A poco que miréis en su catálogo vais a ver que Yermo Ediciones trae a nuestro país unos comicazos increíbles. Puro cómic europeo, pero sobre todo, títulos muy actuales. Joyitas del otro lado de los Pirineos como suelo decir (que me repito más que un abuelo). Pero es así. Cada vez que anuncian novedades, ya sólo con los dibujos de lo que se viene, a más de uno nos pone el vello de punta. Me pasó cuando vi que traían la serie Nottingham, de los guionistas Brugeas y Herzet junto al prolífico ilustrador Benoît Dellac. Este es otro de los titulazos que suelen ver la luz en el centro de Europa de la mano de Le Lombard, la editorial belga (se ve que Yermo va a buscar oro a la propia mina), la empresa que fue fundada en 1946 por el editor belga Raymond Leblanc, quien llegó muy pronto a un acuerdo con Hergé para publicar Las aventuras de Tintín. A partir de ahí…, maravillas.
Un primer volumen que no solo hace las introducciones sino que, por mi parte, me dejó un poco al borde de querer comprarme una diana y una ballesta e irme a un bosque a tirar (jajaj). Decir que sobre el papel ya me había conquistado el equipo de autores. Porque me encantó lo que hizo Emmanuel Herzet con el dramático Le Chant du Cygne (El Canto del Cisne) o Vincent Brugeas en el tormentoso Ira Dei; dos chicos apasionados por la historia que además saben contarla. Además, adelanto ya que Nottingham se hace bastante bueno si leíste en su día (o recientemente algo) sobre la dinastía de los Plantagenet. La casa reinante en Inglaterra entre 1154 y 1399 que cuando al último de ellos le obligaron a abdicar, la corona pasó a dos ramas secundarias como la Casa de Lancaster y la Casa de York. ¿Os suena la Guerra de las Dos Rosas? Pues eso. Pero en Nottingham vamos a la ficción.
Aprecié la originalidad del guión, el aspecto de justicia social, así como la inversión de roles entre los personajes del sheriff, el ladrón y la señora de la casa. Pero es cierto que de la trama (de momento) se cuenta muy poquito en este primer álbum. Por ejemplo, la fase de prueba que tiene que pasar William no está muy clara a qué punto llega. No entendí muy bien el por qué de todo lo que le ocurre después. Supongo que se resolverá más adelante. Un segundo álbum donde quizás sepamos más de Marianne porque… Bueno, bueno, bueno. Perdonad, que os voy hablando como si ya lo hubieseis leído. De Nottingham: El Rescate del Rey, la sinopsis editorial cuenta: «Todo el mundo conoce la leyenda de Robin Hood, también conocido como Robin de los Bosques, el bandido que robaba a ricos y nobles para repartir sus riquezas entre los pobres. Pero ¿cuál era la verdadera identidad que se escondía bajo la capucha de este defensor de la justicia? ¿Cuál era el verdadero objetivo que intentaba conseguir con su arco y flechas?». Con esto, y tan bien contado, cincuenta y cuatro páginas se quedan cortas. En este El Rescate del Rey empezamos a conocer personajes y a hacernos cábalas con cada uno de ellos y no da tiempo a tener una opinión clara. Por eso, solo por eso, Yermo Ediciones, ¡no debe hacernos esperar mucho con el segundo volumen! Que me parece curioso saber que con él se cierra la historia. Bueno, pues debe ocurrir toda la acción en él o mataré a alguien… uff.
Pero cierto verdad es que estamos ante otra relectura del mito del arquero de Sherwood, tema ya tratado muchas veces en cómics y autores que de algún modo revisan su historia desde el principio. Por tanto, es necesario innovar para sorprender al lector, y sobre todo a un lector como yo tan fan de este personaje y de la historia semifantástica anglosajona. En cuanto a Robin Hood, puedo decir que no me guarda ningún secreto dadas las diferentes adaptaciones de libros y cómics que he leído y sobre todo las muchas películas de Hollywood inglesas e italianas que he visto. De las revisitaciones de personajes tan icónicos suelo desconfiar, en este caso, tenía miedo de toparme con una versión como la de la película de 2018 con Taron Egerton, con una actriz deleznable que distorsionaba por completo el mito. Sin embargo, la versión que hacen Herzet-Brugeas-Dellac es más una mezcla entre la versión de 1990 de Kevin Costner y lo que se cuenta y cómo lo cuenta el film de Ridley Scott de 2010. Ese ambiente, ese entorno, me ha encantado. Y como siempre disfruto leyendo aventuras medievales, me ha llegado esta visión del siglo XII en tierras inglesas con un detalle que me dejó el culo torcido: ¡El Sheriff de Nottingham como un Robin encapuchado!
Una idea curiosa, que por el momento me cuadra. Hechos bien conceptualizados en un largo preámbulo que por lo pronto solo crea ansias de querer leer más, dos guionistas apasionados por contar la leyenda de Robin Hood a su modo… Un primer volumen muy prometedor.