Reseña: Authority. Kev, de Garth Ennis y Glenn Fabry

Los personajes de Authority son unos de los que más me han marcado dentro del cómic americano no mainstream. Pero para el caso, diría que es mejor ponerse o ver Authority: Kev como un spin-off poco conectado con la serie básica, al menos, más una trama aparte que una continuación de la misma. Por que Ennis tiene un… estilo distinto. Un estilo que disfruto mucho de vez en cuando, pero que es sombrío y gratuitamente brutal. Y en Kev se explaya aún más dentro del mundo de lo violento y lo tremendamente enojado o mosqueado del ser humano. Aquí no es lo mismo. Sin embargo, gratuitamente brutal “encaja” bastante bien con el personaje de Midnighter. Y el que lo conozca, sabrá lo que quiero decir. Entonces pude ver en este nuevo tomito que recién publica ECC Ediciones que la historia se centra en ese personaje y en Kevin (en su mayor parte). Y entonces, si bien la historia funciona, estos tomitos me reportan la sensación de ser aproximadamente un 75% Ennis con solo un 25% de Fabry. Lo que es un poco decepcionante porque Authority brilla siempre mucho si guion y dibujo están al cien por cien. Pero tenía ganas y tenía muchas ganas de volver a ponerme con algo de esta temática tras las geniales sensaciones de aquel cameo de Midnighter en Sleeper.

¿Y qué tenemos? Aparentemente un equipo de superhéroes telepáticos y malhablados con una estación espacial interdimensional maravillosa que viaja en el tiempo. El trabajo de los Authority es repeler repetidamente las flotas de guerra extraterrestres hostiles empeñadas en subyugar y/o vaporizar el planeta Tierra. Y Kev es un asesino a sueldo perdedor del SAS cuyo único superpoder es «el imán de mierda más grande del mundo». Su primer trabajo como guardaespaldas termina con el protegido siendo devorado por un tigre… en una bonita y tranquila casa suburbana (Jajaj… es que Ennis es genial).

Y los escuadrones de asalto del IRA siguen persiguiéndolo. Y Ennis en su salsa. Haciendo chistes de maricas frente a superhéroes homosexuales con tolerancia cero hacia los imbéciles homofóbicos; reventando cabezas de extraterrestres con malas intencioes, él es Gilligan, si Gilligan fuera un asesino entrenado pero en quiebra.

Authority: Kev -obviamente, por el autor que tiene detrás-, es un cómic que no se toma en serio a sí mismo. Parece un experimento y aun así, funciona, como es habitual para mí con un cómic de Ennis. Me encontré riendo e intentando recordar ciertas bromas para compartirlas con gente. Por supuesto, NO, con las que insultan a ciertos colectivos. Pero sin irreverencia y sin miedo a las historias ficticias de violencia en ocasiones ridícula: este es el Garth Ennis que conozco y amo. Si te gusta Ennis, te encantará. Si no, puede que te asuste lo que se cuenta aquí.

Reseña: Battle Action, de Garth Ennis y VVAA

Battle Action es el cómic bélico rescatado que hará llorar de alegría a cualquiera que haya disfrutado de los viejos cómics del mismo nombre. Y si no llorar, que a veces puedo ser exagerado, sí que noté el vello de punta recordando lo bien que lo pasaba de pequeño con estas historietas.

Uno de esos niños debió ser el ya maestro del guion Garth Ennis, del cual ya conocemos su amor por los cómics descarados pero también las historias clásicas de guerra. Es decir, el serranito o sandwich-mixto vegetal para que se me entienda, un cúmulo de ideas rescatadas para conseguir que todo se haga bien en este volumen que publica Dolmen Editorial, y que justifica por un lado la compra de algo que sin duda van a disfrutar los amantes de lo bélico, y por otro, los fieles seguidores de Ennis. El genio que siempre goza de un alto nivel en todo lo que escribe o reescribe. Posiblemente el mejor escritor en activo, el top-one de muchísimos fans del noveno arte.

Porque sabemos que Ennis, siendo un gran admirador de los semanarios británicos de los viejos tiempos, tomó siete historias de cuando la frase de engancha en portada era ¡Grandes aventuras en el interior! Y con ellos escribió un nuevo capítulo de cada uno, con la ayuda y la complicidad de algunos de los mejores ilustradores que se asientan en el Reino Unido. Y sólo ojear el tomo por primera vez me puso la piel de gallina. A veces, los friki-cómics somos asi de monguers, sí, llevamos dentro lo que los grandes espíritus de Kirby, Lee, Eisner, Miller, Mignola o Ross inspiran. Como un anuario de guerra de noventa y seis páginas, los planetas se han alineado para que Dolmen Editorial publique esta chulada. ¿Y qué contiene? La primera historia es para mí la más poderosa de todas. Johnny Red contra Skreamer de los Stukas es donde el as de la aviación se enfrenta al temido coronel por la soberanía del cielo en el frente ruso. Épica a tope. Visto está que Ennis no era ajeno a este personaje y tenía algo que decir sobre él junto al dibujante Keith Burns. Una magnífica historia con batallas tácticas inteligentes protagonizadas por viejos aviones de por medio. Un buen comienzo. El arte en color se convierte en blanco y negro a continuación, ya que la versión de Ennis de El Sargento, de Gerry Finley-Day, es una lección de historia más sencilla que cualquier otra cosa. Pero funciona bien y con una trama fácil (una escuadra dirigida por el sargento Jim Masters intenta cruzar Italia sin morir en el intento); los miembros principales de la sección están esbozados magistralmente.

El tema bélico a tope continúa con Crazy Keller, pero esta vez es un asunto más ligero, lidiando con un capitán yanqui cuyo objetivo principal es sobrevivir a la Segunda Guerra Mundial con más dinero del que ingresó. Curiosa trama que no conocía o de la que no recuerdo nada. Crepitante guión de Ennis bien ilustrado por Chris Burnham.

Pero no solo se trata la guerra aquí. Dregger fue una tira cómica de los años 70 que tomaba prestado generosamente lo que era popular en ese momento: dramas policiales británicos duros como The Sweeney. Dredger, que fue expulsado de los marines por brutalidad (creo que estamos de acuerdo en que es un logro, sobre todo, los que hemos sido militares profesionales), un tipo que soluciona problemas para el Gobierno y eso es realmente todo lo que necesitas saber… Las demás historias os dejo que las descubráis vosotros mismos.

A diferencia de otros cómics bélicos del irlandés, en Battle Action vais a encontrar al Ennis bueno, por la caradura con la que se le conoce. Este es Ennis sin correa y se le permite cagar en jardines de bellas flores con una violencia exagerada al estilo de lo que hizo con The Punisher. Y por ahí van los tiros, nunca mejor dicho. Una carta de amor de Ennis a un género, a una época, a un tipo de cómic que lo atrapó. Que nos atrapó.