Reseña: Los Pequeños Marsupilamis y la Gran Ciudad, de Benjamin Chaud
Uno que es amante del cómic europeo, de los buenos cómics de aventuras con giros y vueltas, de las ilustraciones divertidas y, sobre todo, del mundo Marsupilami (https://www.cronicasliterarias.es/?p=876), díganme si no, aunque parezca (y lo es) un cómic infantil no iba a querer degustar Los pequeños marsupilamis y la gran ciudad aprovechando que recién lo publica Nuevo Nueve Editores en nuestro país.
Benjamin Chaud vuelve a visitar el mundo de Marsupilamis para nuestro mayor placer. Fuera de los marcos y las burbujas, en un mundo vegetal repleto de colores brillantes, encontramos todas las características de estos pequeños seres imaginarios creados por el gran maestro André Franquin, ahora llevados a nuestra amada ciudad de Nueva York.
Os tengo que decir que Chaud, este nuevo descendiente no traiciona nada el espíritu original. En este álbum, en especial, nos vamos a la maravillosa ciudad que nunca duerme. ¿Os suena? Donde tenemos muy cerca cantidad de grandes edificios, algunos demasiado alto por mucho que eches el cuello hacia atrás, museos, parques que son casi un mundo nuevo, cristales, altas farolas por las que pasar… Y cristales por doquier. Donde los Pequeños Marsupilamis explorarán lo que es para ellos una nueva jungla diferente y moderna. ¿De acero? Lo que parece una fuente inagotable de maravillas se convertirá en una peligrosa aventura cuando se encierren en un callejón y tengan un encuentro inesperado…
¡Houba houba hop! El día pasa sin que nadie se aburra ni un segundo (y nosotros tampoco) mientras la jungla está repleta de pequeñas criaturas por descubrir. ¿Un cómic ideal o hecho para que los peques “entren” en el mundo del cómic europeo con grandes personajes como pueden ser unos bebés marsu lindos y graciosetes? Sería una forma de definirlo.
Ligero, rápido para degustar con tus descendientes antes de la hora de dormir…, un álbum súper ligerito y chulo de disfrutar para cuando dicha situación se tercie, y que hará brotar una sonrisa a todo aquel viejoven que viene de vuelta y que ya ha “vivido” con los marsupilamis otras aventuras (https://www.cronicasliterarias.es/?p=1941), que lo han hecho disfrutar de lo lindo porque eso es siempre lo que aportan estos seres.
Adoptaría uno en cero coma dos.