Reseña: Carlota Emperatriz. Integral 1, de Fabien Nury y Bonhomme

No me canso de elogiar a este autor, que ha escrito numerosos relatos históricos, algunos desde el ángulo de la fantasía y otros en un tono mucho más serio. Carlota Emperatriz  lleva un tono serio pero tenemos… ¡Otro Nury, otro éxito brillante! Y es que este autor se esfuerza y se documenta de forma genial para sus cómics, y recorre y nos hace recorrer el trágico destino de la emperatriz Carlota de Bélgica, esposa del archiduque Maximiliano de Habsburgo, presentada aquí un poco como la oveja negra de la famosa dinastía austriaca.

En este buen volumen de cómic europeo que recién publica Norma Editorial, los personajes que vais a encontrar están elaborados, son entrañables o repulsivos, pero ninguno deja indiferente. A través de los ojos de la princesa Carlota, nos invade la simpatía, luego la lástima, el horror o el disgusto cuando nos enfrentamos a la personalidad fantasiosa de Maximiliano de Habsburgo. Una especie de monstruo compuesto y creado por un poder visiblemente esclerótico, que es a la vez víctima de un sistema del que le gustaría escapar. Un tema que aparece a lo largo toda la historia, donde se aprecia que Nury no antepuso ninguna visión política anacrónica a su reconstrucción histórica. Carlota fue víctima de los abusos del poder corrupto pero aquí se comenta de forma sutil. Y, por supuesto, sentimos mucha más lástima por la emperatriz de lo que la odiamos. Pero la personalidad de la princesa también resulta muy compleja, no dudando en mostrar crueldad hacia su marido dejándolo chocar contra una pared que ella ve desde hace mucho tiempo.

El guionista Fabien Nury (Érase una vez en Francia, Katanga) y el dibujante Matthieu Bonhomme (Esteban) recrean la biografía de la emperatriz Carlota en una apasionante historia que se presentará reunida en dos volúmenes integrales. Hoy os reseño el primero con el que he disfrutado de una de las mejores lectura históricas de los últimos tiempos. Y parece que sólo he venido a hablar de Fabien Nury, pero hay que reseñar que gran parte de su éxito en este caso se debe evidentemente al dibujo del señor Matthieu Bonhomme. Capaz de aportar dibujos a un título que roza lo sublime. Un cómic que ilustra la ligereza de las primeras emociones del amor, las primeras vacilaciones de la vida matrimonial, el cálido sol de Italia o el sol abrasador de México, además del horror de la guerra… Bonhomme es perfecto en todo. Y seré sincero. Creo que si no hubiera habido un dibujo de esta calidad, me hubiera interesado menos esta historia, porque de algún modo llegó a mis oídos en su día el desenlace, que saldrá más adelante. Para el que no lo conozca, lo que yo haría es esperar, coger ambos integrales cuando se publiquen y disfrutarlo de como uno solo. Así el impacto será mayor.

Reseña: El Oro del Tiempo, de Rodolphe y Oriol

Nos trasladamos a la mansión privada de Hugo Reuhman, reconocido historiador y egiptólogo. Durante esta velada que reúne a gente guapa, pija y bien acaudalada, su amigo Théo Lemoine presencia un robo en el que se roban copias de cartas de un tal Drovetti. El ex-soldado de los Bonaparte que se convirtió en embajador de Francia en El Cairo y que revendió parte de su colección (proveniente del saqueo) al Louvre en 1850. Sin embargo, según la lista de objetos, el sarcófago que contiene los restos del sumo sacerdote Moloch no aparecen, y tampoco su poseedor. Y se rumorea que quizás se descubrió por fin el secreto de la inmortalidad. Pero, ¿cuál es el vínculo entre estos dos casos?

El guionista Rodolphe junto a Oriol crean un relato magnífico que tiene de todo; persecuciones, misterios, pasadizos secretos, personajes fascinantes y criaturas fantásticas. El oro del tiempo puede ser ahora mismo una de las novedades de cómic europeo más satisfactorias que el fan puede adquirir. Menuda sorpresa. Un dúo de amigos que se embarcará en peligrosas investigaciones y rápidamente comprenderá que hay otras personas persiguiendo el tan famoso objeto (artefacto). Y donde Oriol regresa con un maravilloso folletín a modo de aventura pulpera ambientado en la París de la Belle Époque.

