Reseña: Los Eternos. El Crepúsculo de los Dioses, de Roy Thomas, Ralph Macchio y VVAA

La Saga de los Celestiales, aquella en la que Los Eternos tuvieron mucho que decir, se continuó en los 80 en otras series porque en realidad fue en evento grandioso que terminó por acaparar a todo el universo Marvel. En especial, a aquellas cabeceras, o mejor dicho, a aquellos superhéroes que tenían la habilidad de viajar al espacio exterior. Como en el caso de Thor, que incluso procedían de allí. Y precisamente en unos pocos de números de la cabecera del asgardiano también se desarrolló una mini-trama dentro de la TRAMA. Fue exactamente en los números del #292 al #301 de The Mighty Thor, donde vieron la luz una cuantas grapitas mensuales en 1980, que ahora se reeditan de forma genial en este gran formato en tapa dura, económico e indispensable (para saber del tema) que está publicando Panini Cómics.

El Crepúsculo de los Dioses comprenden dichos números y cronológicamente corresponde y debe ser leído como el cuarto tomo de la recuperación que se está haciendo de estos grandes personajes nacidos de la mente del maestro/dios Jack Kirby como son Los Eternos. Y vaya por delante, os lo digo ya, el tremendo dibujazo que de por sí contiene este tomo.

Indispensable muy mucho solo para amantes de la ilustración.

En este cuarto volumen de esta colección de Héroes Marvel (que si te ha gustado la peli Eternals no es indispensable, sino lo siguiente), vamos a ver que la guerra entre dioses y Eternos ha terminado. No obstante, Thor todavía tiene cuentas pendientes con la Cuarta Hueste Celestial y asiste a un encuentro con ellos. Pero todo se le va de las manos y termina luchando contra el terrible Fafnir, El Destructor y Loki. Un cómic donde Roy Thomas saca a relucir su mejor don. Y si tengo que hablar sobre “un globo ocular gigante sin cuerpo que dispara fuego” no me avergüenzo de ello. Porque son otros tiempos, otra época, otras partes del universo comiquero… Y hay un montón de extraños monstruos diferentes allí para disfrute del fan. Y el Ojo de Odin lo peta cuando sale. Nunca volverás a ser el mismo tras leer este volumen… jajaj Tira cordura, anda, tira (chiste para roleros).

Centrándonos un poco, pues sí, en este volumen se reedita el cómic (tras muchos años) donde hace su primera aparición el Ojo de Odin. Y el guion que da comienzo se sabe que procede de la cita bíblica Mateo 5:29 («Si tu ojo derecho te hace pecar, arráncalo y tíralo; porque es mejor que se pierda uno de tus miembros, antes que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno»). Aunque tergiversándo un poco el argumento. Un poco digo… Además de otros números donde se viaja a los panteones divinos de diversas culturas, se re-interpreta la leyenda marveliana de Thor para con el Sigfrido, de Richard Wagner, asistimos al verdadero origen de Odín y veremos cositas chulas e inesperadas como Gea, acunando a Thor, y recordando los eventos pasados que llevaron a la muerte de Zuras y todos los asgardianos. Revelando incluso todas las verdades sobre el nacimiento de Thor y narrando cómo la Madre del Cielo conspiró para crear los Dioses Jóvenes y así apaciguar a los Celestiales.

Tremendo todo. Este último hecho contado dentro de un cómic que cuesta una pasta a día de hoy por eBay y que desde ya puedes encontrar en librerías.

No sé qué pensáis. Pero si hacerse con esta colección de forma tan asequible y llevadera no es una de las mejores noticias comiqueras del momento en nuestro país…, no sé qué más decir. Me quedo sin consejos, sin palabras, para definir lo orgulloso que estoy de llevar esta colección adelante donde Keith Pollard, Roy Thomas, Ralph Macchio, Mark Gruenwald, mostraron lo geniales autores que son en unos años míticos que marcaron a toda una generación. ¡Por Odín! Todo es bueno aquí.

Reseña: Hombre Lobo, de Taboo, B. Earl, Scot Eaton y VVAA

Más miedo, más Terror, más cómics, más libros, venga, que aún estamos a tiempo de saborear el horror y perdernos en esos bosques oscuros, casas encantadas y aberraciones que muchos llevábamos dentro casi sin saberlo. Me llamaba la atención el saber qué y cómo lo habían hecho con la miniserie nueva de Werewolf by Night!, que se editó en USA a principios de 2021. La rememoración de un clásico del cómic de Terror, la traída a nuestros días de un cómic de época, pues Werewolf by Night! apareció por primera vez en el Marvel Spotlight #2 en 1972. Sin embargo, antes de la formación de Comics Code (1954), la predecesora de Marvel, Atlas Comics, ya había publicado un relato de cinco paginitas titulado Werewolf by Night! en el Marvel Tales #116 (1953). Y con la “relajación” del CC en 1971, se rescató para editar esta joyita que es el Hombre Lobo de Marvel por excelencia. Una idea que partió del gran Roy Thomas y con un equipo creativo inicial compuesto por otros maestros como Gerry Conway y Mike Ploog, incluso Stan Lee tuvo algo que ver. Aquel Werewolf by Night! fue un genial cómic clásico de Terror que se publicó en 43 números y se desarrolló hasta marzo del bendito año de 1977. Pero no hace mucho, se han estado rescatando en nuestro país en las geniales ediciones de Marvel Limited Edition que Panini Cómics y SD publican en conjunción. Yo iría a por ellos Ya. Si puedes encontrarlos, claro.

