Reseña: Liga de la Justicia / Power Rangers, de Taylor y Byrne

Entre los crossovers más sorprendentes que se pueden encontrar en DC dentro del sello Boom! Studios (el cual no para de sacar cositas muy locas) ahora mismo está Liga de la Justicia / Power Rangers. Lo acaba acaba de publicar ECC Ediciones por fin, en tomo de tapa dura recopilatorio (ya sabéis que no soy mucho de grapas). Una miniserie diferente y curiosa, se mire por donde se mire. Empezando obviamente porque seguramente nadie imaginaba que estos personajes pudieran estar en el mismo universo alguna vez.

¡Cuidado, van a metamorfosearse!

¡La Liga de la Justicia aún no conoce a estos adolescentes tan temerarios!

A tope con la presentación.

Tom Taylor es el aclamado guionista de Injustice y DCsos, y ahora se une al dibujante Stephen Byrne para este casi evento y despiporre de cómic. Para muchos, dos mundos de la infancia chocando en una nueva aventura cargada de nostalgia. En mi opinión, un título en el que ya entras con una sonrisa en la cara. Y aunque nunca fui de Power Rangers (me pilló ya con unos añitos), sí que disfruté y reí con algún que otro capítulo junto a mi hermanita pequeña en el sofá de casa en aquellos años de estudiante. ¿Sensaciones? Muy similares a lo que sentí al leer Batman / Tortugas Ninja reseñada el verano pasado (https://www.cronicasliterarias.es/?p=6407) o Green Lantern / El Planetra de los Simios que disfruté hace casi dos años (https://www.cronicasliterarias.es/?p=453).

Liga de la Justicia / Power Rangers sacará a relucir tu niño interior. Los coleccionistas lo van a disfrutar. Uno más de esos What if…? rarunos, como los llamo yo. Y más cuando trata viajes interdimensionales, de los más locos que te puedas imaginar. La historia comienza en una Angel Grove destruida, la ciudad natal de los Power Rangers. Allí Zack (Black Ranger) es consolado por Superman, diciendo que el accidente no fue culpa suya. A partir de ahí, retrocedemos treinta y seis horas atrás donde Lord Zedd está atacando la sede principal de los Power Rangers. Para proteger su cuartel general, Black Ranger decide teletransportar a Lord Zedd y sus secuaces, y sin querer, los envía a un universo diferente. Al nuestro. Después de que el resto de los Rangers lleguen para salvar a su amigo malherido, para colmo, tendrán que enfrentarse a los héroes de nuestro mundo: la Liga de la Justicia.

Lo dicho. Si disfrutas esta aventura en tono alegre y no te la tomas demasiado en serio, la disfrutarás un montón. Es divertido y entretenido ver a la Liga de la Justicia reaccionar ante las habilidades de los Power Rangers, pero creo que eso es casi todo lo que va a ser esta historia: divertida y entretenida. Aunque uno a estas alturas tampoco pide más a la hora de sentarse a leer. Además, las ilustraciones de Stephen Byrne son limpias y brillantes. Dibujadas y coloreadas por él mismo, aquí hay mucha viñeta-espectáculo. Sus interpretaciones de los miembros de la Liga de la Justicia están a la par con la mayoría de los artistas que trabajan en DC, pero me sorprendió ver que su versión de Superman es mucho más pequeña que casi todas las versiones vistas anteriormente…jajaj.

Que sepáis que también me emocionó ver a un Voltron en una poderosa splash-page.

Nadie puede decir de estos autores que no hayan creado una trama palomitera y emocionante dentro del «juego» que se propone. ¿Lo más profundo? Hacer ver a los Power Rangers y a la Liga de la Justicia que el enemigo de su enemigo es su aliado.

¿En conclusión?

Nostalgia pura.

Reseña: PsicoInvestigador. El Génesis, de Erwan Courbier y Benoît Dahan

Cierto toque lovecraftiano tenía este PsicoInvestigador cuando supe de él. Y en ese sentido, no me ha defraudado. Respecto al poder de encontrar cosas, también es algo que siempre me ha llamado la atención. Me moló ver el desarrollo de este poder en una peli basada en una historia de Stephen King como es Dreamcatcher (El Cazador de Sueños); donde uno de los chicos del grupo movía el dedito y encontraba cosas de forma extraordinaria. Ahora fijaos en qué dos grandes autores del género de Terror estoy mencionando. Maravilla, ¿no? Bueno, el cómic que os reseño hoy no trata el horror en sus más altas formas pero lo que se cuenta en PsicoInvestigador: El Génesis da cierto reparo. Protagonista, un tipo de lo más curioso que lidia una y otra vez contra esa cordura que se le va de las manos cada vez que usa su don.

A poco que indagues sobre la obra, te enteras que el primer álbum de PsicoInvestigador (Los Fantasmas de la Culpa), flipó a muchos allá en el epicentro del cómic europeo. Se lanzó en 2005. Pero se convirtió curiosamente en una serie abandonada. La continuación se pedía y se pedía, y no llegaba. ¿Ventas insuficientes? No sería la primera vez que algo encanta a muchos lectores, si no es económicamente viable, no siga adelante. Pero lo que importa es que al final sí que llegaron tres álbumes más, que completaron una historia maravillosa. Y debo decir que alertado por otros autores y bastantes críticas positivas, no solo tenía curiosidad. Tenía el «hype» por la nubes y todo por leer esta obra que gracias a los cielos acaba de publicar Ponent Mon en uno de sus maravillosos integrales en nuestro país.

