Reseña: Avatar. El Terreno Elevado, de VVAA

Cómo saben cómo engancharnos, ¿eh? Avatar 2 – El Camino del Agua, la peli que está pegando fuerte, lo más grande a nivel mundial… y ahora resulta que te enteras que hay un cómic cuyo argumento se sitúa cronológicamente entre ambas películas y que además fue un proyecto de guion que estuvo muy posible de llevarse a cabo. Ese cómic es El Terreno Elevado y Panini Cómics ya tiene en cartelera-librerías dos de los tres tomitos que la conforman y que yo me he esperado a tener ambos en posesión para devorar y comentar, al menos, una gran parte de la trama. Durante el proceso de desarrollo de la creación de las cuatro secuelas de Avatar, una de ellas fue la que comprende este cómic. El equipo creativo que dirige James Cameron se juntó para crear muchas ideas e historias nuevas y esta por lo menos podemos dar gracias que nos ha llegado en formato gráfico y que funciona perfectamente como precuela de Avatar 2. Porque Avatar: El Terreno Elevado es esencialmente un aperitivo de idea gráfica que recapitula lo que Jake Sully y su familia han estado haciendo entre los eventos de la primera y segunda película, al mismo tiempo que prepara el escenario para la narrativa que vemos desarrollarse en El Camino del Agua. Es decir, que se puede disfrutar antes o incluso después de ver la peli que aún está en cines. Y aunque extrañamente, la mayor parte de lo que se incluye en el primer tomo se resume más o menos en la nueva película, sin embargo, ya en el tomito 2 (y probablemente en el 3) se promete mucha más información de la historia y se rellenan varios vacíos narrativos que no se cuentan en el nuevo film.

Mi opinión de lo que se que cuenta en El Terreno Elevado es que es un tema exagerado e incluso inverosímil a veces. Pero no imposible para un mundo como Pandora. Se nota muy mucho que es un guion re-elaborado una y otra vez y que tenía muchas opciones de estrellarse en formato cine. Por lo que optaron bien dejando esta historia fuera. Sin embargo, dentro del noveno arte funciona y esto es un tema que pasa con bastantes tramas de diferentes franquicias. Insisto, es increíblemente inverosímil. Pero eso no lo hace malo. En la primera entrega de tres que tiene este arco argumental seguimos a Jake, Neytiri y sus hijos biológicos y adoptivos inmediatamente antes de los eventos de la segunda película. La Gente del Cielo ha regresado, y Jake Sully, como Olo’eyktan de Omatikaya y como Toruk Makto, quiere que tantos clanes Na’vi como sea posible se unan y marchen a la lucha. Al mundo negro. Sí. Na’vi en el espacio. ¿Suena genial? Mmmmmm…, por lo visto hay una razón por la cual esta idea fue recortada y reformada en la secuela que obtuvimos en Avatar: The Way of Water. Realmente extiende la suspensión de la incredulidad de una manera que no encaja con la filosofía de inmersión total de James Cameron, algo que siempre ha estado en el centro de esta franquicia. Incluso antes de que fuera una franquicia. Pero es exactamente por eso que el cómic es es el medio perfecto para explorar ideas como ésta.

Es pura diversión. Además, el arte es magnífico aunque no muy fácil de seguir para niños el tema de los personajes. En ocasiones, se confunden personajes, padres, hijos… aunque esto sea un tema totalmente temático que esté así. Pero tenemos paisajes, flora y fauna magníficamente ilustrados y reconociblemente Pandoranianos. Y los diálogos molan y se sienten naturales y se siente imbuido el carácter que le mete a sus personajes el propio James Cameron. Y es que ha pasado más de una década desde que los humanos se vieron obligados a abandonar Pandora. Y ahora regresan con un ejército de naves fuertemente armadas y después de años de paz, Jake Sully, Neytiri y la familia que crearon, tienen de nuevo el peligro a espuertas. Pero ahora lo que está en juego es aún mayor que cuando fueron a la guerra por primera vez contra el poder corporativo de la Tierra. ¿Las buenas noticias? Que el volumen 2 le da un empujón maravilloso a la trama. ¿La noticia aún mejor? Cantidad de material e ideas nuevas en este segundo volumen, que rellenan espacios en blanco entre los eventos de la primera y la segunda película. Por lo que está claro. Si eres fan de Avatar, indispensable para ti esta miniserie. Y os lo estoy diciendo ya, a expensas de leer, reseñar y disfrutar su resolución en un tercer tomito que aún queda para ser publicado en nuestro país.

Reseña: El Invencible Iron Man, de Matt Fraction y Salvador Larroca

En este Marvel Omnibus tenemos a dos autorazos dándolo tod con El Hombre de Hierro. Matt Fraction y Salvador Larroca en el primer volumen que recopila su aclamada etapa. Diecinueve números (más o menos un tercio) de la aclamada carrera de El Invencible Iron Man, que realmente merece los elogios que ha recibido en redes sociales. Y es cierto que aunque he amado la MCU desde su debut en 2008 con el lanzamiento del primer Iron Man, el personaje de Tony Stark nunca significó mucho para mí. Esto probablemente se deba a sus espectáculos animados a principios de los 90 que fueron secundarios en comparación con los dibujos animados de Spiderman y La Patrulla-X. Como he contado otras veces, tenía un colega de la infancia que sí que le encantaba y hacía todas sus colecciones, por lo que de saber que las podía leer cuando quisiera, probablemente por eso nunca lo hice. Pero teniendo en cuenta cuánto ha crecido la interpretación de Stark con Robert Downey Jr. a lo largo de los once años en la MCU, y viendo que se acabó su papel, uno quiere más y cuando veo que un tomo puede molar, pues me pongo al lio.

