Reseña: Hinatsugi. El Pueblo de las Muñecas, de Aki Shimizu

Sigo a la joven mangaka Aki Shimizu desde su Le coffre aux esprits. Fuera de que casi todo manga cuenta con una idea original o al menos una que nos deja con el culo torcido a los de Occidente, Shimizu tiene ese no-se-qué en sus historias que son muy atractivas desde sus sinopsis. Y no cuentan mucho. La del Le coffre aux esprits nos llevaba al fin de la guerra en los años 40, cuando dos colegialas deciden tomar el tren para acercarse a un lago. Pero el tren sufre un accidente. El mismo tren donde va el Inspector Kiba (gran personaje de Shimizu) y todo se pone patas arriba. Bien, pues Hinatsugi mantiene un misterio corto al principio de la misma forma. Una mansión en el corazón del monte Hinatsugi ofrece refugio a cuatro universitarios que han sufrido un accidente durante la búsqueda de unas ruinas. Pero a aquellos que se pierden en esa montaña y llegan al pueblo de las muñecas, solo les esperan dos destinos. Ser parte del pueblo o vivir eternamente para ellos…

Aki Shimizu esta vez dándole al Terror. ¿Y quién se lo iba a perder? Hinatsugi: El pueblos de las muñecas es un manga de J-Horror bastante estándar en cuanto a premisa. Cuatro estudiantes universitarios fueron de excursión pero luego se pierden. Una de las chicas resulta herida y el grupo es rescatado por unos aldeanos. Debido al mal tiempo, los estudiantes no pueden salir de las montañas y el jefe de familia de esta remota aldea accede a acogerlos para pasar la noche. No obstante, la amante del jefe de familia tiene una hermosa hija y… lo adivinaste, el pueblo no es lo que parecía ser.

Pero un manga de terror gustoso de leer y que, obviamente, deja con ganas de más. Porque no deja de ser un one-shot de varios capítulos que se devora en nada. Está formado por algunas historias cortas que involucran a diferentes personas que llegaron a esa aldea remota y les suceden cosas aterradoras y espeluznantes. No es solo lo que os he contado. Las historias son interesantes y en la segunda mitad del manga vemos alguna explicación de los secretos y la historia de este pueblo y de la hermosa hija del jefe de familia. La explicación deja más que satisfecho. Aunque si me lo permitís, desde aquí le doy un consejo a la joven Aki Shimizu: «Lo bueno del género de Terror es que muchas de las cosas, si no las explicas, mejor». ¿Hay algunas escenas desagradables a lo largo del camino? Afirmativo. ¿Son exageradas? Negativo. Esto no se parece en nada a un manga de Shintaro Kago.

Nacida el 16 de octubre, Aki Shimizu comenzó su carrera en 1995 como dibujante y diseñadora de personajes para varias revistas de videojuegos. Fue en el año 2000 cuando publicó su primer manga como guionista (Blood Sucker). En 2002 sacó Qwan, obra totalmente propia como guionista y dibujante. Una mangaka que propone bastante en sus títulos.

Reseña: Las Supervivientes (Final Girls), de Riley Sager

Los lectores constantes siempre tenemos una novela que se transforma en “la novela del verano”. Aquella que leí en el verano del año tal o Aquella que recuerdo muy chula y que leí estando de vacaciones en tal… Siempre hay una novela del verano para el lector constante, y si la disfrutaste, se te quedan marcadas de por vida porque uno de los poderes misteriosos de la lectura es que tu mente marca o ancla en tu memoria donde y cuando estabas cuando leíste un buen libro. Incluso algunas escenas. Y ya puedo decir que mi novela de este verano 2023 ha sido Las Supervivientes, de Riley Sager. Un título que quería reivindicar (sabía de sobra que me iba a gustar) y sacar a la palestra porque no he visto que su publicación tuviera la repercusión que merece. Este título que publicó Alfaguara en 2018 y que aún se puede conseguir con relativa facilidad, debería estar en vuestras opciones si estáis buscando un buen libro de terror psicológico, un tremendo homenaje a los slashers de toda la vida. ¿Y por qué sabía que me iba a gustar? Porque tiene todos los ingredientes para ello.

No hace mucho decidí hacerme hacerme una maratón de los buenos slashers de la historia (Saga Viernes 13, Saga Halloween, Saga Scream, La Matanza de Texas, Pesadilla en Elm Street, La Casa de Cera…), pero no creáis que llegué a este libro hypeado por tanta peli de este subgénero. Os confesaré que fue por otra de mi pasiones como son los nuevos juegos de mesa donde recién había encontrado una joyita de juego en solitario llamado Final Girl. Y quería más.