Intrigado por ver cómo se mantiene firmemente de forma racional una buena historia sobre un psico-investigador que ayuda a la policía parisina en sus más complicados casos, me sumergí rápidamente en la lectura. Y encontré una historia súper creativa, dinámica, sorprendente en ciertos momentos, y no sé si pensar si los guionistas Erwan Courbier y Benoît Dahan (o alguno de ellos) participaron en investigaciones reales. Para los que sabemos de esto, hay detallitos que los delatan. O quizás han dado clases de Psicología y han sabido reconfigurar las tramas para darlo a entender. Nos dan un personaje particular como es Simon Radius, utilizado por la policía para resolver casos casi imposibles de resolver, el cual comienza intentando dilucidar, por su parte, la desaparición de su esposa producida diez años atrás. Bien, pues no sé si podéis imaginar la que lían los autores con estos dos hilos narrativos entrecruzados. Consiguen hacer que el lector se pierda en el camino, en la búsqueda, de manera bastante inteligente. Descubrí a Simon Radius, que usa para llevar a cabo sus investigaciones, su capacidad de viajar físicamente a las mentes y memoria de otras personas. Es un psicoinvestigador. Para encontrar tesoros también recurre a su talento. Y le suele salir bien. Excepto en los casos en los que el dueño de ese tesoro sea… amnésico. ¡Obviamente eso complica las cosas! Más que nada porque cada vez que usa su don, se tiene que enfrentar a ciertas locuras de la gente, otras revelaciones y horrores incluso de su propio pasado…

Ya en la portada del volumen encontramos este amor por el juego rebuscado que parecen amar Benoît Dahan y Erwan Courbier ofreciéndonos una foto de la esposa hecha como un puzzle al que le falta una pieza del rompecabezas. En realidad, es una imagen que resume bien toda la trama. Y mola descubrir la personalidad del investigador y el extraño e impresionante poder que ha desarrollado. Este completo nos permite descubrir la evolución de nuestro personaje a lo largo de varias investigaciones junto a la subtrama de la obsesión de Simon Radius por encontrar a su esposa. O al menos saber porqué desapareció. Como habréis podido comprobar no quiero contar mucho, fuera de esa eterna búsqueda. No spoilear nada. Pero deciros que quedas atrapado en estas locas historias en un principio improbables de la trama pero que se resuelven de manera maravillosa. Son varias historias a la que se enfrenta, pero el círculo se cierra.

PsicoInvestigador: El Génesis tiene un dibujo que encanta a nivel general, pero a mí no me enamora. El dibujo es original, curioso, aunque no soy muy fan de esta clase de ilustraciones. Funciona, pero a mí personalmente me saca del preciosismo que espero siempre de la BD. Dahan tiene un toque muy cómic independiente en ocasiones que no me enamora. Opinión subjetiva, por supuesto. Pero debo admitir que el potencial de los escenarios de este cómic, me hizo olvidar todo los demás. Tramas más interesantes que la serie de El Mentalista, para quien se lo pregunte. Las escenas que tienen lugar en la memoria de otros personajes tienen ese toque onírico que incluso reconoces dentro de ti mismo/a. Consiguen llevarnos a ese lado turbio y morboso que sin poderlo evitar, pasa a veces por nuestras mentes.

Courbier y Dahan muestran un auténtico tesoro.

Reseña: Gauguin. El Otro Mundo, de Fabrizio Dori

También publica ECC Ediciones buen cómic europeo. No tanta BD como quisiéramos algunos pero sí que algunos títulos destacables a los que merece la pena echar un ojo. Todo depende de los gustos. Pero yo sí que me fijo en casi cualquier editorial que sea capaz de traer del otro lado de los Pirineos obritas que de otro modo jamás veríamos publicadas aquí. Y me interesan, por ejemplo, unos tipos de cómics en los que ciertos autores aprovechan casi como de una biografía se tratara, el hablar sobre cierto autor de renombre y algún momento de su vida en especial.

Los que alguna vez estudiamos Historia del Arte, sabemos de la pasión de Paul Gauguin (1848-1903) por Tahití y su entorno en los últimos años de su vida. Paul Gauguin fue un pintor francés impresionista que como es normal empezó a ser reconocido después de su fallecimiento. Se me quedó grabada una anécdota sobre él que mi profe me contó. La obra de Gauguin es reconocida a día de hoy gracias a los esfuerzos de un comerciante de arte que organizaba exhibiciones de sus lienzos por medio París. Y eso que muchas de ellas estaban en posesión de un coleccionista ruso que andaba enamorado también del estilo y no las soltaba fácilmente. Y es que Gauguin fue y sigue siendo uno de los máximos referentes del pos-impresionismo. Lo demuestra con su uso experimental del color y su estilo sintetista, elementos clave para encuadrarlo dentro de este movimiento pictórico. Un trabajo de enorme influencia para grandes maestros como Picasso o Henri Matisse.

Desde ya, advierto que este cómic lo disfruta, sobre todo, un amante de la Historia del Arte. Y más aún los que gustan de la pintura clásica de finales del XIX. Si no, el cómic se les pues volver algo tedioso al principio cuando atraviesa algunos flashbacks en el que participan un montón de «celebrities»: Mallarmé, Verlaine, etc., que se llaman entre sí por su apellido, y que ya supones que por eso debieron ser reconocidos en el entorno de la época. Pero sí que es cierto que todo lector puede orientarse bien con tanto realismo y un dibujo que necesariamente tiene los ingredientes para integrarse casi en los pensamientos del artista a tratar. Aunque el álbum despega totalmente y la historia se disfruta de todas-todas (y se vuelve más fluido) cuando Gauguin llega a la Polinesia.

