Reseña: Batman Gótico, de Grant Morrison, Klaus Janson y Bucellato

Gótico recoge el mini-arco argumental publicado en los números de Legends of the Dark Knight del #6 al #10 USA. ¿Se puede publicar esto en un solo volumen y dentro de la colección Grandes Novelas Gráficas DC? A mí me vale. Porque casi de forma independiente es una trama que gusta leer de un tirón y recuperar de vez en cuando fuera de la colección. Un chupito de tequila pues Gótico fue, en realidad, una de las primeras historias del personaje escritas por Grant Morrison, donde el maestro concibió un singular relato en cinco episodios junto a otro de los grandes ilustradores del mundo comiquero como es el dibujante y entintador Klaus Janson. Que no es decir poco. Y es que Legends of the Dark Knight fue un proyecto interesante: contar historias independientes utilizando diferentes equipos creativos ambientados en distintos puntos de la carrera de Batman en la lucha contra el crimen. Como tal, esas historias harían que el título fuera fácil de captar, sin atarlo excesivamente a la continuidad. Era una máxima simple e interesante, y produjo todo tipo de historias chulas; una de las mejores, Gótico. Quizás la mejor para muchos lectores norteamericanos entre los que me encuentro.

Está todo al revés. De hecho, el villano nos parece bastante familiar. Mr. Whisper es un hombre que vendió su alma al diablo para poder vivir una vida dedicada al pecado y la corrupción. Parece relativamente similar en forma y arquetipo al siniestro Dr. Hurt, hasta en la conexión con el pasado de Bruce y el uso intensivo de imágenes ocultas. Entonces, la primera viñeta gótica presenta la ciudad de Gotham dispuesta como una secuencia de cruces superpuestas mientras las carreteras y líneas de tren se superponen para formar una «geometría sagrada» de la ciudad. Porque al igual que Hurt, Whisper planea realizar algún tipo de ritual oculto mientras desata una plaga en Gotham…

Guau. Ya te está molando, ¿eh? El maestro Grant Morrison declaró en su día que no estaba demasiado interesado en lo que consideraba una historia convencional de Batman: el personaje luchando contra los mismos adversarios una vez más y derrotándolos de la misma manera. Por lo que en ausencia del Joker, a Morrison le gustó desafiar al lector clásico enfrentando al personaje contra enemigos que estaban fuera de su categoría de peso y fuera de su marco de referencia. Solo por eso este mini-arco es indispensable. Por un lado, mola la forma en que la historia abraza lo macabro y lo sobrenatural pues parece estar en desacuerdo con la estructuración convencional del mundo del orejas picudas. Sí, es amigo cercano de un mago y se sabe que trata con demonios, pero muy rara vez se enfrenta a oponentes inmortales que hicieron tratos con el diablo. Y más importante aún, las historias de Batman, rara vez se cuentan en este estilo, el estilo de terror gótico que tanto se intenta vender en los mentideros de internet.

Gótico se presta a raíces pulp y noir del personaje, pero son las espeluznantes imágenes ocultas las que dominan con símbolos como la batiseñal invertida y la figura recurrente del 8: el símbolo del infinito girado noventa grados, lo que da lugar a diferentes interpretaciones en la historia. Toparse con el diablo que muchos conocéis.

Reseña: Batman. La Secta, de Jim Starlin y Bernie Wrightson

Tenía ganas de un buen tomo de Batman. Una buena historia, un volumen a ser posible para degustar días atrás que he podido escaparme para levantar las piernas ante el gran azul. Y casi que lo tenía bien decidido porque este que tal anda es súper seguidor (de toda la vida) de la carrera de Jim Starlin desde que me encandiló con sus obras del Infinito. Para mí siempre fue un guionista que estuvo en un tris entre ser escritor de novelas de ciencia y ficción y guionista de cómics. Y aunque se inclinó por esto último, que duda cabe que hubiera llegado también lejos por el camino literario. Pero quizás la duda era si podía hacerlo bien fuera de Marvel, y lo más importante, con argumentos fuera del tema cósmico. Batman: La Secta o The Cult es la prueba de que sí.