Siguiendo lo anteriormente leído, donde comencé con la historia de Extremis, que actualizaba la historia del origen de Iron Man (gran influencia en las películas de Iron Man), El Invencible Iron Man, de Fraction y Larroca, nos coloca a Stark en una posición interesante mientras equilibra su función dual como CEO de Stark Industries y como director de S.H.I.E.L.D. No obstante, las cosas se complican aún más con la llegada de Ezekiel Stane, hijo de Obadiah Stane, quien busca vengar la muerte de su padre destruyendo Industrias Stark mediante el uso de terroristas suicidas con tecnología basada en las armaduras de Iron Man.

Sin tener que volver a contar la historia de origen, esta colección es un buen lugar para ponerte por primera vez con Iron Man, ya que este primer arco (Las Cinco Pesadillas) tiene mucho de lo que mola de las pelis. Desde el carisma agudo e ingenioso de Tony Stark hasta su mecánica de superhéroes, que se inclina hacia el terrorismo y el miedo por el mal uso de la tecnología, especialmente cuando su tecnología se utiliza con fines malvados. Además de ser el hijo de uno de los villanos más conocidos de Iron Man, Ezekiel, con su encanto pícaro, es un diabólico opuesto a la personalidad de Stark y, aunque Stark se ha enfrentado a sus propios demonios (sobre todo en una botella), Ezekiel parece heredar la naturaleza de su padre, sin darse cuenta de los efectos que conducen a su caída.

Por supuesto, el Universo Marvel a menudo está plagado de eventos cruzados que dan forma a futuras historias en los títulos de superhéroes en solitario y, de hecho, puedes obtener más dramatismo de personajes de esas historias individuales que cualquier evento que amenace el mundo donde todos tengan que reunirse. Siguiendo el ejemplo de los eventos de Civil War e Invasión Secreta, Stark carga un virus para destruir todos los registros de la Ley de Registro, evitando así que Norman Osborn, director de H.A.M.M.E.R. (anteriormente S.H.I.E.L.D.) conozca los alter egos de todos los demás compañeros superhéroes. Peor con la única copia que queda en el cerebro de Stark, Osborn lo persigue, mientras Stark viaja por todo el mundo en búsqueda de una solución para poder borrar sus datos mentales… Con lo que eso conlleva.

Decía que después de dos eventos muy poderosos, hay mucho por resolver en estos diecienueve números que Panini Cómics recoge en un poderoso Marvel Omnibus. Principalmente conocido por su trabajo en varios títulos de X-Men, Salvador Larroca demuestra aquí que es uno de los mejores artistas para dibujar las muchas armaduras de Iron Man. Influenciado por Adi Granov (quien dibujó Extremis), Larroca pone cantidad de cositas chulas como detalles en las armaduras y esto me encantó. Mas, en cuanto a los personajes en sí, tienen un aspecto ultrarrealista que se aplica bien a la naturaleza de espionaje de la narración, manteniendo el extraño corte de pelo de Osborn y también afeitado icónico vello facial de Stark.

Tomaco muy recomendable.

Reseña: Alien. Reanimación, de Phillip Kennedy Johnson y Salvador Larroca

En una historia de Alien, debe existir la sensación de que cualquier cosa puede suceder en cualquier momento. Y ese sentimiento, bien hecho, es espantoso. Debería haber miedo a lo desconocido, miedo a las sombras, miedo a las personas con las que compartimos nuestro espacio. Debería existir ese temor a lo que pueda venir pero también al que tenemos al lado muy al estilo de La Cosa, de John Carpenter. El temor a que cualquier cosa podría suceder. Debería existir la sensación de que todos podríamos ser asesinados en cualquier momento por una criatura o por un universo que no se preocupa por nosotros. Mira a través de nosotros y no ve nada. No le importa si vivimos o morimos, triunfamos o fracasamos, somos buenos o malos. Este universo existe a pesar de nosotros, no gracias a nosotros. Y los aliens son la principal evidencia de la naturaleza indiferente de esta existencia. ¿De qué otra manera puedes explicar el xenomorfo diseñado por H.R. Giger, una criatura creada solo para matar?