Pero ahora voy a hablaros de esta miniserie que edita Panini Cómics en este mes oscuro que se va con frío y lluvias. Un TPB del que sin duda hay que hablar. El guionista principal es Taboo (¡Agarraos!), sí, uno de los integrantes del grupo musical Black Eyed Pease. Otro famosete que le da a lo bueno. Aunque un tal B. Earl es co-guionista también. Esta miniserie de cuatro numeritos que corresponderían al Vol.3 de Werewolf by Night!, es un debut extraño pero interesante. Lo puedes percibir como un cómic de Marvel de mediados de los dos miles, tanto en diálogo como en arte. No es algo malo, es buena época también, no son los principios de los 90 pero aparte de eso, lo que funciona aquí muy bien es la gran cantidad de escenas utilizadas para construir los personajes centrales. Los cómics que me estoy acostumbrando a ver ahora tienden a pasar demasiado tiempo en escenas de acción y poca narratividad. Problemas muy gordos que se solucionan muy rápidamente casi en una sola página y eso te hace chasquear la lengua.

Jake Gomez es un adolescente nativo que vive en la Reserva Hopi en Arizona. Y desde hace algunos años, ha estado lidiando con una maldición hereditaria que lo convierte en un hombre-lobo gigante a tope de emociones incontrolables. Pero gracias a su fiel compañera Molly, ha encontrado formas de controlar y canalizar la maldición, evitar el daño e incluso hacer el bien con él. No obstante, viven en una región donde una poderosa farmacéutica… (esas empresas que creemos que son buenas pero son una mafia de cuidado), estamos hablando de una empresa que secuestra a lugareños para usarlos como ratas de laboratorio en experimentos. Por otro lado, el chamán nativo/sheriff/U.S. Marshall favorito de todos, Red Wolf ya anda rastreando a los violadores de la Ley de Kamala en el suroeste. Y su camino inevitablemente se cruzará con el de Jake. Gran personaje.

El Hombre Lobo de Taboo y B. Earl -a los dibujos Scot Eaton y Jeffrey Veregge-, ofrece una serie de escenas rápidas que frenan para contar la vida familiar y laboral de los personajes, pero sin dejar de lado el tema sobrenatural. Esto me encanta como se hace. Y es que los niños están desapareciendo y solo Jake Gómez puede enfrentarse a lo que está pasando (un tono un poco optimista y palomitero para lo que se supone una historia de Terror para Halloween, sí, tenéis razón); pero me gustó la inclusión en la serie de Red Wolf. Soy fan de los héroes nativos, en general. Tal vez, cuando me jubile y me vaya a la cabaña del bosque termine convertido en un Bigfoot, jaja.

En el frente artístico, los ilustradores hacen un trabajo sobresaliente al dar vida a la zona rural donde se debate la historia. Las noches en el desierto están muy logradas en un guión que compagina muy bien como historia de frontera. Os advierto que pese su publicación en TPB recopilatorio en nuestro país, estamos hablando de una historia que en USA todo el mundo valora de 9 sobre 10.

Reseña: Marvel Must-Have. La Muerte del Capitán América, de Ed Brubaker y Steve Epting

La Muerte del Capitán América es también algo horrendo de leer. No es una historia de Terror en sí, pero impacta. Como bien se dice, el relato que nunca creíste que llegarías a leer, un magnicidio cuyas repercusiones alcanzarán a todo el Universo Marvel; y es que si quieres leer y te intriga esta historia es un momento ideal, ya que Panini Cómics la recupera en estos geniales tomos Must-Have que son eso en definitiva: cómics debes tener y leer. Se encarga de la tragedia Ed Brubaker. El tío, el guionista, el maestro, que todo lo hace bien y se supera a sí mismo cuando trata guiones que son thrillers de películas de acción. Steve Epting, uno de sus más fieles compañeros en grandes cómics que ya son leyenda, es el otro maestro del que brota The Death of the Dream (nombre original de este arco). Obra que tiene seis partes y que ahora se recoge en el formato que os comento: bueno, bonito y barato. Y llevadero, que me gusta decir de todo lo que puedes llevar en mano a cualquier lugar sin que sufran tus muñecas.

Un cómic donde Brubaker lo vuelve a hacer. Realmente me encanta cómo se conjuga todo en esta historia: Bucky se enfrenta a su pasado/presente, construye una amistad con Falcon (que ya sabemos que no durará mucho), reaviva un pasado con Natalia… Ver a Red Skull desquiciarse lentamente. Eso no tiene precio. Incluso conocer la historia de política de fondo que se cuenta sobre el país, aún leyéndolo en 2021 (esto vio la luz en el Vol. 5 del personaje en 2007), se siente demasiado real. Y la historia de Sharon Carter tiene su cosita. Aunque si conoces a Brubaker sabes que hay una mejor manera de escribir sobre mujeres, y él sabe hacerlo, y más sabiendo cómo terminará la historia de Natalia; pero bueno. No obstante, se nota que el maestro guionista aquí no está centrado en ese personaje sino en todo lo que concierne a la muerte de un sueño como es el tío de la bandera estadounidense en el pecho.

La Muerte del Capitán América nos lleva a las páginas finales de Civil War, la trama más grande jamás contada del Capi que partió de Ed Brubaker y Steve Epting; los cuales parece que aún tenían cosas que contar, para aturdir aún más a lectores con tanta tragedia de donde partieron ondas de choque hacia todo el Universo Marvel. Repercusiones de las que aún a día de hoy se sigue hablando. El Soldado del Invierno finalmente elige un bando, después de que la Guerra Civil ha terminado. El suyo propio. Y eso repercute en que Red Skull y sus secuaces salgan nuevamente a escena. Y es que a raíz de la Civil War, el Capitán América termina siendo acribillado en los escalones del juzgado minutos antes de ser procesado (¡Bendita portada!). Y Bucky apunta su poderoso brazo hacia Tony Stark. Y se convierte en su primer objetivo reclamar el escudo del Capitán América.