Considerada una buena novela gráfica por muchos, donde Starlin aleja al Hombre Murciélago de sus enemigos habituales y saca adelante una inquietante novela gráfica dibujada por mi eternamente amado Bernie Wrightson, el que es para mí es mejor ilustrador de Terror de la historia. Así que el caviar se vende solo. Porque The Cult es una historia brutal y oscura y absolutamente fascinante. Quizás se dependa demasiado de los informes de noticias parlantes que dicen que se parece demasiado a El Regreso del Caballero Oscuro, pero en general esta es una miniserie muy bien contada. Batman rara vez ha sido llevado a estos límites y es reconfortante ver que no se trata de una trama tontuna que involucra a personas de la infancia de Bruce. Este es Batman en su punto más bajo y le toma unas buenas cincuenta páginas recuperarse incluso después de estar libre del culto al que tiene que enfrentarse. Porque Starlin se asegura de que captemos cada momento del adoctrinamiento de Batman en el culto, para explicar cómo la voluntad de Batman se desgasta hasta las vívidas alucinaciones del Caballero Oscuro. Blackfire predica la justicia, transmite el mismo mensaje que Batman, pero dice que la brutalidad es el único camino. Y lleva tiempo, pero el orejas picudas llega a estar de acuerdo con esa postura. Después de todo, ¿cómo podría alguien dudar del diácono Blackfire?

Todas las apariencias en 1988, llevaban a pensar que La Secta iba a ser una buena, pero una trama estándar de Batman. Sin embargo, unas pocas páginas del primer número demuestran que Jim Starlin y Bernie Wrightson venían dispuestos a hacer ruido. Comienza con Batman secuestrado, prisionero del carismático y atractivo en palabras Blackfire junto a su banda de almas subterráneas de seguidores. Colgado durante semanas y apenas alimentado, Batman sucumbe lentamente al lavado de cerebro de Blackfire. Sí, incluso Batman se puede romper y Blackfire hace precisamente eso. La controversia proviene, en parte, del asesinato, el que aparentemente comete Batman. Hasta ahí puedo contar.

Starlin y Wrightson en su máxima expresión. Sitúen esta obra en el pódium junto a El largo Halloween, Año Uno y El Regreso del Caballero Oscuro. Están al mismo nivel.

Reseña: Batman. Año Uno, de Frank Miller y David Mazzucchelli

Fue genial que esto se hiciera cuando se hizo. Fue Frank Miller el iluminado en muchos aspectos. Fue Miller el que se paró a pensar que un personaje como Batman necesitaba un reinicio. Aunque Año Uno no fue un reinicio propiamente dicho, fue algo más, algo especial. Una mini saga donde se narra (obviamente lo que indica el título) el primer año en que Bruce Wayne decidió ser, quién llego a ser. Una historia genial que se desborda en suspense y acción donde Miller profundiza a retazos en la infancia de Wayne y en la idea de cómo quiere encauzar su vida, una vida que es como un pastel sin guinda. Algo le falta y no sabe qué es. Tiene una idea, pero hasta que no se lanza a pasear por las calles y a tener enfrentamientos de lo más real con malhechores; no descubre lo que realmente desea hacer en su tiempo libre.

Frank Miller dotó con gran parte del protagonismo de esta historia al teniente Gordon, lo cual fue todo un acierto. También se cuenta su vida, los pormenores de ser un buen samaritano en una ciudad repleta de políticos y policías corruptos y la debilidad de un hombre contra el mundo. Año Uno es una obra cumbre en muchos sentidos. Destaca la aparición de personajes esenciales años después como Falcone »El Romano» (que hace aquí su primera aparición), una muy diferente Selina Kyle que más que ladrona, Miller encasilla como una valiente prostituta del East End y por supuesto, amante de los gatos. El comisario Gillian Loeb, la detective Sarah Essen o el fiscal del distrito Harvey Dent. Aquí se estaba gestando, se gestaba el resurgimiento de un llamado en nuestros días Caballero Oscuro.

En Año Uno se cuenta la vida del guapo y rico Bruce Wayne. Ha regresado a su ciudad natal tras doce años fuera del país. Lo que los demás no saben es que ha estado entrenándose para conseguir un propósito que lleva años regando su cabeza. Por otro lado, el teniente James Gordon también llega a la ciudad. Bruce empieza, y decide dar una vuelta por los bajos fondos de la ciudad. Es allí donde tiene un incidente con un proxeneta y una prostituta llamada Selina Kyle. Una tía que no lucha nada mal… Wayne ve monstruos en la oscuridad, uno especial que le persigue, uno que fue a por él cuando de pequeño cayó en aquella enorme cueva que hay bajo la mansión Wayne. Lo curioso es que quiere ser como ese monstruo. Quiere ser un ser oscuro con orejas que pueda aterrorizar a los criminales y… ¿empieza a conseguirlo?