Rodolphe sitúa su nueva historia en la capital francesa porque corresponde, según él, a “la edad de oro del ocultismo y del esoterismo”. Es también un escenario propicio a “costumbres ancestrales, enigmas y seducciones” (en los campos de la moda, la arquitectura, la decoración, etc.). Enriquecida con toda una sección de literatura popular gracias a una multitud de referencias literarias y cinematográficas (Belphégor, Rouletabille, Tintin, Adèle Blanc Sec, etc.), la trama resulta rica, intrigante y realmente agradable de leer. Desde los barrios de Montmartre hasta el resplandeciente Moulin Rouge -sí, el famoso cabaret al que acudían los ricos para divertirse-, desde los círculos espiritistas de moda hasta las lúgubres galerías del museo por la noche, personajes históricos y de ficción se codean en este thriller que coquetea tanto con lo místico.

Oriol (La piel del oso, Naturalezas muertas) restaura notablemente el París de los locos años 20. Dibuja pocas líneas, apoyándose en gran medida en su color particular en tonos nítidos y poderosos para dar formas y contornos. El reconocimiento de los personajes resulta un poco confuso al principio, hay que admitirlo, porque las expresiones faciales a menudo carecen de rasgos, pero esta persecución parisina que el diseñador supo plasmar en imágenes y en atmósferas a la vez elegantes no carecen de un encanto innegable: la atmósfera está cargada de misterio.

Ante la deliciosa narración que propone El oro del tiempo, su ritmo vivo y los gráficos explosivos que ofrece, en este generoso volumen que recién publica Norma Editorial, el lector no puede más que impacientarse por leer página tras página. Por lo que sólo diré algo más. Terminan saliendo autómatas y sonámbulos…

Reseña: El Misterio del Paso Diátlov, de Cédric Mayen y Jandro González

Tal como leí por ahí en su día El misterio del paso Diátlov es un «Expediente X» con nueve cadáveres perdidos para siempre en el corazón de los Urales. Aunque como todos, más misterioso cuanto más indagas. Además de una apasionante aventura y lectura si lo entiendes como tal. Hoy os traigo un cómic donde se reconstruye este suceso que aún a día de hoy da para debate, uno de lo fenómenos inexplicados más impactantes del pasado siglo XX. Pues la noche del 1 de febrero de 1959, los nueve miembros de una expedición de alpinismo desaparecieron en extrañas circunstancias en el paso Diátlov, en el corazón de los montes Urales. Los hallaron un mes después, todos muertos y en diversos estadios de descomposición. La investigación, seriamente obstaculizada por la KGB, jamás arrojó resultados concluyentes y el misterio aún continúa. Pero, ¿qué ocurrió aquella noche? Un álbum del que me preguntaba qué ángulo de enfoque iba a utilizar el guionista para evocar el que sigue siendo uno de los mayores enigmas actuales, sujeto a las hipótesis más diversas y curiosas).

Cédric Mayen optó por un enfoque realista. La historia se divide así en dos épocas con un incesante ida y vuelta de una a otra. El primer período evoca la propia expedición hasta el momento fatídico. El segundo período evoca la investigación realizada sobre el terreno por el fiscal a cargo del caso. La transcripción rigurosa es frustrante ya que no se pudo sacar ninguna conclusión indiscutible, como ocurrió en realidad para muchos investigadores que se pusieron con el caso de forma particular. No obstante, en el cómic está bien representado, las tensiones y dificultades que encontraron los montañeros, entendemos la dificultad del fiscal para encontrar lógica en las múltiples pistas recogidas…, y al final no sabemos nada más de lo que ya sabíamos (es decir, aproximadamente , que no podemos excluir ni una sola de las múltiples hipótesis que se han ido desarrollando a lo largo de los años, ni siquiera las más fantásticas: yetis con hambre, extraterrestres, portales temporales, etc.).

Esperaba más de esta lectura aunque el cómic es muy disfrutable. Este es un caso que investigué, estudié y para el que me documenté bastante en su día. Fue uno de los que más me atrajo en mi juventud y esperaba una teoría nueva aunque fuera una súper inventada de la muerte. Pero no. No hay más de lo que uno puede ver en un dossier de Iker Jiménez. Y no sé si eso es bueno o malo para el que quiere entretenerse “pensando”. Pero soy consciente de que se trata de un tema delicado en el que se puede caer rápidamente en el sensacionalismo (que aquí los autores evitan). Y en este caso parece que El misterio del paso Diátlov es más un álbum dedicado a contar ese suceso a alguien que no tenía ni idea de este acontecimiento, que otra cosa. Eso si, el dibujo de Jandro González (La vampira de Barcelona, La sombra roja) es agradable a primera vista y le va totalmente a cada una de las partes narradas.

