Reseña: El Asesino (Integral 1) , de Matz y Luc Jacamon

En cómic europeo, los que somos fans de toda la vida y hemos podido devorar títulos bien sea por poder acceder a estos chulos álbumes por “herencia” porque seamos sinceros, no es el tipo de vicio más barato dentro del noveno arte… Los que leemos desde siempre, estamos súper encantados con esta maravillosa época de las integrales. Se entiende que ya tenemos una edad, que nuestro tiempo es limitado pero que conseguimos encontrar huequecillos y el dinero no tiene porque ser un problema. Es por eso que los integrales nos hacen más bien que mal. Poder leer obras que ansiamos leer y tener, y la disposición de tener en un sólo volumen varios álbumes, gusta. Nos pone. Y gracias a las editoriales que tenemos en nuestro país pues van llegando cositas que molan cantidad. Este pensamiento ha vuelto a mí mientras devoraba el primer volumen integral de El Asesino que recién publica Norma Editorial. Cómic que a poco que busquéis referencias lo vais a ver valorado de notable como mínimo. Y no me extraña porque es rápido, directo y endiabladamente efectivo. Devoré los álbumes uno tras otro. Esta es la típica serie que no esperas y que terminas adorando a las pocas páginas. Diciéndote, por cosas así, merece leer buen cómic europeo.

En El Asesino tuve la impresión de encontrar a un pariente de León, el famoso asesino a sueldo de Luc Besson. Porque para este señor al que se le puede llamar simplemente Asesino, su trabajo es como cualquier otro, incluso si la hemoglobina está presente a menudo. Está solo y sin amigos, como muchos seres humanos acaban sus últimos días. Es sólo el dinero lo que le interesa porque tampoco es tan viejo como para no necesitarlo. Nuestro héroe (porque para mí lo es después de la lectura) es un tío frío pero entrañable al final. No hasta el punto de encontrarlo simpático pero esa, my friends, es la ambivalencia de esta serie. Y todo se va al traste porque aunque siempre cumplió contratos sin dejar huella, un nuevo encargo le compromete y le obligará a salir a la luz.

El primer álbum es, con diferencia, el mejor escrito y el mejor de la serie. Es como esas pocas series de TV que les sale un primer capítulo redondo, vendible al productor más crítico y más odioso, pero en este caso, todo lo que sigue no anda muy lejos del nivel. En particular, la atmósfera que se genera con este personaje esperando y pensando en su apartamento, nos permite conocer su visión del mundo. Y es que uno/a casi podría pensar que el primer volumen es suficiente en sí mismo, todo está ahí, los demás álbumes (aunque no todos porque este sólo es el primer integral) agregan ideas y profundización del personaje. Y eso completa bastante. Matz logra así sacar de la banalidad lo ordinario de sus relatos. El cinismo, las reflexiones de este asesino amoral, desilusionado y anónimo (que sería casi un hombre corriente, si no fuera por su «sucio» trabajo) hacen que se incline hacia ciertos personajes del thriller de Manchette. También hay que decir que el dibujo de Jacamon tiene mucho que ver con la fluidez de la lectura, en un estilo semirrealista eficaz, dinámico y de trazo agradable a los ojos.

Hay que decir que el tono adoptado (falsamente despreocupado, casual), la narración (la mayoría de las veces los textos en off están formados por estados de ánimo, reflexiones de nuestro héroe-asesino, siendo estos comentarios mucho más numerosos que los diálogos), mas, todo contribuye a desarrollar una atmósfera asombrosamente tranquila, equilibrada y “clara”, aunque el tema se presta más a la oscuridad y al ritmo entrecortado.

El Asesino es otra gran serie que no había leído y de la que quiero más. Me encanta como los autores ofrecen el retrato de un asesino solitario, cínico, frío, metódico y sin escrúpulos que da escalofríos porque el relato de sus hazañas mortuorias se vuelve fascinante a medida que pasan las páginas. Y con secuelas de guion más orientado hacia una geopolítica invasiva, entre ricos, cubanos, venezolanos y toda una operación de manipulación. Esta serie es una joya. Sin tiempo muerto. Hay ritmo. Hay tantos giros y vueltas que no puedes dejar de leer. Los flashbacks son numerosos pero esto no rompe el ritmo de lectura. Solo un breve descanso para recuperar el aliento…

Estoy seguro de que sois todos iguales. Cuando estáis en una librería o librería especializada buscando carnaza, estáis buscando un álbum que guíe vuestros sentidos y buscáis la perla de vuestra vida en formato viñeta. Ese tomo que después de gastar los billets quedes contento. Pero hay algo mejor que rebuscar o curiosear desde cero. Tenéis los consejos de un profesional o amigo compartidor de gustos que en mi caso es mi tito americano del que ya os he hablado. El mismo que me dijo: Sí ha salido en castellano, ve a pillarlo sí o sí. Un brillante thriller del que Netflix prepara una adaptación cinematográfica para ya.