Batman: Año Uno se publicó originalmente entre 1986 y 1987, entre los números #404 y #407 de la serie regular. Sin embargo, está planteada como una lectura independiente y autoconclusiva. Está considerada unánimemente como la mejor historia de Batman jamás realizada junto a El Regreso del Caballero Oscuro. Durante mucho tiempo se quiso llevar al cine. Poco antes de que se lanzara la noticia de la producción de Batman Begins, Miller confirmó que gran parte del cómic aparecería en la próxima película de Christopher Nolan.

Frank Miller al guion, David Mazzucchelli al dibujo y el coloreado de Richmond Lewis, dieron al aficionado lo que deseaban. Una obra eterna que por estos lares consideramos el mejor y más recomendable cómic de Batman que se puede recomendar a un aficionado que quiere leer una obraza del orejas picudas. Excelentes obras muchas pero que superen el sobresaliente, se pueden contar con los dedos de una mano. Los años 80 fueron un punto álgido en la historia del noveno arte y Batman debía estar ahí… Y estuvo gracias a Frank Miller. ECC Editorial lo sabe, y como lo sabe, siempre tiene en cartel esta joyita que nunca debe faltar en disponibilidad y asequibilidad. Uno de los cómics que hay que leer antes de morir.

Reseña: Batman. Caballero Maldito, de Tim Sale y Jeph Loeb

Una edición que yo por lo menos esperaba con muchas ganas pues estaba seguro que tendría cabida dentro de estas magnificas Ediciones Deluxe que está publicando ECC Ediciones con sobrecubierta transparente. Batman: Caballero Maldito…, que menos que poner a disposición del aficionado en un mismo tomo las tres aventuras escritas por Jeph Loeb y dibujadas por Tim Sale, de este maravilloso tándem creador de El largo Halloween. Tres arcos que sirven como precuela para dicha obra de arte y que, por supuesto, os recomiendo leer antes de poneros con El largo Halloween por primera  vez. Entenderéis ciertos detallitos mucho mejor.

Un tomo que abre con el Legends of the Dark Knight Halloween Special #1 de diciembre de 1993, y que cuenta como Batman viene intentando cazar y capturar al Espantapájaros pero cuando lo consigue, todo se torna en desgracia. Un Halloween durante los primeros años de Batman, donde el Espantapájaros obliga a jugar al Caballero Oscuro a un juego espantoso del gato y el ratón. Y es que ver al Espantapájaros cantando canciones infantiles esta serie pone el vello de punta… Historias de terror. Interesante trama donde los autores nos muestran a un Bruce Wayne turbado por elecciones personales, el equilibrio entre el hombre y el vampiro.

Maldito nos lleva a la víspera de Todos los Santos donde el orejas picudas tiene una cita terrorífica a medianoche cuando se enfrenta al genio retorcido, el Sombrerero Loco. La adolescente Barbara Gordon se mudó recientemente con su tío, el capitán de policía de Gotham City, Jim Gordon. Pero una disputa en la noche de Halloween la lleva a huir… y el horror de Barbara apenas comienza cuando cae en las garras del Sombrerero Loco, uno de los villanos más inquietantes de la galería de pícaros del Caballero Oscuro. Ante una de las peores pesadillas de su vida, la única esperanza de Jim Gordon de recuperar a su sobrina es Batman. Pero los terrores del pasado y del presente persiguen al Caballero Oscuro, y eso puede costarle muy caro a Bárbara…

Después de que el primer especial de Halloween, Batman: The Legends of the Dark Knight, se vendiera tan bien, Jeph Loeb y Tim Sale tuvieron que quemar un poco de cerebro y crear una nueva historia de miedito. Cierto es que el Sombrerero Loco no es un gran villano de la Batman Rogue Gallery, pero le da cierta profundidad -y está muy conseguido aquí-, y es por eso que Batman aquí mola cuando se enfrenta a él. La razón es fácil: Jeph Loeb y Tim Sale escriben con soltura buenas historias del orejas picudas.

El torturado sueño de Bruce Wayne es violado por cuatro espectros: el espíritu de su padre asesinado, el fantasma del Halloween pasado, el fantasma del Halloween presente y un misterioso fantasma del Halloween futuro. ¿Pero qué quieren del Caballero Oscuro? Bruce Wayne tiene su propia experiencia paranormal en Ghosts. Otro especial para Halloween de este tándem que llevaría a Jeph Loeb y Tim Sale a continuar la trama fraguada que depararía en El largo Halloween, que tomaría trece meses, de Halloween a Halloween. ¿Una visita a lo Dickens para Bruce Wayne? Digno de ver. Más que nada porque este cuento tiene un ritmo diferente a los anteriores y, sobre todo, porque hay un súper emocionante atraco al Pingüino que se vuelve flipante con el paso de las páginas.

