Reseña: El Integral de lo Supernuevo de Tank Girl, de Alan Martin, Hewlett y VVAA

El Integral de lo Súper Nuevo de Tank Girl recopila otros cuatro volúmenes independientes fuera de la serie principal que, por cierto, se pueden encontrar en dos integrales en el catálogo de Norma Editorial. Más historias inéditas en nuestro país del personaje más irreverente salido de la mente de Alan Martin y Jamie Hewlett recopiladas en un nuevo integral repleto de genialidades y absurdeces. Un nuevo tocho que incluye Carioca, Estado Sólido y Tank Girl del Siglo XXI, nuevos guiones del maestro Martin, esta vez unido a los ilustradores Mike McMahon, Warwick Johnson-Cadwell y varios artistas más. Más locuras de la heroína mas irreverente de los años 90, más historias inéditas en nuestro país de este maravilloso personaje que conociéramos aquí los más viejunos en la revista El Víbora (1991) y luego en su colección de cómics monográficos de la colección Fuera de Serie de Comix (2001). Porque Tank Girl fue una serie creada en 1988 por los británicos Alan Martin, al guion, y Jamie Hewlett, a los lápices, aunque después ha sido dibujada (como veis) por cantidad de ilustradores. Una idea que andaba inicialmente ambientada en una Australia pos-apocalíptica, a pesar de contener la gran influencia pop de la cultura noventera británica. Y donde originalmente, la protagonista (la denominada Tank Girl), era Evita Buck que conducía un Ford Escort rojo que también era su hogar, y se dedicaba a realizar diferentes misiones para una mafiosa organización hasta que es declarada como «criminal» debido a sus inclinaciones sexuales y su abuso de drogas. Mas, con los años, el cómic fue narrando las peripecias de «Tank» junto a su novio, Booga, un canguro mutante, en un estilo que incorpora una gran influencia de la estética del movimiento punk; una protagonista desorganizada, nihilista, llamativa y casi psicópata.

Y fueron llegando muchísimas más aventuras y este nuevo tomo que publica Norma Editorial lo demuestra. Por lo que tenemos un nuevo integral de calidad, para disfrutar, y que nuevamente me recuerda a los vídeos musicales de Gorillaz (normal, siendo Hewlett co-creador y responsable de aquellos diseños). Tank Girl: Carioca, no capta de inmediato la vibra de Tank Girl. Y aunque el arte es de Mike McMahon, autor de muchos trabajos en 2000AD, tal vez vuestro cerebro (como el mío) reciba una señal mixta al respecto. Te tomas un tiempo… pero cuando entras, rápidamente se restablece una verdadera aventura de Tank Girl (después de todo, está escrito por Alan Martin). La acción comienza con Tank Girl y Booga en la audiencia de un popular programa de preguntas y respuestas, y como es de esperar, rápidamente terminan formando parte del espectáculo. ¿Y el resultado? ¡Venganza!

Estado Sólido es una de las historietas más extrañas del personaje, pero sigue siendo una lectura sólida, nunca mejor dicho. Y divertida. Su novio canguro enferma, por lo que Tank Girl y sus amigos emprenden un viaje fantástico para encontrar la fuente de la enfermedad. Travesuras excéntricas, lenguaje obsceno y algunas situaciones ridículamente extrañas con ultraviolencia. Se recupera “la forma”. Y en Tank Girl del Siglo XXI vemos a nuestra prota en el espacio (en una nave que es tan fálica que debería llamarse nave-pene). Pero también en la Segunda Guerra Mundial y en Reality Shows. Tenemos nuevamente una de esas tramas tan locas como divertidas, absurdas, de las que es mejor contar poco.

Que más voy a decir si ya sé que lo queréis. Se ve a leguas lo que disfrutamos con esta chica. Grande Norma Editorial trayéndonos estas aventuras.

Reseña: Belladona, de Ange y Pierre Alary

Pintaza que tenía y no me ha defraudado. Aunque creo que rara vez pasará porque mis gustos lectores de la BD van muy acorde con lo que Nuevo Nueve Editores publica. Y más aún cuando lo hace en unas ediciones curiosetas, en tapa dura y con relieves que nunca vienen mal al tacto. Y tomos que además incluyen todos los álbumes de una obra como es el caso, un tríptico que te llevas en solo volumen, un buen cómic que te metes entre pecho y espalda casi de un tirón.

El guion de Belladona está basado en el personaje de Marie, una espía al servicio de un tal Charles de Batz, más conocido como D’Artagnan. Sí, ese de nombre único que a todos nos suena, en un cómic que toma prestados muchos elementos de las películas de Capa y Espada de los años 60 que este que está aquí solía disfrutar bastantes años después (con Jean Marais) al igual que los romances de época al estilo de la serie Angélique, Marquise des Anges, que también nos llevaba a la famosa Corte de los Milagros en tiempos de Luis XIV.

