Reseña: Shock SuspenStories, de Al Feldstein, Orlando, Davis, Wally Wood y VVAA

Diábolo Ediciones fue consciente en su momento de lo que nos gustaba a los amantes del Terror en todos sus formatos, de lo que muchos estábamos ansiosos por tener en buenas ediciones, y propuso varios «rescates» de las mejores historias recopiladas por Al Feldstein. Ahora, vuelve a la carga y nuevamente nos deleita con un primer volumen de una colección que yo, por lo menos, jamás vi en español… y es que me da que ni existía en nuestro idioma hasta ahora. Shock SuspenStories mola y mola cantidad porque era el título que más variedad contenía dentro de las colecciones de EC Comics. No solo vais a encontrar Terror en estos relatos genialmente ilustrados; la variedad era grande en esta extinta revista pues cada ejemplar contenía cuatro historias: una de crimen, otra de ciencia ficción, terror y «shock» que típicamente era una trama que hacía mención a dilemas sociales y los ponía en la palestra como, por ejemplo, el racismo. Un volumen genial recoloreado según los colores originales de Marie Severin, y con un prologazo del mismísimo Steven Spielberg.

Y ya está en librerías.

Es fácil y a la vez difícil reseñar una colección como ésta. Hay tantas historias interesantes en estas páginas y no tengo el tiempo ni la energía para hacer justicia a cada una. Shock SuspenStories era una revista que incluía historias de diferentes géneros en la misma revista, como os comentaba antes. Por un módico precio tenías un frito variado bastante bueno. Un fenómeno completamente nuevo para EC. Así que limitaré mi reseña a las historias que caminan por el sobresaliente alto donde ya os adelanto que la joyita esta en la bélica Yellow!

Todo eso de un cómic que estaba condenado a una muerte prematura a manos del gobierno USA por el tema que ya sabéis, y que no repetiré aquí. Tenemos tramas irónicas de patriotismo que golpean tan fuerte hoy como seguramente lo harían en los años 50. ¿Quién es ese comunista sin el pin de solapa con la bandera? Vamos a darle una paliza, ¿no? Tenemos una historia sobre el racismo en los pueblos pequeños en una especie de cómic abreviado de Matar a un ruiseñor. Tenemos corrupción policial y la brutalidad, la tortura y la fuerza mostrada para agilizar una Confesión. Tenemos actividades antisemitas, que si alguna vez sucedieron de este modo… pufff.

En ¡Un trabajo limpio!, tenemos a Eleanor Berdeen temiendo la idea de convertirse en una mujer que la sociedad considere demasiado mayor para casarse. Y se casa con un hombre que no ama, lo que la lleva a la desesperación… En ¡Halloween!, la señora Ann Dennis encuentra un trabajo cuidando a los niños del Briarwood Orphan Asylum, dirigido por Eban Critchit. El estado decrépito del edificio y su mínimo mobiliario reflejan la condición de los niños que se encuentran en la institución. Durante la primera noche, Ann sigue el sonido del llanto hasta la puerta de un dormitorio que esconde una visión repugnante y desgarradora: treinta y cuatro camas apiñadas dentro de una habitación con una pequeña multitud de niños rodeados de una niña que llora…

La profundidad de los personajes que vamos a encontrar en estas historias pese a su breve descripción, aporta bastante a las historias. Aunque las EC: Shock SuspenStories estaban dirigidas a un público más maduro, los lectores más jóvenes tuvieron la oportunidad de discutir temas que no estaban permitido hablarlos en compañía hacia la mitad del siglo XX. Y es que no puedo expresar lo mucho que disfruté este volumen, a pesar de ser una mezcla de historias que incluye una enorme variedad de temas, escenarios y personajes. Es una ventana al pasado que permite a los lectores ver la sociedad tal como era, tal como son hoy porque muchos de estos casos se están repitiendo y los podemos ver hoy en día en las noticias… Los peligros que habitan en ella, y en este mundo que se supone nuestro. Además, el horror presentado en el volumen está ejecutado con habilidad y desde diferentes puntos de vista. El ser humano es el problema. Siempre lo es.

El arte de Jack Kamen, Joe Orlando, Jack Davis, Wally Wood y Graham Ingels…, crearon algunas de las imágenes más evocadoras de todos los tiempos en este cómic. Por otro lado, me alegra saber que la Tales From the Crypt, de HBO, hizo un guion adaptado de esta maravillosa colección. Perdérsela no es una opción.

Reseña: La Vieja Guardia, de Greg Rucka, Leandro Fernández y VVAA

Últimamente pasa mucho que, como los guionistas de Hollywood llevan años cortitos de ideas, se decidió tirar hacia el maravilloso y grandilocuente mundo de los cómics donde hay ideas a cascoporro para adaptar. A diestro y siniestro, y buenas, a poco que busques bien. Pero no solo para cine también para las famosas series de TV de las diferentes plataformas a las que muchos andamos enganchados cada poco. E insisto en decir que se está tirando mucho de cómic porque hay calidad. Lo demuestra el cómic que reseñé ayer y lo demuestra el que os traigo hoy: La Vieja Guardia, del ganador de un Eisner Greg Rucka (Lazarus, Black Magick, Wonder Woman…) y el dibujante aclamado por la crítica Leandro Fernández (The Discipline, Deadpool, Pushisher: MAX) que formaron tándem para este cómic que se centra en esos viejos soldados que nunca mueren… Y no es una metáfora.