Si no lo habéis deducido ya, una aclaración de términos antes de seguir con Las Supervivientes (muy rápidamente, que me enrollo bastante); el slasher es un subgénero de terror que se caracteriza por un asesino en serie que va matando a los personajes principales de uno en uno. El termino de final girl se le atribuye a la escritora Carol J. Clover cuando en su libro Men, Women, and Chainsaws: Gender in the Modern Horror Film hacía bastante hincapié en llamar “chica final” a la persona que suele quedar viva en este tipo de pelis y normalmente derrota al malo en la última parte de la trama o escapa de Él. Aunque también os digo que no es un término exclusivo del slasher porque, por ejemplo, Ripley en Alien, también se consideraría una final girl.

En Las Supervivientes, Quincy Carpenter, fue la única superviviente de la masacre que tuvo lugar en Pine Cottage donde pasaba el fin de semana con cinco amigos. La prensa la bautizó como una de «Las Últimas Chicas». Es la protagonista. Perdió a nueve compañeras y cuando huía por el bosque y creía que iba a morir, Coop, un policía de la zona, la rescató. Diez años después, Quincy se sigue viendo con Coop, se ha convertido en alguien que hace muchos kilómetros hasta su casa cuando tiene algún problema. Aunque Quincy tiene un novio que la cuida, un blog de cocina y un bonito apartamento. Pero cuando Lisa aparece muerta en extrañas circunstancias, otra final girl, que quiso mantener contacto con ella en el pasado; parece que algo oscuro ha empezado a cernirse sobre las que quedan. Entonces, están estas tres mujeres. Porque hay una más, Sam, que ha aparecido al otro lado de la calle para hablar con ella tras el suicidio de Lisa. Cada una de ellas pasó por una terrible experiencia con un asesino enloquecido y ya solo quedan dos para contarlo. Las final girls hasta ahora nunca se han conocido. Pero ahora hay algo que las une. La muerte en extrañas circunstancias de una de ellas. Todo tipo de cosas extrañas comienzan a suceder a su alrededor. Las que quedan vivas, se temen lo peor.

Riley Sager logra mantener alerta al lector hasta el giro final. ¿Juega con los tópicos? Por supuesto. Pero Las Supervivientes mola por estar llena de giros argumentales y tener cantidad de guiños al cine de terror. Y ahora dices: «Lo típico, ¿no?». Sí, pero bien hecho. Las Supervivientes fue un libro que fue un pelotazo en USA. Súper recomendado al otro lado del charco por cantidad de blogs y autores incluido Stephen King…, así que, que duda cabe que este que os escribe tenía que sacarlo a flote en Desde New York… No quería que pasarais por alto  -como casi me ocurre a mí-, esta joyita de libro que te mantiene en tensión como pocos libros de terror actual. Más que una peli, tienes la sensación de estar viendo una buena serie TV que transcurre lentamente aliñada de terror psicológico cuyos capítulos están muy llevados. La información con cuentagotas. Algo que hizo muy bien David Fincher en Mindhunter, por ejemplo.

Por otro lado, creo que el primer problema para que este titulo no tuviera la repercusión que se merece entre los fans de Terror de este país fue la traducción de su título. Aunque no es incorrecto del todo, Final Girls no solo es su título original sino también un término muy de moda en medio mundo que completa y comprende al libro. No hubiese pasado si no se hubiese traducido y seguramente le hubiese venido mejor como publicidad. Pero esta sería mi única pega porque por lo demás, súper agradecido que Alfaguara la trajera a nuestro país, esto, sin duda, es lo más importante. La cuestión es que joyitas así crucen el Gran Azul. Eso es lo principal.

Reseña: La Casa del Diablo, de José Ortiz, John Wagner y Alan Grant

Isla de Nabumbu sigue recopilando joyitas del cómic clásico para su catálogo. Joyitas que ningún aficionado al cómic fantástico se debería perder. Grandes maestros, nuevamente traídos a la palestra de novedades, títulos a cual más apetecible. La última sorpresa ha sido La Casa del Diablo (The House of Daemon), obra que se sacaron de la manga el maestro Alan Grant, John Wagner y nuestro paisano con el don de la ilustración como es José Ortiz. Uno de los cómics favoritos para el fan y que ya tocaba reeditar. Con un argumento sencillo, en principio, una historia de Terror que es maravillosa en todos los aspectos, pues en La Casa del Diablo, Elliot Aldrich ha construido una casa de ensueño para su chica. Pero un sueño que termina por convertirse en pesadilla para todos.