Tras disfrutar muy mucho de Alien: Linajes (https://www.cronicasliterarias.es/?p=10205) que comprendía los seis primeros números de la serie y un arco argumental completo, fue ver que Panini Cómics continuaba este serión que se están marcando Philip Kennedy Johnson y Salvador Larroca y no dudar en querer tenerlo y devorar el nuevo tomo que con el séptimo número abre una nueva trama. Una nueva historia de la que considero mejor saga de Terror en el Espacio de todos los tiempos. Alien: Reanimación retoma la acción dos años después del último arco con una colonia de terraformación lista para cortar los lazos con Weyland-Yutani (WY) como parte de un acuerdo legal de tierras. Todos los colonizadores son parte de una secta religiosa que cree haber obtenido su tierra prometida en una luna lejana. Pero el último transporte de WY que llega para firmar los documentos finales alberga a un invitado inesperado que puede destruir su nuevo Edén. Uno que todos conocemos como se las gasta…

Un inicio que pese a todo es extraño. La página del prólogo recapitula (algunos de) los eventos del arco anterior como un indicador de que este nuevo arco retoma una colonia de terraformación distante años después. No obstante, según la descripción y los eventos que se desarrollaron, no parece haber ninguna conexión con el arco anterior, aparte de la presencia de WY y xenomorfos. Entonces, si nos preguntamos qué demonios está pasando o pasó con los sobrevivientes de la estación espacial del último arco, tendremos que esperar a los siguientes números (leer un poco más) para encontrar datos y todo lo bueno que aporta este cómic. La historia se centra en un grupo religioso que abandonaron la Tierra bajo un contrato de terraformación WY con el acuerdo de sacar adelante una colonia y con el paso de los años lo firmado se va cumpliendo con condiciones. Las palabras tienen sentido, las piezas individuales tienen sentido, pero la premisa completa de este tema y como se saca adelante me encantó y lo mejor, es peliculero total. O digno de ver en una de esas miniseries de TV que se hacen ahora. Con grandes argumentos para los nostálgicos frikis de pro.

¿Por qué WY gastaría todo el tiempo, la energía y los gastos para patrocinar una colonia de terraformación lejos de la Tierra solo para renunciar a ella sin un ROI masivo? ¿Cómo se forma una orden religiosa firme (con escrituras y un profundo conocimiento de la fe) ciento ochenta años en el futuro sin que los feligreses parezcan cultistas o bichos raros? Las religiones toman su tiempo, perduran en el tiempo. Otro tema bien llevado que me encanta y que me retrotrae a la genial novela de CF que es Hyperion, de Dan Simmons.

El arte de Larroca es consistentemente bueno desde el último arco hasta este.

Recomendado está.

Reseña: The Silver Coins Vol. 1, de Walsh, Brisson, Jeff Lemire, Kelly Thompson y Zdarsky

Pocas cosas son tan petrificantes como una maldición. Tenemos arraigados dentro eso, el concepto y el sufrimiento de estar maldito porque quizás lo llevamos en la sangre el que algún familiar nuestro en alguna época pasada sufriera una de ellas. A lo largo de la historia, la humanidad se ha horrorizado ante la perspectiva de objetos místicos que nos condenen a la perdición; de una bruja o un señor con poderes que no son de este mundo, tuviera la “gracia” de pronunciar unas palabras y hundirle la vida a alguien. Pero los objetos…, los objetos malditos son los que de alguna forma siempre hemos intentado evitar. De hecho, hoy en día, en pleno siglo XXI, año 2022, os aseguro que le decimos a alguien que tal objeto está maldito y no lo quiere tocar ni saber nada de él. Y si lo coge, su propia consciencia empezará a roer en su interior con el temita hasta que… Dependiendo de la persona, de su racionalidad, se volverá más o menos poderoso. Por lo que las maldiciones siguen muy vigente hoy en día y quizás nunca nos la podamos quitar de encima.

En The Silver Coin de Image Comics, la pieza de metal principal persigue a quienes se atreven a tocarla. Una historia e historias dentro de un cómic creado por Michael Walsh, Ed Brisson, Jeff Lemire, Kelly Thompson y Chip Zdarsky. Un primer volumen de una antología que recién publica Panini Cómics en nuestro país que sorprende por la calidad que tiene. Además, de ser una seria antológica que cuenta historias aterradoras y retorcidas que atormentan a inocentes y culpables por igual y que viene ni que pintada leerla, devorarla, para este Halloween que tenemos a un paso. Pues The Silver Coin es una mirada emocionante al Mal con una cantidad asombrosa de variedad, asustando a los lectores al menos una vez por capítulo… jaja. Este primer volumen recopila relatos pero parte de una premisa súper interesante pues se cuenta que la fortuna de una banda de rock en decadencia cambia de la noche a la mañana después de que encuentren una misteriosa moneda de plata… ¿Os suena? Porque a mi sí. Pero lo chulo es que con cada historia seguiremos los acontecimientos que se vayan dando alrededor de esta moneda argentaria a lo largo de los siglos. Desde la Nueva Inglaterra puritana hasta ese futuro desolador que tendremos en la tierra en el lejano año de 2467…

The Silver Coins recopila los cinco primeros números de la serie. Cada uno de estos cómics se centra en la moneda de plata titular y está dibujado por el artista Michael Walsh, ganador del premio Eisner. La primera de estas historias es El billete, escrita por el guionista de Daredevil, Chip Zdarsky, donde seguimos a un aspirante a estrella de rock que se encuentra con la moneda mientras revisa las pertenencias de su madre, y decide usarla como púa de guitarra. Genialísimo. Pero es asi que inmediatamente establece lo que está en juego en la premisa y construye una tensión lenta y creciente antes de su ardiente conclusión. Me encantó esta historia. Y a diferencia de otros números, que se deleitan con la agonía de las pobres almas que se encuentran con la moneda, el guión de Zdarsky explora los impactos psicológicos que surgen al manejar un objeto tan oscuro y poderoso, y lo hace de una forma maravillosa como maravilloso guionista que es.

