Reseña: Marvel Must-Have. Masacre. La Guerra de Wade Wilson, de Duane Swiercynski, Jason Pearson y VVAA

Cuando no te fallan con el criterio es obvio que la confianza sea máxima. Estos Must-Have de Panini Cómics son en definitiva eso: Tienes Que Tenerlos. Historias muchas, las mejores o de las más punteras de dicho personaje o grupo de superhéroes. O grandes arcos argumentales o geniales eventos. Así son y así lo he comprobado ya con Dinastía de M (https://www.cronicasliterarias.es/?p=6608), Planeta Hulk (https://www.cronicasliterarias.es/?p=3703) o la maravillosa El Guantelete del Infinito (https://www.cronicasliterarias.es/?p=3210); por solo mencionar de las últimas joyitas reseñadas por aquí. Pero hay más. Muchas más y siguen publicándose otras. Y lo mejor de todo es que son tomitos en tapa dura y a un precio súper económico. Ese es su verdadero poder.

Llevo escuchando recomendaciones de lectura de La Guerra de Wade Wilson, pues años. Prácticamente, desde que se publicó por primera vez en 2010. Pero por una cosa o por otra nunca ha llegado a mis manos. Como habréis podido ver, no se ha reseñado mucho Deadpool (Masacre) por aquí. Y no es porque no me atraiga o guste el personaje, es de esas cosas extrañas del destino. No te has puesto con él y no te has puesto con él. No hay más. Nunca nos hemos tomado un té juntos (tampoco un whisky) pero si que nos hemos visto constantemente por el barrio…

He podido percibir rápidamente que Masacre: La Guerra de Wade Wilson brinda por la originalidad. Esta miniserie presenta a Deadpool contando su historia temprana como superhéroe de fuerza de ataque. Pero que no os suena a historia de origen porque no lo es. al menos, no como las entendemos hoy en día. Es más bien una mirada libre de continuidad al personaje desde una nueva perspectiva peliculera en un guión que Duane Swiercynski comprende en cuatro números. Una historia con la que los fans pudieron ver regresar al personaje después de una breve temporada sin sus historias. Pero como La Guerra de Wade Wilson fue un proyecto de Marvel Knights, la continuidad no es una preocupación. Eso hay que tenerlo en cuenta. Porque hay algunas violaciones claras al canon aquí. Pero si puedes aceptar que Masacre, Bullseye, Silver Sable y Domino fueron operativos militares activos hace más de veinticinco años, entonces la historia será bastante de fácil de digerir… jajaj.

Como un flashback transmitido por Deadpool a los miembros de una audiencia en el Senado, el guión rebota entre ambas líneas de tiempo con bastante rapidez. La mayor parte del humor en el guión proviene de esta interacción, ya que el guionista juega con la tendencia de un Deadpool rompiendo la cuarta pared. Algo que provoca que rías entre dientes constantemente, sobre todo, cuando la narración de Deadpool trata el disgusto constante de sus compañeros de equipo. Pero tengo que decir que el Deadpool de Swiercynski no es tan gracioso como esperaba. Y quizás lo agradezco. Por que un guión de constante humor en un contexto que en realidad debe ser más acción que otra cosa, puede morir de éxito. Es por eso que los problemas comienzan con Wade Wilson, nuestro mercenario favorito, siendo llevado a la corte y presentando un caso. Ha muerto gente y los tribunales quieren justicia. Desafortunadamente, su único testigo vivo es la sobreviviente a dicho infierno. Deadpool inexplicablemente complica, serpentea y cuenta una historia sobre cómo el programa Arma-X lo convirtió en un monstruo y luego lo involucró en un grupo encubierto de asesinos que fueron enviados en misiones secretas por parte del gobierno USA. Y es curioso, nos encantaría creerle… pero no podemos.

Una trama que se mueve de un lado a otro entre presente y pasado, tratando de sortear bromas enloquecidas y momentos de horror. Un cómic donde Duane Swierczynski intenta responder algunas preguntas persistentes sobre el pasado de Deadpool y arrojar algo de luz sobre una masacre que tuvo lugar en México, de la que hay pocos datos.

Creo que es un cómic adecuado pero no tan sorprendente como esperaba. Me lo habían puesto como indispensable y… No obstante, es entretenido y se lee en un periquete. Palomitero, como se suele decir. Swierczynski domina el sentido del humor de Deadpool, eso si, y quizás eso sea lo importante con este superhéroe, ¿no?

A todo eso sumadle una historia de fondo llena de misterios sin resolver.

Para fans.