Esta sería la sinopsis-base pero hay mucho más. A bote pronto os diría que en este cómic se cuentan cosas que cierra magistralmente lo contado en el UCM (Universo Cinematográfico Marvel) cuando tratan este tema en el film Capitán América: Civil War. Más que nada porque allí no “baleaban” al Capi aunque si que lo pasa mal queriendo defender a Bucky de las acusaciones. Y las secuelas de su muerte o desaparición y la cuestión de quién será su relevo se lo llevaron a un final de otra saga con un «Y murieron felices y comieron perdices». Más una serie de TV que cuenta la lucha entre Falcon y Bucky por la sucesión, claro. Pero Brubaker continuó por el camino trágico que es realmente lo que pasó. Más que nada, porque se ha tenido en cuenta en la continuidad Marvel de los cómics hasta el día de hoy. Se puede decir que todo lo que toca Brubaker se convierte en canon. De ahí la importancia de este cómic que hoy os reseño.

La Muerte del Capitán América desencadena una dramática cadena de eventos que lleva a Bucky, Falcon, el Agente 13 y la Viuda Negra al centro de atención. Insisto, tengo que presentar nuevamente mis honores ante el tandem Brubaker/Epting por el gran trabajo de hacer que Bucky parezca un digno sucesor del escudo. Además de poner en la sartén a un Red Skull súper interesante, una amenaza viable a pesar de que ha sido derrotado cientos de veces a lo largo de los años. Un tomito donde se recopila por primera vez una edición de lujo completada con decenas de extras, la saga que sacudió a toda una generación de lectores y llegó hasta el último lugar del planeta.

¿Deseas saber más?

Reseña: El Asombroso Spiderman. Matanza Máxima, de Tom DeFalco, J.M. DeMatteis, Todd Smith, David Michelinie y VVAA

Siempre que se viene una peli Marvel suelo recomendar el cómic de dónde procede dicha historia o los que al menos se han utilizado como inspiración. Porque no siempre son exactamente el mismo argumento. De hecho, suele ser normal que guionistas y directores sólo usen una parte del cómic, y luego están sus aportes. Por la sencilla razón de decir ¡Eh! ¡Qué nosotros también estamos aquí!

Se viene el film en cines Venom: Let Ther Be Carnage (Venom: Habrá Matanza) y con una historia muy potente, en mi opinión. Diría que teniendo como base, una de las mejores tramas Marvel que he leído en mucho tiempo y que si no fuera por el pijameo, incluso se podría categorizar de tremendo thriller, potente historia de asesinos en serie. Siendo concretos, el film que se estrena este mismo viernes 15 de octubre (que tiene como subtitulo toda una declaración de intenciones o respuesta al fan de cómics Marvel de toda la vida), contiene una historia base que parte de lo que podéis encontrar en El Nacimiento de Matanza (https://www.cronicasliterarias.es/?p=5158), aunque me consta (tengo amigos que ya la han visto) que lo que se cuenta en el arco Matanza Máxima también se ha tenido en cuento para el film nuevo. Y algo de eso deben saber en Panini Cómics porque recién publican este mes un sendo integral de Marvel Héroes con la mítica aventura de los 90, que creo, nunca fue recopilada de esta forma. Y que no solo contiene el guión mencionado (un arco argumental que englobó nada más y nada menos que catorce números de diferentes colecciones como fueron Web of Spiderman, The amazing Spiderman, Spider-Man Unlimited…), también números precedentes al enorme evento: The Amazing Spider-Man #366-#380, algunos Anuales…, así como algunos one-shots que se hicieron de por medio y donde también se comentan los casos de asesinato y encuentros con el susodicho. Y como no os puedo hablar en tan solo una reseña de todo el contenido del compendio, hablaré de los dos grandes arcos que se incluyen que en definitva es lo que os va a molar.

Empiezo por el bueno, por el potente, Matanza Máxima que da nombre al tomo y os digo ya que es uno de los mejores arcos que se pueden leer del trepamuros con los guionistas-maestros Tom DeFalco y J.M. DeMatteis dándolo todo y redefiniendo la lucha entre héroes y villanos del modo en que a los amantes del buen cómic nos enamoraba allá por los 80-90. Mezclando acción y tramas que te mantienen “conectado”. Historias atemporales como Matanza Máxima que vio la luz en 1993 pero que se disfruta muchísimo a día de hoy. Donde vemos el regreso de Matanza (Carnage) a la acción, el cual ha reunido a un grupo de asesinos para emprender una ola de asesinatos en nuestra amada ciudad de Nueva York (Manhattan).

La historia comienza con el Bicho escapando de la prisión de Ravencroft con una mujer llamada Shriek. Pronto se encuentran con un duplicado mutado de Spiderman llamado Doppleganger y deciden «adoptarlo». El trío comienza a masacrar a personas inocentes, cosa que atrae la atención de nuestro querido vecino Spidey. Pero Matanza, Shriek y Doppleganger escapan continuamente. Spidey gana como aliados a Capa y Puñal, los cuales le ayudan a rastrear a estos asesinos despiadados. Mientras tanto, Eddie Brock también ha descubierto que Matanza ha vuelto. Por lo que promete matar a su descendencia… y en una tremenda lucha termina derrotado a las puertas de donde vive Peter. Comienzan entonces la alianzas entre los dos bandos: Carroña, Demoduende, Grito y el doble demoniaco de Spiderman versus el Hombre Araña reclutando a Estrella de Fuego (Firestar), Morbius, Deathlok y al Capitán América. Tremenda trama. Donde vais a ver a Spiderman llevado a sus límites.

La otra gran trama es La Invasión de los Mata-Arañas (que viene editado antes), trama que comprende seis números, una historia que empieza con un Spidey confundido por la reaparición de sus padres muertos después de mucho tiempo, a la vez que emboscado (aparentemente al azar) por múltiples asaltantes robóticos. No mucho después, le llegan noticias de avistamientos y estragos provocados por cientos de arañas robóticas que están atacando toda la ciudad.

