Reseña: Tokyo Día a Día, de Taiyô Matsumoto

Me van también los mangas que brindan por las pequeñas/grandes cosas buenas de la vida. Y a poco que me entere de alguno que trate este tema, intento degustarlo. El más reciente manga del consagrado autor Taiyo Matsumoto, quien en 2020 ya ganó dos Premios Eisner por Los gatos del Louvre (también publicado por ECC), y obras Tekkon kinkreet o Ping Pong las cuales pusieron al público en pie dándole fama internacional con sus adaptaciones al cine. Y no se me olvida Sunny (https://www.cronicasliterarias.es/?p=12491) que la disfruté un montón. Así que tenía que leer el primer volumen de Tokio día a día sí o sí aprovechando que llega a librerías en nuestro país.

Tokyo Higoro (que se ha traducido libremente como Tokyo days o Tokyo día a día) es una nueva serie de manga del reconocido artista de cómics japonés Taiyo Matsumoto, el cual aquí te saca un personaje preocupado por su trabajo o mejor dicho por la vida laboral llevada. Pensar si hay cosas perturbadoras en la vida por las que merece la pena pasar para el poco tiempo que estamos aquí. ¿Vivimos para el manga? – se pregunta Shiozawa, un editor de manga que trabaja en la editorial Ote. Decidido a realizar su objetivo de crear el manga de sus sueños, Shiozawa deja su trabajo diario y busca un artista de manga de confianza para escribir lo que tiene en mente.

Lo cierto es que no soy muy de las piezas «meta autorreferenciales» como en las que en este caso tocan el tema de “mangas sobre mangas”. Pero me llamó la atención este título porque este tipo de obras que antes no eran frecuentes, cada vez lo son más dentro del mundo ilustrado nipón. Y también esta era la primera vez que Matsumoto tocaba este palo que en Japón se anunció como “pieza filosófica” del autor. Aunque lo que está claro es que estamos ante un título deslumbrante lleno de humanidad y melancolía donde la vida de Shiosawa nos va a parecer cada vez más interesante, sin ser realmente original lo que le ocurre.

Un personaje que con tan solo treinta años decide retirarse de la presión laboral para disfrutar de la vida, ponerse a lo que le gusta hacer sin presiones y dedicar mucho tiempo a su casa pero, sobre todo, a su canario. Veremos cómo será su nuevo día a día relacionándose con sus antiguos compañeros y autores de los que se encargaba, ahora que está libre de presiones laborales. Y el tema manga no lo olvida. Ahora así, de este modo, lo disfruta. Seguirá siendo una parte esencial de su vida porque es lo que ama desde que tiene uso de razón. Pero visto desde la orilla buena llena de flores. Sin fuegos. La parte no quemada del bosque.

Una oda a la jubilación que todos deseamos.

Reseña: Los Nuevos Vengadores. La Edad Heroica, Acuña, Immonen y Bendis

Mola ver en un cómic, franquicia o género que la cosa después tantos años, de pronto, cambia. Por eso mola encontrarse con una nueva serie de Los Nuevos Vengadores, descubrir su nuevo punto, y sobre todo, te peta la cabeza cuando descubres que Vengadores Oscuros se han unido a sus filas y qué un demonio interdimensional amenaza nuestra existencia. Los Nuevos Vengadores vuelven a nosotros de un modo fresco e interesante de la mano de Daniel Acuña, Stuart Immonen y, por supuesto, Brian Michael Bendis. Un primer arco de una serie regular que se ha llamado por estos lares La Edad Heroica.

Durante bastantes años, Brian Michael Bendis consiguió que Los Nuevos Vengadores fuera la serie de Marvel más seguida. Y eso no es moco de pavo. Por eso vais a agradecer, sobre todo, los que aún no os habéis puesto con estos cómics, la publicación del primer arco de esta serie dentro de la colección Must-Have. Por lo menos, económico sale ahora darles un tiento, por si existiera la ínfima posibilidad de que no os gustara. Pero ya os digo que vería muy raro que un lector de pijameo de toda la vida no se enganchara a la serie tras degustar el primer arco que brinda esta serie. Y es que cuando Tony Stark, también conocido como Iron Man, actuaba como un completo imbécil y se nombró rey de los superhéroes, Luke Cage y otros que habían sido parte de Los Nuevos Vengadores pasaron a la clandestinidad y contraatacaron. Ahora que la Civil War de Marvel y sus secuelas finalmente terminaron y la llamada Edad Heroica ha comenzado, Steve Rogers quiere que Luke continúe liderando un equipo de Vengadores…, y esto mola que te cagas. Pero de pronto, en la nueva sede, Dr. Strange y el nuevo Hechicero Supremo Dr. Voodoo aparecen poseídos por demonios. Y tras ello una entidad poderosa de otra dimensión queriendo hacerse con el Ojo de Agomotto. Para ello, dispuesto a destrozar nuestro universo para conseguirlo.