Otro relato chulo es Chicas de verano, de Kelly Thompson. Si bien Thompson ha personificado anteriormente el Mal en Capitana Marvel, aquí desata uno de los problemas más desconcertantes de su carrera. Una joven llamada Fiona encuentra la moneda en una cabaña apartada mientras está en un campamento de verano, lo que hace que la maldición la apunte a ella y a sus compañeros de campamento. Esta historia canaliza slashers clásicos al estilo Viernes 13 y tiene implacables actos de violencia a lo largo de la trama que a más de uno dejará con el culo torcido. Mientras Thompson se prepara para lanzar más cómics de terror a través de Substack, este número es un gran indicador de lo que los fans podemos esperar de ella en el futuro.

Al unificar todas las historias en torno a la moneda de plata titular, todos estos creadores pueden brindar una perspectiva única sobre el Terror. Mientras Lemire juega a lo grande y juega con la ciencia ficción, Brisson abraza la posesión demoníaca y el horror. Donde algunos cuentos son asaltos implacables a los sentidos, otros son una combustión lenta con un momento de violencia repentina. En un año en el que se está consiguiendo que cada vez más cómics de Terror lleguen por estos lares, y de calidad, The Silver Coin es otra súper recomendación para el fan que como lector disfruta de escenas impactantes que te hacen mirar una y otra vez a esa esquina de tu habitación en la que antes no habías reparado y donde parece que hay una extraña sombra…

Reseña: Call of Duty. Vanguard, de VVAA

Yo que pertenezco a la Generación X, yo que fui niño en los 80, con los años, los videojuegos me han ido gustando cada vez menos. Quizás es por el paso de los años o quizás es porque he preferido no avanzar en ese apartado de gasto de horas de mi tiempo libre, preferí anclarme en la cultura de libros, cómics, juegos de mesa y films. Los de la Generación X vivimos el boom de todo esto aunque también vimos la explosión de los videojuegos. Y si tuviera que elegir uno que me impactó y me gustó con cada edición que se publicaba, de los pocos que me apetecía probar, esos eran los denominados Call of Duty. Será porque fui Infante de Marina, será porque siempre me atrajo el tema bélico en todas sus facetas, será porque quizás fue siempre el único juego que me encantaba lo que proponía y el modo o sistema en el que lo hacía. Por eso, y solo por eso, no me iba a perder un cómic que recién publica Panini Cómics y que cuenta lo que sería la precuela al juego de Sledgehammer Games y Activision el conocido Call of Duty: Vanguard.

En la Comic-Con de Nueva York de 2021 se anunció esta serie de cómics vinculada a Vanguard cuyos asistentes se pudieron hacer con una copia gratuita del primer número donde la protagonista era la carismática Polina Petrova. Sin embargo, el 4 de noviembre de 2021, Activision anunció que la serie de cómics se lanzaría de forma gratuita en el sitio web oficial de Vanguard, y el primer número se lanzó de forma digital ese mismo día. Decir que poco después ya no estaba disponible. No obstante, Panini Cómics ha tenido a bien traer este tomito que recopila la miniserie al completo para zampársela de una vez como ha hecho este que os escribe. Pero, ¿cuál fue la inspiración para crear un cómic como Call of Duty: Vanguard? De hecho, tenemos esta gran historia dentro de la campaña de Vanguard, es decir, estos mismos personajes. Pero mientras en el juego nos muestran una escuadra unida, un equipo con experiencia y formidablemente bien conjuntado, en el cómic se cuenta cómo fue su primera misión juntos.

Contaron los autores en una entrevista que mientras escribían la historia principal, se dieron cuenta que pensar en cómo esos tipos llegan a formar equipo también era importante de narrar algún día. Y tenían una buena para contar sobre ello y lo plasmaron en esta miniserie. Por suerte, ya la tenemos aquí y decir que la he disfrutado a tope y lo peor es que ahora necesito o “actualizar” mi videoconsola (uy, me estoy dando cuenta que esta palabra huele a dinosaurio, ¿no) o en su defecto ir cada poco a casa de mi cuñado que él si que es un gran freak de los videojuegos y lo tiene todo-todito-todo de esta serie.

Los autores contaron que viendo todo el material que había surgido del brainstorming, nació la idea y vieron sentido a explorar la historia de origen de cómo todos se unieron para formar la Task Force One. Ahí entró en escena el Capitán Carver Butcher. ¿No lo conocéis? Butcher hizo su aparición en 2017 en un DLC de la Segunda Guerra Mundial. Era intendente en el Cuartel General y era divertido e ingenioso. Un personaje de los que calan. Por eso, sinceramente, estamos ante una de las mejores historias de personaje secundario que conozco de héroe nacido de un videojuego. No creo que ningún otro personaje secundario en ningún juego se haya convertido en el Nick Fury de una franquicia con tanta repercusión mundial como esta. Y es que parece que llevar el apellido “Carnicero” es sinónimo de éxito.