Elliot con su esposa Cassandra y algunos valientes trabajadores y parapsicólogos contratados terminan por quedar atrapados en esta retorcida mansión del terror. El Diablo (Daemon) hace lo que quiere dentro de ella, una casa de la que nunca les permitirá escapar…

¿Qué tenemos? Una impresionante obra para mí que conocí por primera vez en su publicación de New Eagle allá por finales de 1982. Y si no fue ahí mi primera lectura, recuerdo que esa edición sí que la tuve un tiempo en mi poder. Aunque es de esos cómics que se perdieron con el tiempo en mi vida y no sé donde acabó entre tanta mudanza. Así que imaginad mi sorpresa cuando vi que Isla de Nabumbu lo sacaba de nuevo y en una nueva edición en español. Una historia magníficamente escrita por Alan Grant y John Wagner, acompañada del arte incomparable del maestro español José Ortiz. Y es que no me canso de repetirlo y todo porque es sorprendente la calidad creativa que se reúne en este cómic. Donde Grant y Wagner dan cuerpo a todos los personajes de manera efectiva, no solo brindándonos una gran acción y aventura, sino también fuertes heroínas femeninas; una rareza en la mayoría de los cómics británicos “para niños” de aquellos años. La historia no trata de una simple posesión demoníaca. Más bien de una infestación. Una fuerza maligna mucho más aterradora y aparentemente imparable que se ha hecho con «la realidad» de los presentes. Y la batalla. Escenas que os dejarán boquiabiertos por como están diseñadas desde la primera hasta la última página.

Si deseáis sentaros a saborear buen cómic de Terror, con un trabajo creativo, asombroso, detrás, esta debería ser una de vuestras opciones en este momento. Y quizás, en cualquiera de los momentos lectores de los que dispongáis. Un buen cómic de Terror, una buena historia, siempre-siempre es un cóctel que se disfruta. Recordad que el primer sentimiento del ser humano, aquel que sintió y le inquietó por primera vez, tiene el poder de atrapar a todo aquel que se expone. En vosotros está querer más o no. O de forma más culta, lo que dijo el maestro H.P. Lovecraft:

La emoción más antigua y más intensa de la humanidad es el miedo,

y el más antiguo y más intenso de los miedos es el miedo a lo desconocido.

La Casa del Diablo es un clásico cómic británico de terror verdaderamente escalofriante. Pasa rápidamente de ser una historia de casa embrujada al mundo de las pesadillas cuando los Aldrich y los que les rodean se sumergen en un aterrador paisaje de ensueño. Con un ente que no puede existir sin hacer el Mal.

Reseña: Odio Este Sitio, de Kyle Starks, Artyom Topilin y Loughridge

Podría hacer una reseña de Odio este sitio en tan solo un párrafo que dijera: disfruté los dibujos, contiene los estereotipos clásicos del Terror en un solo escenario (lo cual es uno de los puntos fuertes del género), hay que sumar protagonistas geniales, seres malutos con y sin inteligencia, un misterio de luces que nadie entiende… En resumen-resumen, una pareja chicas en un rancho embrujado luchando contra ovnis, fantasmas, zombies, poltergeists, criaturas del bosque…, a saber. Y aunque no me gusta que siempre se recurra a la participación militar norteamericana tan socorrida, diría que aquí aporta al guion un toque muy original del porqué entran en escena.

Tenemos en Odio este sitio una serie súper interesante que empieza con una versión atractiva y al parecer diferente del género de las casas embrujadas. ECC Ediciones, que cada día nos maravilla más, con más y más cómics de Terror (¡Siempre grande Junji Ito!), recién publica este volumen en nuestro país. En mi tierra natal lo hizo Skybound a través de Image Comics, un sello en el que siempre tengo puesto un ojo porque se suceden este tipo publicaciones de vez en cuando. El guionista es Kyle Starks, quien está haciendo su primera incursión en los cómics de Terror después de una larga lista de excelentes historias de comedia y acción como puede ser Sex Castle o Rock Candy Mountain. Pero a lo que vamos, la premisa de Odio este sitio, cuando ya queda súper clara, es al final del primer número. Me refiero a la grapa pues este volumen en tapa dura de ECC contiene los cinco primeros números de la serie.

Una pareja ha heredado una casa de campo con terrenos de un familiar fallecido. Lo dejan todo para venir aquí. Las dos emocionadas chicas llegan, y la primera noche: ¡PUM! En toda la cara. Se topan con un grupo de seres acosándolas en la oscuridad de la noche. ¿Alienígenas, fantasmas, zombies, un misterioso demonio que acecha en el bosque? Os aseguro que apostaréis dudas o aceptaciones sobre algunos de ellos. Nunca certeza sobre lo que son. El problema es que también se apunta al carro un asesino en serie que busca dinero por la zona. Las visiones idílicas que tenían de comenzar una nueva vida en un lugar nuevo esta pareja de señoritas, finalmente se convierte en horror. Y con ese tema, si no tienes vuelta atrás u otra salida, lo pasas bastante mal. De buena mano lo sé.