Me divertí especialmente con estos cómics porque aporta muchos de los superhéroes Marvel que me gustan: Luke Cage, Spiderman, Lobezno, La Cosa, Iron Fist, Miss Marvel y mi amada Pájaro Burlón. Todos juntos pero no revueltos, creando una dinámica de equipo interesante y jugando con la principal fortaleza del diálogo ingenioso de Brian Michael Bendis. Y simplemente, porque se muestra una alineación sólida de personajes geniales con un buen guionista y dibujante, que eso raras veces sale mal. Un nicho interesante que había que rellenar en el Universo Marvel.

Bendis también muestra su poder de narración en una trama de misterio de varios hilos y de formato largo que te mantendrá enganchado y querrás a volver a casa rápido a leer si no lo terminaste la primera vez de una atacada. La forma en que el tomo comienza con ¡Vengadores Desuníos! (¡Avengers Disassembly!) me hizo pensar: «Tío, me espera un regalo aquí».

Y lo tuve.

Reseña: The Nice House on the Lake, de James Tynion IV y Álvaro Martínez Bueno

Imagina a tu mejor amigo de la infancia. Un poco incómodo, un poco raro e intenso; querido por todos, pero sólo unos pocos pueden afirmar que realmente lo conocen bien. Un confidente; el padrino de su boda, un oído comprensivo y una mano amiga siempre ansiosa que nunca está a más de una llamada de distancia. Ahora, imagina que ese amigo fuera en realidad un macabro y trastornado alienígena disfrazado de ser humano que lleva dentro un intento de exterminar a toda la humanidad, y te ha elegido como uno de los pocos para sobrevivir. Para los protagonistas de The nice house on the lake, la serie de terror del siempre interesante guionista James Tynion IV y el ilustrador Álvaro Martínez Bueno para DC Comics, esta hipótesis se convierte en una realidad aterradora. Ganadora de los Premios Eisner a Mejor Serie Nueva en 2022, Mejor Guionista y Mejor Colorista en 2023 y nominada en las categorías de Mejor Serie Regular y Mejor Dibujante/Entintador…, que duda cabe que esta miniserie, y más aún en este tomo recopilatorio de doce números que trae ECC Ediciones, es como poco recomendable. Por su originalidad y horror descrito.

Una nueva manera de entender el cómic de terror moderno. De dejarse sorprender por la primera temporada de una serie en la que las grandes ansiedades del siglo XXI adquieren un nuevo y aterrador rostro… que bien podría ser el de la persona en la que más confías. Para resumirlo a través de una comparación, tenemos una mezcla de Reencuentro, de Lawrence Kasdan, con El cazador de sueños y algo de la genial It, de Stephen King. Incluso muy del estilo de la novela La cabaña del fin del mundo, de Paul Tremblay, de la que Shyamalan convirtiera en peli en Llaman a la puerta. Mirad, hasta el poderoso ambiente de Señales tiene. Un thriller de misterio apocalíptico donde el punto focal de estas influencias dispares es Walter, el antagonista de la serie, uno de los villanos de cómics más intrigantes que me he encontrado en mucho tiempo.

Walter deja la compra en una mesa y dice: “Me alegro de que hayas venido. Ahora… ¿quién quiere probar estos filetes a la parrilla? Sus gafas reflejan la luz de manera siniestra como un villano de anime o manga, pero todo comienza con la imagen de una mujer envolviéndose la cabeza con una venda, con el fondo ardiendo con un resplandor naranja y rojo y cuenta la historia de cómo conoció a Walter, el amigo de un amigo, quien la invitó a ella y a un pequeño grupo de conocidos cercanos a pasar unas vacaciones en una hermosa casa en un lago de Wisconsin. En verano de 2021. Lugar del horror donde como ya os he dicho antes, todo el mundo se da cuenta de la horrible verdad en la que Walter no es humano y el viaje se convierte en una culminación del horror para un ser que pretende erradicar la raza humana. Y muertos por doquier.

The nice house on the lake responde preguntas a través de flashbacks de sucesos trágicos en cada número. Cada uno narrado por un nuevo huésped de la casa mientras reflexiona sobre su propia relación con Walter antes del apocalipsis. Historias que pintan un retrato complicado de Walter, un ser de inmenso poder entrando en conflicto con su propio papel de malo-malón. Por lo que contar más es destripar una maravillosa serie de terror que todo lector de cómics debería disfrutar.

Trama poderosa como pocas.

Reseña: Nochebuena en un barco embrujado y otros relatos espectrales navideños, de VVAA