¿Un símil para con su vida en realidad? Me aferré especialmente al aspecto gráfico desarrollado por Fabrizio Dori y como aporta ese toque casi simplista lo que no es otra cosa que un bonito homenaje a la obra del pintor. Juega con los colores, la luminosidad, una ingenuidad de las líneas acercándose al estilo de Gauguin… Y me encantaron los paisajes y los elementos más significativos de la mitología polinesia. Pues el francés, en los últimos años de su vida, fue tocado con la varita de lo exótico y Dori lo expone muy bien a la vez que cuenta su vida y obra. El estilo artístico colorido y fascinante de Gauguin es algo que encanta a los diseñadores de cómics de la BD.

Gauguin: El Otro Mundo no es una excepción a la regla. Con una gráfica muy inspirada en la del pintor, aborda la biografía del artista desde un ángulo bastante original y crepuscular. Os explico: el álbum comienza con unas veinte páginas que son similares a un breve resumen de la vida de Gauguin, una historia trepidante que parece abrumadora y casi frustrante. Pero atrapa. Porque al final de esta introducción llega la muerte del pintor. Y allí su alma se encuentra con el dios tahitiano de la muerte con quien caminará y al que contará su vida esta vez desde su punto de vista personal. Es así como con él, volveremos con más detalle a todos estos momentos que acabamos de vislumbrar brevemente y con el que nos pondremos del lado del estado de ánimo e imaginación del artista.

Gauguin: El Otro Mundo es una inmersión íntima en la vida del maestro francés. Un cómic interesante y bastante bien hecho, que mezcla escapadas imaginarias, fantasmas del pasado y las pasiones íntimas de Gauguin, junto al folclore mitológico polinesio. Todo retratado de una manera muy hermosa, mezclando estilos, pero la mayoría de las veces inspirado por los geniales colores por los que abogaba el pintor. Para amantes de este estilo gráfico.

Reseña: Hasta las Cenizas. Lecciones que Aprendí en el Crematorio, de Caitlin Doughty

Perdonad si me gusta lo morboso. Me gusta leer sobre lo que la mayoría de la población evita o les da miedo. Sobre temas tabús, sobre todo, en un país que solo quiere tardes/noches de bares y tapas. Personalmente, me atraen mucho libros como Hasta las Cenizas, de Caitlin Doughty. Un ensayo que publica Plataforma Editorial y que en nada lleva dos ediciones. Y que habla sobre Lecciones que Aprendí en el Crematorio. Es decir, todo lo que rodea a una trabajadora de un Mortuorio, como los llaman en algunos sitios. No me digáis que no es interesante leer sobre anécdotas y sucesos de todo tipo que se pueden dar en un lugar o en un trabajo así. Caitlin Doughty usa su libro como una forma de compartir su perspectiva hacia la cultura de la muerte. La señorita Doughty hoy en día tiene licencia y dirige su propia funeraria en Los Ángeles, California. Así que sabe de lo que habla, o escribe. Sin embargo, no siempre fue la fuerza positiva que habla ahora sobre ese «último momento». Pero es cierto que la señorita Doughty creció interesada por lo mórbido.

Enfrentarse a la muerte no es fácil. Pensar en ello, menos. La mayoría de las personas se sienten fuertemente intimidadas ante la noticia de que un día ya no estarán en este mundo. De que dejarán de existir. Hasta las Cenizas: Lecciones que Aprendí en el Crematorio (Smoke Gets in Your Eyes: And Other Lessons from the Crematory) ofrece a los lectores un relato de primera mano de alguien que miraba a la muerte a los ojos a diario. Si bien esto puede parecer una historia de Terror (y para algunos lo será), Caitlin Doughty comparte su experiencia con la verdad y el ingenio que le fue surgiendo día a día en su trabajo. La mayoría de nosotros puede admitir tener al menos algo de curiosidad o fascinación por la muerte. Ya sea que se trate de una pasión por las historia sobre crímenes reales o simplemente por ese tipo de preguntas que nos hacemos por nuestra condición de seres racionales. El pensar qué pasará después. Por eso, Doughty no rehuye esta fascinacióny la cuenta en esta autobiografía. Pero, ¿quiénes deberían leer Hasta las Cenizas?

Doughty sabe más que nadie lo difícil que es aceptar lo que le sucede a nuestro cuerpo después de morir. Aporta con este libro un relato revelador de su trabajo en un crematorio y no solo explica lo que les sucede a los cuerpos en las funerarias. También hace una declaración sobre cómo nuestra sociedad maneja la cuestión más amplia de qué sucede después de “ese día” al salir de allí y sentirnos afortunados y vivos. La misma autora presenta una historia poco tradicional y, de hecho, comienza narrando como fue una recién graduada de veintitantos años que siempre estuvo interesada en lo grotesco. Y sin más experiencia que su titulación en Historia Medieval, aceptó un trabajo en un crematorio para llegar a fin de mes e inmediatamente se vio arrastrada a un nuevo mundo de cultura, prácticas y cuidados del final de la vida. Un libro con descripciones muy vívidas de cómo se cuidan los cadáveres. Este libro abre el telón de la industria funeraria y la cultura en torno a la muerte. Si alguna vez has querido una explicación honesta sobre este tema tabú, este libro es una oportunidad para ti de saber. Además Doughty usa su experiencia en el crematorio para abogar por prácticas funerarias alternativas. Este su libro pide a los lectores que enfrenten su miedo a morir. Pero no se detiene ahí. Como dice la autora: «La muerte es el motor que nos mantiene funcionando, dándonos la motivación para lograr, aprender, amar y crear». Cada día, aporto yo.