Esta edición de lujo se completa con el especial que aborda las consecuencias de dicha miniserie y lo que supuso para el mundo del cómic cada colaboración (y esta fue la última), de esta genial pareja de autores.

Reseña: El Batman que Ríe. Metal, de Scott Snyder, Jock y VVAA

Con el orejas picudas también opto siempre por leer cositas diferentes. Y a poco que aparezca una novedad llamativa en este sentido, que menos que ponerse rápidamente a devorar dicha opción. ¿O no es tremendamente atractivo a los ojos -sin saber nada de nada- el genial tomo en tapa dura que recopila la miniserie de El Batman que ríe? Detrás, Scott Snyder, Jock, James Tynion IV y Eduardo Risso, ¿eh? Un equipo creativo poderoso para una obra que ya os adelanto que es indispensable para ti si estás leyendo esta reseña. Curiosa y muy digna para un Caballero Oscuro que ya se echaba de menos en postura… oscura. Parafraseando a un amigo, uno de los títulos más emocionantes que se pueden leer actualmente en DC, desde la primera ola de Rebirth (Renacimiento). Totalmente, de acuerdo. Una obra que engancha desde la primera viñeta gracias al impactante arte de Jock, diseños fuertes que son casi inmediatamente identificables como suyos.

También se presenta una amenaza espeluznante tanto para el personaje principal como para el Joker, quien de algún modo juega un papel importante en esta trama y es por que…, con tan solo dos frases nos tiene ganados. ¿Quién no desea saber más de un ser mitad Batman-mitad Joker? Veréis. Scott Snyder sacudió todo alrededor del murciélago al crear el Multiverso Oscuro. Lo hizo en la épica colección Noches Oscuras: Metal. Dejó suelto en Gotham City al más letal morador de esa realidad alternativa y ahora Bruce Wayne debe enfrentarse cara a cara con las pesadillas generadas en esa tormenta de acontecimientos. El Mal devoró al Mal en esa línea temporal y el Caballero Oscuro sigue sin estar tranquilo desde que ha descubierto a El Batman que ríe. Este ser que no solo sobrevivió a la pelea con el Joker, sino que ahora está implementando un plan siniestro en todo el Multiverso. Así que Bruce Wayne percibe que, la única forma de detener a este espectro loco, es matarlo.

Violar la regla que Batman nunca debe romper.

Con un impactante inicio, el tic-tac del reloj pone a Batman en camino a través de las diferentes realidades del Multiverso. Comienza a ver todas las interacciones de su vida, lo que podría haber sido y lo que no. Pero lo más importante es, que comienza a deducir que su vida actual es de alguna manera incorrecta y que todos los errores que ha cometido están conectados de alguna forma por una curiosa fuerza extraña. Mientras tanto, El Batman que ríe levanta el telón en su segundo acto, sacando sus mejores armas para irrumpir en Arkham Asylum… Anexa a su equipo a uno de los Batmen más poderosos del Multiverso Oscuro: ¡el Grim Kinight! Con el que el Cruzado de la Capa tendrá una lucha a muerte.

Se llega a un enfrentamiento final de película. ¿Y cómo derrotar a un enemigo que conoce todos tus instintos y todos tus movimientos? La idea de explorar los demonios internos de Batman, sus rincones más oscuros y sus peores miedos sin perder la esperanza o el momento ocasional para la introspección tranquila del personaje, es un tema mil veces tratado. Pero no deja de ser interesante saber hasta donde puede llegar un tipo que está sobrepasado, al que muchos amamos por la cantidad de historias chulas que tiene detrás. Historias ya eternas en las que para mí acaba de entrar El Batman que ríe.

¿Hasta qué el cuerpo aguante? El villano de aquí es una fuerza inconmensurable tras la escena. Cuando hace acto de presencia, es discordante y aterrador. Y eso mola. O a mí me mola mucho, mejor dicho. Yo que soy muy partidario de los arcos de Batman donde el terror está muy presente. Una trama con varios protagonistas, con la maravilla visual de los mundos hermosos/horribles que a Jock le gusta crear, este magnífico tomo y completo como pocos, recopila no solo la miniserie realizada por Scott Snyder y Jock, también apariciones posteriores a cargo de autores imprescindibles del cómic contemporáneo como Steve Epting, David Márquez o James Tynion IV (The Batman Who Laughs #1-#7, The Batman Who Laughs: The Grim Knight #1, The Infected – The Commissioner, Hell Arisen #1-#4, Batman/Superman Vol. 2 #1-#5). Dos villanos y un plan terrorífico que nuestro Batman no está dispuesto a asumir. Indispensable. Momentos realmente impactantes contiene.