DeFalco y DeMatteis son grandes narradores y sobra decirlo. De hecho, para mí son los mejores autores que han trabajado el trepamuros. Con los que más he disfrutado de sus historias, desde luego. Nadie me ha dado nunca nada mejor. Un gran fan de Spidey, un gran fan de Matanza -mirad, lo que os digo-, incluso, un verdadero fan de Veneno, va a disfrutar de lo lindo con este tomo de Matanza Máxima.

Un Marvel Héroes indispensable.

Reseña: Los Eternos. Matar a un Dios Espacial, de Jack Kirby

Matar a un Dios Espacial es más caviar Kirby en formato económico. Continúa la colección que muchos llevamos adelante donde se está publicando todo lo concierne a Los Eternos; lo mejor, o mejor dicho todo, de la serie clásica de donde proviene todo el germen para el film épico en ciernes que se nos viene en encima dentro de la UCM.

Matar a un Dios Espacial abre con The Eternals #12 USA que se publicó en 1977. Donde un grupo de Eternos se sorprende cuando se topan con un buen contingente de invitados, invitados que no esperaban ver. Y donde la llamada Uni-Mente toma forma para el horror de todos. ¡Presenciad LA VISITACIÓN que se materializa ante nosotros! Los Eternos toman el cielo, llevando a Margo y Sam Holden con ellos.

Y me encantó, me gusta y me llamó la atención que justo después nos metan en el tomo el primer Annual de Los Eternos que vio la luz a finales de ese bendito año. Cosa que nos demuestra que Panini Cómics está haciendo un tremendo trabajo con la colección, sirviéndonos todo-todito-todo de la cabecera, además, en orden cronológico.

Donde encontrar a Zuras mostrándole a Thena una imagen en una pantalla de visualización de un hombre neandertal arrasando la ciudad de Nueva York. Zuras, convencido de que sabe quién es el responsable de esos actos de ese ser: ¡Zakka, el Maestro de Herramientas, un Desviante de varios siglos de antigüedad! Y Thena cree que puede manejar a ese Zakka. Pero a ese tío color verde lo conocemos nosotros con otro nombre… (Es curioso como Zuras hace su aparición aquí, y luego desaparece para aparecer al final del Eternals #15). ¿Kirby brindando por los cliffhangers? Por supuesto. Y en ¡Astronautas!, vemos al hermano Tode, llevado por sus sirvientes, conduciendo a Kro a un área de trabajo importante dentro de Lemuria. Aquí, Tode ha construido un «regalo» para los Celestiales: ¡una inmensa bomba, un buen regalito para destruir su nave nodriza…

Es que es maravillosa esta obra. Jack Kirby nos mete en vena una nueva mitología con personajes que a su vez son semi-dioses, que a su vez son superhéroes y se brinda por lo clásico, lo antiguo y a la vez lo evolucionado. Lo futurista y el tema espacial como caminos que llevan a Olimpia. ¿Otro ejemplo? En este último número que os comento los protagonistas se dan cuenta de que alguien está investigando a los poderosos Celestiales. Pero han percibido que  son… ¡Dos astronautas estadounidenses! Terry Parker y Matt Durgan, enviados en un vuelo especial para investigar una nave nodriza que no entienden y para colmo, van armados con materiales telescópicos avanzados.

Tenemos Desviantes, Eternos, Celestiales, superhéroes y humanos; todos encontrándose en una misma trama. Una epopeya. Además, aquí vamos a ver al verdadero Hulk por el que tanto brindaba Kirby; ese que siempre fue para mí un personaje épico, de renombre, una bestia desatada que no sabe lo que hace y fuerte e incontrolable como una estrella a punto de explotar. Como pocos seres vivos en el Universo. No el mamarracho que sale en las pelis donde cualquiera con pijama lo tumba. Pero aquí hablamos de un gran arte, y Kirby creando un malvado Hulk de época. Como ese mismo con cuyo “desprendimiento de retina” la lió y sirvió para juntar a Los Vengadores en su inmortal número #1.

Y las escenas de la destrucción de Kirby son maravillosas siempre. Especialmente, cuando un edificio cae… jajaj. Y poco a poco vamos conociendo más de esta mitología y otros tantos seres que Kirby tenía en esa inmensa cabeza llena de imaginación. En este tomo, por ejemplo, es la primera vez que vemos el hogar de los Eternos Polares…

Mirad, es tan increíble esta colección, tan indispensable, que no es otra cosa que la mejor edición que se ha hecho hasta el momento de esta genialidad del maestro. En color, con todos los detalles e insisto, a bastante buen precio. Una edición que incluso aporta los trabajos o ensayos como ¿Por qué mutados? o Pronunciamientos Eternos que Kirby incluía de su puño y letra en algunos números al final.

La colección que estoy más orgulloso de llevar adelante.

Reseña: MLE. Los Defensores. Los Hombres Cabeza, de Steve Gerber, Sal Buscema y VVAA

Ya que obviamente es imposible recuperar series completas clásicas, que duda cabe que es una buenísima idea recopilar por arcos argumentales las mejores historias de grupos de renombre como Los Defensores.

Recuerdo que en mi niñez ochentera Los Defensores no dejaban de ser un grupo menor aunque todo el mundo los coleccionaba como oro en paño o se volvían locos por leerlos y tenerlos. En mi caso, los conocí gracias a un par de números de Ediciones Zinco que mi abuelo me había conseguido a saber dónde. Por que esa era otra. En aquellos tiempos, pensar en conseguir una colección en este país número a número, eso era imposible. Tenías suerte de conseguir algunos y rezar porque su contenido en guión se cerrara. Si no, te quedabas a medias. Por eso nunca dejaré de alabar el gran momento comiquero que estabas viviendo gracias a los integrales y recuperaciones de cómic ochentero que las editoriales están haciendo en nuestro país. Casi cada mes, se publican cositas que uno había dado por perdidas en el fin de los tiempos.