Un cómic que desde el principio te sumerge en conspiraciones, en el sugerente y ambicioso mundo de los venenos y en toda una época convulsa llena de sucesos entre los que destacó la revocación del Edicto de Nantes…. Llevándolo todo a un formato cómic que, al menos, con la Historia es honesta. El primer álbum es fluido y animado pero en el segundo se da un giro complejo a una trama a la que hay que estar muy atentos para no perderse mezclando cantidad de personajes. El segundo volumen se ancla en la revuelta que surge en las provincias contra el poder real, y todo a través de la misión de Marie ordenada por un vizconde que dará mucho que hablar en páginas sucesivas. Y cierra el integral un tercer álbum con un final que duele en el corazón. No sabemos qué será de la misteriosa Marie y si bien, alguien me dice que volveré a ver este personaje en futuras aventuras no hay problema… Pero si no. Mmmm… puedo trinchar a alguien. Pues el coitus-interruptus ha sido de órdago.

Un escenario que toma un giro clásico poniéndonos en la mesa a una heroína que se encuentra sola contra todos, incluidos sus propios amigos. Y los Reyes siendo cabrones como solo ellos han sabido ser en la historia de la Vieja Europa. Y no voy a irme sin mencionar el precioso dibujo de Alary: vivaz, sorprendente, dinámico y con unas escenas de acción y duelo muy bien plasmadas que proporcionan muchísimo movimiento. Pero, sin duda, lo potente aquí es el uso de una heroína que además de ser simpática y llena de encanto, es de esas que todo el mundo quiere, una heroína de raza moderna, que es una mezcla entre ninja, acróbata y una especie de agente secreto a lo Carmen MacCallum. No me molesta la espectacularidad, hemos venido a eso, ¿no? Pero esto hay que cuidarlo con ojo, que no se traspase la línea de la reiteración en las patadas voladoras a lo John Wick, aunque eso no ocurre aquí. El mundo de los superhéroes debe ser otra acera.

Me gustó Marie con su nombre en clave Belladona. Me enamoré de ella, una nueva heroína de mirada a este siglo XVII en el que nos sumergimos y que demuestra una supuesta renovación del tan gastado género de Capa y Espada. Con un buen anzuelo y punto de partida como es el intento de asesinato de Luis XIV, un cómic contenedor de un potente escenario así como de un bellísimo personaje principal.

Reseña: Flash. El Hombre Más Rápido del Mundo, de Kenny Porter y López Ortiz

Y cayó. Por supuesto, que iba a caer. Porque así va uno o una a los sitios o cines. Preparado. Tenía que leer Flash: El hombre más rápido del mundo antes de pasar por el film. Entre otras cosas, porque sabía que me iba a gustar bastante el cómic; siempre tengo muchas más esperanzas en ellos que en los films. Quintuplican los grandes momentos que me ha dado el noveno arte versus el séptimo.

Flash: El hombre más rápido del mundo publicado por DC Comics, escrito por Kenny Porter e ilustrado por Ricardo Lopez Ortiz y que ECC Ediciones puso como disponible en formato íntegro hace nada en nuestro país. Aunque en USA vio la luz en septiembre de 2022. Pero obviamente era bueno rescatarlo entre las novedades ya que actúa como Precuela de lo que se puede ver en la peli que se estrena en nuestros cines dentro de seis días aunque yo ya la he podido disfrutar.

Una aventura, un no parar de trama, donde se puede ver como el mundo alrededor de Barry Allen con La Liga de la Justicia y diversos personajes empieza a cambiar respecto al hijo predilecto de Central City. Que, por cierto, sigue actualmente como un superhéroe realmente habilidoso e inspirador. Todo hasta que surge una nueva amenaza. Y aunque el Velocista Escarlata viene de hacer frente a una amenaza cósmica junto a la JLA, en su ciudad no le faltarán enemigos que derrotar. Porque si de algo siempre ha podido presumir el tío rapidísimo de mallas rojas, ha sido de “disfrutar” de un enorme elenco de súper villanos. A eso sumad que Barry recurre a Batman para que le aconseje sobre cómo entrenarlo para dominar sus poderes. Y claro, bajo la tutela del Caballero Oscuro, El Hombre Más Rápido del Mundo tendrá que encontrar, como primera orden, como no ser aplastado por la fuerza de Chatarra que reparte ostias como panes.

Este tomito contiene los tres números que englobaron esta mini-mini-serie (The Flash: The Fastest Man Alive núms. 1-3 USA) que se ha usado como trasfondo principal para el film. El entrenamiento del joven superhéroe por parte de un señor Batman algo cabroncete, que comienza un tiempo después del final de la película de la Justice League. Donde Barry todavía está aceptando sus nuevos poderes y no los usa en todo su potencial. Pero el guionista Kenny Porter nos da poco tiempo con ello antes de enfrentar a Barry contra un enemigo colosal y todo para demostrarnos varias cosas. En primer lugar, el desafío físico es demasiado para el disfraz hecho en casa de Barry. En segundo lugar, al recibir tal paliza, el joven héroe cuestiona la poca confianza que tenía en si mismo.