Ser inmortal y capaz de absorber el daño puede convertirte en un muy buen soldado. ¿El mejor? En La Vieja Guardia los personajes no se presentan al comienzo de cada historia y es muy difícil saber de qué elenco se trata la historia, pero todo se va resolviendo a su tiempo con un aspecto bastante diferente según el período de tiempo que trate. Pero sí, sí, no era un comentario más, los personajes principales de esta serie son inmortales, y sus acciones se combinan con la violencia con la que participan en ciertas batallas a las que acuden. Tenemos la historia de dos mujeres y tres hombres que no pueden morir… o casi. Sus nombres son Andy, Nicky, Joe, Booker y Nile. Son soldados, y su guerra nunca acaba. Han estado en todos los lugares, lo han visto todo y han luchado en prácticamente todos los conflictos hasta día de hoy. Durante siglos, han mantenido su existencia oculta, sin quedarse nunca demasiado tiempo en un mismo lugar, siempre en movimiento, de misión a misión. Pero todo cambiará cuando empiecen a darse hechos que no esperan, los propios secretos de cada uno de estos seres, La Luz que provocará que se desequilibre un equipo que parecía imbatible.

Y así llegamos a una antología de relatos, dos de ellos escritos por Rucka y el resto por un grupo de guionistas de diferente calibre. Dos historias están dibujadas por el artista original, Leandro Fernández, cada dos historias por otro artista. Y la mayoría de las tramas son realmente entretenidas, no maravillas, pero acción y hechos que gustan de leer por lo que proponen. Básicamente, se hace que uno de estos inmortales aparezca en algún lugar, en algún momento, los malutos intentan matar de alguna forma al inmortal (a veces lo consiguen), pero este resucita y los destroza. Me encantaron especialmente dos historias, una de Brian Michael Bendis y otra de Vita Ayala. Hicieron algo interesante con este montaje, algo que no está directamente relacionado con la violencia. Y Cómo hacer un pueblo fantasma, de Matt Fraction o Un alma vieja, de Jason Aaron, son tramas terriblemente buenas. Como veis, autores consagrados por un tubo. El caso es que Greg Rucka y Leandro Fernández invitan a otros veintiún escritores y artistas a jugar con los juguetes en una caja de arena llamada La Vieja Guardia. Y en mayor medida, todos hacen un buen trabajo. Para mí las mejores tramas se encuentran a mitad del primer ejemplar, más que nada, porque ya conoces qué son y cómo actúan y es cuando verdaderamente empiezas a disfrutar de la saga. Mi única queja podría ser que hay demasiado Booker y muy pocos Nicky y Joe…

El hecho de que las historias sean dibujadas por diferentes artistas plantea el eterno problema de siempre. Unos gustarán más que otros. Pero recordad que el dibujo en un cómic tiene el poder de hacer que ya solo te encante la historia por el visionado. Aquí os pasará eso. ¿Qué ocurre? Pues que dado el talento de primer nivel que trabaja siempre Greg Rucka, esta serie se ha criticado por no aportar nada nuevo. Ese es el problema inherente que le persigue siempre a los grandes autores o artistas. La gente les espera siempre éxitos tras éxitos y ese poder muy pocos lo tienen. Difícil como que te toque la Lotería de Navidad… o ahí-ahí. Pero las sombras no son tan densas cuando te adentras en ellas.

Reseña: Valerian. Allí donde nacen las historias, de Pierre Christin y Virginie Augustin

Este álbum pertenece a la colección Valerian visto por…, y fue el gran Pierre Christin (Orwell, Leyendas de hoy) quien lo elaboró junto a la gran dibujante Virginie Augustin para ofrecer una visión fresca y renovada de una de las series míticas de la BD francobelga. Pero lo que hicieron es más una continuación de la mítica serie aunque solo fuera en un solo álbum. Y es que habiéndonos dejado Mézières, muchos nos vimos huérfanos de este maravilloso universo creado que a muchos nos trasladó a aventuras interestelares donde conocimos mundos, razas y otras galaxias infinitas. Un macro-universo que fue uno de los gérmenes para que naciera Star Wars, dicho por el propio George Lucas.

En cualquier caso, los fans de la serie principal no estarán demasiado desorientados con este nuevo principio. Allí donde nacen las historias es fácil de leer y disfrutar. Una lectura agradable con un reparto bastante heterogéneo. Lo dicho, es más bien una continuidad de sus aventuras, hasta el punto que incluso nos preguntamos si no será así. Entonces, ¿cómo transmitir ese sentimiento (al menos personal) de que este álbum realmente vale la pena? Me limitaré a lo que pensé en cuanto lo cerré. Bastante logrado, coherente y fluido.