Reseña: Batman. Chamán /Veneno, de Dennis O’Neil, Hannigan, Von Eeden y José Luis García-López

No lo esperaba porque en realidad resulta que empecé a leer y a leer, me enganché, y resultó que me sonaba bastante lo que me estaban contando. Y me dije: ¿Yo he leído esto? Diría que sí. Y sí, lo había leído hacia muchísimo tiempo y no recordaba lo bueno que eran estos dos arcos argumentales del maestro Dennis O´Neil. Un retroceso a algo que no sabía que me estaba perdiendo, los cómics donde una historia comienza y terminan con un apoteósico final. Y simplemente estás con Batman y lo ves “trabajar”. Pero estas historias merecen más que las estrellas que algunos “críticos” les han dado. Quizás es mi sensación ahora que estoy reseñando los dos arcos al completo, ahora, que se pueden disfrutar en un solo tomo, en tapa dura, gracias a esta nueva edición de ECC Ediciones. Tenemos en este tomo Chamán y Veneno, dos sagas escritas por el siempre maravilloso Dennis O’Neil y dibujadas por Ed Hannigan y Trevor von Eeden con la colaboración del maestro José Luis García-López. Y además, un relato protagonizado por el mítico guionista que firman su hijo Larry O’Neil y el dibujante Jorge Fornés.

Chamán es una historia extraña que muestra todo lo fantástico de las pelis de aventuras de los 80 con trasfondo sobrenatural. Esas genialidades de algunos directores hoy consagrados que a muchos nos hizo enamorarnos del cine ochentero para el resto de nuestro días. El primer capítulo de cinco partes tiene lugar incluso antes del Año Uno, de Frank Miller, y el resto ocurre poco después del primer año. Antes de que Batman pateara traseros a súper alienígenas y villanos inmortales, antes de que tuviera un batmóvil y un cinturón de herramientas lleno de artilugios, y antes de convertirse en el hombre más peligroso de la Tierra. Cuando únicamente era un tipo con una máscara, deambulando por el mundo pero, sobre todo, su ciudad, su mayordomo, un busca pistas. Un lado del personaje de Batman que nunca debe perderse, que no se le olvide a ningún guionista. En este arco, Batman aborda misteriosos asesinatos rituales en las calles de Gotham. No es educado, no siempre es capaz de salvar a las personas que lo rodean y los criminales no hablan con él a menos que él realmente los persuada. Pero… ¡Eso es mucha charla para el Murciélagos! Disfruté (volví a disfrutar) la combinación de sobrenaturalidad y espiritualidad de esta trama, así como el viaje que emprende Bruce Wayne para convertirse verdaderamente en la máscara que se pone.

Veneno no es una historia de ¿Y si Batman se volviera adicto a las pastillas?, como dice mucha gente. Eso es un tema bastante superficial. Puro simbolismo. En primer lugar, no es Vicodin, es veneno, el veneno/esteroide/súper droga que crea a Bane, probablemente el mayor y más subestimado enemigo de Batman. En segundo, es fácil interpretar el veneno como un símbolo de corrupción, maldad, obsesión total, psicopatía, todo lo que Batman no es. Batman es y siempre ha sido equilibrio. Tiene sed de venganza, pero protege a la gente de Gotham y a su familia. Destruye a sus enemigos pero no los mata. O normalmente no mata, depende del guionista. Sissy Porter se ahoga y Batman le falla y recuerda cómo les falló a sus padres. Se da cuenta de que no es suficiente, que su equilibrio no funciona. Entonces se vuelve completamente Batman. Nunca te vuelves completamente Batman. Con eso quiero decir que se entrega al 100%, todo venganza, todo cuerpo, sin cerebro, sin segundas conjeturas. Pero sí que se vuelve adicto a las pastillas, pero sólo por el poder que le dan. La supuesta infalibilidad. Porque todo ese jugo confunde su cerebro y comete errores, casi lo matan, casi se convierte en un asesino, lo que se prometió a sí mismo que nunca sería, o de lo contrario no es mejor que Joe Chill, quien mató a sus padres. El fracaso de Batman ilustra cuán humano es en realidad, o tal vez cómo Batman nunca está sin Bruce Wayne, siempre humano, nunca completamente corruptible.

Dos historias indispensables.