Cédric Mayen y Jandro González reconstruyen los sucesos de este auténtico «Expediente X» soviético a partir de la instrucción que llevó a cabo el fiscal Lev Nikititch Ivanov. A poco que te interese el tema, este es tu cómic.

Reseña: La Esperanza Pese a Todo. Tercera Parte, de Émile Bravo

Una buena serie de la BD que espero con ganas, que está compuesta de cuatro álbumes y acaba de salir el muy esperado tercer álbum es La esperanza pese a todo, de Émile Bravo. Desde 2020 no teníamos en nuestro país noticias de su continuación. ¡En 2020 se publicó la segunda parte! Cuidado. No es bueno jugar con el corazoncito de los lectores así. Pero bueno, lo que cuenta es que ha llegado y la intención de Dibbuks es volver a ponernos contentos porque (ya lo dije en su día) esta aventura de Spirou es más que indispensable.

Después de Diario de un ingenuo y la primera parte y segunda de La esperanza pese a todo, Dibbuks continúa trayéndonos esta genial recuperación de las tramas de Spirou. La variedad. La confianza de ceder un enorme y clásico personaje a nuevos autores para nuevas aventuras; ahí reside el éxito muchas veces. La colección Una Aventura de Spirou por… (Le Spirou de…) lanzada en 2006 al otro lado de los Pirineos por Ediciones Dupuis, que validó la opción de poder tener en nuestras manos, nuevas aventuras del botones más intrépido que el mundo del cómic ha conocido. Fue en 2008 cuando Émile Bravo presentó sus intenciones con el personaje en Diario de un ingenuo, un álbum muy reconocido entre lectores clásicos del personaje, que ganó además bastantes premios y eso provocó que de un one-shot, pasara a programarse una miniserie de cuatro álbumes como es la que os reseño hoy. La esperanza pese a todo trata una trama intrigante que engancha. Es un cómic, un formato, representante distinguido de la línea clara donde Émile Bravo domina perfectamente el arte propuesto anteriormente por Hergé con su Tintín, Tillieux con su Gil Jourdan o Edgard P. Jacobs en su Black & Mortimer.

La esperanza pese a todo nos lleva a la Bélgica de 1940, cuando este pequeño país está a punto de ser invadido por el ejército alemán y nuestro valiente Spirou actúa como botones en el Hotel Moustic, mientras Fantasio dedica cuerpo y alma al ejército belga… En el segundo volumen entrábamos de lleno en la guerra, en la privación, la humillación, donde a pesar de sus condiciones de héroes, Spirou y Fantasio no escapaban a las consecuencias de la ocupación alemana y desempleados, deben encontrar trabajo para no dar de bruces en la calle. Así que echándole imaginación, montan un pequeño espectáculo de marionetas para distraer a los niños. Y afortunadamente, un «patrón», les da la oportunidad de ofrecer sus servicios en las escuelas públicas de toda Bélgica. Salir de Bruselas, airearse, volver a contactar a amigos que durante algún tiempo se perdieron durante el Ocupamiento; son quizás virtudes de la vida que uno no recordaba. Y con ello, todo cambia. En esta tercera parte, mientras Fantasio hace todo lo posible por encontrarle sentido a su vida, a este destino aciago que en la vieja Europa se puede vivir (y conquistar a la mujer de su vida), Spirou intenta hacer lo correcto a riesgo de verse llevado a actos heroicos que le pueden llevar a una muerte directa.

Un tomo, un volumen, una serie que ningún amante del buen cómic europeo se debería perder. Donde Émile Bravo continúa su gran trabajo y consigue intrigarnos e interesarnos cada vez más con lo que está por venir. El cuarto álbum huele a final inolvidable. Y es que cuando alguien me pregunta, concretamente, de qué va esta serie, suelo contestar que es un magnífico cómic que cuenta la historia de la Segunda Guerra Mundial desde el punto de vista de un hombre o, más bien, de un niño con muchas miras. Donde Spirou se desespera por encontrar a Kassandra y donde el autor muestra muy bien la situación de los judíos, mientras que la represión nazi aumenta cada día. Destacando a su paso las ambigüedades del clero y presentándonos la supuesta Resistencia. Y cierto es que las aventuras que vamos leyendo no son tan impresionantes como de costumbre. Algunos pueden criticar la falta de cuerpo del legendario personaje y su compañero. Sin embargo, aquí todo adopta un tono más oscuro, necesario y se vuelve un cómic más serio, más adulto pero lleno de humanidad y realismo. Con una cuestión al final por parte del autor, que pone los pelos de punta:

¿Qué habríamos hecho nosotros en lugar de los protagonistas?