Se puede deducir por mis palabras que este que os escribe es un enamorado de este tipo de historias. Que puede hacer un juego de palabras con el título de este cómic y decir que cuando terminó de leer Odio este sitio, de hecho, no lo odió. Si no que le encantó, o al menos, le tuvo entretenido y gustoso de leer que es lo mínimo que uno le pide a una historia. Que haya una intriga. El suspense famoso del que hablaba Patricia Highsmith en su ensayo. Pero la razón no es que solo se lee bien, sino que hace un buen uso del género que amamos muchos, tanto en términos creativos de lugares y ambientación como de los estereotipos en los que se basa para salir adelante. Y eso que la serie aún no ha terminado.

Seguimos en contacto.

Reseña: Los Cazadores Solitarios, de Tyler Crook

Para poder valorar de forma objetiva el género de Terror que es lo que principalmente me atrajo de esta obra, obvié en un principio que Tyler Crook ganó el Premio Russ Manning, fue nominado al Eisner y es co-creador de la maravillosa Harrow County. Aunque sea difícil no dejarse influenciar por tanta mención.

Ah…, el cómic de Terror…, ese del que tanto me quejé que apenas llegaba nada a este país y que por fin las editoriales se están dando cuenta que siempre-siempre hay que tenerlo entre sus novedades porque su número de seguidores aumenta como una plaga de zombies un fin de semana en el Primark. Y es cierto que Norma Editorial ya traía cositas de vez en cuando pero me alegra ver que cada vez son más y que ya es raro el mes en el que no hay al menos un título de nuestro amando género. Y no viejunadas sino títulos que han pegado fuerte hace nada en USA como esta genial serie que Crook se sacó de la manga en febrero de este mismo año.

Permitid que revele esto ahora: siempre me ha encantado la obra de arte de Tyler Crook desde que llegué anonadado al primer titulo de Manor Black. Su paleta de colores, las afiladas mandíbulas de sus personajes endurecidos por la vida y el horror subyacente, a menudo sutil, que brota de debajo de la superficie de casi todas sus viñetas… Mola ver todas y cada una de sus colaboraciones con Cullen Bunn donde el terror está muy presente. Dibujos inspiradores que dejan con ganas de más. Los Cazadores Solitarios ya tiene una premisa bastante intrigante por no decir portentosa: Howard, un cazador de monstruos envejecido y sin práctica desde hace tiempo se une a una joven llamada Guadalupe para combatir a un anciano demonio. El viaje para destruir a esta vil ser los lleva a meterse en un viaje en carretera al corazón de la propia oscuridad. Pero este primer volumen insinúa un arco argumental más amplio que trata el tema de la espada que Howard usa para combatir. Sí, esa que veis en la portada del cómic. Al parecer Howard las usa para matar monstruos pero está siendo perseguida por su creador. Su legítimo propietario.

Es un terror diferente. Los Cazadores Solitarios tiene ambiente hitchcockiano. Tensión constante por escena en la mayor parte del cómic mientras se gira una y otra vez a las “travesuras” de unas urracas malvadas que quieren sangre. La peli de Los pájaros a un paso. Pero creo que el objetivo de Tyler Crook es contar una historia sobre dos personas que lloran la pérdida de sus familias y deciden ir a por todo, recorrer, atravesar la vida, solas. La tragedia o el destino envía a esta chica al camino de un anciano cazador de monstruos, que tiene que salir de su retiro para mantenerlos a salvo. Y enfrentarse a su pasado en el proceso. El contraste entre los dos personajes tiene su aquel. Es un poco de Last of us mezclado con un poco de Silent Hill. Aunque este primer ejemplar no es demasiado espeluznante como tal vez la serie pretenda ser más adelante. Si no me equivoco, creo que esta es la primera incursión de Tyler Crook en la escritura. ¿Mantendrá el tipo? Veremos.

Crook usa sus diseños de página y colores para transmitir gran parte de la trama, a menudo con poco diálogo. Ese terror que con poco, dice mucho. Me encantó especialmente el diseño de la reina Urraca.