Fue uno de mis placeres culpables el redescubrir este universo, universo de universos, tenemos en Allí donde nacen las historias una especie de reinicio, por lo que es positivo y al mismo tiempo decepción pensar el porqué no se siguió con ello. Pierre Christin retoma su universo donde lo dejaron hace más de una década. Nuestros héroes, ahora adolescentes y amnésicos, viven una vida pacífica en la Tierra y bajo la tutela del tío Albert. Por supuesto, se invita discretamente a vivir una aventura casi personal. Me gustaron mucho todos los pasajes de la Tierra en este viaje a Georgia y un poco menos el cosmos presentado por no estar más desarrollado los sistemas anexos. Pero sí que me encantó el tono que sirve de intriga en torno a la industria del entretenimiento cósmico. Descubrí que el guionista presionó demasiado para denunciar nuestro sistema industrial actual. La historia se centra en los Delfos, una raza de inteligencias artificiales, capaz de crear argumentos novedosos. Por desgracia, la fuente de su creatividad se está agotando. Se trata de un raro metaloide que solo se encontraba en grandes cantidades en la Tierra a principios del siglo XXI. En este viaje al pasado, los Delfos tropezarán con una jovencita pareja de agentes espacio-temporales… Pero está la historia de fondo. Encontramos algunos personajes que aparecen en otros álbumes: la schnafleur, los chicos de la industria del cine y algunos jefes de los Círculos de Poder…

No me iré sin decir que el dibujo de Virginie Augustin fue realmente lo que me abrió el apetito. Un dibujo encantador que ya he podido apreciar en otras series y con estilos ligeramente diferentes, lo que sorprende cantidad. El dibujo de esta señora es encantador, fino, elegante y detallado, nuestros jóvenes héroes molan en apariencia bajo su pincel.

Quiero descubrir nuevos héroes del espacio, otros, pero siempre que intento eso, recuerdo y me digo, dios mío, pero si Valerian me da todo lo que necesito. Qué bueno es.

Reseña: Mobius, de Jean-Pierre Pécau e Igor Kordey

Prometedor, sumamente prometedor, este integral de Mobius que se ha marcado ECC Ediciones. Está bien, está pero que muy bien, que títulos así se publiquen recopilados porque uno a mi edad ya casi que no está para coleccionar álbumes y mucho menos para esperar la publicación de estos en historias que generan ansias por saber. Tenerlo todo a mano y poder leer todo de un tirón o cuando me plazca poder seguir hasta el final es lo que pide un señor (¿sibarita?) como yo. Es simple la razón y la opinión madura que puedo aportar porque tanto la historia de Jean-Pierre Pécau como el particular dibujo de Igor Kordey realmente te sumergen en esta historia.

No hay nada más desafiante para un guionista que aventurarse en las tierras del espacio y del tiempo. Hay que saber gestionar el ir y venir entre universos manteniendo una cierta linealidad que no haga perderse al lector. Tampoco hay en Mobius un lenguaje pseudocientífico que deje a cualquiera fuera sin tener una maestría en física cuántica. No, aquí todo está bien montado. Cuando mueres te encuentras en una tierra alternativa y todo comienza de nuevo… Y es que todas las religiones del mundo afirman que la muerte no es el fin, sino el comienzo. Casi todas ellas creen en la reencarnación. Y tienen razón. A la inmensa mayoría de los humanos, la conmoción de la muerte nos hace olvidar la vida anterior, pero los llamados viajeros sí la recuerdan. Un inesperado día, Berg, antiguo miembro de los Navy Seals a punto de ser ejecutado en prisión, recibe una oferta irrechazable para embarcarse en una extraña misión. Y es a través del personaje de Berg que exploraremos extraños caminos que conducen a universos paralelos. Este último «olvidó» que pertenecía un servicio especial que viaja por el multiverso… muriendo. Y si bien la mayoría de las personas olvidan sus vidas pasadas cuando mueren, los agentes de Monte recuerdan sus vidas pasadas. Pero no abandonamos. Ahora los agentes de esta organización han venido a buscar a Berg para una nueva misión: encontrar un asesino en serie que “trabaja” a través del multiverso.

Mobius es un álbum, un título, un tomo recopilatorio que reporta una idea súper chula. Ciencia ficción de la buena. Me dejé llevar por esta historia que aunque puede recordar a algunos relatos, libros o incluso pelis clásicas de CF, de algún modo, me pareció también una trama única por como está llevada. Un escenario que como os decía puede parecer un poco complicado, pero cuya narración y paso de las páginas percibes que para nada es así. La narración está bien construida y el ritmo sostenido que nos están dando nos engancha a seguir y a querer saber.