Ricardo López Ortiz ilustra la historia de manera experta, dándole un estilo vibrante a los sucesos que van llegando y destacando el estilo frenético y lleno de acción que un cómic de Flash siempre requiere. Creo que queréis tener este cómic y no solo por la portada.

Mola ver lo que se pretende hacer con uno de los superhéroes más chulos de todos los tiempos.

Reseña: Peter Porker. El Espectacular Spiderham. La Colección Completa Vol.1

En una de las pocas entrevistas que me han hecho en mi vida, dije una vez que tras mi querido género de Terror, amaba la Ciencia Ficción por encima de otros géneros. Pero brindaba por ella, sobre todo, si iba entremezclada con el humor. He leído historias muy buenas con estos ingredientes e incluso los intenté imitar en algún que otro relato que fueron publicados, pero ahora que ando por aquí reseñando grandes libros y cómics que me son como mínimo interesantes, también deciros que abogo por el humor en el mundo de los superhéroes. En especial, porque es un lugar donde se ve poco este tema y ojo, no digo que no exista. Lo que digo es que dentro del pijameo, fuera de cualquier comentario que le hace a los malutos cierto protagonista guasón, el humor no es lo que más se potencia.

Excepto en personajes como Peter Porker. El nombre ya tiene guasa. Por eso me pareció súper curioso que Panini Cómics trajera el primer volumen integral de Spiderham. Y tan curioso que me pareció que rápidamente me puse a buscar si esto se había publicado alguna vez en español y resultó que no. Por primera vez en castellano, el primer volumen de las aventuras clásicas de Spiderham. Lo que comenzó como un especial de parodia porcina… y que pronto se convirtió en una hilarante serie regular llena de aventureros antropomorfizados con los que uno puede partirse la caja…

Aparte de los Marvel Tails Starring Peter Porker, The Spectacular Spider-Ham One-Shot y Peter Porker, este genial volumen contiene los diecisiete primeros números de la serie The Spectacular Spider-Ham. Lo que nos lleva a saber que descansando en el sótano de May Porker hay una pequeña araña llamada Peter y que mientras trabaja en un secador atómico, May recibe una gran dosis de radiación. Esto la vuelve temporalmente rabiosa y May muerde a Peter como resultado (No todo es igual). La mordedura convierte a Peter en un cerdito con buen ojo para la fotografía. Por eso trabaja como fotógrafo principal para el Daily Beagle y sí, Peter Porker se gana la vida vendiendo fotos de sí mismo como el espectacular Spiderham.

Estas travesuras como héroe disfrazado ponen a Spiderham contra un cúmulo de supervillanos que lo van a llevar a mover el culete más de lo debido. Hablamos de Ducktor Muerte, Bullrana, Kingcerdo (King-Pig) y Bee-Yonder (Todoabejorro). Aunque tendrá ayuda de los grandes como Conejulk, Gaticán América y, por supuesto, Los 4 Peludos. Y más: Thrr, el Perro del Trueno protagonizando Retales de Arfgard y Deerdevil, ¡El Mamífero Sin Miedo! Pero más todavía: Nick Furry, agente de SHEEP (Ovejas), el Ganso Fantasma, el Invencible Iron Mouse, Croar y Tejón, la Asombrosa Hormiga Hormiga… Y cuando los héroes del Universo Mármol no pueden echarle una mano a Spiderham, puede confiar también en sus amigos y jóvenes reporteros del Daily ¡Beagle! Aunque nunca fiarse ni un ápice del desdichado de J. Jonah Chacal, ya sabéis.

Las historias son extremadamente divertidas. La creatividad del co-creador Tom DeFalco está muy presente, y la asistencia de guionistas con experiencia como Fred Hembeck y Mike Carlin (Star Trek) se hace notar. Además de unos dibujos que diría que entran bien, el trabajo de Steve Mellor y su hermano Mike en la historia debut es quizás el más llamativo. Hay un toque de art-decó ahí que no esperaba. También decir que a menos que los lectores de Star Comics de a mediados de los 80 sean mucho más maduros que los lectores de la Generación Z de hoy, no veo ninguna razón por la que este cómic deba ser calificado para adolescentes.

Más de cuatrocientas páginas con toneladas de bromas y huevos sorpresa a descubrir.

Reseña: Las Crónicas de Conan. Bajo los Cerros Sombríos, de Busiek, Nord y Nicieza

Creo que no somos los únicos por aquí que esperábamos con ansia la llegada del integral o integrales del Conan de Busiek. Porque uno/a, el verdadero amante de Conan, quiere a su amado personaje de Fantasy en tomos gordos, con largas aventuras para leer, todo en una mano, en un brazo de bíceps gordo como es el nuestro, ¿no? La leyenda, el Conan bajo la visión de un guionista contemporáneo y no un cualquiera. Kurt Busiek es para mí y para muchos un autorazo de renombre al que atribuyo la reinvención del cómic de superhéroes, cosa que alcanzó con su maravillosa Astro City. Y aquí, junto al artista Cary Nord (Daredevil) vuelve a la figura del Conan el Bárbaro, un personaje que vuelven fácil de entrar para las nuevas generaciones; cosa que no ha gustado a los más puristas pero a los que les digo que antes de negarse a cruzarse el río, lo ideal es coger un palo y ver cuanta profundidad tiene.