Call of Duty: Vanguard se basa en una máxima, una pregunta en condicional: ¿Para quién trabajan estos hombre de élite? La respuesta a esto, asi como el desarrollo de la trama en torno al nacimiento de las Fuerzas Especiales de las que disponemos en el juego, todo eso y un poquito más, cuenta esta miniserie. Aportar que cada uno de los personajes principales se inspiró en héroes de la vida real de la Segunda Guerra Mundial.

Una gozada en su conjunto.

Reseña: Not All Robots. El Mejor Amigo del Hombre, de Mark Russell y Mike Deodato Jr.

Uno siempre tiene tiempo para leer una sátira de Ciencia Ficción y más si está bien escrita y es interesante lo que se cuenta como para no soltar el cómic hasta que lo acabas. Con eso me encontré entre las novedades de Panini Cómics al ver que publicaban Not All Robots, ese cómic tan llamativo por tan atractiva portada homenaje al famoso cuadro American Gothic, de Grant Wood.

Not All Robots usa la revolución de los robots para apuntar al peligro de justificar la ira obsoleta, aunque el cómic a veces lucha por mantener intacto su mensaje central. La nueva serie de Mark Russell y Mike Deodato Jr. está ambientada en una sociedad futurista donde los robots llevan la carga de mantener intactos pequeños sectores de la sociedad, mientras que el cambio climático y la contaminación han convertido el resto del mundo en un páramo. Literalmente. Los robots son conscientes pero aparentemente subordinados, y siguen dedicados a cuidar de este resto de humanidad que queda a la vez que se enfurecen abiertamente contra sus supuestos amos. Razorball es uno de esos robots exasperado de una vida sin futuro, ya que odia su trabajo y su vida hogareña y está trabajando en un proyecto para construir literalmente sus propios reemplazos.

Su descendencia.

Los protagonistas de Not All Robots se inspiran en la cultura Incel y el tipo de ira impotente que encuentras en ciertas redes sociales sobre cómo piensan estas personas. Si no la conocéis, la cultura Incel (abreviatura de la expresión inglesa «involuntarily celibate»), es una subcultura que se manifiesta en comunidades virtuales de hombres que dicen ser incapaces de tener relaciones románticas y sexuales con mujeres, como sería su deseo. Las discusiones que se producen en estos foros son de pandereta. Se caracterizan por el resentimiento, la misantropía, la misoginia y la apología de la violencia contra las mujeres y contra los hombres que se suponen sexualmente activos. ¿Otra muestra de que merecemos la desaparición como especie?

Razorball está enojado por la futilidad de su situación, a pesar de que su familia humana (que le riñe por su mala actitud) se mantiene mayormente apartada. Mira las instrucciones de codificación en 4chine para desactivar sus chips de empatía y escucha a un amigo opinar abiertamente sobre cómo acabar con la humanidad de una vez por todas. Cuando Razorball ve a uno de su familia humana abandonar el edificio de «Recursos Inhumanos» después de que ella parece solicitar un reemplazo, un compañero robot se burla abiertamente de él y dice que lo están «engañando» (incluso el título del cómic hace referencia al trillado argumento que toda mujer en Internet ha escuchado al quejarse del sexismo institucional).

Estos robots, al menos en su superficie, comparten muchos de los mismos sentimientos de impotencia que los tipos estos irritados de internet que cumplen todos los requisitos para cometer un asesinato en masa algún día. Not All Robots trata un tema importante de una mini comunidad que apenas conocía. Está bien enterarse de “lo que hay” aunque sea a través de un cómic creado por dos grandes de esto como son Mark Russell (Los 4 Fantásticos: Toda una vida) y Mike Deodato Jr. (El Asombroso Spiderman). En el año 2056, los robots han reemplazado a los seres humanos como fuerza laboral. Eso no está muy lejos de ocurrir. Ya sólo quedan diez mil millones de humanos viviendo en la Tierra. Obvio que vendrán más pandemias y peores que la que acabamos de pasar. A cada familia humana le corresponde un robot del que dependen completamente. Tampoco lo veo muy descabellado. ¿Qué podría salir mal? Esperemos nunca vivir lo que se prevee en Not All Robots.

Reseña: Alien. Linajes, de Phillip Kennedy Johnson y Salvador Larroca

El poder disfrutar en formato cómic de licencias súper chulas como Alien, en nuestro país se lo debemos a diversas editoriales. Y por el momento, una de ellas es Panini Cómics que gracias a sus novedades podemos tener este mes un nuevo volumen de una de las franquicias que mezcla la CF y el Terror de forma formidable desde que brotó y nos hizo estremecer a muchos allá por finales de los 70 y principios de los. Alien, el gran icono del cine que llega a Marvel, de la mano de Phillip Kennedy Johnson (Superman) y Salvador Larroca (El Invencible Iron Man).

En Alien: Linajes conoceremos a Gabriel. Ha estado en el espacio durante mucho tiempo y una vez fue capturado por una raza xenomorfa brutal y violenta… que todos sabemos cual es. Si bien no tiene idea de cómo escapó, está obsesionado y tiene sueños llenos de xenomorfos donde sus compañeros encuentran dolorosas muertes. Tiempo después regresa a casa con un hijo adulto que no quiere tener nada que ver con su familia, aparte de robar la información que pueda para prepararse para un asalto a Weyland-Yutani, la corporación que envió a su padre al espacio. Pero no tiene pinta de que esta idea vaya a ir bien, ya que ahora se ve atrapado en un laboratorio lleno de las mismas criaturas que persiguen a cada momento los sueños de su padre.