Reseña: La Glándula de Ícaro. El Libro de las Metamorfosis, de Anna Starobinets

El potencial de Anna Starobinets ya lo vi en En la guarida del lobo (https://www.cronicasliterarias.es/?p=5609), donde la autora mostraba como las cosas no son siempre lo que parecen; giros, vueltas de tuerca y humor muy refinado en casos de asesinatos. Bien, pues La glándula de Ícaro es un nuevo lugar donde encontrar historias (varias, porque es un antología) con las que disfrutar. Una muy chula recopilación de tramas de la ya considerada maestra rusa de la ciencia ficción.

Ahora casi toda antología se compara con Black Mirror, claro, lo más fácil es compararlo con lo mejor, con lo que está de moda en el momento. Pero a mí esta antología me recuerda más a una de esas maratones de películas basadas en historias de Stephen King que me dio por hacer una vez. Hay historias geniales, un par de ellas bastante normalitas y un cuento de miedo digno de enmarcar. Pero también un reportaje de REN-TV y una parábola sobre la necesidad de leer «spoilers» y sobre los efectos secundarios del tratamiento. Y en mi cabeza, para la escena final de Reencarnación, una especie de infierno satánico que jamás olvidaré.

Me gusta mucho la sensación de desesperanza que esta autora es capaz de crear. Como si de pronto para alguien ya está todo perdido y poco se puede hacer. O para todo el mundo, lo que da un miedo atroz. Pero siendo sincero hay un par de cuentos que terminan justo cuando la cosa empieza a tomar impulso (La frontera y El lazarillo) y eso no mola. Pero Starobinets, maestra creadora de sensaciones, es capaz de hacer que sientas asco y que algo mecánico y físico se vuelva espiritual, y eso es muy difícil de conseguir. Delicados pastos os va a dejar a muchos de piedra. Una colección que consta de siete cuentos, de los cuales el último es lo suficientemente largo como para llamarlo novela corta por derecho propio. Las historias son bastante diferentes entre sí, pero todas pueden ser etiquetadas de CF, menos la de Terror que antes os comentaba. Y en la medida de lo posible, todas tienen lugar en un futuro indefinido, cercano o lejano y todas tienen algún tipo de avance tecnológico como punto focal de ocasión. Los dos últimos cuentos son una bomba. Spoki hace que te sientas incómodo a más no poder.

Ciencia ficción rusa moderna con elementos de fantasía y terror. Los cuentos de Anna Starobinets son oscuros, macabros e inquietantes, pero también humorísticos y críticamente reflexivos. El que da título a la antología habla de como la ciencia ha localizado el órgano responsable de la propensión de los hombres al adulterio y otros excesos, la glándula de Ícaro, por la cual (afortunadamente) también se ha encontrado un método para extirparlo. Supuestamente, sin efectos secundarios. A partir de ahí el hombre será para siempre un esposo estable, cariñoso y fiel, dedicado a las virtudes cívicas y conyugales… O eso creen.

La invención del viaje en el tiempo le ha permitido a un hombre iniciar una especie de aventura con su propia esposa, la versión más joven de ella de la que se enamoró hace años, antes de que se convirtiera en la aburrida y lo dominante que es en la actualidad. El parásito, es el de Terror que os decía. Recuerda bastante a El fin de la infancia, de Arthur C. Clarke; un médico ha descubierto un método para liberar una hormona hasta ahora inactiva en humanos que puede iniciar una metamorfosis física. Te lleva a la pregunta de ¿la naturaleza más íntima del hombre es realmente ser un ángel o demonio? ¿O algo que nunca hemos conocido?

La Glándula de Ícaro no es la única recopilación de relatos de Anna Starobinets. Editorial Impedimenta, por favor, necesitamos más títulos de esta autora.

Reseña: La Reveladora, de Daryl Gregory

Lo que me escama y antes me dolía bastante más del mundo literario en este país, es que no se publicitaran apenas las obras de Terror como tales. Que se huya de tal palabra que define el género para -en teoría- vender títulos como algo que no son. No etiquetar, no clasificar… puede ser una estrategia de marketing buena, o no. Somos una tremenda legión en la sombra los que necesitamos leer obritas chulas de Terror y lo peor/mejor aún es que somos como los insectos: nos reproducimos con facilidad. Aunque también es cierto que hay muchos lectores en la sombra que parecen no estar orgullosos de ello. Esto es una de las razones por la Desde New York – Crónicas Literarias pese a los años. Nuestra labor es reivindicar obras como La Reveladora, novela que nadie debería pasar por alto.