Reseña: Batman El Detective, de Tom Taylor, Andy Kubert y Brad Anderson

Batman: El Detective es un miniserie de seis numeritos que ECC Ediciones ha recogido en uno de esos geniales tomos tan llevaderos que tanto gustan. El guionista Tom Taylor, el artista Andy Kubert y el colorista Brad Anderson ambientan esta aventura en el propio centro de la línea Infinite Frontier de DC. ¿Qué es Infinite Frontier? Un paso acertado hacia un nuevo renacimiento del Universo DC. Uno que sí que promete tener cambios tangibles y perceptibles y que, con suerte, estos serán verdaderamente significativos para algunos superhéroes. Esencialmente, una nueva era de DC Comics con nuevos equipos creativos, nuevo equipo editorial, nuevo liderazgo y un compromiso con la diversidad y la inclusión tanto de los personajes así como los que están detrás de la escena.

Batman: El Detective comienza con un evento trágico en Inglaterra que rápidamente arrastra a Batman a una tensa investigación que resulta ser terriblemente personal. El talento creativo reunido para contar este misterio es de primer nivel, y la conspiración subyacente eleva esta historia por encima de lo terriblemente “familiar”. Un inicio muy potente donde presenciamos como un avión se estrella matando a ciento cuarenta y siete pasajeros que iban a bordo. Si eso no fuera suficiente para exigir mucha atención, alguien también pinta las letras BATMAN 147 en una estructura cercana… Algo recurrente al principio que no importa que os cuente como se desarrolla cada vez. Lo único que importa es cómo se conecta este tema con el orejas picudas.

Un detalle o detalles que me encantaron de esta aventura es la alta preocupación que mantiene, la tensión y sus partes más inesperadas. Una pelea con Caballero Fantasma proporciona la mejor secuencia de acción de todo el primer número (repleta de escenas notables) lo que deja con ganas de más y hace que sigas queriendo leer. La franca rareza de cómo Batman se enfrenta a la aparición y las viñetas de choque estrechamente enmarcadas por Kubert son una delicia. Por otro lado, Tom Taylor es un guionista capaz de una extrema ligereza (que se muestra plenamente en su reciente debut en Nightwing), así como de material más sombrío: vean la multitud de cómics de DCSos e Injustice que llevan su nombre.

En Batman: El Detective, la situación que nos ocupa no es tan apocalíptica como, por ejemplo, una infección Anti-Vida que se extiende por el mundo, similar a un levantamiento zombie, aunque sí que este Caballero Oscuro adopta el mismo tono de ambiente sombrío. El equipo creativo sugiere que la perspectiva de Bruce está fuertemente influenciada por no estar en un gran lugar de descanso psicológico, todavía aturdido por la pérdida de Alfred y tambaleándose por sus percibidos fracasos mientras considera si realmente alguna vez ayudó a Gotham en toda su puñetera vida. Este último punto no es del todo original, aunque historias como éstas normalmente tienen la ventaja de no pertenecer a historias de continuidad y gusta encontrar este punto.

Tenemos aquí una lectura psicológica especialmente atractiva. Y los detalles de como Bruce llega a Inglaterra y conoce a Caballera y Escudera, molan. Y cuando se da a conocer Equilibrio… oh. El trasfondo es el factor más detallado de esta historia, lo que la convierte en una historia potente en cuanto a reflexión sobre las vidas salvadas y las almas de los inocentes a los que muchas veces un inepto o ineptos empujan a “irse”. Los fantasmas de los perdidos. Es bastante horrible que tantas personas sean asesinadas por una pandilla de individuos desconocidos vestidos como Batmen blanqueados, pero cuando te enteras que a cada una de esas víctimas, Batman ya las había salvado antes… Uff.

Memorable.

Reseña: Batman. Gotham Knights. Ciudad Dorada, de Evan Narcisse y Abel

Los cómics vinculados a videojuegos siempre son una perspectiva arriesgada porque generalmente no son conocidos por su historia entre los comiqueros que siguen la famosa continuidad de un personaje. Pero los cómics de la Gotham Knights, ambientada después del asesinato de Batman mientras sus cuatro protegidos intentan vengarlo, tienen una fuerza tremenda en sus argumentos y pese a que nada llega a ser canon (por llamarlo de alguna forma), el alto nivel de guion y dibujo que se maneja en ellos significa que nunca es una opción perdérselos. Y a las pruebas me remito.