Dicho y redicho que soy fan total de Alien desde que impactó en mi cara cuando la alquilé en un videoclub con un amigo a mediados de los años 80. Se estrenó en 1979, sí,  pero en aquellos años las pelis tardaban bastante en cruzar el charco, y más hacia un país que nunca consigue remontar cabeza a nivel europeo como es el nuestro. Pero temas políticos aparte, en Alien: Linajes se junta que soy también un gran admirador del trabajo de Phillip Kennedy Johnson desde que disfrutara muy mucho su Last God. Eso sin contar que estaba ansioso por ver el gran lanzamiento de Alien dentro Marvel. Dicho esto, después de Aliens: El Regreso (la segunda película de la saga) ahí es donde para de contar para mí la franquicia fílmicamente . Es la última vez que me gustaron los xenomorfos en formato visual. Pero en cómic tengo que decir que he ido encontrando joyitas como Aliens: Polvo al Polvo (https://www.cronicasliterarias.es/?p=2798) o Aliens 3: El guión no filmado (https://www.cronicasliterarias.es/?p=783) que publicó aquí Norma Editorial.

El trabajo de los personajes en Alien: Linajes deja con ganas de más. Son personajes muy currados a primera vista, de los que te andas preguntando cada poco que habrá sido de su vida anterior. Gabriel y los diversos cyborgs de Bishop tienen personalidad, y algunos secundarios también son interesantes a poco que salen. Aunque es obvio que están a las puertas de una muerte prematura… Diría que la escena inicial está terriblemente bien elaborada y ayuda a establecer bastante bien cuál es la terrible experiencia de Gabriel así como la nueva ambientación a la que vamos a acceder con este tomo que recopila los seis números que tuvo esta miniserie publicada en USA a primeros de 2021.

Y para ser sincero, no soy muy fan del fotorrealismo pero aquí tiene algo que terminó por gustarme. Las formas con las que se hacen. El arte con referencias fotográficas de Salvador Larroca simplemente hace que los aliens broten de la página casi de forma real. Y sé que en realidad no es algo propio de Larroca pero le reconozco cambiar y probar una nueva habilidad y haber salido airoso de ello.

El regreso de un militar a la vida civil siempre es complicado. Lo sé por propia experiencia. Y quizás por eso Alien: Linajes me ha tocado un poco-mucho la fibra.

Toparse de nuevo con los mortíferos xenomorfos tampoco es moco de pavo.

A mí me ha encantado.

Reseña: Spiderman. Toda Una Vida, de Chip Zdarsky y Mark Bagley

Chip Zdarsky entró en escena como el nuevo hombre a tener en cuenta como guionista de cómics y no importa cuántas veces hablen mal de él, que todavía sorprende. Su Spiderman: Toda una Vida, no es una parodia y diría que tampoco un What if…? del trepamuros. Es un compendio de historias muy tradicional. Tienes enferma a tía May, a un codicioso J. Jonah Jameson, una sufridora Gwen Stacy, el Duende Verde, intervenciones de otros superhéroes…, e incluso el gran momento dramático cuando Norman se revela a Peter como el villano eterno promoviendo que conoce su identidad secreta y no dudará en desvelarla. Decidme que esto no es pura tradición arácnida. Sin embargo, lo bueno siempre está en los detalles. En Spiderman: Toda una Vida, tenemos escenas de Peter coqueteando con Gwen con comentarios muy ingeniosos y un largo etcétera de detalles que hacen brillar la obra en su conjunto. Título que tengo que reconocer que había pasado por alto decenas de veces. Ahora Panini Cómics publica este 100% Marvel HC con una retórica ideal: ¿Crees que has completado ya tu lista de historias favoritas de Spiderman? ¡Pues prepárate para añadir una más! Muy cierto, por que sin duda es una de las que deseaba leer hace tiempo para “completar” en mi cerebro sus mejores historias. Y para ello que mejor que Spiderman: Toda una Vida que de hecho se elaboró para celebrar el octogésimo aniversario de Marvel. Y donde Chip Zdarsky y Mark Bagley se unen para una historia única de Spidey, pues si un gran poder conlleva una gran responsabilidad, ¿qué responsabilidad tienen entonces los poderosos durante una guerra moralmente cuestionable?

Zdarsky y el legendario Mark Bagley, con el entintador John Dell, el colorista Frank D’Armata y el escritor Travis Lanham de Virtual Calligraphy, examinan esta cuestión; y sin restricciones de continuidad, tallan un camino impactante que todavía se siente perfectamente en línea con su elenco de la Edad de Plata. Zdarsky, utilizando las bases morales ambiguas para la participación de Estados Unidos en la guerra civil en Vietnam, empuja a Spiderman y otros iconos Marvel, mientras se mantiene fiel a la pregunta de lo que realmente significa tener esa «gran responsabilidad». Peter Parker enfrentado no solo al inminente conflicto sino también a las revelaciones de la doble identidad de Norman Osborn, donde se ve obligado a tomar decisiones difíciles que contrastan con las historias clásicas de la época. Esto permite que estemos ante una trama que engancha ya que se siente familiar para los que conocemos el personaje de hace años. Aunque a la vez, prolífera frescura.