En términos de diseño o dibujo, Mobius no baja del sobresaliente. Es bastante sorprendente también. Nos guste o no, hay que reconocer la maestría de Igor Kordey a los lápices por su toque diferente. Fue con Marshal Bass pero especialmente con Colt & Pepper que descubrí a este señor cuyos dibujos son maravillosos. Rasgos muy realistas y delirios arquitectónicos que le vienen genial al género de CF. Tiene ese sorprendente toque anticuado que mola visualizar.

Mobius es cómic europeo en esencia: buena trama, hermoso, asombroso y sorprendente a los ojos. Diría que es una pequeña joya de ciencia ficción del momento. Así que, por favor, no la paséis por alto.

Reseña: Predator. La Etapa Original, de VVAA

Espero que ni por un momento hayáis pensado que por estos lares íbamos a dejar pasar la reseña de un tomo tan maravilloso como el que Panini Cómics publicó el mes pasado. Correct! Hablo del Marvel Omnibus de Predator, la Etapa Original. Unos cómics que como muchos otros que (benditos los dioses) por fin están volviendo a salir a la palestra. Cómics que muchos de nosotros jamás pensamos que algún día tendríamos la posibilidad de volver a tener recopilados, en formato nuevo y quizás lo más importante, todos-toditos-todos, reunidos uno detrás de otro como mandan los canones. No copias sueltas con los que los niños de los 80s nos teníamos que conformar si encontrábamos con suerte uno en algún kiosco.

Muy fuerte.

Predator 1-4, Predator 2 1 y 2, Predator: Big Game 1-4, Predator: Cold War 1-4, Predator: The Bloody Sands of Time 1 y 2, Predator: Bad Blood 1-4, Predator: Invaders from the Fourth Dimension, Predator: Dark River 1-4, Predator: Strange Roux, Predator: Kindred 1-4 y material de Dark Horse Presents 46, 67-69 y 119, Dark Horse Comics 1 y 2, 4-7, 16-18 y 20 y 21 y A Decade of Dark Horse; todo esto, my friends, trae este integralaco que se marcó Panini el mes pasado. Y al igual que el de Alien (https://www.cronicasliterarias.es/?p=12169), no nos lo íbamos a perder por aquí. Son maravillas del mundo del cómic que hay que tener. Maravillas del cómic de los 80 y 90, de las que me atrevo a decir que jamás las volveréis a ver en papel cuando se agoten.

En estos cómics es donde se amplía el conocimiento sobre estos seres. Formas de actuar que solo se insinuaban en el primer film, o mitología y sociedad, que se empezó a mostrar en la segunda peli cuando uno de estos cazadores es visto en Nueva York. Pero aquí cómics donde se amplía conocimiento sobre su biología, presas, planeta, cultura, leyes, religión, rituales, orden social, tecnología, naves, equipos, armas y miembros destacados. Y todo en formato cómic molón contado a través de historias. Información subliminal. Y es que Dark Horse Comics sorprendió a la industria del cómic con la expansión del mito de Predator, una serie de cómics tan fiel al espíritu del éxito de taquilla original de 20th Century Fox que los conceptos de la primera serie de cómics de Predator terminaron por incorporarse al universo cinematográfico. En este tomaco se incluye además las que está consideradas sus tres mejores arcos: Jungla de Asfalto, Guerra Fría y Río Oscuro (a mí Dark River me flipó cuando la leí por primera vez), además de varias otras escalofriantes historias de Predator, algunas nunca antes reimpresas, recopiladas juntas por primera vez, en un formato de calidad y a buen precio, en mi opinión. El contenido lo vale aunque sé que para muchos la única opción es meterlo en la próxima carta a Papa Noel o Reyes Magos. Los comiqueros siempre hemos sido unos tiesos, lo sé.

Pero tenemos aquí tramas escritas por el guionista de cine y televisión Mark Verheiden (La Máscara, Battlestar Galactica) y la leyenda del cómic Dan Barry, además de las ilustraciones de Chris Warner, Ron Randall, Dan Barry y otros. My friends, Predator. La Etapa Original es una pieza esencial en vuestra cómicteca… Y LO SABÉIS. Al igual que Alien, la franquicia Predator (Depredador) fueron pelis que se convirtieron en exitazos en el mismo momento de su estreno. Igual que con La Guerra de las Galaxias (que después explotaría demasiado fuerte), pelis que las veías por primera vez y sabías que eran grandes historias porque había mucho detrás. Y hubo. Se rascó, con autores puestos e inspirados y… todo un universo por descubrir. Además de ser las dos franquicias que mejor representan la unión entre Ciencia Ficción y Terror. Y con Alien y Predator pasó que las quisieron encasillar como “de culto”. Pero escaparon del encasillamiento. De culto no es algo que tenga tanta repercusión, tanto éxito, algo que vende tanto y que su merchandising se venda como el pan. Si preguntas a cualquiera por la calle, sabe, o al menos tiene una ligera idea, de lo que le estás hablando. Eso no es «de culto».

Además de las películas y estos geniales cómics, los Predators se han enfrentado a famosos personajes del noveno arte como Batman, Superman, Liga de la Justicia, Tarzán o Terminator. El crossover más famoso fue con Alien. Existe un cómic llamado Aliens vs Predator vs The Terminator que actúa como secuela de la película Alien: Resurrección. Amigos de Panini Cómics, por favor, todo esto se tiene que publicar aquí. ¡Por favor!