ECC Ediciones publica este tomo que recoge la miniserie al completo Ciudad Dorada (Batman: Gotham Knights – Gilded City núms. 1-6 USA). Estamos ante un cómic que como Preludio aborda el caso final. Evan Narcisse y Abel desentrañan la historia de una nueva y misteriosa plaga en Gotham que funciona-mata lento pero rápido como gas del miedo. Un gas que convierte a la gente de Gotham en maníacos enloquecidos capaces de hacer cualquier cosa: disturbios, luchar y matar para conseguir el objeto deseable más cercano. Por poner un ejemplo de estas locuras: irrumpen en un estadio, roban el objeto más deseado de ese equipo, publican una foto e inmediatamente colapsan. Todo muy directo en términos de sátira referente a como se comporta el ser humano, en especial, respecto a la adicción a las redes sociales y a su imagen para con el vecino. Todo esto mientras Batman, Robin y Batgirl intentan proteger a los residentes de Gotham de sí mismos y encontrar al culpable de la expansión de dicha plaga.

Gotham City nunca ha sido el lugar más seguro de la Tierra. Pero ahora la metrópoli está sumida en la locura. Todo por culpa de un misterioso virus que convierte a la gente corriente en criminales obsesionados que destruyen propiedades, roban tiendas y atacan a residentes inocentes. En todo este caos, Batman y los Caballeros de Gotham titulares tienen las manos ocupadas. No sólo deben detener la propagación de la plaga, sino también descubrir su origen pues resulta que la enfermedad ya afectó a la ciudad en el pasado. Ese en concreto es el motor de la trama.

Ciudad Dorada hace de introducción al videojuego que se lanzó para PC y consolas. Para quien se lo pregunte, es una miniserie lo suficientemente independiente como para que no jugar no perjudique la comprensión de la trama. Y no leer el cómic, por supuesto, no perjudica a la comprensión del juego. Evan Narcisse ha creado una obra que cualquiera puede disfrutar, tiene la dosis adecuada de entretenimiento del fan de los cómics de superhéroes. No es que viajen al pasado, la historia se desarrolla de dos maneras. Por un lado, observamos los acontecimientos actuales y los esfuerzos de Batman por controlar el caos que se está extendiendo, y por otro lado, hay sucesos que se entrelazan con numerosos flashbacks.

El dibujo de Abel es espectacular.

Reseña: Batman. Alegría, de Chip Zdarsky, Eddy Barrows y VVAA

Podríamos debatir todo el día (y la noche) sobre la necesidad de otra aventura del “murciélagos” en DC Comics. Sobre si nos da vida lectora o no leer y degustar una nueva historia -con nuevos autores- del Caballero Oscuro. Uno que me conozco diría: “Siempre se trata de dinero”. Pero yo, que trabajo más lo creativo, me limito a: ¡Batman trae la cashunda! Un comentario que hacía otro colega mío cada vez que quería recomendar un cómic del orejas picudas. Entonces, yo, a ustedes, sinceramente, les diría, no, no necesitamos un nuevo cómic de Batman a cada momento. Pero entonces mis ojos recorren la portada, se dirigen a la zona donde se indica la autoría y… ¡Necesito un cómic de Batman escrito por Chip Zdarsky! Y aquí está, y aquí se resume todo el párrafo. Batman: Alegría (Batman: Urban Legends #1-#6 USA), un detective de Zdarsky que encima viene acompañado de algunos amigos para dicha antología.

Chip Zdarsky y Eddy Barrows hacen antes que nada un opening con una historia de Capucha Roja que muestra por qué amo la escritura de Chip. Al igual que lo que hizo con Daredevil en Marvel, no hay tontás a nivel de superficie, incluso presentando una trama que trata en gran medida de historias pasadas. Mientras que en el presente, Jason Todd está investigando una nueva droga denominada “lágrimas alegres” que está llegando a las calles de Gotham, también vemos flashbacks del joven Jason tratando de convertirse en Robin y más allá. Sí, la historia trata sobre la muerte de Jason a manos del Joker, pero creo que a los fans de Red Hood les gustará porque se centra en las emociones de Jason y Bruce. Zdarsky configura esto para mostrarnos el corazón de Jason y la ira intrínseca que todavía tiene dentro. Y ya estamos enganchados.

Stephanie Phillips y Laura Braga brindan después a los lectores una actualización sobre la relación Harley/Ivy, y aunque espero que veamos más de esto en su libro en solitario que ECC publicará en los próximos meses, con toda la locura con Ivy desde Heroes in Crisis, es bueno darles a las chicas un tiempo juntas. Ahora, el cínico en mí, se preocupa del por qué Ivy está llegando a Infinite Frontier como villana directa. Esta historia es un servicio de fans para fans de Harley/Ivy. Y se lo merecen después de la montaña rusa de emociones de los últimos años. A continuación, tenemos una historia de Outsiders, de Brandon Thomas y Max Dunbar que quería que me gustara pero no me llegó a gustar tanto como esperaba. En ciertos momentos es inconexa, aunque tiene algunas escenas geniales para que Katana y Relámpago Negro se abran camino.

