Reseña: Batman/Spawn. Guerra Diabólica, de VVAA

Otro cómic de esta colección con brilli-brilli es Batman/Spawn: Guerra Diabólica. Otra chulada de cómic al estilo one-shot, un disparo a tu ansia lectora de buenos cómics que en este caso se marcaron Doug Moench, Alan Grant y Chuck Dixon contando con el dibujo del legendario Klaus Janson. Gente, maestros, dándolo todo para un superhéroe con el que todo el mundo quiere mojar. Y os seré sincero, me enfrenté a él por primera vez sabiendo que era un cómic que nunca tuvo buenas críticas, en general. Pero por eso digo siempre que uno/a por si mismo/a debe pasar por el aro para poder opinar. Y aquí está el tío para ello.

Aún siendo consciente de que no es una de las mejores tramas de la historia, ni estaría entre los diez one-shots más recomendables, lo he disfrutado. Tened en cuenta que el orejas picudas cuenta en su haber con cientos de miles de tramas. Y bueno, ya sabéis como funcionan las estadísticas. Pero Guerra Diabólica me parece reseñable y por eso está aquí. Porque aunque vi mucha gente destrozando este crossover, honestamente, hubo aspectos que disfruté. La historia nos sitúa en Gotham City, al igual que el título anterior, pero esta vez, toda la acción transcurrirá aquí, y ni siquiera se menciona Nueva York. Resulta que hace unos cuatrocientos años nació Virginia Dare, siendo la primera mujer británica en nacer en América, en la isla que luego se convertiría en Gotham. Con el paso de los años, llegamos a su descendiente Virgil Dare, el mismo ser que será la clave para desatar el infierno gracias a un antiguo objetivo resucitado de Al Simmons. Este mismo fue un agente de la CIA asesinado en horribles circunstancias que ha regresado a la vida convertido en un ser demoníaco que va recuperando fragmentos de su memoria. Pero existe un tipo llamado Simon Vesper, el propietario de un edificio situado exactamente en el mismo lugar que ocurrió todo hace cuatrocientos años, donde la palabra Croatoan apareció pintada con sangre en un árbol tras la desaparición de todos los aldeanos del pueblo de Roanoke. ¿Os suena? Miles de veces se ha contado. Pero no así. Aquí parece que Vesper es la clave para entender lo que sucedió entonces y también, lo que está por suceder en Gotham. El horror que se viene hasta que Batman y Spawn intervienen.

Lo primero que me llamó la atención fue la cantidad de retcon que tiene, en comparación con el one-shot de Miller/McFarlane (https://www.cronicasliterarias.es/?p=12864); ese otro encuentro de Batman y Spawn que los reúne por «primera vez». Aunque aquí no se hinchan a ostias a cada momento. Y como aquí los personajes no chocan cada momento, la trama y el contexto se maneja mejor y los personajes están mejor representados, narrativamente hablando. Por ejemplo, Batman no es solo una máquina de puñetazos con una actitud temeraria y espantosa, aquí aparece como Bruce Wayne primero, e incluso el tratamiento de sus diálogos está mejorado. Spawn es un poco más una rebaja, ya que se siente más como un «invitado» que otra cosa. Sus diálogos y acciones no son tan cautivadores como en su serie principal y quizás esto no gustó nada a sus seguidores.

Batman/Spawn: Guerra Diabólica es una lectura perfectamente disfrutable, ligera, va a tiro hecho. Diría que el problema principal es que la historia tiene tres acreditados de escritura, no uno, lo que queda un poco fuera de lugar, si recordamos que solo un escritor trabajó en el primer crossover, y solo tenía cuarenta y ocho páginas. Nunca fui de historias escritas a dos manos y mucho menos a tres. Porque SE NOTA. Mas, esta edición es bonita, eso no se lo quita nadie, y junto a los otros dos tomitos de brilli-brilli, queda de maravilla en la cómicteca. Lo que demuestra que no todo el monte es orégano.