Spiderman: Toda una Vida tiene el potencial para llegar a ser considerado un clásico. A tener en cuenta en esos rankings de las mejores historias o indispensables a leer de nuestro amado trepamuros. De clásico moderno, lo tildaría yo. Casi que no hay forma de reseñarlo sin spoilers. Pero a grandes rasgos: en 1962, un Peter Parker de quince años es mordido por una araña radiactiva y se convierte en el sorprendente Hombre-Araña. Flash Thompson es reclutado para servir durante la Guerra de Vietnam y es en 1966 cuando dicha guerra se endurece tanto, que Spidey debe sopesar la cuestión de dónde reside realmente su responsabilidad en el conflicto. Se cuenta bastante más en esta miniserie de seis números ahora recopilada que en casi toda una década de cómics. Desde los 60s del pasado siglo, hasta la primera del presente incluida. Y con apariciones estelares del Capitán América, Duende Verde, el Soldado Desconocido, el profesor Miles Warren, Mysterio, El Escorpión, Los Vengadores, Puño de Hierro, Morbius, Capa y Puñal… En definitiva, un enorme elenco de grandes personajes Marvel.

Spiderman: Toda una Vida utiliza el mismo truco que Marvels o JLA: La Nueva Frontera. Cuenta una historia familiar de superhéroes, pero la sitúa en el mundo real y el tiempo se desarrolla de una manera histórica-verídica. ¡Y Mark Bagley dibuja esto! El maestro Bagley que ha dibujado a Spiderman durante más de treinta años. Para muchos, el mejor dibujante que ha tenido nuestro querido vecino el arácnido.

Reseña. Locke & Key. The Golde Age, de Joe Hill, Gabriel Rodríguez y Jay Fotos

El 26 de abril de este mismo año fue el lanzamiento de la tan esperada Locke & Key: The Golden Age, una colección de historias que prometía ser la introducción perfecta a los personajes, mundos y llaves místicas que dan nombre a esta ya tan famosa serie de cómics del gran Joe Hill y Gabriel Rodríguez.

Existe gente que llegó (y flipó) con Locke & Key mediante los cómics. Otros curiosamente abordaron la magnífica obra gráfica después de su estreno en serie de TV. Pero os puedo contar casi en voz baja que me he enterado que hay otro tipo de fans que llegó a esta serie por su cruzamiento con el Sandman Universe que se propone aquí. Se corrió la voz y algunos/muchos se vinieron para acá. Panini Cómics recién publica este mes en nuestro país el volumen Locke & Key: The Golden Age. Un volumen -ya desde la primera página- verdaderamente encantador que abre la puerta a momentos históricos relacionados con el famoso universo de estas poderosas llaves. Y una colección de relatos que abre un cruce épico con el Universo Sandman de DC Comics.

Locke & Key: The Golden Age incluye historias autoconclusivas, dos relatos publicados anteriormente como Small World, Open the Moon, el preludio a World War Key y la nueva serie de Locke & Key que aproxima la historia de la familia Key durante grandes conflictos como la Revolución Americana, la Guerra Civil o la Segunda Guerra Mundial. Así como el crossover íntegro con Sandman en dos partes denominado Hell & Gone. Y como regalo especial exclusivo de esta colección en tapa dura, se incluye el cuento inédito Face the Music, creado por Hill y Rodriguez como parte de un proyecto de disco de vinilo que, lamentablemente, nunca llegó a buen término. Una historia caprichosa de la familia Locke ambientada a principios del siglo XX y que presenta una llave completamente nueva. Locke & Key: The Golden Age además de ser un tomo que contiene cuentos fabulosos, el volumen también recoge más de veinte portadas, principales y variantes.

¿Sinceramente? Me salté el paso a paso y fui directamente a leer los números de Hell & Gone. Y me encantaron. Y así ya empecé con una sonrisa a leer todo lo demás. Estamos ante las historias que mejor allanan el camino hacia el maravilloso mundo de Locke & Key. Podemos ver esos viajes de los personajes, desde la infancia hasta la edad adulta, y los lectores obtienen así una historia completa que es cohesiva, inteligente, divertida, aterradora y entretenida. Debo admitir que devoré este tomo en dos noches de estas “fresquitas” que estamos teniendo. Y con «fresquitas» me refiero a fuego abrasador es lo que cae del cielo sobre este país que será desierto sahariano en cincuenta años a más tardar… Pero pude leer el tomo, tomarlo capítulo por capítulo y dejar que las situaciones, los personajes y la historia de estas páginas se apoderáran de mí. Cosa que Hill con su guiones consigue fácilemtente. The Golden Age no solo ha vuelto a encender el fuego por querer leer más Locke & Key. También avivó la llama por volver a repasar esos dos grandes omnibus que editó Panini Cómics (https://www.panini.es/shp_esp_es/locke-key-omnibus-1-sloke101-es01.html) y que nadie se debería perder, donde se recopila toda la obra inicial. Es donde verdaderamente apreciarás los talentos de Joe Hill y Gabriel Rodríguez.