Reseña: Blake y Mortimer. Integral 1, de Dufaux, Edgar P. Jacobs y VVAA

Las Aventuras de Blake y Mortimer fue una serie de cómics creada por el guionista e ilustrador belga Edgar P. Jacobs. Una de las primeras series en aparecer en la famosa revista franco-belga Tintín en 1946. Debido a su éxito, posteriormente, fue publicada en forma de álbum-serial por Les Éditions du Lombard. Desde la muerte de Jacobs, un buen grupo de autores han continuado el trabajo intentando aportar sus dones sobre el cómic. Lo que ha deparado en una buena cantidad de aventuras para el disfrute del aficionado. Incluso en 1997 se produjo una serie de televisión basada en la serie, titulada Blake and Mortimer, que yo no he visto…, aunque así es como me gusta llamarla.

Los principales protagonistas son Philip Mortimer, un destacado científico británico y su amigo el capitán Francis Blake que trabaja para el famoso MI5 (el Servicio de Inteligencia de Reino Unido). ¿El villano principal? El maléfico coronel Olrik, que aparece en el noventa y seis por ciento de las historias. Pero lo que mola muy mucho es que sus encuentros y desencuentros nos llevan a vivir tramas de todos los tipos: la Guerra Mundial, el antiguo Egipto, el país nipón y su extraña alta tecnología, los espías rusos, guerras bacteriológicas, la descolonización de la India, etc, etc. Desde los casos más rebuscados y detectivescos hasta la propia y más clásica Ciencia Ficción. La que nos enganchaba desde que tenemos uso de razón, la pulpera, los viajes en el tiempo, viajes a la Atlántida… En lo que a mí respecta, este es uno de los cómics de culto que recomendaría a tan solo unos pocos. En especial, a esos engendros que conozco que ya tienen una edad y que llevan mamando CF clásica desde que aprendieron a leer. ¿Qué es un poco tarde para recomendar Blake & Mortimer? Mirad, sin ir más lejos (y supongo que por la semana en la que estamos), ayer mismo me recomendaron ver El Evangelio según San Mateo, un film de Pier Paolo Pasolini, que todo el mundo alaba por lo diferente. Una película en blanco y negro de 1964, friends. Si uno busca originalidad, no está la cosa para poner pegas.

El Grito del Moloch Tras una serie de álbumes, Norma Editorial ha tenido a bien publicar por fin esta colección en unos maravillosos integrales de los que no me pienso perder ninguno. Y hay tiempo porque este es el primero, pero un volumen que seguramente volará en librerías.  Con tramas tan buenas como La Onda Septimus, la amenaza de un dispositivo extraterrestre, bautizado Orpheus, se había frustrado gracias al sacrificio de Olrik. Desde entonces, el «coronel» vive recluido en un centro de salud mental. Pero Philip Mortimer intenta hacer entrar en razón a su viejo adversario utilizando la famosa fórmula del jeque Abdel Razek (“¡Horus permanece!”), pues hay noticias de que hay otra Orpheus. A bordo de un carguero transformado en laboratorio secreto, Mortimer descubre a un extraño piloto de una máquina que no es de este planeta. Un extraterrestre de forma humana, oscuro e hierático, al que los científicos han dado el nombre de «Moloch», como la divinidad bíblica, cuyas reacciones de este ser y los jeroglíficos que deja tras de sí son mensajes un tanto indescifrables. Y hacen temer lo peor para nuestro planeta.

Dos personajes con un carácter bien forjado y con un trasfondo desarrollado desde el principio. Misterio omnipresente, uno de los villanos con más clase y uno de los más interesantes vistos en formato cómic. Sumadle una buena atmósfera y temas que se renuevan de álbum en álbum. Es literalmente imposible no dejarse llevar por una u otra aventura de Blake & Mortimer (yo es que los llamo así), tanto por el ambiente cautivador como por el escenario. Tened en cuenta que el autor que entra a trabajar en esta serie es consciente de tener miles de ojos sobre sus hombros, por lo que intentará darlo todo-todito-todo para que no se hable de su aportación.

Dicen que Tintín, que Spirou, que muchos otros…, pero para mí no hay ninguna serie que recuerde más a una buena aventura de Indiana Jones que Blake & Mortimer. O al revés. No me extrañaría nada que George Lucas leyera esta serie de pequeño pues me consta que se vendía muy bien en USA en los años que tocó cima.