Entonces, repito: ¿Quién debería leer Hasta las Cenizas? Pues cualquiera que tenga planeado morir algún día y quiera desprenderse de ese miedo. Si alguna vez te preguntaste qué sucede después de la muerte (aún en esta vida), cuestionas el proceso de cremación o embalsamamiento, o te preguntas por qué nuestros funerales son los eventos que son, este libro te va a entretener. Con descripciones impactantes e íntimas como «Una niña siempre recuerda el primer cadáver que afeita»

Positividad siempre, ante (como decía Gandalf), un camino que recorreremos todos.

Reseña: Batman. El Contraataque del Caballero Oscuro, de Frank Miller y Lynn Varley

No podía faltar dentro de la genial colección DC Black Label el último aporte que hizo Frank Miller al mundo del Caballero Oscuro; que por cierto, se le llama así por su ingenio. El Contraataque del Caballero Oscuro fue una idea muy esperada, desde el mismo momento en que su predecesora se publicó. Pero a muchos fans no les gustó. Y es que este es el tema de siempre: después de una gran obra, de un gran film, de un gran cómic, de un gran libro… ¿qué viene? ¿Otro mejor? Pocas veces se consigue. En sólo algunos casos un autor o un artista consigue llegar a su cima, a su clímax, adopta el estado sobre-inspirado, con el don a tope y sale lo que sale. Una maravilla. Un tesoro como fue y es El Regreso del Caballero Oscuro. Pero como os digo, esto es dificilísimo de conseguir y no todos están en el momento preciso, en la hora adecuada, ni llevan el don potenciable dentro. Esto solo lo entiendes al cien por cien cuando eres creativo. Y se entiende que el fan siempre quiere más de lo mejor, obviamente. En este caso, de aquel Caballero Oscuro con el que tanto lo flipamos. Llegó en 2002 y en tres libros o partes que forman un todo. Se llama El Contraataque del Caballero Oscuro. Pero hay que entender que no salen «Picassos» todos los días…

Una cosa que me gusta y que le debe pasar al maestro FranK Miller, es que su mente debe seguir en los benditos años 80. El Contraataque del Caballero Oscuro se lee como un cómic de mediados de esa década. Unos años donde esas musas de las que hablo estaban a tope en muchos autores. Brotaron personajes y series súper molonas. No obstante, cuando se fue acabando la década, la industria del cómic se estaba muriendo. Las ventas bajaban en picado, los cómics fueron ignorados por la cultura dominante y los superhéroes eran impotentes frente a villanos de la vida real, como tramas de reciclaje, ídolos repetitivos… Pero justo cuando las cosas se veían más oscuras, descendió de una noche sin luna, Frank Miller. Apareció con su innovadora novela gráfica e injertó la angustia moderna en los mitos de los cómics. Creó una obra literaria que definió el género. También soy de los que piensan que Batman renació en este momento. Miller puso de nuevo los cómics épicos en el candelero. La revista Time y Rolling Stone elogiaron a Frank Miller y los 90 empujaron aún más a los cómics gracias a la peli de Tim Burton, el cual confesó estar muy inspirado por la novela gráfica. Desde entonces, los cómics comenzaron a explorar nuevas direcciones artísticas, lo que trajo una nueva generación de lectores al mercado y ayudó a impulsar las ventas de cómics a máximos históricos. Un Regreso…, de todas-todas.

En 2002 llegó El Contraataque del Caballero Oscuro (The Dark Knight Strikes Again), la secuela del clásico. Inicialmente, el lanzamiento de DK2 (como se le llamó al principio, como broma a las tendencias de películas de aquella época) atrajo mucha atención en los medios. Lo recuerdo, fue durante los años en los que empezamos a reseñar en Desde New York – Crónicas Literarias. De hecho, recuerdo que un amigo que vive en Brooklyn y reseña, me comentaba entonces que participó en un trabajo solicitado por el propio editor de DC Comics, en el que tenían que mirar cada una de las copias anticipadas para asegurarse que todo estaba más que perfecto para su distribución. Las oficinas de DC en Nueva York estuvieron a tope para anunciar el más esperado regreso del Batman, de Frank Miller. Pero entonces el público leyó El Contraataque del Cabllero Oscuro y los críticos calificaron la obra de arte minimalista y dijeron cosas como que estaba «dibujada apresuradamente». Los colores digitales superbrillantes de Lynn Varley se describieron como «enjuague bucal con sabor verde». ¿¿?? Peor aún, a muchos lectores no les gustó cómo Miller encaró la obra en forma de burla hacia la mitología de los superhéroes. Como dijo Bob Lipski, un dibujante que trabaja en DreamHaven Books and Comics: «Los fans han sentido que Miller escribió DK2 como forzado a hacer una jodido trabajo que no quería». Lo cual es una pena. Porque en primer lugar, ya os digo que gente que habla así, poco conocen a Frank Miller. Y ahora encima yo os digo, casi veinte años después, que tenéis que leerla y opinar por vosotros mismos.

