Reseña: The Haunt of Fear Vol.1, de Craig, Feldstein, Wally Wood y VVAA

La EC Comics fue considerada muy adelantada a su tiempo por varias razones. Pero una de las más atractivas para mí, porque te llevan al Terror de cabeza, es su total falta de consideración por la Cuarta Pared, años antes de Deadpool o Harley Quinn. Como ejemplo está este genial tomo que acaba de publicar Diábolo Ediciones, tras su enormes éxitos como han sido el rescate de Tales from the Crypt (https://www.cronicasliterarias.es/?p=5567), Impact (https://www.cronicasliterarias.es/?p=15183), Weird Science (https://www.cronicasliterarias.es/?p=7190), Shock SuspenStories (https://www.cronicasliterarias.es/?p=14857) o la genial colección Biblioteca de Cómics de Terror de los Años 50 (https://www.cronicasliterarias.es/?p=14455). Y al igual que los anteriores, creo que ninguno de los que andamos por aquí esperábamos ver por estos lares otra recuperación tan genial de este maravilloso mundo retro del cómic de Terror como es The Haunt of Fear. Diábolo sigue haciendo historia en nuestro país. Con la Vieja Bruja dándonos la bienvenida a la nueva colección de terror de laEC, que en este primer volumen recoge historias inolvidables como El muro, ¡La cosa del pantano!, ¡Hacedor de monstruos!, ¡El jorobado!, ¡El hombre de la tumba!, y bastantes más.

Para colmo, un Prólogo del mismísimo Robert “Freddy Krueger” Englund.

Este volumen contiene los seis primeros números de la colección, publicados originalmente entre mayo de 1950 y abril de 1951. Y siendo sincero, las historias de este volumen pueden llegar a ser cursis y trilladas para los estándares actuales, pero tienen un encanto que evoca al no querer parar de leerlas porque trasladan a una infancia que tuvimos donde el miedo estaba presente en cada rincón de nuestra casa, el camping donde veraneábamos o el bosque cercano a la casa de nuestros abuelos. Son breves y directas y a menudo tienen entre cinco y siete páginas y nunca se extienden más allá de su “mensaje” de bienvenida. Y tienen prosa donde la mayoría de las tramas se centran en personas malvadas a las que se le otorga un merecido sobrenatural, muy a menudo, procedente de ultratumba. No obstante, algunas profundizan en algo más profundo como la inevitabilidad surrealista de ¡Pesadilla!, en la que un hombre sueña una y otra vez que está siendo enterrado vivo hasta que ya no puede distinguir qué es real y qué no. O el terror de lo inexplicable en La Casa de los Horrores, en la que bromistas universitarios desaparecen sin dejar rastro en una casa supuestamente encantada hasta que descubren que uno ha envejecido cincuenta años. Pero mola también encontrar relatos extrañamente poéticos como ¡Semillas de Muerte!, en el que el bolsillo lleno de semillas de gardenia de una víctima de asesinato florece para marcar dónde ha sido enterrado en secreto su cuerpo (Esta historia es de esas maravillas que NUNCA SE OLVIDAN).

Tenemos así, otra joyita de cómic que no deberíais dejar pasar. Y no me iré sin decir que agradezco mucho a Diábolo Ediciones que haya mejorado la calidad de las páginas de estas publicaciones. Ahora son una auténtica gozada al tacto. Tenemos a Johnny Craig, Al Feldstein, Wally Wood, Harvey Kurtzman, Graham Ingels, Al Williamson, Reed Crandall, Bernard Krigstein y un largo etcétera; nombres míticos en la historia del cómic. Ahora, y por primera vez en español en una edición a la altura de los míticos cómics de EC, la editorial norteamericana que no solo marcó una época, sino que supuso un antes y un después en el discurrir del noveno arte y de su influencia en otros medios. Lo dice la propia sinopsis editorial y lo corroboro yo, que llevo unos cuarenta años leyendo cómic de Terror. Insisto: ¡Eterno amor por ediciones y recuperaciones así!