La posibilidad de sorpresa siempre existe.

Comenzando con Conan The Leyend #0 comienza este primer tochal de Biblioteca Conan. Después, los primeros diecinueve números de la colección que ha dado bastante que hablar. Un prólogo de la nueva serie en curso que aviva los fuegos primitivos de tu mente y reintroduce a los no iniciados en el mundo del cimmerio. Un one-shot introductorio que presenta a los lectores la leyenda del bárbaro en expansión, lujuriosa y llena de batallas, estableciendo personajes y situaciones importantes para la serie y preparando el escenario para las aventuras por venir. Pero también el primer número actúa como una buena introducción al personaje de Conan y se demuestra una experiencia de lectura agradable. Hay algo refrescante en un personaje que acabará libremente con la vida de alguien que la historia muestra claramente como un ser asquerosamente lascivo. Tuve que sonreír ante los comentarios de Conan en la mesa de un comedor donde básicamente insulta a su anfitrión, diciendo que es tan feo que le está quitando el apetito.

Posteriormente, vamos con los “rescates” de los grandes relatos de Robert E. Howard, esta vez reinterpretados por los autores mencionados. En el #2 se trata La Hija del Gigante de Hielo, la primera historia reconocida del personaje, donde tras una sangrienta masacre, Conan se encuentra cara a cara con la máxima visión de la belleza, un espíritu irresistible de los páramos del norte, un ser que seducido por su belleza desnuda… Conan termina por enfrentarse a sus hermanos trolls. Una trama que te llev no mucho después a varias grapas con Conan dirigiéndose a la batalla contra los hombres de Asgard, sin sospechar nunca la traición que le reservan, ni el horror que desciende de Hiperbórea. Un relato famoso que sirve para un arco argumental que os enganchará a la saga y que establece muy bien la idea de que el bárbaro es demasiado confiado cuando se trata de su trato con los demás. Incluso los lectores más novatos en el personaje, van a ver que este tío es un baturro con poco cerebro y demasiado músculo y brutalidad. Tema bien rescatado de los inicios del personaje.

Y más aventuras. Un Conan cautivo es llevado al norte encadenado y descubre cuán equivocada estaba su visión de Hiperbórea como una tierra “de ciudades resplandecientes, de riquezas y maravillas, y mujeres exóticas, que viven vidas de serenidad y contemplación, en paz con toda clase de aves y bestias, desde el cordero hasta el grifo y la leche y la miel fluyen en arroyos desde las colinas”. Robert E. Howard insinuó las pesadillas que sufriría el personaje en su paso por Hiperbórea, pero Busiek y compañía las revelan aquí por primera vez con lívidos detalles.

En cuanto al dibujo, Cary Nord hace un trabajo fantástico. Representa además, detalles muy cuidados como cuando Conan es inducido por las drogas y se muestra su confusión visual. Jamás había visto a nadie dibujar algo así tan bien. Pero lo decía antes. Conan the Legend fue diseñado para servir como una introducción perfecta al personaje. Una nueva serie, la primera del siglo XXI, una vez que Dark Horse obtuvo los derechos. Se lanzó el primer número en USA al precio de 25 centavos. El mismo precio que tuviera la primera aparición de Conan, en la clásica revista pulp Weird Tales allá por 1932. Fue un detallazo. Un guiño bien curioso.

Como completista de Conan, te meterás en el agua sin pensártelo. Como interesado en el personaje, coge un palo y prueba la profundidad del río.

Reseña: Marvel Omnibus. Tierra X. Alfa, de VVAA

Una de las grandes obras Marvel publicada en uno de los grandes tochales que uno/a va a poder encontrar en librerías en apenas dos días es Tierra X: Alfa. ¿Esperado? No sé… pero querido, amado y deseado en cuanto ves la edición, ya os digo yo que sí. Estoy hablando de un poderoso Marvel Omnibus que da miedo tanto en potencia de brazos como en valoración a la hora de llevarlo en el metro. Pero la sensación de que llevas algo muy valioso y que te lo pueden robar, eso no te lo quita nadie. Y eso que te vienes un poco arriba al poco de leer los doce primeros números con los que empieza este tochal (Earth X 0#-12#). Y bueno, su Epílogo súper importante también, y el Sketchbook siguiente para el deleite de cómo se inició todo en la cabecita del maestro de la ilustración Alex Ross. Un señor que «humanizó» a los superhéroes.

