Reseña: Night Club, de Mark Millar y Juanan Ramírez
Seguimos con las obritas cuya lectura recomiendo para este mes de Halloween. Pues yo, que amo el Terror, yo que amo las historias de zombies, yo que amo las historias de vampiros (bien hechas), os puedo decir que una de las series que tenía más ansias de que volvería a la palestra era este segundo tomo de Night Club. Una serie que nos dejó con la sangre en los labios allá por finales de 2023, con una premisa potente, una que obviamente atrapó a cantidad de amigos norteamericanos y a Netflix donde estamos a la espera del estreno como serie de TV. Y Mark Millar haciendo estragos, una vez más. Porque Night Club, de Mark Millar y Juanan Ramírez, es algo tremendo a lo que hincarle el diente, nunca mejor dicho. Si bien, como sugiere la evidencia de la mayor parte del primer número de seis que traía el primer tomo y que mostraba una nueva historia de vampiros en el mundo moderno, justo después nos encontramos con un héroe vampiro recién convertido, Danny García, el cual tiene otros planes. Entonces, tened libertad para conocer a Danny, aspirante a youtuber, cuya vida no se acerca ni de lejos a lo que esperaba, un día sale en bicicleta para lanzar su nueva carrera en los medios y… únicamente se encuentra con un problema de los gordos, su vida en peligro y una guerra secreta entre vampiros que nadie conoce.
Mark Millar y Juanan Ramírez hacen un gran trabajo al establecer el elenco principal de personajes de esta serie. La motivación y el misterio están muy presentes, todo a un ritmo apropiado para un cómic que tiene acción trepidante y trata los momentos más sombríos de duelo de forma muy real. Pues el dolor que se siente por la muerte cercana de Danny y el que su familia y amigos deben atravesar, antes de que Danny se convierta en un ser de la noche, peta el alma. Un hecho que Ramírez retrata con toque dramático, gracias al uso liberal de líneas de perspectiva que atraen al lector al encuadre y al abrazo frío y oscuro del nuevo señor y amo de los vampiros, Danny para los amigos. E incluso después de saber por qué Danny fue convertido y con qué propósito, el argumento, en general, sugiera que para Danny hay otros planes. Y es lo que descubrimos en el segundo volumen que es el que Panini Cómics recién publica ahora. Algo ya revelado por la sinopsis de Image Comics, aunque queda la
sorpresa de hacia donde va la historia aún pues aquí se siguen abriendo más ramales narrativos potentes casi con cada nuevo capítulo.
Por supuesto, tenemos las inevitables escenas de entrenamiento a las que suele verse sometido cualquier vampiro novato, que sirven como exposición ingeniosa para establecer las reglas básicas para esta especie de vampiros en particular. Lo que vale para darle al lector una idea del increíble poder que Danny tiene ahora y de sus limitaciones como vampiro. Ya sabes, el sol, estacas de madera en el corazón, ese tipo de cosas… Además de un mentor intrigante que parece conservar más que un dedo gordo del pie en el mundo de los humanos, dada su profesión. Y aparte de ser un vampiro a tiempo completo, por supuesto, quiere ser un superhéroe.
Quien domina todo esto es el escritor y guionista Mark Millar, quien una vez más toma un género bien establecido y hace más que insinuaciones para darle la vuelta a lo convencional. Por lo tanto, juega con las expectativas preconcebidas de los lectores sobre el género. Especialmente cuando la página final revela (con el genial dibujo de Ramírez), sucesos impactantes para un futuro cercano. Millar mezclando superhéroes y vampiros. Esto, a quién no le va a gustar.