Vais a encontrar una versión tan revolucionaria del personaje (que es lo que preocupa verdaderamente a la industria, pero mola), que de tan diferente que se vuelve, a mí, por lo menos, me encanta. Un cosa está muy clara: Miller tocó la fibra a mediados de los 80 con El Regreso del Caballero Oscuro porque los cómics no estaban a la altura de su potencial. Sin embargo, la revolución que inició Miller ha ido en exceso y eso a los conservadores o puritanos no les gusta. Para ellos, El Contraataque del Caballero Oscuro se vuelve un extraño candidato a la alegría. Y sonreír no está bien visto para el que usa traje de chaqueta. Ambientada tres años después de los eventos de su predecesora, con una USA que se vuelve un estado policial donde la Declaración de Derechos ha sido derogada, la gente no hace nada y un presidente holográfico está controlado por el magnate de los negocios Lex Luthor. Peor aún, la mayoría de los ciudadanos no se preocupan por las libertades que han perdido: están demasiado ocupados viendo programas porno y hacen vigilias a la luz de las velas en los días de sol… Decidme si no es interesante una historia que pregunta en voz alta, si es mejor ser feliz y estar esclavizado, o estar hundido en la miseria pero libre.

Opinad por vosotros mismos: SIEMPRE.

Reseña: Blacksad. Todo Cae. Primera Parte, de Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido

Que Blacksad vuelva estar entre las novedades es buena noticia. Una más de que las cosas empiezan a cambiar… para bien. Que digo buena, es una tremenda noticia. Porque encima, ahora que se puede y gracias a Norma Editorial, este genial tandem que son Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido (guionista/dibujante) han ido presentando por medio país este nuevo álbum, la primera parte de Todo Cae,el sexto álbum de la serie Blacksad. De hecho, ayer mismo estuvieron en Nostromo, la librería sevillana especializada conocida internacionalmente por su Premio Eisner a Mejor Tienda de Cómics del Mundo. Pero no es para menos, porque Blacksad es, sin duda, un icono mundial del noveno arte que ha llevado a sus autores a ser reconocidos en cantidad de país por esta obra magna del género negro (noir).

El ansiado del detective antropomórfico más famoso del mundo vuelve. Suele pasar con Blacksad que con cada historia, quedas con la miel en los labios como osito que pide más y más. Pues imaginaos si ya vamos sabiendo que Todo Cae es tan solo una primera parte… Uno ya casi va triste como pasaba con el reciente film de Dune, ¿no? Jajaj… Si es que somos unos ansias. Bueno, os contaré de qué va.

Muy a los cine clásico de los 50, muy a lo novela negra de Raymond Chandler o novela policíaca de Dashiell Hammett (que es donde se mueve como gato entre madejas, la esencia de este personaje), John Blacksad recibe el encargo de proteger al líder del sindicato de trabajadores del metro. Ese personaje amenazado por la mafia de las comadrejas. Pero su investigación desafiará a los poderes políticos y empresariales que rigen los destinos de la ciudad, y estos no dudarán en aplastar cualquier obstáculo que pueda alterar sus planes. john llevará entonces una investigación que resultará particularmente delicada … Llena de sorpresas. Una historia que está terriblemente bien labrada donde descubrir tanto la vida cotidiana de los trabajadores encargados de la construcción del metro en las entrañas de la ciudad, como el inframundo y el mundo del teatro; contraste absoluto entre las sombras y la luz. El mundo de abajo y el mundo de arriba. Encarnado por el ambicioso Solomon, maestro constructor de Nueva York. Pues, ¿qué tema de construcción no esconde dinero negro bajo sus arcas?

Sé que parte de lo que os cuento es su sinopsis editorial, pero friends, ¿qué más contaros de un álbum que no llega a las sesenta páginas, sin destriparos más? Sabéis que Blacksad siempre es joyita. No lo tengo que decir yo. Hablamos de un cómic, de una serie, de un personaje con varios Premios Angoulême (el más prestigioso del cómic europeo), varios Premios Eisner (el más prestigioso en USA y diría que del mundo), estamos hablando de un cómic que no necesita de reseñadores. Se recomienda sola cada publicación. Sé que hay gente que a día de hoy se avergüenza de aún no haber leído Blacksad y no entiendo a qué espera, aún más sabiendo que Norma Editorial publicó en su día un integral con todos los anteriores álbumes recopilados (https://www.normaeditorial.com/ficha/comic-europeo/blacksad/blacksad/blacksad-integral-ed-en-castellano) que es una verdadera maravilla. ¿Qué más contaros? Pues que Todo Cae vuelve a ser una fiesta para los ojos. Cada viñeta admirable, los colores son preciosos, y aún sigo sorprendiéndome muy mucho con cómo Guarnido consigue mostrar animales antropomórficos tan expresivos. Tan humanos. El dominio de la línea es perfecto. Y cuando saca a relucir el lado salvaje de los personajes, es simplemente excepcional. Qué tío.

Además, las investigaciones policiales de John Blacksad en este tomo tienen un ritmo normal, medio, ni muy alto ni muy bajo, cosa que le permite al señor ilustrador detenerse en los detalles de las diferentes viñetas.

