Reseña: Tres Días de Felicidad, de Sugaru Miaki

Cada vez estoy más de acuerdo con la teoría de que, a través de otras culturas, se puede ver el mundo con otros ojos. Discernir sobre la vida de modo más optimista. Para bien o para mal. Y con eso hay que tener cuidado. Pero si estás bien centrado, tus cabales no se han aflojado ni si quiera un poco (o eso crees), puedes disfrutar de la metáfora que se esconde tras argumentos como el que os propongo hoy. Mi debilidad para esto es el continente asiático. Cómo, teniéndolos tan cerca, pueden ser tan diferentes. A poco que me inmiscuyo en la cultura de uno de estos países (preferiblemente, India, China y, por supuesto, Japón), de su obra, de su arte y de sus miedos… como caucásico mi visión del mundo y de la vida cambia. Y son obras como Tres Días de Felicidad las que te hacen verlo. Pues, qué tenemos que decir ante: ¿Cuánto vale verdaderamente la vida?

En Tres Días de Felicidad nos vamos a conocer a Kusunoki, el cual solía creer que estaba destinado a grandes cosas en su vida. Ninguneado de niño, se aferró a la creencia de que le esperaba una buena vida en años venideros. Mas, ahora que se acerca a la edad de veinte años, es un estudiante universitario completamente mediocre, sin motivación, sin sueños y sin dinero. Después de enterarse de que puede vender los años que le quedan, y lo poco que valen, decide deshacerse de todos sus bienes (si se pueden llamar así) para disfrutar todo lo posible de sus últimos tres meses de vida. Pero, ¿Kusunoki realmente ha destruido su última oportunidad de encontrar la felicidad o de alguna manera la ha encontrado?

Esta novelita que recién publica Norma Editorial en nuestro país, puedo decir que es uno de los libros mejor escritos que he leído en mucho tiempo. Tien un algo, un no-sé-qué que me golpeó hasta la médula y me dejó bastante pensativo tras acabarlo. Sin saber como articular mis pensamientos. ¿Es una novela, una historia, perfecta? No, claro que no. Pero es una maravillosa historia en muchas de sus facetas. Y lo más importante: TRANSMITE. ¿Me provocó felicidad? Sí, absolutamente. Sin embargo, es de esas tramas que sabes que no va a acabar bien. De las que te quieres preparar para ese momento trágico, para el que, en realidad, no existe preparación. Lo trágico es inevitable y doloroso de leer, pero hizo que percibiera que cualquiera de nuestros momentos en nuestras vidas, son preciosos. Y que no deberíamos desperdiciarlo en arrepentimientos del pasado y expectativas de futuro sin sentido. Tiene grandes momentos este libro.

Y eso que en Tres Días de Felicidad, Kusunoki no es un personaje muy adorable al principio. No es alguien con quien podamos simpatizar fácilmente, es un pobre estudiante universitario de veinte años y no tiene ganas de trabajar. Para colmo, es todavía lo suficientemente arrogante como para creer que es especial y no dejarse aconsejar… Está dispuesto a lograr grandes cosas en el futuro, pero sin mover un dedo. Kusunoki incluso menosprecia a las personas y nunca intenta construir ningún tipo de relación con nadie, lo que básicamente lo convierte en un paria, un ser aislado del mundo social. Encima, no tiene una vida fácil y la única esperanza que tiene para el futuro es el sentimiento siempre presente de ser «especial». Y debería preguntarse: ¿Con eso vale?

Cometer muchos errores estúpidos en el pasado. No pararse a pensar. Una vida que termina por vale 300,000 yenes (que suena a mucho pero no lo es) y que decide aceptar y vivir los tres últimos meses de su vida dignamente. Sumado a eso, vive con Miyagi, una chica que está asignada a monitorearlo durante sus últimos días para que no lastime a nadie, ni haga nada ilegal. Y ahí es cuando empieza a ver cuan extraño es tener a alguien vigilándote 24 horas del día, siete días a la semana e inmiscuyéndose en tú espacio personal. Y aceptando también el hecho de no tener ningún familiar o amigo que esté a su lado cuando muera. Ufff… Pero Miyagi no será solo una sombra. Es una persona franca y bastante vocal que sabe hablar con las personas que han decidido entregar su vida.

Tres Días de Felicidad es la tan esperada novela inédita de Sugaru Miaki. La felicidad no es algo que podamos obtener al lograr grandes cosas en la vida. La felicidad está en el presente y en los pequeños momentos que vivimos con quien nos quiere. No está tan lejos.

Lectura de las que marcan.