Reseña: Star Wars. Sombra de los Sith, de Adam Christopher

Si estás buscando saber cómo Dathan huyó de Exegol, cómo se sentía acerca de su pasado y cómo Miramir entró en escena y su participación en las decisiones y la lucha por la seguridad de su hija, Sombra de los Sith es tu novela. Y si no sabíais nada de nada de los padres de Rey, creo que os acabo de crear una necesidad. Las esperanzas y los sueños de ambos personajes, y los sentimientos de confianza con respecto a la galaxia más grande y más lejana jamás creada, ayudan a que sus decisiones finales y el destino tengan aún más sentido.

Escrita por Adam Christopher, Sombra de los Sith es una de las primeras grandes novelas que explora un momento crucial entre la trilogía original y las secuelas, ya que cubre eventos que salieron a la luz por primera vez en El ascenso de Skywalker con respecto al pasado de Rey. Además, resume varios hilos persistentes que surgieron una vez que se revelaron esos detalles, de una manera entretenida, con buen ritmo y de forma satisfactoria, basándose en otros trabajos pero inyectando contenido nuevo. Crea un pack memorable. Que “asciende” a su propósito. Sombra de los Sith, en cierto modo, se lee como una novela clásica de Legends, pero ampliando la historia de fondo que solo se insinúa en las películas al mismo tiempo que incorpora nuevos elementos. Y para más inri, deja una inmersión más profunda en la narración del pasado de la mejor prota femenina jamás creada de Star Wars.

El ascenso de Skywalker, la historia de fondo, dejó muchas preguntas abiertas que la película no tuvo tiempo de responder o desarrollar completamente. Pero para eso tenemos el Universo Expandido, ¿no? Por eso, Sombra de los Sith se centra en intervenir, desarrollar y suavizar todas esas preguntas. Es lo que Adam Christopher se propuso y, en mi opinión, le salió muy bien. En cuestión, varias cosas: cómo y por qué Ochi de Bestoon no pudo encontrar a Rey a pesar de localizar a sus padres, y terminó en las arenas movedizas de Pasaana. O por qué recuerda haber visto el barco de Ochi volar después de que ella la dejó en Jakku. O por qué sus padres la abandonarían en un lugar tan desolado. Y lo que es más importante, cómo y por qué Lando Calrissian y el maestro jedi Luke Skywalker tampoco la descubrieron nunca residiendo en ella un poder tan concentrado.

La prosa de Adam Christopher no solo es entretenida, genera tensión incluso con personajes cuyo destino ya conocemos. Nunca en la narración se siente que está haciendo todo lo posible por responder las preguntas persistentes, sino que la historia se lee como un conjunto natural de eventos que se desarrollan en dicha época, las decisiones de los personajes y los resultados son razonables y factibles para lo que sucede. Como mencioné antes, a pesar de conocer el final, hay mucha tensión a lo largo del libro, principalmente por el regreso de un personaje de la trilogía Aftermath (Consecuencias). Me encontré disfrutando de estos personajes más que descubriendo la verdad de lo que sucedió. Miramir fue mi personaje favorito de los dos, especialmente, porque sentí que Adam Christopher la escribió no solo pensando en Jody Comer, sino también en Rey, ya que muchos de los rasgos y dones de Rey provienen de su talentosa madre.

Ciertamente disfrutaría explorando más del pasado de Dathan y Miramir, especialmente con algunas bromas sobre el linaje de Miramir, y todo gracias a la vida que Christopher les infunde. Uno de los aspectos más fascinantes de este libro, al menos para mí, era la idea de que conoceríamos a los padres de Rey, cuyos nombres se revelaban como Dathan y Miramir, y descubriríamos su viaje independientemente de su trágico final. No pasó mucho tiempo para ponerme los vellos como escarpias. Creí que nunca sabría lo que sé ahora.

Reseña: Las Sirenas de Titán, de Kurt Vonnegut

Uno de los poderes o dones de Kurt Vonnegut es que sus novelas siguen siendo súper entretenidas, súper interesantes, a pesar de los años. Blackie Books debe saberlo, y cada no mucho, nos publican una joyita de este genial autor, esa misma editorial que tiene, sin duda, las portadas más atractivas que uno puede encontrar en una librería de este país a día de hoy. Aparte de contener ese olor a libro nuevo al que uno le gusta esnifar…

Las sirenas de Titán (1959) fue una de las novelas elegidas como mejor lectura vintage en el último certamen literario de literatura fantástica en el que participé. Yo no la leí entonces, pero sí que la devoré en mis primeros años de instituto en los que tanta CF clásica tragué. Es una novela, una historia, que viene a mi mente cada poco, eso también es cierto, y merecía una revisitación (Blackie Books quizás también sabe leer mi mente). Os digo de que va: Cuando Winston Niles Rumfoord vuela en su nave espacial hacia un infundíbulo cronosinclástico, se convierte en energía pura y solo se materializa cuando sus formas de onda interceptan la Tierra o algún otro planeta. Como resultado, solo regresa a su casa en Newport, Rhode Island, una vez cada cincuenta y nueve días, y solo durante una hora. Pero al menos, como consuelo, ahora sabe todo lo que ha sucedido y lo que sucederá…