¿Sensaciones? No sé porqué con esta historia tuve la impresión de redescubrir el turbio mundo nocturno de Nestor Burma, pero en formato animal (https://www.normaeditorial.com/ficha/comic-europeo/nestor-burma). Ayer en la presentación de Todo Cae, en Nostromo, era una de las preguntas que quería hacerle a los autores. Me intrigaba saber si había algún tipo de inspiración del clásico personaje de Jacques Tardy y Léo Malet. Pero no se dio el caso 🙁

¿Algo más? Blacksad es una obra con la que sus autores han tocado el cielo. Dios mío, que venga esa segunda parte YA. Es todo muy simple, en realidad. Estamos ante «ooootra» historia que uno/a tiene que degustar por sí mismo con una buena taza de té o café cerca y en un buen sofá para solitarios. Esos que somos todos cuando leemos.

Reseña: Sentinel, de Sardina y D´Angelo

Tras estar disfrutando de los buenísimos cómics de Sergio Bonelli Editore, quería darle una oportunidad al cómic independiente italiano. Quería saber qué se está publicando en el país de la bota que fuera interesante para mí y que, por supuesto, se pudiera leer en nuestro idioma. Fue así cuando me topé con Shockdom (https://es.shockdom.com/), una editorial italiana que desde su fundación en el año 2000, apuesta por el talento, la innovación y la ruptura de esquemas, tal como ellos se definen. La editorial cuenta con una larga serie de proyectos innovadores como integrar la edición impresa con la digital, fue la primera en hacer cómics para teléfonos móviles en 2005 o crear una plataforma digital de blog exclusivamente dedicada al noveno arte. Shockdom es una editorial a tener muy cuenta. Os lo digo ya. Sobre todo, por traer a la Tierra de Conejos titulos que de otra forma no podríamos leer en español y por contener en catálogo títulos como Sentinel, un volumen único con una historia que con muy poco, pone de los nervios.

La premisa básica: tras un naufragio, un padre y su hijo despiertan en una isla habitada por individuos inquietantes y peligrosos que quieren cazarlos como animales. Simone D’Angelo y Tony Sardina, autores de Sentinel, contaron en una entrevista que ya se conocían. Fue en la Escuela de Ilustración de Palermo, donde a menudo intercambiaban opiniones e insultos amistosos. La primera colaboración real llegó un par de años más tarde, cuando fundaron el Outclass Art Studio, con varias propuestas, entre ellas, North Sentinel (en ese momento se llamaba así). Es decir, estamos hablando de un cómic que se fraguó hace tiempo y entre dos amigos con la misma ilusión y hobby en la vida. ¿Qué mejor base que esa?

Pues una trama que atrape, y que viene inspirada gráficamente por Death Stranding, un videojuego de Hideo Kojima. De hecho, el náufrago que protege a su hijo a toda costa es un claro homenaje a Sam Porter Bridges. Pero aquí, dicho náufrago no sabe a qué se enfrenta realmente, anda a tientas en la oscuridad y no puede interactuar con nadie que hable su idioma. Todos los elementos que le rodean se convierten en preguntas y la soledad aparece como su única/peor amiga.

En un entorno muy a lo Perdidos (Lost) con nativos agresivos y más de un elemento paranormal, que parte de una leyenda que azota la naturaleza de la isla; el protagonista lo va a pasar realmente mal.

Así es Sentinel.

Tras disfrutar con esta obra, me ha gustado saber que ambos autores llevan año trabajando incansablemente en más títulos para el mercado exterior. Con suerte algunos de esos proyectos llegarán a nuestro país. Y si puede ser ese producto del que no quieren contar nada pero que va destinado al mercado norteamericano; mucho más y mejor.

Todas las esperanzas del protagonista de Sentinel residen en un mujer. La única persona que parece querer ayudarlos. Atentos a lo que ocurre después porque os va a dejar a más de uno/a con el culo torcido. Un álbum en formato clásico de cómic europeo de 64 págs., que se disfruta en una ida y vuelta de metro. Tremendamente interesante.

Reseña: El Escuadrón Suicida. Orígenes Secretos, de VVAA

Por lo bajini, la última película de James Gunn, El Escuadrón Suicida, nos ha presentado por fin, bien hecho, un film fuera de actores que van de ídolos y que lo primero que piden es tener más minutos en pantalla. Con la dignidad y la humildad por delante, James Gunn ha creado una película que es él, en esencia. Un «boom» de largometraje en muchos aspectos. Y aunque se la acusó de sangrienta, de violencia gratuita, tened en cuenta que este tipo de troles, o no les gusta ver que DC triunfa o no han leído cómics de este grupo en su puñetera vida. Tened en cuenta que está considerada una de las mejores pelis trasladadas a la gran pantalla de un cómic. Un cómic/película de personajes donde todos brillan. Y ahora digo: el cómic donde debéis poner el ojo a poco que os gustara la peli es Orígenes Secretos. Tomaco que publicó ECC Ediciones en una genial edición recopilatoria, volumen que tiene la particularidad de llenar el vaso medio lleno del fan que quiere saber más y más de cada uno de los protagonistas de este grupo tan característico. 

Saber más de un grupo de reclusos que el gobierno usa forzadamente para misiones de riesgo con la condición de reducirles pena, aunque la mayoría de los casos trabajan amedrentados, secuestrado bajo «otros recursos”, que les tiene implantados la señorita Amanda Waller; conocida como El Muro, personaje creado por los maestros John Ostrander, Len Wein y John Byrne. ¿No la conocen? Amanda Waller es una antagonista y aliada ocasional de los superhéroes del Universo DC, una funcionaria gubernamental despiadada y de alto rango que usa la astucia, las conexiones políticas y la pura intimidación para lograr sus objetivos. Carácter fuerte digno de estudio así como directora de las misiones mortales asignadas al Escuadrón Suicida. Y una especialista que supervisa la investigación de personas con poderes.

