Reseña: Holms y Piorot. El Caso de los Cadáveres Exquisitos, de Jali

En la última convención a la que asistí de literatura fantástica me preguntaron qué tipo de Ciencia Ficción me gustaba. Contesté que brindaba mucho por la que va mezclada con humor. Del tipo: Sin noticias de Gurb, Los viajes de Tuf, Guía del Autoestopista Galáctico… Pero en realidad, en mi fuero interno, se clamaba a gritos que aunque amo el género de Terror por encima de todas las cosas, en realidad, una buena historia de humor siempre me hace tilín. Se mezcle con el género que se mezcle. Y es cierto que soy mucho de humor irónico, inglés, en definitiva, me encantan las bromas más sutiles o el tan famoso humor negro. Por eso, jamás hubiera esperado poder leer una obra con Sherlock Holmes como protagonista, un folletín gráfico sarcástico como es Holms y Piorot, donde el autor patrio Jali crea un cómic brillante.

¿Qué no conocéis a Jali? Jali (seguiré llamándolo con su nombre artístico) estudió Bellas Artes en la universidad de Barcelona. Comenzó publicando historietas en la revista Mala Impresión. También publicó en otras revistas y fanzines como Amaníaco, La Comictiva o La Guía del Cómic. Su primera gran publicación fue en 1999 cuando Billete de ida al espacio, fue editada por Amaníaco. Un autor y diseñador con un toque muy original. De esos que con dibujos sencillos muestran una enorme profundidad. Y es cierto que sus ilustraciones en blanco y negro, simples en principio, tienen cierto aire a los primeros trabajos y planteamientos estéticos con los que se iniciaba Tim Burton. Pero comparaciones aparte, su dibujo esplende y es atractivo como pocos. Casi que provocan una sonrisa inevitable con los detalles.

Jali, con Billete de ida al espacio, fue candidato al Premio Autor Revelación en el Saló Internacional del Cómic de Barcelona. Una obra a la que le siguió Igor Mortis, editada por Undercomic, con una ambientación cercana al género de Terror (obra que llevo años buscando). No mucho después ya publicó con grandes editoriales de nuestro país como Astiberri. Y en 2008 participó en un cómic editado por Warner España que acompañaba al disco Mentiroso, mentiroso del músico Iván Ferrero, donde adaptaba algunas canciones del artista.

Holms y Piorot es un claro homenaje a los dos más grandes detectives que la literatura ha creado. Los personajes por excelencia de Arthur Conan Doyle y Agatha Christie, para más aclaración. El Caso de los Cadáveres Exquisitos es una historia que se presenta como si no fuera la primera donde se ven inmiscuidos estos dos trasuntos de detectives universales. Y eso me lleva a querer leer más historias de estos dos tipillos como protagonistas. La historia comienza con un policía patrullando un parque londinense, y avisando a los transeúntes que el parque está a punto de cerrar sus puertas. Un hombre descansa plácidamente en un banco, tapado con unos viejos periódicos y su aparente sueño se ve interrumpido cuando el policía le remueve para decirle que salga del parque. En ese momento, su cabeza cae rodando. Ahora le tocará el turno a Holms y Piorot. Descifrar un misterio donde el horror hace acto de presencia. Donde tendrán que juntar sus virtudes y sus precariedades para dar sentido al asunto. Y aquí es donde entra el humor tan destacable que rezuma El Caso de los Cadáveres Exquisitos.

La verdad es que no encuentro mejor manera de presentar la obra que la sinopsis editorial que Diábolo Ediciones plantea. Una editorial que, por cierto, no para de traernos grandes obras comiqueras a los fans del mejor Terror ilustrado. Aunque también gozan de la Colección Fantasmas, un sello donde publican cada no mucho, relatos y antologías de grandes autores clásicos del género. Obras inéditas muchas.

La obra de Jali es distinta, alegre y agradecida a los ojos. Un autor con todas las papeletas para dar el gran salto al mejor cómic europeo. Un autor que todos debéis descubrir.