No me iré sin decir que Jean Dufaux, junto a Christian Cailleaux y Étienne Schréder, transmiten muy bien la línea evocadora y precisa que proponía el maestro Edgar P. Jacobs.

Reseña: Soy su Silencio, de Jordi Lafebre

Me gustó de este álbum que Jordi LaFebre tuvo la inteligencia de cambiar completamente de registro tras su exitoso Los buenos veranos (https://www.cronicasliterarias.es/?p=13783). Aquí no hay una historia familiar humorística sino un thriller, pero el autor mantiene una marca registrada: ¡Sus personajes! Siguen siendo igual de entrañables y siguen ocultando sus defectos, sus dudas, su fragilidad detrás de una fachada informal. Me encanta este tipo de personajes y creo que Jordi Lafebre los domina a la perfección. Es decir, uno de los más potentes puntos del mundo del cómic como son los personajes, los maneja de maravilla. Pero además, este thriller, que lo es sin serlo, está muy bien hecho. Es ciertamente muy clásico con este personaje central que nos contará su historia (aquí a través de sesiones con un psicólogo) y esta herencia en torno a la cual se desgarra una familia. Una historia apasionante porque con cada página, con cada viñeta, sientes que quieres saber todo dato, hasta la última palabra de lo ocurrido en el caso que se nos presenta.

Como sabéis Jordi Lafebre, autor relevante del catálogo del cómic europeo y nacional, comenzó trabajando, nada más y nada menos, que con Zidrou y luego saltó a la autoría completa con Carta blanca (https://www.cronicasliterarias.es/?p=4955), comicazo con el que adquirió un enorme éxito tanto de crítica como de público. Se puede decir que Soy su silencio es su segundo proyecto en solitario y se ha editado en castellano y catalán en nuestro país de la mano de Norma Editorial. Pero digo más. Este pasado Angouleme 2024, esta obra que hoy os reseño, ganó el prestigioso premio que dan las librerías francesas.

¿Y qué tenemos? Pues un escenario clásico, una historia de herencia en una familia rica con un asesinato que nos sumerge en un thriller lleno de sorpresas y suspense. Aunque la originalidad de este cómic es su heroína. Ejerce la profesión de psiquiatra y sigue o se somete a una sesión con uno de sus colegas para determinar si puede continuar su carrera. Esta sesión nos presenta a una heroína divertida, alegre, despreocupada pero belicosa y valiente que asume naturalmente el papel de detective. Bajo su hechizo, esta investigación brinda un agradable momento de lectura. Como os decía, Lafebre sabe cómo dar vida a sus personajes con sus pequeños defectos a menudo divertidos. Un verdadero thriller, con asesinatos e investigaciones, con Barcelona como terreno de juego. Una joven hablando con su terapeuta, la historia alterna secuencias en la oficina y otras que se desarrollan en el lugar de la acción. Esta narración inteligente nos permite aprender mucho sobre nuestra heroína mientras avanzamos en la trama. Y hay mucho que decir sobre su personalidad. Porque es bipolar y escucha voces…

Para el dibujo, me encantó el símbolo sobre las cabezas de los personajes para comprender instantáneamente sus sentimientos. Y es que en Soy su silencio, una vez más, Jordi Lafebre demuestra su talento para el noveno arte. Se reconoce su estilo dinámico y, como siempre, sus personajes expresivos son un acierto. Este señor seduce con sus propuestas en un ámbito en el que realmente no esperas, logrando conservar sus principales cualidades (dibujo cuidado y personajes entrañables). Ah, y la conclusión es implacable y muy humana.

Creo que esta obra merece algún premio más.

Reseña: La Debacle, de Pascal Rabaté

La debacle es de esos cómics evocadores que dejan la sensación de haber leído una gran historia que uno no olvidará jamás. De hecho, me fustigo porque en su día de esta historia solo había leído el primer álbum y no recuerdo por qué, jamás leí su conclusión. Así que aprovechando que se rescataba en formato íntegro, este cuya mente empieza a cortocircuitear, no iba a perder la oportunidad de leerlo y reseñarlo para Desde New York CL.