El libro de Vonnegut no solo menciona la pregunta de cuál es el sentido de la vida, también responde a dicha cuestión. Por lo general, no prefiero narrar el argumento o sinopsis de una novela tal como se publicita, prefiero reescribirla o difundirla a lo largo de la reseña según me apetezca. Este libro no trata en absoluto de Winston Niles Rumfoord, o al menos no exclusivamente. Va mucho más allá. Y si me hubiesen dejado hacer entonces una redacción o un Comentario de Texto sobre este libro -cosa que propuse a la profesora de Literatura de la extinta B.U.P. allá por 1994-, quizás hubiese podido contar que nuestra verdadera estrella del espectáculo es el encantador pero deplorable Malachi Constant, heredero de una gran fortuna y llamado a ser testigo de una de las materializaciones de Winston. Porque Malachi recibe algunas predicciones sorprendentes sobre su propio futuro altamente improbable, tras lo cual rápidamente intenta desesperadamente dejar atrás su propio destino, con resultados divertidos y depravados. ¿Y qué ocurre? Por supuesto, no hay destino del que uno pueda escapar. Es mentira todo eso que dicen que tu te buscas tu propio destino. Es simple. Está escrito (y en negrita) que TÚ ibas a terminar donde has terminado. En Las sirenas de Titán, el destino es lo que es, y Malachi se ve arrastrado por las predicciones inquietantemente precisas de Rumfoord.

En el camino, Vonnegut se toma el tiempo para explorar temas que se repetirían a lo largo de su obra, como la inutilidad de la guerra y los peligros potenciales de la religión organizada, así como algunas de sus hipocresías innatas. El conocimiento de Rumfoord nos invita a plantearnos preguntas aún mayores, preguntas sobre el significado de la vida; no sólo la pregunta en sí, sino por qué es tan importante para nosotros saber la respuesta en primer lugar. Las cosas se vuelven sorprendentemente épicas para lo que en realidad es un libro bastante compacto y fácil de leer, que realiza un recorrido por la mitad del Sistema Solar y abarca décadas mientras aborda los importantes temas antes mencionados. Es una prueba de la habilidad de Vonnegut el hecho de que sea capaz de acumular tanto y provocar tales cuestionamientos filosóficos sin que las cosas se prolonguen o dejen de entretener. Incluso en las situaciones más sombrías, logrará provocar una sonrisa en el lector, ya sea una sonrisa de «ya veo lo que hiciste allí» o una sonrisa que acompaña a una carcajada total.

Aún tan entretenida como cuando se publicó hace más de cinco décadas, Las sirenas de Titán es puro placer lector. Nunca es duro ni sermonea, ofrece momentos de melancolía en igual medida, y es otro ejemplo más de lo maravilloso que fue este escritor.

Reseña: Ranx. Edición Integral Definitiva, de Tamburini, Pazienza y Tanino Liberatore

Aparte de ser un cómic que La Cúpula acaba de publicar en formato integral -un indispensable para todo comiquero-, esta reseña no es otra cosa que un hombre de muchas décadas redescubriendo una de sus lecturas juveniles. Porque Ranx formó parte de Cults, al igual que Nosferatu, Blade Runner, Mad Max y algunas otras; donde yo me lo encontré por primera vez. En esa publicación francesa que tan buenos momentos me dio en mis inicios lectores. Y ahora la oportunidad de tener todo-todito-todo recogido en un solo volumen, en tapa dura, con las curiosas aventuras de este monstruo, un cómic donde se mezcla ciencia ficción, aventuras, exotismo, erotismo… ¡Y terror! No es uno de los archiconocidos cómics de la historia pero es patrimonio del cómic europeo de culto. RanXerox es eterno.

La quintaesencia del movimiento cyberpunk. Donde la violencia se cuenta sin miramientos; sexo, drogas y violencia son la base de una trama futurista que se vende bastante bien en cuanto te pones con ella. Siete capítulos que recoge este integral, cada uno de ellos, en realidad, una aventura o publicación que Ranx tuvo en sus días. Donde destaco obviamente Ranx en Nueva York pero también ¡Ay, robot!, dos tramas que me encantaron a parte de no recordar haberlas leído nunca. Escenarios sencillos pero con atmósferas que hipnotizan.

