Reseña: ¡El Pacificador se esfuerza mucho!

El Pacificador es un personaje relativamente nuevo al cual sigo con vehemencia. Un personaje al que sigo ya sea por cómics, pelis o series de TV porque tiene todo lo que me hace gracia del tema del pijameo. Y es que al Pacificador no se le da muy bien ser un superhéroe. Y ahora, después de dejar al Escuadrón Suicida, solo quiere hacer cosas de supers. Y él se esfuerza. Pero por desgracia, todos, incluidos los malos, creen que es un desastre en esto de salvar al frágil. Sin embargo, en este cómic que recién edita Panini Cómics, lo vemos como va a desmantelar una red terrorista. Los mismos que le presentan al señor Smith la criatura más adorable que jamás haya caminado (torpemente) sobre cuatro patas. Y ahora. Acaba de encontrar el amor incondicional que le habían negado toda la vida. Y cuando… el perro es secuestrado por un supervillano… entonces y solo entonces… es cuando a Peacemaker se le va la pinza.

Comenzamos en un supermercado, donde una simpática pareja discute sobre películas basadas en cómics, interrumpida por los gritos del Pacificador, quien no puede creer que la cajera nunca haya oído hablar de él… jaja. Tomando su mezcla de pastel y proteína en polvo, el Pacificador se dirige a casa, solo para ser interceptado por una llamada de su ex-jefa Amanda Waller. Y aunque cumplió con su deber para con el Escuadrón Suicida y se licenció en Belle Reve, ella tiene una misión para él: desmantelar una célula terrorista local. Y allí es donde encuentra un pequeño bulldog con aspecto de esmoquin que se le acerca trotando, el perrito con el que Christopher Smith se siente oficialmente enamorado.

Fan de Peacemaker de la HBO, me sorprendió lo divertido que ha sido para mí este cómic. No obstante, es un cómic que ha propinado opiniones muy polarizadas. O te mola o casi que lo odias porque no es del todo la versión del Pacificador que hemos visto en la serie de TV. Y en eso estoy de acuerdo. Pero la esencia de lo que es este personaje, lo que representa totalmente que es el verdadero humor negro en su punto álgido dentro del cómic superhéroes; eso no se lo quieta nadie. Se ríe totalmente de la estética del Capitán América de toda la vida y eso nadie lo ha conseguido tan bien hasta ahora. Y el ataque a la posible célula terrorista casi me hizo reír a carcajadas. Eso sin contar el comentario constante al perro al que llama Bruce Wayne, un «caballerito elegante» y divertido.

Dicen que la comedia es difícil, pero yo no sólo lo digo, lo afirmo. Como escritor os aseguro que hacer reír es mucho más difícil que cualquier otra cosa. De ahí del valor de este cómic que funciona tanto como historia de aventuras como de cómic, en lo que literalmente significa dicha palabra.

¡El Pacificador se esfuerza mucho! comprende seis numeritos de una miniserie (Peacemaker Tries Hard!) que puede encantar a muchos lectores en mi opinión. Todo aquel que tenga una ratito para reírse, debería leer esto. El Peacemaker principal del Universo DC nunca ha sido tan divertido. Y es que si este tomo hubiera salido más cerca del estreno de la serie en enero de 2022, lo habría considerado un ejemplo perfecto de sinergia con S mayúscula. Pero tal como están las cosas, los fans de la serie definitivamente deberían disfrutarlo como acabo de hacer yo.

J. J. Castillo nació una fría mañana de invierno en la que el murmullo del viento hizo temer al más valeroso. Enamorado de esa sensación, dedica su tiempo a escribir y leer historias que increpen el alma. En el ámbito de las letras ha ganado premios y ha colaborado con cantidad de editoriales especializadas en los tres grandes géneros.