Del aclamado autor de Spoonbenders y Pandemonium y gracias a Blackie Books, llega a nuestro país la historia de una misteriosa familia religiosa cuya mal es una hija que le da la espalda a su dios. Nos vamos a 1933, Stella, de nueve años, queda al cuidado de su abuela, Motty, en los bosques de Tennessee. Estas colinas remotas de “montañas humeantes” son el hogar de peligrosos secretos donde al poco de su llegada, Stella, se adentra en una caverna oscura y se topa con una entidad desconocida… Pero años más tarde, después de un trágico incidente que la obligó a huir, Stella, ahora es una chica de armas de tomar. Una contrabandista profesional que destila whisky junto al único hombre negro del pueblo. Eso le ha enseñado a mantenerse oculta. Su familia lleva años sin saber de ella. Pero la muerte de su abuela la obliga a volver al hogar que tanto horror le provocó de niña. Regresa para el funeral de Motty y para ver quién es esa misteriosa niña de diez años llamada Sunny que Motty adoptó. Una pequeña que se le parece mucho, por supuesto. Pero que esconde algo y es más poderosa de lo que Stella puede imaginar. Poseedora de un vínculo directo que Stella creía haber enterrado.

La Reveladora es un cuento gótico sureño que absorbe con un misterio sin desvelar que te lleva con ansia a querer saber el final. Es una obra que mezcla el género noir y el fantástico de un modo extraño. Ambientada en las décadas de 1930 y 1940, la maravilla y la belleza de Cades Cove y sus primeros pobladores cobran vida. Este ambiente es aislado, la fe se mezcla con el miedo mientras navegamos entre secretos familiares y fanatismo religioso, quedando claro que Stella es nuestra reveladora y su trabajo es comunicarse con ese espectro que una vez se le apareció en Los Apalaches. Hoy en día, sigue sin saber explicarlo, no sabe lo que es, ni realmente quiere saberlo. Y teme que su familia, en su celo ciego por complacer a su dios, se ponga en peligro por ello.

Sinceramente, La Reveladora no fue tan aterradora para mí como pensé que sería. Pero tiene ese puntito de tensión toda la trama que mola, sobre todo, cada encuentro con dicha entidad sobrenatural. Obviamente, dudo que cualquiera de ustedes quisiera encontrarse con tal criatura extraña ni si quiera a la luz del día, por lo que miedo da. Por otro lado, es lo de siempre. Este escribe quizás ya ha leído y visto demasiado Terror como para que le sorprendan algunas cosas. Pero La Reveladora cuenta con una tremenda ambientación. Un entorno claustrofóbico bien creado pese a que los lugares descritos son terriblemente «anchos». Aprecié también los aspectos históricos de Cades Cove y como Daryl Gregory analiza la política de género y, sobre todo, las “dinámicas de poder” de la Iglesia.

Insisto, absorbente es la palabra. Completamente absorbente, esta trama.

Reseña: La Tumba de Drácula. Artist Edition, de Gene Colan, Wolfman y Tom Palmer

Los caramelitos que van soltando dentro del bosque comiquero de vez en cuando las grandes editoriales, sólo por eso uno se rinde a ellos como un niño que se dirige a la casa de la bruja llena de dulces casi sin saberlo. Cómics que son joyas, que valoras bastante más, cuanto más edad tienes o más años llevas dentro del fandom. Ediciones que son (nunca mejor dicho) obras de arte o artist edition de magníficos maestros con el don del trazo como fue Gene Colan. Gente con el don de traspasar nuestro cerebro, con una sola imagen, lo que se quiere contar. Para muestra de esto, La tumba de Drácula Artist Edition, escrito por Marv Wolfman e ilustrado por el maestro que os acabo de mencionar. Un genial tomo recién publicado por Panini Cómics y SD dentro de sus Marvel Limited Edition, un titulo a valorar. Una línea que me está deparando alegrías como ninguna otra.

La tumba de Drácula, de Marv Wolfman, Gene Colan y Tom Palmer, considerada como una de las mejores obras de Marvel de los 70, el tremendo ambiente que sólo Gene Colan era capaz de hacer con apenas unos trazos (nadie ha conseguido dibujar el viento o la niebla como este señor). Un arte atmosférico de Colan que fue compañero perfecto para las historias de terror de monstruos clásicos de Marv Wolfman. Y es que no recuerdo bien cuando descubrí a los vampiros por primera vez. Sé que desde muy temprano leí libros de terror a la vez que libros infantiles como El pequeño vampiro. Incluso estos mismos cómics de Drácula en Marvel…, podría tener unos seis o siete años cuando por primera vez pasaron por mis manos. Y sí, estoy hablando de lecturas, porque también desde muy pequeño tengo uso de razón de haber visto a Christopher Lee haciendo de las suyas tras expandir los brazos bajo su capa (¿Drácula, Príncipe de las Tinieblas de la Hammer?). Pero no mucho después descubrí el Drácula de Bela Lugosi y la novela original de Bram Stoker (comprada con mis ahorros la edición Scholastic Book Club). Y hay fotos mías con maquillaje de vampiro y colmillos de cartón, sangre de ketchup y una capa morada que mi madre cosió para Halloween. Todo esto es para decir que cuando el Cómic Code permitió que el Conde Drácula regresara al mundo de los colores en Marvel aquí ya había un fan de todo tipo de historias con chupasangres de por medio. ¿Y qué tenemos aquí? Pues una hermosa introducción retrospectiva de Marv y media docena de números completos, sin secuencias, de La tumba de Drácula, todos fotografiados con amor y con minucioso detalle de las páginas de arte originales. Cosita maravillosa que por estos lares no nos íbamos a perder.