Reseña: Shock SuspenStories, de Al Feldstein, Orlando, Davis, Wally Wood y VVAA

Diábolo Ediciones fue consciente en su momento de lo que nos gustaba a los amantes del Terror en todos sus formatos, de lo que muchos estábamos ansiosos por tener en buenas ediciones, y propuso varios «rescates» de las mejores historias recopiladas por Al Feldstein. Ahora, vuelve a la carga y nuevamente nos deleita con un primer volumen de una colección que yo, por lo menos, jamás vi en español… y es que me da que ni existía en nuestro idioma hasta ahora. Shock SuspenStories mola y mola cantidad porque era el título que más variedad contenía dentro de las colecciones de EC Comics. No solo vais a encontrar Terror en estos relatos genialmente ilustrados; la variedad era grande en esta extinta revista pues cada ejemplar contenía cuatro historias: una de crimen, otra de ciencia ficción, terror y «shock» que típicamente era una trama que hacía mención a dilemas sociales y los ponía en la palestra como, por ejemplo, el racismo. Un volumen genial recoloreado según los colores originales de Marie Severin, y con un prologazo del mismísimo Steven Spielberg.

Y ya está en librerías.

Es fácil y a la vez difícil reseñar una colección como ésta. Hay tantas historias interesantes en estas páginas y no tengo el tiempo ni la energía para hacer justicia a cada una. Shock SuspenStories era una revista que incluía historias de diferentes géneros en la misma revista, como os comentaba antes. Por un módico precio tenías un frito variado bastante bueno. Un fenómeno completamente nuevo para EC. Así que limitaré mi reseña a las historias que caminan por el sobresaliente alto donde ya os adelanto que la joyita esta en la bélica Yellow!

Todo eso de un cómic que estaba condenado a una muerte prematura a manos del gobierno USA por el tema que ya sabéis, y que no repetiré aquí. Tenemos tramas irónicas de patriotismo que golpean tan fuerte hoy como seguramente lo harían en los años 50. ¿Quién es ese comunista sin el pin de solapa con la bandera? Vamos a darle una paliza, ¿no? Tenemos una historia sobre el racismo en los pueblos pequeños en una especie de cómic abreviado de Matar a un ruiseñor. Tenemos corrupción policial y la brutalidad, la tortura y la fuerza mostrada para agilizar una Confesión. Tenemos actividades antisemitas, que si alguna vez sucedieron de este modo… pufff.

En ¡Un trabajo limpio!, tenemos a Eleanor Berdeen temiendo la idea de convertirse en una mujer que la sociedad considere demasiado mayor para casarse. Y se casa con un hombre que no ama, lo que la lleva a la desesperación… En ¡Halloween!, la señora Ann Dennis encuentra un trabajo cuidando a los niños del Briarwood Orphan Asylum, dirigido por Eban Critchit. El estado decrépito del edificio y su mínimo mobiliario reflejan la condición de los niños que se encuentran en la institución. Durante la primera noche, Ann sigue el sonido del llanto hasta la puerta de un dormitorio que esconde una visión repugnante y desgarradora: treinta y cuatro camas apiñadas dentro de una habitación con una pequeña multitud de niños rodeados de una niña que llora…

La profundidad de los personajes que vamos a encontrar en estas historias pese a su breve descripción, aporta bastante a las historias. Aunque las EC: Shock SuspenStories estaban dirigidas a un público más maduro, los lectores más jóvenes tuvieron la oportunidad de discutir temas que no estaban permitido hablarlos en compañía hacia la mitad del siglo XX. Y es que no puedo expresar lo mucho que disfruté este volumen, a pesar de ser una mezcla de historias que incluye una enorme variedad de temas, escenarios y personajes. Es una ventana al pasado que permite a los lectores ver la sociedad tal como era, tal como son hoy porque muchos de estos casos se están repitiendo y los podemos ver hoy en día en las noticias… Los peligros que habitan en ella, y en este mundo que se supone nuestro. Además, el horror presentado en el volumen está ejecutado con habilidad y desde diferentes puntos de vista. El ser humano es el problema. Siempre lo es.

El arte de Jack Kamen, Joe Orlando, Jack Davis, Wally Wood y Graham Ingels…, crearon algunas de las imágenes más evocadoras de todos los tiempos en este cómic. Por otro lado, me alegra saber que la Tales From the Crypt, de HBO, hizo un guion adaptado de esta maravillosa colección. Perdérsela no es una opción.