez de fondo que muestra el poder del espacio negativo. Es decir, la ausencia de color, a una historia de género negro, le vine al pelo.

Novela gráfica muy digna. Como os decía, el cómic se basa en en la novela de Milton Hatoum (The Brothers), que se publicó originalmente en 2002 y sigue las aventuras de dos hermanos que vivieron separados por todo un océano durante más de una década. Los gemelos, Yaqub y Domingas, se reencuentran al comienzo de la historia y están rodeados de una familia con complejas relaciones que se desmoronan a lo largo de la trama. Aunque a la medida que la narración avanza se desarrolla más profundamente y se ofrecen flashbacks sobre las vidas de los chicos, que sinceramente, atrapan. Pues Domingas y Yaqub tienen una relación tensa evocada conmovedoramente por los propios hermanos autores. Los mismos que abordan la dureza del tema original con cierto sentido de inocencia y honestidad que hace que esta historia parezca autobiográfica.

Es refrescante ver a Bá y Moon, a través de un estilo minimalista, crear un mundo tan hermoso y grandioso como ya hicieron en The Umbrella Academy y Casanova (sus otras obras que he leído) con menos líneas y trazos menos complicados. No obstante, Dos Hermanos, la historia, se vuelve más oscura a medida que la novela gráfica continúa. Las tensiones aumentan, pero la narrativa nunca se aleja de su propia belleza intrínseca, incluso cuando la violencia y el contenido sexual revelan el engaño y la traición ocultos dentro de la familia. Y es que Dos Hermanos tiene más de doscientas páginas. Los gemelos utilizan este espacio para desarrollar lo que creo que son los puntos fuertes de la historia de Hatoum. A algunos esto les puede parecer un trabajo fácil, pero os puedo asegurar que cuando piensas como un guionista, o mejor aún, has hecho algún curso de guión audiovisual o creatividad, sabes que este es el peor de todos los problemas a solucionar. Con la selección de escenas (porque obviamente todo lo de la novela no se puede trasladar) tienes que intentar elegir a la vez, que transmites sensaciones que crees que puedan ser las más emocionantes de la historia.

No es nada fácil… hacerlo bien.

El tema que involucra a esta familia es la más importante pieza de atracción para el lector. Y es donde Moon y Bá se pueden apuntar alguna que otra medalla, intentando adaptar una historia con más sustancia que un cómic promedio. Dos Hermanos es una novela gráfica sorprendente que permite a los fans ver un aspecto diferente de dos de los mejores creadores de cómics que ha parido Brasil.

Sinceramente, sorprendido me hallo.