Como se ha señalado en otros sitios, el hecho de que las historias no sean secuenciales no viene al caso. Este volumen es más para que pongamos el foco en el arte, el diseño y el trabajo dado por maestros del noveno arte. ¡Aquí prima el dibujo! Y es que Colan fue difícil de entintar correctamente. Su estilo más realista no se prestaba en absoluto al entintado típico de los cómics. Sus técnicas de narración y diseños de página siempre fueron retorcidos por llamarlos de alguna manera. Pero atractivos por el detalle. De hecho, en varios de sus últimos proyectos, las páginas impresas se tomaron directamente de los lápices sin entintar del artista, evitando al entintador por completo. Pero aquí, sin embargo, a pesar de que su nombre no aparece en el título, la verdadera estrella para mí es Tom Palmer. Como dije anteriormente, Colan podría ser difícil de entintar… pero no con Palmer. Usando una buena cantidad de planchas y efectos pegados, Palmer siempre parecía tomar las decisiones correctas para mejorar y generalizar las ideas de Colan. Mirar estas páginas es admirar el trabajo de ambos artistas y recuerda las hermosas líneas y delicadas, y los negros pesados que el lector ve en cada viñeta (excepto por unas pocas páginas sin tinta en la parte posterior). Este Artist Edition de La Tumba de Drácula no es otra cosa que un maravilloso tributo al artista a menudo subestimado, pero también a su memorable compañero de arte, Tom Palmer, con quien se unió para brindarnos casi una década de espeluznantes aventuras de vampiros, una colección de cómics de terror irrepetible. Si queréis más de este genial tándem Colan/Palmer los podréis encontrar en proyectos como Doctor Strange y Daredevil. Pero ni de lejos a lo que hicieron aquí.

Reseña: Historias de Harrow County. Los Perdidos, de Cullen Bunn y Emily Schnall

En Los Perdidos se nos lleva a saber más de la vida de Emmy. Y qué queréis que os diga, es bueno ver a Emmy en un nuevo entorno, una nueva historia del condado de Harrow, historias interesantes con un dibujo fantástico, historias que siempre dejan con ganas de más. Entonces, ¿Emmy está en la gran ciudad y se encuentra con nuevos desafíos? ¿Está ella realmente dispuesta a hacer esto sin poderes? Realmente depende de cuán perdida y sola haya estado, ¿no? Los últimos arcos de Historias de Harrow County (Tales from Harrow County) han estado centrados en Bernice Anderson como protagonista pero en Los Perdidos volvemos a Emmy Crawford, la protagonista de la serie original, y esto es para mí, como mínimo, emocionante. Porque además me habían advertido que cambia radicalmente la serie original en cuanto al futuro. Y cierto es. Han pasado diez años desde que Emmy dejó el condado de Harrow. Desde entonces, han pasado muchas cosas en la ciudad pero, ¿qué le sucedió a la propia Emmy y qué aventuras ha emprendido desde que perdió sus poderes y se fue de la ciudad con el Abandonado? En esta historia épica y esencial, descubrimos dónde le ha llevado la vida y qué peligros acechan en las sombras esperando… porque también hay sombras maléficas fuera del condado de Harrow.

De alguna manera, estaba preocupado ella. Después treinta y dos números sufriendo junto a Emmy (las brutales cosas por las que tuvo que pasar) y tras un final agridulce, que duda cabe que la pobre se había ganado un respiro. Realmente no importaba a dónde fuera, todo lo que importaba era que pudiera encontrar algo de paz. Pero en Los Perdidos no encontraremos eso…

Desde la apertura de Schnall, este cómic se siente diferente a todo lo anterior. Ya no estamos en el condado de Harrow, es nuestra amada ciudad de Nueva York y en años de la Segunda Guerra Mundial. Pero no es la Nueva York con la que estamos familiarizados. Podemos ver una ciudad genuinamente desconocida: luces apagadas, la ciudad se transforma, pero esto no es un apagón o una escena de una peli apocalíptica, sigue siendo la bulliciosa ciudad de Nueva York que conocemos excepto que intenta ser invisible durante la noche. ¿Por qué? A través de la oscuridad se filtra lo sobrenatural.