RanXerox o Ranx es el protagonista de una serie de historietas de cómic underground creado en 1978 por el guionista Stefano Tamburini, con dibujos de Andrea Pazienza, primero, y, después, de Tanino Liberatore; tres grandes autores del país de la bota. El personaje principal es un androide violento, un anti-héroe y sí, es lo que estáis pensando. Su creador lo bautizó con el mismo nombre de la tan famosa marca de fotocopiadoras (Rank Xerox), y así aparece nombrado en la primera historieta (Los orígenes), dibujada por Andrea Pazienza. Pero los representantes de la marca le dirigieron una carta al autor y le instaron a dejar de usar dicho nombre sin autorización. Le amenazaron con ponerle una demanda. Lo que hizo Tamburini fue eliminar la letra «k» y unió las dos palabras y quedó RanXerox como nombre definitivo.

En nuestro país apareció por primera vez en la genial revista El Víbora en los 80. Como os decía, RanXerox es un cyborg amoral y poseedor de una fuerza, agilidad, y velocidad que lo transforman en una especie de súper hombre simiesco y salvaje. Lubna, su novia, es una preadolescente tan amoral como este semi-Terminator. Adicta a diversas drogas, solo cuenta con doce años pero tiene más calle que muchos de los adultos que la rodean. Vais a ver en el cómic que esta ausencia de inocencia en los personajes infantiles es algo común. Por suministrarle drogas, deshacerse de sus amantes y hacerla feliz, Ranx irá de Roma a Nueva York, ejecutará masacres colectivas e incluso actuará en Broadway. Ranx no le teme a nada, y menos al ridículo.

Un cómic rico en personajes amorales al borde de la desesperación.

A mí si que me parece Liberatore un gran pintor y dibujante. El surrealismo al servicio del lápiz o carboncillo. Y cuando hay colores, se usan con originalidad y arte. Por otro lado, quizás me dirías: ¿Por qué se necesita representar tanta violencia en un cómic? Les diría que, la realidad aquí es demasiado excesiva, pero no está demasiado alejada de lo que el ser humano es capaz de hacer. Algunos dicen que representa muy bien la política italiana. En ese tema, no sé… Pero tengo claro que es un cómic inmoral y me encanta por eso. El héroe “estúpido” y la adolescente pervertida forman un dúo muy interesante. Violencia, sangre, sexo, drogas, todo el lado oscuro de una vida que con el paso de los años, con el paso de las páginas, va quedando atrás. A quién no le va a gustaaaaaaaaaaaarrr…

Reseña: El Rastro del Rayo, de Rebecca Roanhorse

Rebecca Roanhorse es una de las nuevas escritoras del fantástico que viene pegando fuerte en estos últimos años. Todos sus últimos títulos publicados y ubicados en la lista de best-sellers del New York Times, así como ganadora de los más prestigiosos premios del género como el Nebula, el Hugo y el Locus e incluso galardonada en sus inicios con el Astounding (anteriormente llamado Premio Campbell) al mejor escritor novel.

Red Keys Books, la nueva editorial que en nuestro país lo está dando todo con cada nueva novedad, parece ser que están muy puestos en en CF. Deben saber lo que pasa al otro lado del charco y acaban de publicar aquí una de las joyitas, si no la mejor escrita de esta autora, hasta el momento. El Rastro del Rayo es toda una novelaca de las que yo suelo disfrutar muchísimo. Un debut sólido con personajes atractivos y un escenario fascinante que impacta. Y a las pruebas me remito. Contar que nuestra protagonista Maggie tiene la capacidad de matar. Pero esto está en su sangre. Literalmente, sus poderes provienen de su línea de sangre. Cuando de pronto un aterrador asesinato hace florecer los incipientes poderes de Maggie, Neizghání, una inmortal cazadora de monstruos, la rescata del horror. Entonces ella se convirtió en su alumna, casi en su discípula, y este acuerdo funciona durante unos años hasta que Maggie hace algo [¡No Spoilers!] tan terrible que incluso su maestra la rechaza y desaparece de su vida.

Meses después, Maggie apenas habla con nadie, apenas sale de su casa…, aparte de simples intercambios para poder ganar algo de pasta prestando servicios como asesina, no hace nada más. Hasta que llegan las aguas… y la mayor parte del mundo queda sumergido tras un apocalipsis climático. Por esto, la antigua reserva navaja de Dinétha renace y ahora, los dioses y los héroes de las leyendas recorren la tierra. Pero también los monstruos. Y Maggie Hoskie cree recordar que una vez fue una cazadora de monstruos de Dinétah, aunque sin terminar su entrenamiento. ¿Y eso importa? Acaba de nacer el Sexto Mundo.

Mola ver como en raras excursiones, Maggie se encuentra con un tipo de monstruo que nunca antes ha visto. Y como a partir de ahí lo investiga y busca información. Esto me encantó. No siempre un héroe debe luchar a la primera. Además, está claro que estamos ante una novela que la hace fuerte su protagonista. Me gustó mucho Maggie. El trauma del pasado lejano, combinado con el reciente y aplastante rechazo de Neizghání; cosa que la acercan a los monstruos y la alejan de la gente normal. Ver a Maggie luchar entre el sentimiento de su propia inutilidad y su deseo de ser amada (incluso por las personas equivocadas) es convincente.