Pero no nos olvidemos que estamos hablando de un Marvel Omnibus, es decir, contiene todo-todito-todo de la obra que da título al tomo. Y eso, en este caso, es mucho decir. Uatu, Hombre Máquina, Capitán América, Thor, la familia Black Panther, Hulk, Miss Marvel, Rayo Negro, Doctor Muerte, Hank Pym/El hombre Hormiga, Ojo de Halcón, Iron Man, Daredevil, Elektra, Bullseye, Fénix Oscura, Los 4 Fantásticos, Namor, un enorme número de X-Men, Dazzler, Mefisto, Lobezno, Capitán Britania, Lorna Dane/Polaris…, puedo estar reseña y media diciendo la cantidad de personajes que aparecen en estas aventuras. En un principio, Tierra X fue una serie limitada de cómics publicada en 1999, escrita por Jim Krueger y a los dibujos John Paul Leon. Estaba basada en unas “notas” creadas por Alex Ross, el cual presentó a Marvel una versión distópica de dicho Universo Marvel. Y gustó. ¿Triunfó? Diría que también pese a que en aquellos no gustaba ni un ápice que se tocara nada del clásico pijameo marvelita. Por tanto, vinieron seguidas dos secuelas, Universo X y Paraíso X, e incluso una precuela denominada Marvels X. Cantidad de aventuras que nos llevaron a la que terminó por llamarse Tierra-9997. Por resumiros un poco, en la primera trama se nos presenta Tierra X como uno de los varios planetas implantados como sistema celestial en gestación. Rayo Negro libera las nieblas mutagénicas en la atmósfera de la Tierra, buscando transformar a la humanidad en Inhumanos para que su gente no sufra. Y ciega a Uatu, conocido como El Vigilante, para evitar consecuencias. Y Rayo Negro y los Inhumanos abandonan la Tierra…

Incapaz de operar. Uatu transporta a X-51 (Hombre Máquina, quien hace tiempo que renunció a los superhéroes para imitar la vida de su creador humano), a la Luna para actuar como el nuevo Vigilante de la Tierra. Y X-51 se enoja cada vez más por ver como actuaba Uatu y como de loco empieza a volverse el mundo pues: tras matar a Cráneo Rojo, el Capitán América abandona Los Vengadores, considerándose no apto para el equipo. Poco después, Reed Richards construye una red mundial de centros de energía de vibranium para resolver la crisis energética, lo que provoca una reacción en cadena explosiva en todo el mundo. Y cómo os decía Los Inhumanos comienzan a mutar a la población humana de la Tierra, aunque gran parte del mundo culpa al experimento fallido de Richards. Y así todo se va tornando en desgracia.

Tierra X, en realidad, comenzó en 1997 cuando la revista Wizard pidió a Alex Ross que creara un posible futuro distópico para Marvel. Ross diseñó un futuro en el que todos los humanos ordinarios obtenían superpoderes y desarrolló el cómo algunos de los personajes más conocidos de Marvel (incluidos Spider-Man, el Capitán América y el Increíble Hulk) manejarían un mundo en el que sus poderes ahora se habían vuelto comunes. Aquel número de Wizard que contenía el artículo de Ross se agotó rápidamente. La demanda fue tan amplia que en 1999 (en asociación con Marvel), volvieron a publicar el artículo como Earth X Sketchbook, que también se agotó. Basado en este interés de los fans, Marvel encargó a Ross que creara una serie completa basada en sus “notas”. Alex Ross, Jim Krueger, John Paul Leon, Doug Braithwaite, Brent Anderson, Butch Guice, John Romita, John Stanisci, Thomas Yeates, Bill Reinhold y otros, crearon esta maravilla. Como curiosidad la encarnación de Tierra X de Spiderman hará su debut cinematográfico en el largometraje que se estrena en breve, Spider-Man: Across the Spider-Verse, representado como miembro de las Fuerzas Araña de Miguel O’Hara.

¿Opinión? Un tomo que sí, que cuesta un dinero, pero esto es como todo: haced cuentas y mirad la edición y pensad el hecho de tener todo-todito-todo lo que aconteció en este macro-evento, precuelas y secuelas y archivos originales de la historias; la idea de poder portarlo y tenerlo todo entre tus manos. Tras eso y leerlo, los vellos como escarpias. Os aseguro que un verdadero amante marvelita sentirá eso al tenerlo y leerlo. Un regalo a pedir (o pedirte), una macro-saga que provoca una sonrisa eterna para el fan de Marvel de toda la vida.

Reseña: Agujero Negro, de Charles Burns

¿Estamos de acuerdo con que una buena obra debe reeditarse una y otra vez, tener las ediciones que haga falta para que siempre esté disponible para todo aquel que quiera obtenerla? Creo que estáis en mi bando. Por eso, y por la película en ciernes que se acerca, es bueno que La Cúpula Ediciones haga lo que está haciendo con Agujero Negro, de Charles Burns. ¿Película en breve de este cómic? Fue en 2005 cuando el message-board de Comics Journal informó que Black Hole sería adaptado al cine. En 2006, la web de noticias Newsarama informó que Neil Gaiman y el co-guionista de Pulp Fiction, Roger Avary, adaptarían el guion. En 2008, Variety informó que la película sería producida por Paramount Pictures y dirigida por el nominado al Premio de la Academia, David Fincher (House of Cards, Mindhunter, Perdida, Love. Death + Robots). Y se informó que los guionistas Gaiman y Avary habían dejado la producción, informando que Fincher no quería usar su guion. Pero en 2010, David Fincher también se bajó del carro. Sin embargo, a partir de octubre de 2013 volvió a estar vinculado a la dirección de Black Hole y todos dimos gracias al cielo por ello. Y desde entonces el proyecto salió adelante. Y en Sundance esperamos algún año el estreno como agua de mayo.