Y ver que se publica un nuevo Marvel Limited Edition con Los Defensores, me lleva a ese paraíso casi lupanar de grandes cómics de mi memoria. Los Defensores: Los Hombres Cabeza recopila los números de The Defenders #26-#41, el primer Annual, Giant-Size Defenders #5 y el gracioso Marvel Treasury Edition #12. Estamos hablando de la conclusión de la etapa de Steve Gerber con dicho grupo. Gerber fue un guionista de cómics estadounidense al que siempre le perseguirá la fama de ser co-creador del personaje satírico Howard El Pato. Ese que tanta nostalgia nos dio cuando lo vimos en los post-créditos del film de Los Guardianes de la Galaxia. Pero Gerber hizo otras muchas cosas. Llegó a redefinir la época temprana del Hombre-Cosa, y entre sus grandes trabajos se le reconoce haber creado buenísimas aventuras con Omega the Unknown, Marvel Spotlight: Hijo de Satan, Los Defensores, Marvel Presents: Los Guardianes de la Galaxia, Daredevil e incluso con Foolkiller (ese raruno nombre de cuatro personajes diferentes que aparecen en algunos cómics USA. Un autor que era conocido por incluir extensas páginas de texto en mitad de algunas historias y rarunadas varias. Un guionista que fue incluido póstumamente en el Salón de la Fama del Cómic Will Eisner en 2010. Pero, sin duda, un guionista al que le gustaba romper constantemente las reglas del género superheróico. Y eso se percibe bastante en Los Defensores: Los Hombres Cabeza, donde se ofrece una de sus sagas más celebradas con la llegada de Los Guardianes de la Galaxia a nuestro tiempo.

Siempre he sido un fanático de las historias futuristas y creo que es desde que muy pequeño leí La Última y Primera Humanidad, de Olaf Stapledon. Lo encontré en la biblioteca del colegio, creo que cuando cursaba 5º de E.G.B. (¡Qué ya no existe!). Con los años me di cuenta que era rarísimo que un libro así estuviera en dicho lugar. Y es curioso como tiempo después me llegué a enterar que el culpable era mi profesor de Lengua, el cual tenía tantos libros en casa que iba trayendo y aportando a la biblioteca del recinto. Pero este no es el caso. El tema es que es una historia que mola por cómo se proporcionan antecedentes antes y después de que ocurran los eventos más importantes del libro. Y los detalles no son estrictamente necesarios. Se enviaban héroes de nuestro tiempo al futuro casi únicamente para que disfrutaran aventuras futuristas. Fue esta novela la que se me vino a la mente al leer Los Defensores: Los Hombres Cabeza.

El futuro de Los Guardianes de la Galaxia les ha llevado a Tierra-691. Parece ser la misma línea de tiempo donde se ubica en estos momentos Killraven y la Guerra de los Mundos. Pero la historia empieza en Palisades, donde Jack Norriss todavía no acepta el hecho de que Valkiria no es su esposa Bárbara, sino una nueva persona que habita su cuerpo. Incluso la obliga a besarla, lo que a ella le molesta mucho. Pero de repente, hay un terremoto y Jack cae por un acantilado y Valkiria monta a Aragorn y lo lleva a un lugar seguro… Pero no hay fallas sísmicas en Nueva Jersey. ¿¡Qué está pasando!? De vuelta al Sanctum Sanctorum, Los Defensores están recibiendo informes de un clima loco en todo el mundo y Doctor Strange lo atribuye al desplazamiento temporal causado por unos visitantes del futuro llamados Los Guardianes de la Galaxia (los clásicos, los buenos: Vance Astro, Charlie-27, Yondu y Martinex). Pero aquí hay un problema. Seguramente todo se esté torciendo porque Vance Astro también existe en esta línea de tiempo. Aquí es un niño, eso si. Y si habéis leído a Los Guardianes clásicos sabréis quién es. Que por cierto siempre me ha flipado saber quién es, hecho que no todo el mundo sabe.

A partir de aquí toda una serie historias y argumentos que teletransportan a una aventura que se convierte en macro-saga cuando todos los eventos hacen “bizcocho” en tu cabeza.

Los Defensores: Dr. Extraño, Hulk, Valkiria, Halcón Oscuro, la vuelta de Nebulón, un cruce alucinante con Howard el Pato y… ¡Los Hombres Cabeza!

Steve Gerber y Sal Buscema dándolo todo.

Reseña: Marvel Must-Have. Masacre. La Guerra de Wade Wilson, de Duane Swiercynski, Jason Pearson y VVAA

Cuando no te fallan con el criterio es obvio que la confianza sea máxima. Estos Must-Have de Panini Cómics son en definitiva eso: Tienes Que Tenerlos. Historias muchas, las mejores o de las más punteras de dicho personaje o grupo de superhéroes. O grandes arcos argumentales o geniales eventos. Así son y así lo he comprobado ya con Dinastía de M (https://www.cronicasliterarias.es/?p=6608), Planeta Hulk (https://www.cronicasliterarias.es/?p=3703) o la maravillosa El Guantelete del Infinito (https://www.cronicasliterarias.es/?p=3210); por solo mencionar de las últimas joyitas reseñadas por aquí. Pero hay más. Muchas más y siguen publicándose otras. Y lo mejor de todo es que son tomitos en tapa dura y a un precio súper económico. Ese es su verdadero poder.