El Escuadrón Suicida: Orígenes Secretos fue una novedad de agosto, pero no quise perder la oportunidad de recomendarlo por lo que aporta. Pero primero:

NO ES UNA REVISIÓN EN VIÑETA DE LA PELÍCULA

Que quede claro. Esto es lo que tiene de malo ponerle a cómics las portadas del film. Aunque entiendo que toda publicidad es poca para mover el medio. Lo entiendo. Pero los fans comiqueros deben saber que aquí dentro se encuentran los orígenes de cada uno de los componentes de tan distinguido grupo. Comunión que nunca debió existir pero existe. Y encima se les da bien trabajar juntos siempre que haya cabezas por reventar y tipos por extinguir que no merezcan la vida. Además, esta selección de historias también incluye una aventura sobre la juventud de la mismísima Amanda Waller, la mujer implacable que dirige la Fuerza Especial X.

Lo cuenta muy bien en una mini-introducción Fran San Rafael como siempre. Tras la genial presentación con la que se inicia con cuatro numeritos del clásico personaje de El Pacificador (inminente serie de TV, que por cierto, dirige y guioniza también James Gunn); pero el resto del volumen incluye aventuras realizadas por autores legendarios como John Byrne, que escribió y dibujó la primera aparición de Bloodsport en la serie mensual de Superman; Alan Grant, John Wagner y Norm Breyfogle que sacaron adelante el debut del Ratonero; o Gail Simone y Ed Benes que convirtieron a Savant en uno de los personajes punteros de Aves de Presa. Pero también queda espacio como bien se indica para la primera aparición del Rey Tiburón en aquella destacable colección de Superboy de los 90. En definitiva, ver dónde comenzaron Deadshot, Harley Quinn y el resto de componentes de un grupo que reparte más que recibe, al cual en muchos casos se les van las misiones de la mano. No tiene precio.

O sí lo tiene y uno muy recomendable por calidad/precio. Contenido del bueno y que insisto, no estamos ante un cómic que revisite la película. Es un tremendo compendio, una tremenda aportación para el fan que desee saber más de estos personajes. Si quieres tener una idea de qué es El Escuadrón Suicida, quiénes son sus miembros y qué papel juega en el Universo DC, es mejor volver al principio, ¿no? Pues eso es exactamente lo que aporta Orígenes Secretos.

No tengo ninguna duda. Este volumen reposa en la cómicteca del distinguido James Gunn.

Reseña: Casacas Azules 2000-2002, de Raoul Calvin y Willy Lambil

Nuevo álbum de Casacas Azules en esta genial recuperación que está haciendo de la obra la siempre genial Dolmen Editorial. Un serie de cómic europeo que goza de un humor muy chulo y buenos personajes, muy cercanos en apariencia y que recuerdan de algún modo a Lucky Luke y su entorno, en mi opinión.

Casacas Azules era el nombre dado por los indios a las tropas de caballería que “mantenían el orden” en el Lejano Oeste. Dolmen Editorial se encarga de recuperar este grandísimo estandarte, joya del cómic que todo el mundo debería degustar. Casacas Azules es un clásico del western humorístico y un best-seller absoluto del cómic europeo. Ambientadas sus historias en la Guerra de Secesión y las hazañas del intrépido sargento Cornelius Chesterfield y su fiel (aunque a ratos rebelde) cabo Blutch, son desde hace más de cuatro décadas, una de las series más longevas y exitosas del célebre semanario Spirou. Una de las series que llevo adelante y que pienso completar y hacer disfrutar a mis hijos cuando se tercie.

Y siguen llegando gloriosos integrales que comprenden varios álbumes. Por años. Como ha decidido traerlo la editorial. Este especial que os reseño hoy comprende los títulos que salieron entre el año 2000 y 2002. Tres exactamente. Historias con un tono un tanto diferente, como Romances en Azul, que habla de Abigail, la hermana del Capitán Stilman, que fue salvada de los sureños justo en el álbum anterior. Esta chica decide casarse con su salvador el Capitán Stark. Pero esto no le conviene en absoluto a su hermano, que se niega a «permitir que un tonto” se una a la familia. Por lo que ordena a Chesterfield y Blutch que escolten a Abigail fuera del lugar de encuentro donde se está llevando a cabo una importante reunión con el personal del Norte. ¿La esperanza? Que encuentre a otro pretendiente.

El siguiente álbum narra que para desalojar a los sureños atrincherados en un campo inexpugnable, al General Grant se le ocurre una muy buena idea. Pero su plan (de cavar una galería debajo de su campamento para hacer estallar barriles de pólvora) fracasa y el líder de los Casacas Azules busca consuelo una vez más en la botella. Exasperado, Lincoln envía a uno de sus espías a investigar, listo para despedir al General alcohólico. Blutch y Chesterfield tendrán que competir en ingenio para llevar a su General por el camino correcto mientras frustran los planes de este espía apodado «La oreja de Lincoln».