Un cómic donde el genial historietista Pascal Rabaté (Un gusano en la fruta, La virgen de plástico), decenas de años después del famoso Éxodo francés, revive aquella falsa guerrilla y chulescas intenciones sin sentido de los galos, en formato cómic. Lo que ocurrió entonces es bien conocido al otro lado de los Pirineos pero para el que no tenga conocimiento: frente a la Blitzkrieg de la Wehrmacht, las fuerzas francesas muy mal equipadas y preparadas, fueron barridas en menos que canta un gallo. Y miles de franceses tuvieron que huir ante lo que se les venía encima. Un intento de frenada que fue un sinsentido y que terminó en desbandada. Y aquí justamente es donde entra en escena un soldado cualquiera atrapado en el torbellino de aquella debacle.

Y caminando entre Robert Lamoureux y Jean Aurel, a Pascal Rabaté le queda un retrato medio divertido y medio consternado de una nación en completo desorden. Porque como buen recluta, Videgrain intenta cumplir con su deber lo mejor posible…, mientras todo a su alrededor parece desmoronarse. A lo largo de sus andanzas se topa con soldados tan perdidos -geográfica y moralmente- como él. Fugitivos sobrecargados y bastante desolación. Pero el espíritu de la derrota divertidamente ilustrado. Rozando el absurdo en ocasiones al más puro estilo Samuel Beckett; los encuentros y diálogos que vais a encontrar en La debacle son geniales y siempre muy realistas. Se percibe a leguas que Rabaté se documentó bien y afortunadamente no cae en el didactismo. Rabaté no rehace la Historia, sino que cuenta y muestra a unos cuantos individuos perdidos en el caos, los cuales se arremangan para hacer lo que creen correcto.

Gráficamente, el diseñador optó por un estilo sencillo y muy ligero. Sin excesos ni furia en la puesta en escena ni en el montaje, todos los acontecimientos -incluidos los cadáveres que cubren ciertas viñetas- están representados de una manera única y muy humana, a través de los ojos del héroe. Esta visión frontal y distante resulta particularmente eficaz por su franqueza. De hecho, evita dar vueltas, el guionista-ilustrador logra resaltar las emociones de sus personajes, al tiempo que pone al lector frente a las suyas propias. Un buen ejemplo, las frases:

Y nosotros, ¿qué hubiéramos hecho entonces?

La debacle dolerá donde más duele al lector orgulloso francés. O no. Se reirá porque a estas alturas poco se puede hacer. Para el público más objetivo o general, queda una volumen maravilloso de lectura ágil, divertido (dentro del trasfondo bélico) y divierte cuando es necesario muy en el tono de La vida es bella, de Roberto Benigni. La debacle es otra de las joyitas de buen cómic europeo que Norma Editorial acaba de poner en su catálogo.

Reseña: La Bibliomula de Córdoba, de Lupano y Chemineau

Ha sido un verdadero placer leer este cómic, La bibliomula de Córdoba, recientemente publicado por Norma Editorial en una preciosa edición: ¡Es espléndido desde múltiples puntos de vista! Contiene un escenario muy rico, a lo largo del viaje épico de un trío de personajes que nada predispone a priori a la aventura: Tarid, el bibliotecario eunuco elegante y corpulento, Lubna, la copista esclava que trabaja con Tarid, y Marwan, el antiguo alumno de Tarid que se convirtió en un tío de la calle… Tenemos a un trío e incluso a un cuarteto porque a ellos se les une la memorable mula del título, que juega un papel esencial (e inesperado) en la historia y que contribuye a la trama con una fuerza cómica como pocas veces se ha visto en un animal de compañía.

Un cuarteto que se forma un poco por casualidad, tras un terrible acontecimiento inaugural que los dejará desamparados: el incendio de la biblioteca por parte de un malintencionado visir, menos fanático religioso que político, deseoso de atraer el apoyo de los religiosos. Obviamente, todo elaborado por culpa de su ambición política… Leer esta historia es vivir una aventura rica y apasionante.

Se percibe a leguas que los autores han realizado un trabajo de investigación y documentación de gran precisión, plasmando en imágenes bellísimas ilustraciones de lugares y paisajes que nos transportan literalmente a nuestro país en la época en la que Al-Andalus era el principal reino árabe en Europa. La misma época del apogeo político del emirato de Córdoba, principal capital del mundo (se dice que entonces era la ciudad más poblada del continente). El interesantísimo epílogo muestra hasta qué punto el libro es fiel a lo que sabemos de esta época en la que convivían (más o menos pacíficamente según el momento) reinos musulmanes y cristianos en nuestro país. Y en mi Al-Andalus: musulmanes, cristianos y judíos. Y en el hilo de la historia descubrimos anécdotas auténticas y sorprendentes, hasta los detalles de las inesperadas aventuras de un rey demasiado gordo para montar a caballo, o de las espadas vikingas falsificadas que circularon en el siglo X y que sólo un ojo avispado en temas históricos podría identificar.

