Reseña: Las Caprichosas Maldiciones de Sôichi, de Junji Ito

Sôichi es ese niño repelente y terrorífico con el que nadie quiere toparse en una noche de tormenta… Qué digo en una noche lúgubre, ese ser al que una vez conoces, no vuelves a querer ver en tu vida. Sôichi es ese joven de aspecto tenebroso causante de accidentes, de males, tan oscuro todo lo que le rodea, que no sabes si es sólo una personita con afán de elaborar maldades o realmente es un demonio en la Tierra. ¿Por qué? Por que Sôichi no tiene amigos, es demasiado ególatra y antisocial y prácticamente lo aborrece todo y a todos. Incluso su propia familia le cae mal. Por esa razón lanza maldiciones a toda persona que se le cruza, eso sin contar que es un niño que “saborea” clavos y entierra muñecos en el bosque y pone trampas vudú para matar a culpables e inocentes por igual. Y si no está claro que ha sido él, todos los dedos le señalan. ¿Te hará dudar de su inocencia? Cuando le conozcas, para nada.

Junji Ito es ese maestro creador de historias de Terror que uno no se cansa de alabar. O mejor dicho, desde que lees su primera historia, le amarás por siempre a poco que te guste este género. Qué decir a estas alturas en las que uno ya ha leído decenas y decenas de sus historias y nunca me canso de disfrutar. Y todo gracias a ECC Ediciones y la gran recopilación de sus obras que está haciendo. Títulos y grandes antologías de relatos de Terror del maestro nipón que casi cada mes ven la luz entre las novedades. Y es que a mitades de 2022 que estamos, las obras de Junji Ito tienen un gran peso dentro del género de Terror. Veréis films, mangas, cómics, animes e incluso videojuegos en los que se le hace referencia a su trabajo. Solo os comentaré una noticia para que veáis hasta que punto Ito ya es un grande del género; hace unos años, cuando hubo la polémica de que el nuevo videojuego Silent Hills sería cancelado, el mismísimo Guillermo del Toro publicó en su twitter que Junji Ito iba a ser uno de los involucrados en el arte del nuevo proyecto. Esto generó tal expectación que todo dio un vuelco de la noche a la mañana y tema comenzó a tener tal popularidad que el juego salió adelante sin ningún problema.

Respecto a la obra: ¡Cualquier precaución es poca si Sôichi está cerca! Totalmente de acuerdo con este anuncio que aparece en el tomo recopilatorio de historias que publica ECC Ediciones en una magnífica edición llevadera denominada Flexibook. Desde la playita estos días, os puedo confesar que he devorado unas cuantas tramas en las que el niño este hace de las suyas… No estoy muy seguro de ello porque no he encontrado datos pero que este chulo volumen llamado Las caprichosas maldiciones de Sôichi corresponde o contiene casi en su totalidad lo que se pudo ver en el anime Junji Ito Collection; todo apunta a que sí. De igual modo, estamos ante un medio donde el ilustrador y guionista evoca algunas de las imágenes de terror más espeluznantes de los últimos 30 años en diversas historias de manga, que incluyen a sus obras cumbre como son Uzumaki y Tomie. O Gyo, que para mí es un guión que recuerda a las mejores obras de Stephen King.

Las caprichosas maldiciones de Sôichi es un volumen de relatos de Terror centrados en un mismo personaje. En un mismo Mal. ¿Y qué hay más apetecible que eso en esta época del año? ¿Qué hay más apetecible que eso SIEMPRE? ¿Manga de Terror de Junji Ito? ¿Sándwich mixto calentito? Un volumen como Las caprichosas maldiciones de Sôichi es como ir al cine a ver lo que uno quiere, con la persona que quieres y dónde tiempo y astros se han alineado para que todo funcione a las mil maravillas. El Mal haciendo de las suyas y yo sonriendo, pasándomelo bien, disfrutando de cada una de las escenas. Apariciones que marcan. El manga de Terror es casi siempre espeluznante. Pero Ito consigue lo que otros no. Increpar. Y parece que lo hace fácilmente. Además de que sus mangas apenas recuerdan a este formato; son como cuentos, relatos, rumores de algo sobrenatural que alguien te pudiera contar en el trabajo o en el parque una tarde en la que sol no existe o se marcha… Historias que se quedan en tu mente, en tu subconsciente por días y con un arte que son, en definitiva, fotos, imágenes casi reales de lo paranormal. ¿Un niño que usa vudú para atormentar a los compañeros de clase que no le gustan? Es incluso atractivo.