Algunos ya me conocéis, soy fan acérrimo del género apocalíptico. De hecho, de eso trata mi única novela publicada. Pero es que me encanta una buena historia post-apocalíptica, y aunque pensaba en un primer momento que meterle monstruos y magia no le iba a sentar bien, la señorita Rebecca Roanhorse demostró que me equivocaba.

Por lo que he podido ver, no soy el único que disfrutó de esta novela, en realidad, creo que llegué un poco tarde a la fiesta. Pero aquí está. En español. Un título que hace diez años difícilmente llegaría a nuestro país pese a la cantidad de premios que tiene. El Rastro del Rayo (Trail of lightning) fue ganadora del Hugo/Nebula/World Fantasy/Locus. Y sí, eso es mucho decir. Liga, Copa, Champion y Mundial de Clubes de la Ciencia Ficción. Un debut sólido, un pelotazo de libro que nadie se debe perder. El estilo de la prosa de esta autora evita el símil en favor de la metáfora. Las cosas son lo que parecen, incluso cuando parecen demasiado monstruosas o míticas para creerlas. Escribe con oraciones cortas y directas que tienen una cadencia que parece coincidir con la taciturna y pragmática Maggie.

La lectura que uno pide en este siglo XXI.

Reseña: Los Dominantes, de Runberg y Toledano

Los Dominantes abre con una máxima de la que yo no tengo ninguna que es cierta: ¿Y si la mayor amenaza para la humanidad fuera ella misma? Aparte de esto, representa muy bien lo que sucedería si una raza alienígena decidiera hacerse con el planeta Tierra. Tres puntos. Hay o habría los que deciden adaptarse y convivir con los invasores. Segundo: los que optan por resistir y reclutar gente para formar la Resistencia. Y por último, los que les rendirían culto como si de dioses o una invasión divina se tratara. Que de estos últimos, sin duda, habría bastantes porque el ser humano parece estar hecho para creer. Al menos, ante el miedo.

A medida que el país más poderoso de la Tierra se acercaba a las elecciones presidenciales de 2020, una terrible epidemia de origen desconocido azota al país y mata a más de ochenta millones de personas. Justo después, el país, el mundo o lo que queda de él, ve aterrizar formas de vida desconocidas, criaturas terrestres o voladoras que no parecen querer entrar en contacto con los seres humanos. Aterrizan en distintos puntos del planeta y trastornan la vida de las personas con su presencia. Aquella mañana, de camino a Los Ángeles, Andrew tuvo que detenerse a un lado de la carretera, sufriendo fuertes náuseas y vómitos. Este es el efecto que provoca el paso de un nauseabundo alienígena si lo tienes en las proximidades.

Ahora… Han pasado más de siete años desde que la vida de todos los supervivientes se transformara por completo. La gente se agrupa en pequeñas comunidades, comparte la comida que escasea y se protegen unos a otros como pueden. Aquellos que iniciaron la Resistencia a la presencia de los aliens se han convertido en terroristas que cobran rescate a su paso, matando indiscriminadamente, provocando más miedo que apoyo. La prensa sólo existe local y artesanalmente, Internet ha dejado de funcionar, nadie sabe en qué se ha convertido el resto del mundo. Sin embargo, las centrales nucleares siguen funcionando, lo que permite la circulación de vehículos eléctricos… Y volviendo a Andrew, este continúa su viaje hacia un museo donde espera encontrar pinturas que representen escenas de la vida familiar. Esta es su forma de aguantar, soportar, sin noticias de su familia desde la llegada de la Gran Cepa.

Runberg sabe cómo capturar el espíritu de los tiempos. Lo que está de moda. Con este virus que ha devastado a la humanidad, muchos recordarán lo recientemente pasado con el coronavirus. Aunque le pone la guinda con el tema de la invasión extraterrestre. Y a los que leemos CF de toda la vida, estos dos ingredientes nos llevan lógicamente a pensar en La guerra de los mundos, de H. G. Wells. Por lo que tenemos una historia, un tomo, un volumen que se disfruta bastante bien pero donde muchos no vais a encontrar originalidad. Los aliens son monstruos enormes con formas diferentes pero siempre tirando «a lo crustáceo». De ellos se sabe bastante poco. Cada especie causa daños diferentes, pero a menudo destructivos, a su entorno o a los humanos cercanos, aunque parece que exploten a estos de ninguna forma (que se sepa). Lo que da lugar a imaginarse cualquier cosa. Eso me gustó.

En cuanto al dibujo de Toledano, es correcto, incluso bueno, pero no me gusta mucho el coloreado, evidentemente, renderizado de ordenador. Llámenme viejo pero donde se ponga la mano -nunca mejor dicho- del hombre… que se quite todo lo demás.

Virus, epidemias, oscurantismo, el mundo que se va a la mierda, aquello recientemente comentado en un tribunal norteamericano sobre lo próximo que tenemos ya una visita extraterrestre… Pocas veces he visto en un cómic, un tema tan premonitorio tan en sintonía con nuestra actualidad.