Una aventura rica en giros de tuerca, humor y múltiples emociones también. La historia contiene muchos misterios relacionados con los personajes principales cuya historia pasada vamos descubriendo poco a poco, incluso a través de sueños casi fantásticos cuyo significado luego descubrimos. En la descripción de esta dura época, que no se presenta de forma idealizada, nuestros antihéroes se enfrentan a numerosas dificultades, perseguidos por muchos, donde muchos de ellos eran seres más depredadores para los cuales los libros no significaban nada de nada. Como mucho, su valor comercial.

Y un diseño y dibujo maravilloso. Todos los protagonistas de este portentoso álbum están dibujados con gran talento, ya sean los personajes importantes de la historia, pero también todos los numerosos personajes secundarios que existen los cuales brotan con realismo entre arquitecturas ilustradas súper realistas (si aún no habéis visitado la Mezquita de Córdoba, estáis calentando el sitio). Pero ya lo que me dejó con el culo torcido en La bibliomula de Córdoba es, que más allá de la historia épica, hay otra historia entretejida, que nos habla del amor por los libros, la riqueza del conocimiento que nos permiten compartir y lo que aportan a la humanidad. ¡Es fascinante redescubrir con Tarid antiguas intuiciones hoy a menudo poco conocidas sobre la evolución de las especies o los inicios de la aviación! A lo largo de los libros mencionados en la historieta, la trama rinde homenaje a la riqueza de la literatura de los eruditos de Al-Andalus y recuerda su papel esencial como, por ejemplo, contrabandistas que permitieron salvar los textos de muchos grandes autores de antigüedades que solo buscaban su propio beneficio. Otra historia de la fragilidad y acoso a los libros en nuestra historia pasada.

La bibliomula de Córdoba es un cómic, un álbum, un objeto hermoso que gusta tener en casa, entre las manos, en una urna de exposición. Un éxito total de estos autores. Un cómic de museo disponible en librerías.

Reseña: Cuando el Viento Sopla, de Raymond Briggs

Un cómic que nunca pensaba que iba a leer, que nunca pensaba que iba a llegar a mis manos y que no esperaba ver entre las novedades de este país, es Cuando el viento sopla, de Raymond Briggs. En primer lugar porque no sabía que existía una historia en cómic de esta película que vi tan pequeño y con la que quedé impactado. Yo, y mucha gente como yo. ¡¡No sabía que procedía de un cómic!! Y tras obtener esta edición que Blackie Books acaba de recuperar para todos nosotros, disfruté, entre comillas, de esta historia de Raymond Briggs que demostró que sabía contar con ternura la vida de una pareja inglesa sencilla y sin incidentes, preocupándose más por su pequeña vida doméstica que por el mundo exterior.

Una pareja de personas mayores que se presenta en el cómic en una atmósfera mucho más ambigua. Para empezar, aunque se quieran tanto, estos dos son claramente más ingenuos, incluso dulcemente estúpidos; la mujer es una ama de casa que apenas ve más allá de las paredes de su hogar y la limpieza de sus cortinas. El hombre sólo conoce el mundo exterior leyendo los periódicos, escuchando la radio y charlando en el bar, cuyas informaciones sólo retiene de forma errónea. Y cuando se entera de que pronto puede estallar la Tercera Guerra Mundial…, seguirá las instrucciones de las autoridades para construir su refugio improvisado en el salón de su propia casa, bajo la mirada cautelosa de su esposa que toma esto como un capricho inmaduro de su marido y le sigue preocupando que vaya a ensuciar las cortinas.

La primera parte de la historia juega con este contraste entre la aparente gravedad de la situación y la forma completamente despreocupada e ingenua de prepararse para el tema de la pareja. Confiando ciegamente en los «poderes existentes» y pensando con cierta nostalgia en el sencillo y casi agradable momento de su vida bajo los bombardeos alemanes de la Segunda Guerra Mundial, nos brindan diálogos extravagantes y bastante divertidos dada la situación hasta tal punto.

Y luego llega la segunda parte, tras un hecho clave, y la cosa cambia…, como se espera. Esta parte es menos divertida y ciertos diálogos pueden llegar a dar miedo. Sobre todo, el humor que disipa y va dando paso a algo mucho más oscuro y al final el lector llegará a ese desastrosa sensación agridulce, la puta realidad donde no sabes si reír o llorar.