Llevo escuchando recomendaciones de lectura de La Guerra de Wade Wilson, pues años. Prácticamente, desde que se publicó por primera vez en 2010. Pero por una cosa o por otra nunca ha llegado a mis manos. Como habréis podido ver, no se ha reseñado mucho Deadpool (Masacre) por aquí. Y no es porque no me atraiga o guste el personaje, es de esas cosas extrañas del destino. No te has puesto con él y no te has puesto con él. No hay más. Nunca nos hemos tomado un té juntos (tampoco un whisky) pero si que nos hemos visto constantemente por el barrio…

He podido percibir rápidamente que Masacre: La Guerra de Wade Wilson brinda por la originalidad. Esta miniserie presenta a Deadpool contando su historia temprana como superhéroe de fuerza de ataque. Pero que no os suena a historia de origen porque no lo es. al menos, no como las entendemos hoy en día. Es más bien una mirada libre de continuidad al personaje desde una nueva perspectiva peliculera en un guión que Duane Swiercynski comprende en cuatro números. Una historia con la que los fans pudieron ver regresar al personaje después de una breve temporada sin sus historias. Pero como La Guerra de Wade Wilson fue un proyecto de Marvel Knights, la continuidad no es una preocupación. Eso hay que tenerlo en cuenta. Porque hay algunas violaciones claras al canon aquí. Pero si puedes aceptar que Masacre, Bullseye, Silver Sable y Domino fueron operativos militares activos hace más de veinticinco años, entonces la historia será bastante de fácil de digerir… jajaj.

Como un flashback transmitido por Deadpool a los miembros de una audiencia en el Senado, el guión rebota entre ambas líneas de tiempo con bastante rapidez. La mayor parte del humor en el guión proviene de esta interacción, ya que el guionista juega con la tendencia de un Deadpool rompiendo la cuarta pared. Algo que provoca que rías entre dientes constantemente, sobre todo, cuando la narración de Deadpool trata el disgusto constante de sus compañeros de equipo. Pero tengo que decir que el Deadpool de Swiercynski no es tan gracioso como esperaba. Y quizás lo agradezco. Por que un guión de constante humor en un contexto que en realidad debe ser más acción que otra cosa, puede morir de éxito. Es por eso que los problemas comienzan con Wade Wilson, nuestro mercenario favorito, siendo llevado a la corte y presentando un caso. Ha muerto gente y los tribunales quieren justicia. Desafortunadamente, su único testigo vivo es la sobreviviente a dicho infierno. Deadpool inexplicablemente complica, serpentea y cuenta una historia sobre cómo el programa Arma-X lo convirtió en un monstruo y luego lo involucró en un grupo encubierto de asesinos que fueron enviados en misiones secretas por parte del gobierno USA. Y es curioso, nos encantaría creerle… pero no podemos.

Una trama que se mueve de un lado a otro entre presente y pasado, tratando de sortear bromas enloquecidas y momentos de horror. Un cómic donde Duane Swierczynski intenta responder algunas preguntas persistentes sobre el pasado de Deadpool y arrojar algo de luz sobre una masacre que tuvo lugar en México, de la que hay pocos datos.

Creo que es un cómic adecuado pero no tan sorprendente como esperaba. Me lo habían puesto como indispensable y… No obstante, es entretenido y se lee en un periquete. Palomitero, como se suele decir. Swierczynski domina el sentido del humor de Deadpool, eso si, y quizás eso sea lo importante con este superhéroe, ¿no?

A todo eso sumadle una historia de fondo llena de misterios sin resolver.

Para fans.

Reseña: Supervisor. El Disparador Rubicón, de Jed MacKay y Alessandro Vitti

Los que disfrutamos de los nuevos juegos de mesa y de joyitas como el nuevo Marvel Champions LCG hacemos una genial combinación con los cómics de Marvel que se publican actualmente pues las aventuras y enfrentamientos que se pueden dar en el juego dan lugar a que quieras saber más de ciertos personajes, sobre todo, y en mi caso, de villanos de los que poco sabía. Me parece tremendamente curioso pero obvio pensar que tanto Fantasy Flight Games como Panini Cómics están al tanto de las publicaciones de una editorial y otra para hypear aún más si cabe al verdadero fan de Marvel. Fue así como llegué con muchísimas ganas de querer leer este TPB de Marvel Héroes donde tenemos a Supervisor (Taskmaster) como protagonista. Una aventura en solitario del mercenario más mortífero del Universo Marvel. Supervisor es un villano que es percibido como amenaza legítima para héroes de primer nivel pero un espantoso ser para cualquier persona que no lleve capa. Esto lo tenían muy claro el equipo creativo de Jed MacKay y Alessandro Vitti cuando idearon la trama, y así inician con una mini escena de broma que pronto se convierte en el acto frío de un asesino sin miramientos.

Comenzamos con Supervisor usando sus súper habilidades fotorreflectantes como disparador de tragedias en un torneo de golf organizado por la mafia. Con momentos muy Deadpool, no pasa mucho tiempo hasta que todo se vuelve un caos; sangre, tiros, muertes por doquier… Y un asesino vestido con traje de cuero, motocicleta y metralleta a dos manos pegando tiros. Cuando es rescatado por Nick Furia, Supervisor se entera de que Maria Hill ha sido asesinada y que él es el principal sospechoso. Hasta aquí todo bien. O no. Por que Furia le dice necesitar que memorice la presencia física de tres de los mejores súper espías para abrir una bóveda en un lugar que contiene… Bueno, no voy a profundizar mucho más en esta misión. Sería un spoiler en toda regla. Pero una aventura que se degusta de una sentada y que lleva a pensar que quizás es posible que algunos estéis interesados en saber de este personaje tras conocer al tipo en la película Black Widow. Aunque ya os aviso que veréis poco semejanza entre ambos. Y eso que se puede decir que la agente Romanoff es la principal antagonista de este arco argumental.

