Reseña: El Gaucho, de Hugo Pratt y Milo Manara

Si el otro día os decía lo indispensable que era leer la obra de Hugo Pratt, ¿qué os debería decir ahora si os cuento que existe una obra llamada El Gaucho y que ahora reedita Norma Editorial en un sendo integral a color, donde el maestro italiano se junta con otro grande como es Milo Manara? Juntos pero no revueltos para una obra que casi al momento de publicarse ya se marcó de cómic clásico de referencia. Y bueno, estaba claro que la asociación de estos dos grandes solo podía dar buenos resultados. Pratt, a quien conocemos por nuestro amigo Corto Maltés, mi nuevo héroe favorito (https://www.cronicasliterarias.es/?p=6143), y Manara por sus heroínas ultra eróticas (Mmmmmm… uff); se reunieron para El Gaucho donde nos cuentan una historia que versa por un amor que está maldito. Tened la seguridad de que no estamos ante ninguna «flor azul», El Gaucho goza más bien de una atmósfera entre el horror humano y el erotismo, todo, en un contexto de colonialismo y genocidio. Una historia tan real como dura, donde me gusta mucho como trata la línea clara el señor Manara, que mejora y refina los gráficos de sus personajes y también los decorados en esta obra maravillosa donde las mujeres son surrealistas en belleza. Una obra que en color gana bastante.

Por otro lado, el escenario es puro Hugo Pratt. Una historia de aventuras, de un aventurero de esos con los que las chicas de antes soñaban y por el cual los chicos sentimos emoción. El escenario es evocador. Nos embarcamos en una historia raramente mencionada en cómics, a saber, la conquista por parte de los ingleses de tierras argentinas en Sudamérica. Por mi parte, poco sabía al respecto, salvo el episodio de la Guerra de Malvinas, muchísimos años después. Pero lo que se cuenta en El Gaucho, si cuenta con alguna referencia verídica, demuestra ya lo mal que se llevan estos dos pueblos en el siglo XIX, durante la lucha por la independencia de las colonias españolas en latinoamérica. Donde la hermosa y sensual Molly Malone se ve inmersa en una irrefrenable y destructiva tormenta y en un Nuevo Mundo que no es otra cosa que un lugar despiadado, un escenario turbulento en el que se mezclará el amor, el sexo, la pasión, la codicia y la lucha por sobrevivir. El escenario de Pratt es tan bueno como diferente. La parte de la historia que sirve de marco es tan fluida como cualquiera de sus producciones en Corto Maltés. Eso si, con un comienzo de la historia que descoloca (no entendí el vínculo entre el comienzo de la historia donde un anciano blanco convertido en indio cuenta su vida y el final de la misma).

Pero la historia está llena de giros y vueltas y tiene un carácter histórico indiscutible donde descubrimos que los ingleses intentaron invadir Argentina para arrebatársela a los españoles a principios de 1800. Estos ingleses siempre han sido unos piratas para todo y por mucho que intenten manchar nuestro nombre, no nos llegan ni a las suelas de los zapatos… En fin. Un episodio más de lo ladrones que son y esto Pratt y Manara lo cuentan muy bien en El Gaucho. Donde en medio de este alboroto, hay una verdadera historia de amor entre un joven inglés llamado Tom Browne y una prostituta irlandesa llamada Molly Malone, la cual ha sido entregada a los oficiales de la flota. Es de esas historias que cuando terminas, lamentas que haya terminado. Una muy buena señal para un álbum que tiene más de ciento veinte páginas y que comprende un volumen único.

El diseño es realmente magnífico e impecablemente fluido. Realmente se siente el estar en mitad del río Negro con La Pampa de fondo y ver tipo de esclavitud que se promovía con el asesinato en masa de los nativos y tribus argentinas. Pero eso sería un resumen marginal de la trama que mueve este cómic, porque hay más detrás. Una historia que te lleva a un cruce de sentimientos importante.

Milo Manara ilustra un magistral guion de Hugo Pratt. Una de las obras más memorables de dos genios revolucionarios del noveno arte. Déjate llevar por el viaje.