Por eso, y quizás por muchas otras cosas, quizás es el momento que sepáis del genial argumento que aporta Agujero Negro, de Charles Burns. Un cómic con un guion apocalíptico original como pocos.

Agujero Negro fue una serie limitada de doce números escrita e ilustrada por Charles Burns y publicada primero por Kitchen Sink Press y luego por Fantagraphics. Fue publicada de forma recopilada en 2005 por Pantheon Books y traída a este lado del charco (entre otra obras del autor) por la siempre genial La Cúpula Ediciones. ¿De qué va exactamente? La historia trata sobre las secuelas de una enfermedad de transmisión sexual que provoca mutaciones grotescas en los adolescentes. Pero cuento más. Nos vamos a Seattle. A los suburbios, a mediados de los años 70. Y conocemos a un grupo de adolescentes que contraen dicha misteriosa enfermedad y vemos la repercusión en extrañas mutaciones físicas nunca vistas y como a consecuencia se convierten en marginados sociales. Muchos de ellos huyendo de casa para vivir en un bosque cercano. Pero la trama se centra en dos personajes que a menudo narran la historia. Chris, una estudiante popular y respetada, y Keith, un fumeta que parece experimentar ansiedad. El punto de vista cambia bastante (obviamente) de uno a otro. Pero están relacionados. Cuando los conocemos por primera vez, Keith está enamorado de Chris, quien es amable con él pero no le corresponde. Y es que en una fiesta Chris se enamora del popular estudiante Rob Fancicani, los dos abandonan la fiesta y tienen relaciones sexuales. Sin que Chris sepa que Rob lleva “el bicho”. Una vez que Chris se da cuenta de que ha sido infectada, ella y Rob no se hablan durante un tiempo. Keith y Chris comparten un momento en otra fiesta donde Keith venda el pie cortado de Chris. A medida que Keith se enamora aún más de Chris, ella no corresponde a sus sentimientos. Casi al mismo tiempo, Keith conoce a Eliza, una mujer joven que también tiene “el bicho”. Pero a pesar de la tensión sexual, no tienen sexo.

Mientras tanto, muchos otros adolescentes de la ciudad han contraído la enfermedad. Y empiezan a recluirse en el bosque que os comentaba. Y con la comuna formada, junto a toda una serie de sucesos, todo se torna en desgracia. Una infección no controlada que se convierte en epidemia. O pandemia. Quién sabe.

¿Os suena? Charles Burns dijo que las mutaciones provocada por “el bicho” pueden leerse como una metáfora de la adolescencia, el despertar sexual y la transición a la edad adulta. Pero creo que hay algo más detrás. Bien adaptada, puede salir un peliculón.

Reseña: Batman´89, de Sam Hamm, Joe Quiñones y Leonardo Ito

Entonces, sí, existe. Hubo una serie que nos llevaba a la continuación de la clásica película que lo petó en los 90. Pero nos llevaba de una forma chula y curiosa como es la idea de si aquella historia hubiera continuado y entonces obtenemos el origen de Dos Caras (en aquel entorno, ambientación). Por eso, una versión diferente y me encanta la forma en que sucede. Cómo Harvey se convierte en una especie de tipo famoso y se postula para los puestos de gobernador y cómo ocurre todo para que este tipo llegue a ser abrazado por su dualismo… El guionista, el señor Hamm, captura perfectamente eso colocándole una curiosa relación con Barbara Gordon y tratando el cara a cara con Bruce (también conocido como Batman, jajaj). Con todo, genial el cómo responde a este tipejo que nunca mejor dicho, tiene dos caras.

Batman´89 marcó el retorno del guionista Sam Hamm al cómic. Hamm es un guionista y autor de cómics estadounidense, conocido por co-escribir el guion del Batman, de Tim Burton. También estuvo en los créditos de Batman Returns aunque cuentan que la versión final de la película para nada se parecía a lo que él escribió y ahí se desvinculó de esa «sociedad». Tras ese desliz, DC Comics invitó a Hamm a escribir para Detective Comics y el resultado fue Blind Justice, cómic en el que se presentó por primera vez al mentor de Bruce, Henri Ducard. Pero fue en 2021, cuando Hamm regresó a sus creaciones originales del orejas picudas con la serie limitada Batman ’89, una continuación directa tanto de la película de 1989 como de Batman Returns y que ahora tiene disponible ECC Ediciones en nuestro país en un genial tomito que recopila al completo la serie.