La escritura en sí es divertida. Como os decía, encontramos a un Supervisor como una especie de Deadpool con momento melancólicos. Diría que es su punto fuerte, las constantes indirectas-directas entre Supervisor y Nick Furia te sacan la sonrisa mínimo. La trama tiene momentos que son bastante buenos (la pelea de Hyperion en particular es un punto culminante de la serie), seguidos de escenarios genéricos y algo “familiares” que siempre gustan. El ejemplo más claro es una escena en Corea del Sur, en la que Supervisor realiza una artimaña creativa para obtener acceso a la oficina de Ami Han, solo para que al final tenga que darse de tortas con lo que le espera dentro. También se puede alabar de esta aventura la consistencia del diseño de personajes y la fuerza de la coreografía que muestra. Escenas de combate dignas de película de acción, aunque la resolución del conflicto resulta muy apresurado, quedando la sensación que el guionista tenía para más.

Supervisor: El Disparador Rubicón recoge la miniserie de cinco números que se ubicó dentro del Vol.3 de Taskmaster que se publicó en USA al inicio de este mismo año. Un trama que no esperaba tan entretenida, la verdad, pues me quedaba la duda de si Supervisor me parecería tan intrigante como en el juego de cartas Marvel que al principio de la reseña mencionaba. Y cierto es que algo más he podido conocer. Aunque siendo sincero no es una trama que quedará en tu mente por siempre porque hay bastantes aventuras de este tipo. Pero el momento bueno de lectura te lo da. Una lectura ligera y divertida con acción bien renderizada y algunas púas decentes, o mejor dicho, bromas divertidas entre Supervisor y Nick Furia. Y una conjunta de escenas de lucha muy bien coreografiadas.

Lectura adecuada para un viaje en metro o en tren o para la sala de espera del dentista. Lectura palomitera que es lo que iba buscando.

Reseña: Los Eternos. El Día de los Dioses, de Jack Kirby

Si tenéis la mínima noción de lo que se viene en Marvel, tendréis como yo el hype por las nubes. Sobre todo, tras el trailer de Eternals, que dará pie a una nueva saga o evento en la Marvel UCM. Los Eternos (como supongo la llamarán en español), por fin, a la gran pantalla. Una de mis series clásicas favoritas del cómic de superhéroes y que sinceramente nunca pensé que fuera llevada al cine, y mucho menos, por una productora multimillonaria. ¿Por qué es de mis favoritas? Por que en formato cómic, Los Eternos es Jack Kirby en esencia. Él se lo guisa, él se lo come, con su don y con su inspiración a tope. Una creación de las buenas, propias, suyas y de nadie más. Del maestro dios del noveno arte como siempre será considerado el gran Jack Kirby. Y ahora me dicen que llegará a la gran pantalla en noviembre (o diciembre diría yo) de este año, veo el trailer, famosos por doquier interpretando y todo se resume a HYPE POR LAS NUBES hacia el infinito y más allá. Y ya sabéis qué pasa, cuando la tormenta de ideas de grandes títulos Marvel cinematográficos asoman, los de aquí solo tenemos que poner el ojo en Panini Cómics para ver qué se edita, qué se publica, y en este caso, lo más importante, qué se reedita y en qué formato. Porque sabemos que Panini nos traerá todo lo que pueda de dicho título que se pondrá de moda. Y eso siempre es de agradecer a una editorial. Que mire por el lector antes que nada, sobre todo, económicamente.

Por que Los Eternos es de esas grandes obras que solo conocen los más metidos en este mundillo, los cuales, sabemos que hasta el momento, no ha tenido una edición que se precie. De hecho, siendo una de mis favoritas, nunca pude conseguirla en color. Y ahora, my friends, is this the moment. Lo guay es que siendo Panini Cómics quien está detrás sabemos que llegarán cositas. Y con tiempo de sobra. De hecho, entre las novedades de este mes (pasado) ya podemos encontrar no solo este primer tomo El Día de los Dioses por el que empezar, también se publicó el segundo de nueve volúmenes que recogerá toda la colección clásica (Matar a un Dios Espacial); y que en breve os reseñaré. En un formato genial como son estos Marvel Héroes, económicos y llevaderos, disfrutables en cualquier lugar. Y en tapa dura, del estilo de la saga Aniquilación o Biblioteca Drácula, para más datos.

Un sueño hecho realidad.

Para el que desconozca por completo quienes son Los Eternos, contaré que son una raza evolucionada de la humanidad dotada de poderes y habilidades que tiene por misión cuidar de la raza humana a través de su historia. Y es que hace un millón de años, Los Celestiales crearon cien Eternos antes de marcharse de aquí. Desde entonces, estos seres han vivido aislados en la Tierra, rara vez interfieren en cosas de humanos y al morir, simplemente, renacen. Después de una devastadora guerra civil tras el exilio de Uranos y sus seguidores, los Eternos eligieron un camino de paz y dedicaron sus vidas a mejorar ellos mismos la sociedad. El mejor ejemplo de sus nuevas capacidades es el poder de la Uni-Mente, que se crea cuando varios Eternos unen sus voluntades en una entidad poderosa que es capaz de… Bueno, ahí paro por el momento.

La premisa es poderosa, ¿no? Muy poderosa, diría, como todo lo que hacía el maestro Kirby. A lo largo de los milenios, Los Eternos construyeron grandes ciudades, incluida su actual hogar, Olimpia, que proporcionó el escenario para su encuentro con Los Olímpicos, los conocidos dioses de la antigua Grecia. Después de notar las similitudes entre ambas especies, formaron una alianza y Los Eternos actuaron como representantes de los dioses en la Tierra por un tiempo. Pero no hace tanto, a muchos de Los Eternos se les fue la pinza y se volvieron unos contra otros o se suicidaron. Desde entonces, como vuelven a nacer, poco a poco comienzan un nuevo camino pacífico. O eso parece.