Cuando el ejército se quede sin armas y los voluntarios hayan dejado de empujarse en la misma puerta para terminar siendo carne de cañón, ¿qué queda para repoblar las filas? ¡Reclutamiento! Revuelta en Nueva York cuenta como en todo el país se está gestando una revuelta frente a este enfoque injusto e impopular. Para restablecer la calma, los Casacas son enviados como refuerzos para supervisar las operaciones en la cada vez más potente ciudad de Nueva York. Pero cuando los más ricos compran en detrimento de los más pobres la libertad de no hacer la guerra, exasperados, los conscriptos toman las armas. ¡A por los burgueses! ¡Súmate al ejército! Llegó la hora de que nuestros personajes cambien de bando si quieren terminar con vida una aventura.

Casacas Azules es todo un clásico de la escuela franco-belga, con más de cincuenta álbumes publicados. Volvemos a vivir una buena época con una serie maravillosa de aventuras y desventuras centrada en estos cómics de intrépidos soldados norteños, yankees del noveno arte, cuyos cómics han sobrevivido durante más de cuarenta años, que se dice pronto. Editoriales como Dolmen que piensan bastante en el aficionado al cómic europeo y que ponen en librerías clásicos de renombre. Y no paran de publicar joyitas, en sendos tomos en tapa dura y a un precio genial por contenido. No es de extrañar su gran acogida. Seguimos disfrutando. ¡Qué nunca falte el pan!

Reseña: Zardo, de Tiziano Sclavi y Emiliano Mammucari

Tiziano Sclavi (Dylan Dog) y Emiliano Mammucari (Orphelins), dos grandes autores italianos reconocidos del cómic europeo, se juntan para obra impactante como Zardo. Uno de los nuevos títulos (el más reciente creo) que Panini Cómics en su conjunción con el sello italiano Sergio Bonelli Editore rescata para poner en librerías en nuestro país. Un cómic que lleva al desastre, a un día de desastres donde la Ley de Murphy triunfa para con una sola persona. Un lugar donde todos habrán tenido un mal día, donde una cadena de acontecimientos lleva progresivamente al agravamiento de la situación e inevitablemente todo se vuelve cada vez más complicado de superar. Sí friends, aquí en Zardo todo es una locura. Y a esa conjura de desgracias sumadle un toque «noir» muy bien llevado. Es como esas espirales de horror de las que han hablado más de un filósofo en donde llegas a un punto como ser racional que, o te enfrías, lo piensas y consigues parar, o todos los sucesos te arrastran hacia abajo y la cuesta aumenta su pendiente cada vez más. Qué ocurre? Que la mayoría de las veces, lo horrible no se puede parar.

Zardo es la «nueva» historia de Sclavi, el padre de Dylan Dog, que sabe preparar desayunos con horrores y meriendas de novela negra. Parece suficiente como sinónimo de calidad, ¿no? Pues sí, unas cuantas páginas son suficientes para llegar al corazón de la historia, unas cuantas viñetas de Mammucari para quedar encantado con un argumento digno de film (que de hecho existe). Como os decía, impactado aún por lo que sucede, y asombrado por cómo la situación se precipita cada vez más. Incluso cuando piensas que puede haber un momento de respiro, cuando piensas que «peor no se puede ir» aquí está la sorpresa, la evolución exasperada, grotesca que también puede hacerte sonreír tanto si es brillante como plausible. Así defino lo contado en Zardo. ¿Pero qué cuenta este cómic? Federico, el protagonista de esta historia, se ve arrastrado a una pesadilla que parece no tener fin, en una noche donde el sol parece no querer salir nunca. En esta negra historia de Tiziano Sclavi caes en el abismo en el que se ve desbordado el protagonista, que intenta esconder un cadáver, ocultando las pruebas que parecen acusar de asesinato a Francesca, su nuevo amor que le tiene loco no, lo siguiente. Pero Francesca tiene algunos problemas que parecen surgir de unos extraños comportamientos, y el tontolaba y fascinado Federico nunca logra decirle que no a las locuras de su nuevo amore. Sin embargo, el protagonista también es presionado por un violento detective privado que ha visto toda la escena y está dispuesto a chantajear a Federico para conseguir ¡¿dinero?!

Como decía mi abuela, aquí el que no corre, vuela.

Una trama convincente para una historia dibujada por una de las puntas de lanza de Sergio Bonelli Editore como es el gran Emiliano Mammucari. Aunque los colores son distribuidos por Luca Saponti y se disponen de forma muy ambiental para un guión del que Sclavi cuenta que lo tenía escrito hace treinta años, que era una “guión enterrado» y finalmente, tras pensarlo mucho, consiguió darle un giro de tuerca para tener una buena opción de publicación dentro del noveno arte. Y ese giro ya os digo que se nota cuál es. Un condimento final para una pieza que queda genial en un solo cómic. Porque si no lo sabéis la convincente historia de Zardo está inspirada en la novela escrita por el propio Sclavi titulada Nerón, publicada allá por 1992. Una historia que se hizo popular ya que el director Giancarlo Soldi le dio vida en la película homónima protagonizada por Sergio Castellitto, Chiara Caselli, Luis Molteni y Hugo Pratt. No obstante, el cómic retoma un nuevo guión, cambiando solo el título, el apellido del protagonista y haciendo una reescritura de mesa para la ocasión.

Pero entonces, ¿quién es Zardo y cómo terminará su historia? Un historia que impacta. En mi opinión, todo un acierto que Sclavi haya decidido darle vida nueva a esta vieja criatura suya para con el mundo del cómic.