¿Es un volumen que hay que tener por completismo? Por supuesto. En especial, los amantes de las pelis de Burton entre los que me incluyo, aunque soy del bando de los que solo destacan el potencial de la primera. Pero en este cómic salen cositas curiosas que uno como fan del Caballero Oscuro debe ver. Me encanta el nuevo Robin. Tiene un diseño de vestuario de Robin increíble en estas viñetas. Y el enfrentamiento entre Batman y Dos Caras creo que puede ser el mejor que existe dentro del noveno arte. Y el papel de Selina en toda la coreografía que muestra es una maravilla, que solo apreciará el lector constante de cómics de acción. Y el escenario propuesto es emocionante. Así que sí, definitivamente lo recomiendo. Es una serie muy divertida y sí, no es el mejor material de Batman, pero sigue siendo una buena lectura y si se tiene en cuenta que está escrito por el mismo tipo que escribió la película, es una lectura perfecta, sin duda. También me gusta la forma en que se usa el escenario noir de los 90 aquí y cómo se introduce la llegada de internet al escenario de entonces. E insisto, Selina, tremenda es Selina en este cómic. Que aparte de dar patadas como si no hubiese un mañana, es una genio de la tecnología, algo que nunca vimos en otra parte. Así que fue divertido presenciar sus disputas en ese tejemaneje que lleva con Bruce…, y no solo como Bat vs Cat.

El arte de Quiñones, una maravilla que nos lleva a la ambientación propuesta por las pelis en su día. Y esto lo podréis apreciar tanto en la historia como en los bocetos y la galería de portadas alternativas que trae el volumen. Muy recomendable.

Reseña: Rorschach, de Tom King y Jorge Fornés

Muchos tuvimos claro, y muy pronto, que el mejor personaje de Watchmen era Rorschach. Los que leyeron el cómic y, por supuesto, los que vieron la película. Por eso tuve muy claro desde el principio que este tomo que recopila los doce números del spin-off que hicieron Tom King y Jorge Fornés del personaje era indispensable para mí. Una historia apasionante que retoma el legado de Watchmen de la mano de dos grandes maestros del cómic contemporáneos sobre uno de los personajes más emblemáticos de un cómic que lo cambió todo.

En esta secuela moderna del trabajo de Alan Moore y Dave Gibbons y el Watchmen de John Higgins, donde aquel Rorschach seguía a un investigador anónimo en un viaje extraño y en constante cambio que revelaba corrupción política, lo ponía cara a cara con el famoso dibujante Frank Miller y subrayaba el legado perdurable y complejo del justiciero Rorschach. Ahora, el escritor Tom King y el artista Jorge Fornés llevan la investigación a un final apropiado para la colección DC Black Label, con una conclusión inquietante, eso os lo adelanto ya. Rorschach gira en torno al intento de asesinato del gobernador Turley, candidato a las elecciones presidenciales de 2020 con la esperanza de iniciar una «revolución conservadora». Uno de los posibles asesinos, un excéntrico caricaturista llamado Wil Myerson, lleva una máscara de Rorschach que, junto con una extraña grabación en cinta, incita al investigador anónimo contratado por la campaña de Turley a seguir la teoría de que el justiciero aún puede estar vivo o que su espíritu puede vivir en otras personas. Después de seguir todas las pistas, “el investigador” decide compartir sus hallazgos con el político Turley y… ya sabes, fíate tú de alguien tan falso como un político. Más falsos que los actores son.

Una colección de doce numeritos recogidos en este genial integral publicado por ECC Ediciones, donde a lo largo de toda la serie, King llena páginas y páginas con pistas falsas y sorpresas para mantener al lector inquieto en su asiento. Intentando adivinar lo que está pasando. Porque Rorschach está ambientada en la actualidad y eso le da un toque diferente. Es una historia reaccionaria en respuesta a los acontecimientos actuales en la política USA y al volátil panorama político del país. El tema de apertura de Tom King y Jorge Fornés para su propia maxiserie establece de inmediato que Rorschach se aparta del tono y el estilo que Moore y Gibbons crearon para su propia versión. Y hacen bien porque este arco argumental nos lleva a treinta y cinco años después del final de la historia clásica. Con un Rorschach abriendo la senda de las elecciones presidenciales, con la reaparición repentina y asesina del antihéroe enmascarado en un mitin de campaña en Los Ángeles. Con un número inicial en el que cada vez hay más muertos, intriga política al más alto nivel y misterios sin resolver que se remontan al pasado del Universo Watchmen. Un investigador se encuentra explorando la vida y la época de Walter Kovacs, por ejemplo, y el sangriento legado que evidentemente dejó para con el presente.