El Día de los Dioses recopila los primeros once números de la serie publicados por primera vez en 1976. Comienza con una aventura de descubrimiento arqueológico por parte de un profesor, su hija y un tipo llamado Ikaris que no parece tener buenas intenciones pese a ser quién encuentra el lugar secreto en la cordillera de los Andes donde se halla el tremendo yacimiento en piedra que confirma la estancia en la Tierra de estos seres colosales. Para apreciar Los Eternos, debes considerar las influencias de inspiración del momento en que Kirby los creó. Hubo un libro de bolsillo muy popular a finales de los 60s llamado Chariots of the Gods, de Erich Von Daniken, que presentaba la teoría de que los extraterrestres visitaron a nuestras civilizaciones antiguas e influyeron en nuestro desarrollo. Esta teoría incluía varios mitos religiosos, aclarando que estos eventos habían sido obra de extraterrestres y no de ángeles o espíritus. Para una persona desinformada, la ciencia de pronto se volvió magia. Con Los Eternos, Kirby trató de retomar esta teoría incluyendo todos los conceptos de Ciencia Ficción que tanto amaba.

El Día de los Dioses es el primero de dos volúmenes que recopilará la obra maestra del Rey de los Cómics… Y en color, insisto. Una joya. Repito: Un sueño hecho realidad.

Reseña: Starr El Asesino. Ha Nacido Una Estrella, de Daniel Way, Richard Corben y José Villarrubia

Lo que está haciendo Panini Cómics es lo normal. Lo lógico. Tener constantemente en cartel obras de un maestro del cómic fantástico como Richard Corben es lo obvio. Si seguís Desde New York – Crónicas Literarias desde hace mucho, sabéis de sobra cuán fan somos de Richard Corben por aquí. Para nosotros, es de rigor amar todo lo que hace un gran autor que encima aboga por el siempre grandioso género del Terror. Aunque os delata un poco el hecho de, si estáis leyendo esta reseña ahora, un poquito-mucho seguidores también sois. Y es normal. Hablamos de un maestro que lleva ya casi cincuenta años en el mundo del noveno arte. Con un trabajo además que realmente ha impresionado e inspirado a muchos. Y siendo sincero, cierto que Corben ha colaborado en argumentos no muy buenos o que no han estado a la altura de lo que uno esperaba; pero que el maestro aparezca en un título ya significa que como poco el nivel puede ser aceptable. Corben, con sus ilustraciones, es de los que provoca que una obra se convierta en medianamente buena.

Sus ilustraciones siempre empujan a una historia al siguiente nivel. Y para el decida ponerse y no lo conozca, Starr El Asesino, se puede convertir en un descubrimiento más que agradable, la nueva joyita a descubrir dentro del catálogo de Panini Cómics. Otra más. De hecho, ha sido uno de los cómics que más he disfrutado en lo que llevamos de año y al que decido volver cada poco cuando busco inspiración para el Fantasy. El guión de Daniel Way de una clásica historia retomada de hace años, ha sido excepcional. Con acción, humor, amores no correspondidos y odio. Mucho odio. Cierto también que una obra muy Conan, en ocasiones, pero Way marca algo diferente en el guión que hace que Starr mole a su modo.

Starr El Asesino nos cuenta la historia del escritor pulp Len Carson, quien se eleva de la oscuridad a la fama y la fortuna… para luego caer. Pues muy pronto, después de gastar todo su dinero en coches y mujeres y cuando la fama le sobreviene, todo se convierte en desazón por una decisión repentina de abandonar para salirse de nuevo a ese mundillo de escritor de género. Y aunque pida perdón a su antiguo editor, para volver a tener presencia, necesita una buena historia. Sin embargo, lasmusas parecen haberse disipado. Abandonó lo que mejor sabía hacer para escribir narrativa “ideal” para gente culta y ahora… Nada. Ni una mísera frase brota de él. Así que decide visitar los orígenes de su famoso héroe pulpero Starr El Asesino. Historia que nos traslada a conocer a Starr y a su familia teniendo que sacar cabeza del bosque, para asomarse a la ciudad por la crisis de hambruna que azota a su clan. Hecho que le cambiará la vida de todas-todas. Así que llegan a la ciudad de Zardath solo tres de la tribu para realizar intercambios comerciales. Pero en las puertas de la urbe, junto con su familia, pronto son ridiculizados por dos hermanos en un mercadillo debido a su apariencia y a su desnudez. Hasta que Starr se ofende y golpea a uno de ellos. El hermano del mercader se enfurece e interviene, por lo que Starr encolerizado le destroza la cabeza y lo mata. La gente aterrorizada se espanta y la Guardia del Rey los apresan a todos, poniendo en marcha un giro de acontecimientos que van más allá de ser condenados por asesinato. Es decir, caída y auge de nuestro héroe.

Y aquí Carson vuelve a sufrir otro bloqueo de escritor.

Hasta que una de sus creaciones aparece en su casa para secuestrarlo y manipular la historia.

Starr El Asesino es un genial guión repleto de personajes coloridos (y lascivos), con una trama que desliza por el metacómic. Starr es el personaje principal y un portentoso héroe carismático, pero también encontraréis buenas divas como Tira, una compañera gladiadora de Starr la cual por alguna extraña razón le odia, Trull, el malvado hechicero, o uno de los personajes más chulos como es Moonja, la cabecilla del acuartelamiento de gladiadores, enamorada de Starr, y ángel de la guarda de éste cuando más lo necesita. Todos estos seres iluminados por los lápices de un Corben en estado puro. Creando rostros y estereotipos que se quedan guardados en la retina. Por eso, y por tan buenas sensaciones, Starr… es una joyita del cómic fantástico, que no debiera pasar inadvertida. Sin duda, uno de los mejores últimos trabajos que elaboró el maestro Corben que además aporta un genial coloreado de otro grande y además paisano, como es José Villarrubia.

Un cómic inolvidable.