Durante doscientos años, la familia Locke ha vigilado una mansión de Nueva Inglaterra donde la realidad se ha desquiciado y las sombras caminan solas. La vida de Chamberlain Locke y su familia a principios del siglo XX y sus combates, desde arañas gigantes a los campos de concentración de la Primera Guerra Mundial… Las conexiones entre los universos de Sandman y L&K son mucho más profundas de lo que pensaba y se remontan mucho más atrás de lo que imaginaba. Las escenas que me intrigaron de Hell & Gone tienen ahora mucho más sentido, ahora que he leído todo lo que propone The Golden Age. Prestad especial atención a “las cartas” y al “pañuelo rojo” al principio de la trama que… ¡A lo que llevan es increíble! La escritura de Joe Hill vuelve a ser de primer nivel y este es el mayor cumplido que puedo dar: Sentí que estaba al nivel de Gaiman.

¿Algo negativo? Voy a gastar mucho dinero en cómics de Locke & Key en las próximas semanas y meses. Lo quiero todo-todito-todo de esta serie. Así que aficionados al terror y la fantasía: compren este tomo. Y si ya venís instruidos en tema Sandman y Locke & Key, indispensable para vosotros. Incluso recomendable para aquellos que no leen cómics (dioses, ¿cómo se puede vivir así?) pero anhelan la aventura, la emoción, la magia, la tradición, los personajes fascinantes, o cualquiera de los universos de ficción, mundos en los que perderse… ¡Lean este cómic!

Reseña: Neonomicon, de Alan Moore y Jacen Burrows

Llega una nueva edición del gran Neonomincon del maestro Alan Moore. Una edición además que contiene las dos miniseries que siguen esta serie de investigaciones al más puro estilo Lovecraft. Pero con el toque Moore que lo hace un poquito-todo especial. Este nuevo tomo que publica Panini Cómics recopila los cuatro numeritos que tuvo la serie Neonomicon pero también incluye los dos de The Courtyard, que con ellos se inicia el volumen y también son partes de la misma historia de Providence, a la que hacen precuela. Estamos ante la versión de Moore del Mito de Cthulhu y después de lo leido me pone ansioso saber que Providence es esa joyita que le sigue, de la que me han hablado maravillas y que aún no he conseguido devorar.

Cuando te metes en la trama tienes muy claro que Neonomicon y The Courtyard, su historia introductoria, son bastante directas en su narrativa y bastante fáciles de seguir. Pero tengo que admitir que esplende y que perciobes que hay un tramón detrás y que pone nervioso y quieres saber más y más. Y lo mejor/peor es que con cada página parece que todo está a punto de explotar. Y no explota. Y te mantiene en tensión cada paso del agente federal Aldo Sax cuando se infiltra en las profundidades de los barrios bajos para encontrar una droga misteriosa llamada Aklo, cuando queda atrapado en una red de locura lovecraftiana con un tal Johnny Carcosa en el punto de mira… Entonces Aldo Sax se encuentra con horrores cósmicos y voltea su mierda de tal forma que incluso su caso puede llegar a ser creíble. Y esto me encantó. Moore haciendo un esfuerzo grandísimo por contar una historia de forma que parezca real o que, de algún modo, podría haber ocurrido realmente. Además, mola mucho como Moore siembra los guiones de cantidad de referencias lovecraftianas, como La Sombra sobre Innsmouth, El horror de Red Hook, Zothique (que en realidad es del maestro Clark Ashton Smith) y ese investigador famoso que es Randolph Carter y que aquí resulta ser la voz cantante de un grupito de rock llamado Los Gatos de Ulthar (también referencia un relato de Lovecraft).

Y después en Neonomicon nos vamos de visita al sanatorio, con los agentes Lamper y Brears continuando donde Aldo Sax lo dejó.

Y ya la serie se vuelve definitivamente no apta para aprensivos.

Alan Moore es el primero en decirte que cada vez que leas sus historias, especialmente, si ha pasado una buena cantidad de tiempo, vuelvas a ellas porque encontrarás cositas nuevas que anteriormente pasaste por alto. Obtendrás historias de una manera diferente, bajo una nueva luz, en un mejor entendimiento. Se tira ese pegote de los gordos (otro más) pero lo peor de todo es que el cabrón tiene razón. Y un amigo mío, hablando hace poco del tema, añadió que, sin importar el orden en que hayas leído estas historias enlazadas, si lees una de ellas, no puedes (por todos los dioses no lo hagas), debes leer las tres para apreciarlas como una al completo.

Como un todo. Y es que probablemente así fueron escritas.

El FBI y lo paranormal mezclado siempre mola. Y Moore no duda en señalar que Neonomicon y The Courtyard se inspiraron en El silencio de los corderos para algunas escenas. Y supongo que mencionar Expediente X sería demasiado obvio. Pero insisto, lo que está claro es que el FBI y lo paranormal son una gran combinación narrativa que funciona tan bien como el pan y la mantequilla o el tomate y el jamón. Y lo único que puedo asegurar es que, estos tres agentes especiales no serán los mismos después de todo lo vivido aquí.