La historia final es una historia de Grifter, de Matthew Rosenberg y Ryan Benjamin, y podría ser mi favorita. Me encantó la referencia al Grifter de Rosenberg en Future State. Denme un excelente trabajo de personajes, y estoy dentro. Y Rosenberg lo hace. Leí por ahí que se saltaron las referencias al Grifter más cercano porque no sabían o no les importaba el personaje en realidad. Pero por favor… Vais a ver como Rosenberg conoce y se preocupa por el personaje lo suficiente como para hacerlo atractivo para el que lo conoce y para el que no. Muy divertido y lleno de acción.

ECC Ediciones presenta la recopilación Alegría, una de las sagas más aclamadas de la serie Leyendas Urbanas.

Muy disfrutable.

Reseña: Yo Soy Suicida, de Tom King y Mikel Janín

Batman y Catwoman han tenido una larga historia de amor a lo largo de la historia de DC Comics y no hace tanto esto se ha explotado de un modo muy chulo (https://www.cronicasliterarias.es/?p=13413). Pero hay que recordar que la primera aparición de la sensual Selina Kyle fue allá por 1940 debutando en un número de Batman, donde desde un principio comenzó el ardiente afecto que ha durado décadas. Y ha tenido muy buenos momentos en El Largo Halloween, Hush and The Brave and the Bold #197 y un número que recuerdo bastante: Detective Comics #557, donde Gotham sufre una lluvia roja aparentemente interminable a la vez que Batman se muestra enamorado de Catwoman por primera vez. Su flirteo también fue más allá de los cómics, abriéndose paso en la serie de televisión Batman en los 60s y en las pelis Batman Returns y The Dark Knight Rises. Pero la versión más reciente y atractiva la tenemos en el Batman Rebirth, de Tom King (el enlace a la reseña que os he puesto).

Yo Soy Suicida, se recogió como una miniserie o arco al completo pero comprendería, en realidad, los números del #9 al #13 de la nueva colección. Donde el cortejo está entrelazado con la cruzada suicida de El Cruzado de la Capa por atrapar a uno de los más importantes secuaces de Bane mientras se infiltra en las entrañas de la prisión de Santa Prisca, aunque para eso necesita de la ayuda y virtudes de su chica, a veces fiable, a veces no, la denominada Catwoman. Y todo, esta vez, en una chula edición que presenta ECC en escala de grises por expreso deseo del autor.

Como os decía, Yo Soy Suicida proviene de la historia de amor entre Batman y Catwoman. Sus momentos más potentes son cuando King muestra las cartas de amor entre los dos; son sentidas, poéticas y apasionantes. Pero en Yo Soy Suicida realmente nos adentramos en el corazón de nuestros queridos enmascarados. Es aquí donde triunfa la escritura de King y lleva al lector a un anhelo emocional entre los dos amantes desafortunados. Hace que sea fácil empatizar con la situación suicida en la que se encuentran. Un luchador contra el crimen y una criminal juntos. Un buen drama. Yuxtaponed esto con las escenas de lucha increíbles y violentas y disfrutaréis de este mini-arco súper chulo donde incluso los dibujos de Janín aportan bastante. Hace un excelente trabajo al dar vida a Batman abriéndose camino a través de ola tras ola de balas cayendo al suelo provenientes de la ametralladora de Bane y sus lacayos… Eso sin contar que las viñetas donde se escalan muros o incluso rascacielos, son alucinantes.

Y si tuviera que poner alguna pega sería el diálogo. A veces, la naturaleza repetitiva del diálogo de Batman y Catwoman se hace algo tediosa. Y Bane no parece tener esas potentes frases que tiene en otros cómics. Y eso le quita poderío. Pero si estás interesado en una buena historia de Batman, una atractiva, que entretiene y de las que provocan que no quieras dejar de leer, Yo Soy Suicida es muy buena opción. Una historia que combina un romance sincero con páginas de acción impactantes. Tom King y Mikel Janín llevando al límite amores de pareja y enfrentamientos con Bane. Un tomo que además incluye una extensa entrevista con Janín, material extra inédito, cedido y revisado por el propio creador español. Hay que probar.