La galardonada serie de terror gótico sureño nominada a un Premio Eisner regresa con una nueva historia. Cullen Bunn (Bone Parish, El Sexto Revólver) regresa con una nueva historia. Aquí junto a Emily Schnall nos hace caminar por la cuerda floja intentando honrar desarrollos de Harrow County que se produjeron antes y lo hacen bien. Siempre está presente la serie original. A ratos, se regresa a momentos o a puntos de la trama principal y eso es súper interesante porque se matizan detalles y se agrega complejidad y riqueza a tan gloriosa historia. Y la aparición de Emmy no es para nada un fan-service. En esta historia es esencial.

Por otro lado, si tuviera que poner una pega a este spin-off es que lamento mucho que Tyler Crook (AIDP, Petrogrado) no sea el dibujante. Pero más que nada porque tal diseñador me inspira con sus dibujos cosa mala. Pero por lo demás, otro cómic chulo de Terror para disfrutar.

Reseña: El Fantasma de la Ópera, de Andrew Lloyd Webber, Cavan Scott y José María Beroy

No le doy el sobresaliente pero casi lo alcanza porque hay un artículo al final que explica la historia y la creación del musical icónico, lo que me hizo muy feliz ya que vivo para este tipo de conocimiento que probablemente nunca sea útil pero son detallitos que a mí me encantan. Y también se hace referencia al libro original y al hecho de que la relación romántica del Fantasma y Christine, aunque solo se insinúa en el musical, y es completamente inexistente en la novela; se nombra porque huele a fuego lento en la cocina durante toda la trama.

De todos modos, que duda cabe que esta novela gráfica que publica Aleta Ediciones es una adaptación de El Fantasma de la Ópera, de Andrew Lloyd Webber, que a su vez fue sacada de la novela de Gaston Leroux. Y si bien me hubiera encantado poder disfrutar de una reproducción escena por escena de todo el musical (eso habría sido un tochal de no te menees) así que mejor no pedir peras al olmo y, al menos, disfrutar de las escenas que se adaptaron aquí y que bueno, cuentan claramente la historia (que conozco tan bien) y eso puede valer para el que a estas alturas no sepa de qué trata tan famoso título.

Una historia que confieso que incluso canté (en mi cabeza, por supuesto, para no asustar a los vecinos) todos los extractos de cada canción. Y con unas ilustraciones magníficas que evocan la sensación de las escenas que también se pueden disfrutar en sus musicales (visto dos veces hasta ahora), desde la mascarada brillante y colorida hasta la pérdida de color cuando el Fantasma aparece en el espejo de Christine. Y cuento más. Pasé gran parte de los 90 obsesionado con este musical, y después de haber viajado a Toronto para la mejor excursión escolar de mi vida, al final, lo vi en Nueva York. En casita. En uno de los recintos de la gloriosa Times Square, y sinceramente, nunca imaginé que un musical pudiera ser tan inmersivo: jadeamos y señalamos cada vez que vimos al Fantasma aparecer fuera del escenario y no me avergüenza admitir que realmente pensé que ese candelabro iba a lastimar a alguien…

Pero fue aún más emocionante la segunda vez que presencié la caída del candelabro en el siguiente musical en la capital de este país esta vez, años después, ya que nuestros asientos estaban directamente bajo su arco. Donde vi, por cierto, al director hacer lo suyo y a todos los músicos calentar antes de la actuación, cosa que me dio bajona y me impresionó a su vez. Pero nos familiarizamos tanto con todo el musical que nos lo recitábamos unos a otros mientras sonaba. Así que lo siento. Tenéis que disfrutar de esta historia en cualquiera de sus formatos. Siempre seré parcial en lo que respecta a El Fantasma de la Ópera. Es una de mis historias favoritas y para el caso, adoré absolutamente esta adaptación. Me hizo desear poder ir de nuevo al musical, doquiera que lo echen. Pero como eso no es posible actualmente, voy a hacer lo siguiente mejor… volver a leer esta novela gráfica y disfrutar con nostalgia de lo bien que lo he pasado en mi vida con esta historia.

Dando gracias a Aleta Ediciones, Scott y Beroy por darme la oportunidad de volver a disfrutar de tan tremenda historia.