Gran parte del trabajo anterior de Tom King ha sido visiblemente influenciado e incluye referencias directas al trabajo de Alan Moore. Desde The Omega Men hasta su larga carrera en Batman. Y esa distinción la refuerza y eleva el trabajazo de nuestro paisano Jorge Fornés, acompañado para la ocasión del colorista Dave Stewart. Y es que Rorschach siempre fue en mi opinión un personaje pulp; casi imbatible, protagonista absoluto en la grandes escenas en las que participa. Los lectores que busquen una secuela directa o una continuación de la histórica historia de Alan Moore y Dave Gibbons no necesariamente la encontrarán aquí. Y aunque King también hace todo lo posible para incluir numerosas referencias al Watchmen original (sobre todo, en el último número), estamos ante un cómic, una serie, que se disfruta de todas-todas de forma independiente. Cómic satisfactorio y reflexivo.

Reseña: Spiderman 2099. Éxodo, de Orlando, Fry y VVAA

Se puede decir (¡Y no pasa nah!) que por estos lares blogueros  neoyorquinos solo se reseñan libros y cómics buenos o súper buenos. Y es cierto. Ya llevamos unos cuantos años (bastantes) en el mundo lector como para saber elegir lo que queremos leer y reseñar y por tanto disfrutar en un porcentaje muy alto. Ya que se hace, que se disfrute, podría ser una de nuestras máximas. Y de notable o sobresaliente se podría categorizar este TPB que lanzó Panini Cómics a principios de este mes que recoge los arcos de Spiderman 2099, los denominados Alpha y Omega dentro de lo que sería el entorno Éxodo.

Spiderman 2099: Éxodo-Alpha lleva a los lectores de Marvel de regreso al futuro en el mismo momento en que el arácnido descubre un complot de la Cábala para usar los restos de un Celestial muerto para crear un nuevo y valioso Jardín del Edén. ¿Cómo? Sí friend, deberías estar algo puesto en el Spiderman 2099 antes de leer esta saga. Yo aproveché y la retomé hace no mucho aprovechando que Panini la reeditaba (https://www.panini.es/shp_esp_es/100-marvel-spiderman-2099-1-shmma197-es01.html). A partir de ahí, vuelve este recopilatorio de dos arcos argumentales que bien por la editorial, a la hora de meterlos juntos en un solo volumen. Una historia donde Orlando crea una re-introducción al futuro derivado de Spiderman con una historia llena de acción, toneladas (quizás demasiadas) de tecnopalabras futuristas, un cameo del Motorista Fantasma 2099, trolls de realidad virtual y una trama de organización criminal que hace que el plan de Ultrón en Los Vengadores: La Era de Ultrón parezca francamente aburrido.

Me gustó la falta de moderación o arraigo de Orlando en este tema. Si vas a ir a lo grande y futurista, hazlo, y Orlando lo hace (“O tú kárate hacer sí, o tú kárate hacer no. Tú kárate hacer supongo… ¡Crack!). Mola cuando O’Hara se entera de un plan de la Cábala para estrellar un pedazo de Celestial muerto en la Tierra con la intención de minar el lugar del accidente mutado en busca de cualquier maravilla que surja. Los planes de la Cábala son mortales y destructivos, pero también otorgan demasiado poder potencial a una organización criminal que ya domina a gobiernos y líderes mundiales. Es decir, un futuro realmente bastante probable. Pero O’Hara no detiene el plan (ni siquiera se acerca), logra descubrir la identidad del líder de la Cábala, organizando una búsqueda para erradicarlos cortándole la cabeza a la serpiente…

Haré un mini-parón para poner en contexto qué es Spiderman 2099. Siempre hay alguien que “no está al día” y ciertos nombres le pueden sonar a chino. Spiderman 2099 fue un personaje creado por el maestro Peter David y Rick Leonardi en 1992 para la línea de cómics Marvel 2099. Una reinvención futurista que se hizo de ciertos superhéroes y que se lanzaron en aquel potente año, en general, para el país en el que vivimos. Este Spiderman es otro. Su alter ego es Miguel O’Hara y es un brillante genetista irlandés-mexicano que vive en la Nueva York de 2099. Un tipo que intenta recrear las habilidades del trepamuros original en otras personas hasta que sufre un accidente que hace que la mitad de su ADN se reescriba con el código genético de una araña. Un personaje que posteriormente apareció en numerosas adaptaciones e incluso hizo debut cinematográfico en la película animada Spider-Man: Into the Spider-Verse en 2018; Oscar Isaac le dio voz en la escena pos-créditos. Pero también un personaje del que ya está anunciada su aparición en la secuela que llegará este año 2023 en el film Spider-Man: Across the Spider-Verse, con Isaac retomando el papel.

Este volumen también incluye Spiderman 2099: Éxodo–Omega, que es el arco que termina la serie con una pelea de las buenas entre Norman Osborn y las fuerzas de la Cábala, Spiderman 2099 e incluso La Patrulla-X 2099 (con un poco de ayuda de Ghost Rider 2099). ¿Mola el cierre? Kárate hacer sí. Orlando ofrece a los lectores todo lo que pueden desear en un cómic, una gran batalla con un premio de alto riesgo para el vencedor, giros, vueltas y una conclusión satisfactoria. Miguel O’Hara es un Spiderman adulto, implacable y maravilloso.