Tremendo cómic. Conmueve la ternura de esta pareja en una edad a la que todos llegaremos aunque esperemos que no, en la situación de ellos. Pero quién sabe. Un álbum que terminé y no quise hacer la reseña hasta pasados unos días porque no podía parar de pensar en el horror real que había leído. Quería explicarlo concretamente bien y a estas alturas de la reseña aún no sé si lo he hecho.

Reseña: Donald y el Viento del Sur, de Guido Martina y Carpi

En mi intenso disfrute gracias a Panini Cómics y SD de los guiones del maestro italiano Guido Martina, he podido acercarme por primera vez en mi vida a algo que para nada esperaba leer nunca. Donald y el viento del sur ha sido toda una experiencia porque para nada pensaba que me iba a gustar algo así. Y he disfrutado mogollón lo que es la traslación al mundo Disney de la genial novela de Margaret Mitchell como es Lo que el viento se llevó. ¿En serio? ¡Sí! Una historia cómica Disney escrita por Guido Martina y dibujada por el gran Giovan Battista Carpi que fue publicada originalmente en 1982 en el semanario Topolino (del #1396 al #1400). Una de las historias más famosas ilustradas por Carpi y sí, una parodia de la novela y película que interpretara en su día Clark Gable y Vivien Leigh.

Donald es Paper Butler (Rhett Butler) y Daisy Duck O’Hara (Escarlata O’Hara, la señortia escarlaaaaata). La historia del cómic sigue, en parte, la trama de la película homónima de Fleming, salvo algunos cambios realizados por los autores del cómic. Donald ordena a sus sobrinos que busquen en el sótano de la casa un objeto precioso para regalárselo a Daisy por su cumpleaños. Molesto por los ruidos provocados por Qui, Quo y Qua, el propio pato baja al sótano, donde descubre una antigua estatuilla colocada en el estante de un mueble. En un intento por atraparla, Donald derriba los muebles, rompiendo la estatua, pero encuentra un viejo álbum de fotos de la Guerra Civil. Inicialmente, planean vender las fotografías a los periódicos, pero una vez que ojean las páginas, se dan cuenta de que el álbum trata sobre sus propios antepasados…

La que más les llama la atención es la imagen de un tal Paper Butler, descrito por Donald como un personaje intrépido, duro y hábil (aunque los flashbacks de la historia muestren todo lo contrario). Butler intenta convencer a su padre de que fue ascendido con la máxima puntuación y una mención de honor en la academia de West Point, pero una carta de la misma academia expone su mentira: en realidad, el pato fue expulsado por su carácter holgazán. El padre, no queriendo tener un holgazán en la casa, lo echa. Paper Butler decide entonces contactar con su tío Paper McPaper (idéntico al tío Scrooge), para recibir hospitalidad y quizás alguna ayuda económica. El tío, debido a la mala reputación de su sobrino, se niega a ayudarlo, por lo que Butler decide pedir un préstamo a un banco frente a la tienda de su tío, intercambiando su burro a cambio. El dueño del banco, Rock Jaffery (Rockerduck), nada más conocer su nombre, le ofrece tres mil dólares sin pedir, de momento, nada a cambio. Butler regresa a la tienda de su tío, donde se compra un traje nuevo con el dinero que le acaba de dar. En esta ocasión conoce a Duck O’Hara (Daisy), Charles Hamilton (Paperoga) y a la hermana de este último, Melania. Esta última quiere casarse con Gaston Wilkes (Gastone) y le revela a Duck su deseo de anunciar el compromiso durante una fiesta en honor de los voluntarios que partirán hacia el frente…

Un cómic chulo con muchas partes de cómic adulto e incluso histórico. Una visión diferente de la historia que diría que a muchos les entraría mejor. Y es que Donald y el viento del sur, tras su primera publicación en Italia, se publicó en Brasil, Dinamarca, Finlandia, Alemania, Grecia, Países Bajos, Noruega, España y Suecia. En Italia se reeditó también por entregas en las series I Grandi Classici Disney y Super Miti Mondadori y posteriormente en un solo volumen. Acaba de ser reeditado en nuestro país en formato íntegro y llevadero, una muy genial forma de llevarlo consigo para leerlo doquiera que te encuentres. Una edición que cuenta con un nuevo coloreado que embellece más si cabe tan mítica historia. Con estos Disney Limited (en este caso, en versión pocket) estamos llegando fácilmente a la posibilidad de contar en nuestras cómictecas con títulos y recopilatorios que son obras de museo del cómic. A favor de eso siempre.