Siempre son buenas noticias que se publiquen en español obras de terror que jamás pensaste que llegarías a tener entre tus manos. Sobre todo, si son cuentos, novelas o grandes recopilaciones que vieron la luz en el mundo anglosajón, a lo que hay que sumar, como en este caso, que viene de la mano de un gran antologista y escritor como es Ramsey Campbell. Y suma bastante más que os hablo de una antología traducida a nuestro idioma en la genial colección de cuentos de fantasmas de Diábolo Ediciones, una edición que en los mercadillos de segunda mano anglos se paga a precio de oro; sobre todo, una edición que existe con grabados en tela negra, ediciones de poco más de doscientos ejemplares en todo el mundo firmadas por Campbell y el artista Ladislav Hanka… Todo esto suma sí o sí. Y permitidme decir que por esta vez, incluso queda más chulo el titulo en el idioma de Cervantes que en el de Shakespeare. Que raras veces pasa. Y aunque pueda parecer un poco tarde para esta reseña, porque la época ideal para su lectura acaba de pasar, puedo decir que he disfrutado en tiempo y forma de Nochebuena en un barco embrujado y otros relatos espectrales navideños, el décimo volumen de esta indispensable colección de relatos de terror que se está marcando Diábolo Ediciones. Que apoyada por grandes profesionales como Alberto Ávila Salazar y Fernando López Guisado aportan para la ocasión Introducción y reflexión bastante interesante sobre lo que para él representa las ghost stories. El cuento “principal” de esta antología habla de David, un niño que intenta superar las tensiones familiares durante una visita a sus abuelos durante las vacaciones de Navidad. La madre de David ha sido abandonada recientemente por su marido, y la abuela de David, que lucha contra la demencia, está obsesionada con un adorno de plástico de Papá Noel que se desprende del techo de su casa. La narración avanza lentamente hasta un clímax aterrador y ambiguo, de las tramas que te llevan a amar el cuento de terror en todas sus formas. De hecho, este relato (Los adornos), que cierra la antología y da nombre al volumen en inglés, fue seleccionado como la historia principal por el editor Stephen Jones para la genial The Mammoth Book of Best New Horror, de 2006.

Solo comentaré algunos relatos para no destripar (spoilear) demasiado pero ya os digo que no hubo ningún relato de esta antología que no disfrutara, cada uno con sus características. La sombra, de la siempre genial Edith Nesbitt, es, sin duda, un relato que impacta; una historia de fantasmas contada en un estilo inusual, una historia de fantasmas que en realidad no trata en absoluto de mitologías sobrenaturales, vistas espeluznantes o atmósfera gótica, sino más bien una historia profundamente preocupada por la condición humana. Una tinta líquida negra se hunde en las sombras y perturba a los propietarios de una propiedad. Relato lleno de una atmósfera oscura e invernal, disfruté mucho de este cuento que lleva a la época victoriana como pocos. La señorita Eastwich, el ama de llaves, contándole a «sus niñas» una historia de fantasmas mientras les ofrece un chocolate junto al fuego…

Me sorprendió encontrar a J.M. Barrie (Peter Pan), aportando un cuento de fantasmas, un relato muy sugerente y nada infantil. “Se dice que cada Nochebuena se repite la escena silenciosa y la tradición declara que ninguna persona vive tranquila mientras el espectro apunte con el dedo”. Un relato muy breve que da escalofríos y que deja con ganas de más.

Nuestra compatriota Emilia Pardo Bazán tiene su hueco en esta antología. Y no me extraña. Porque siempre fue una autora poderosa en creación de ambientes o historias costumbristas, y a donde lleva eso si no es la principal festividad cristiana. El ciego, es uno de sus cuentos más cortos e importantes donde se aprecia de lo que esta precursora autora de nuestro país fue capaz.

El último cuento que comentaré, pese a que la antología cuenta con veinticinco relatos más unos apéndices contenedores de artículos sobre las fiestas navideñas de grandes autores como Ambrose Bierce o el aristócrata George W. Erskine Russell, es la joyita del científico y novelista Charles Grant Blairfindie Allen (1848-1899) conocido como Grant Allen. Muy pulp es Mi nochevieja entre las momias. Y es que en la víspera de Año Nuevo, la noche antes de que el grupo de Eliot realizara una visita guiada y escalara la pirámide aún sellada, él se dispuso a caminar solo alrededor de la pirámide para aliviar su aburrimiento. Entonces, encuentra una entrada secreta… Lo que experimenta en lo profundo de la pirámide es algo que casi no se puede describir… Brillante, las sensaciones que aporta este relato.

Aunque se vendió en nuestro país como ¡El mejor libro para leer en fiestas navideñas!, pienso que es una antología que por extensión y poderoso ambiente creador se puede disfrutar en cualquier momento del año. Cualquier momento en que quieras leer terror del bueno. Pero que duda cabe que el aislamiento lector, el entorno rural, el frío y la búsqueda del calor en las fiestas de fin de año, suma bastante a la lectura de este volumen que no es otra cosa que una celebración para los amantes del terror. Pocos regalos para Navidad hay más perfectos. Y es que mientras retiraba con mi familia los adornos navideños en casa, no podía sacarme de la cabeza la visión interior del desenlace del relato de Campbell; espeluznante, con imágenes de antaño simplemente sugeridas, nunca demasiado obvias. Casi subliminal. Estremecimiento. Nunca volveré a mirar las luces navideñas de la misma forma.

Un ritmo cardíaco elevado seguido de un rápido subidón de endorfinas causado por la adrenalina es justo lo que nos calienta en una fría noche de invierno. Y correr. Hacer deporte siempre es bueno.

Reseña: Justice, de Alex Ross, Jim Krueger y Doug Braithwaite

Os aseguro que esta reseña puede ser a) Irrelevante para algunas personas, b) Un asentimiento con la cabeza para otros o c) un sentimiento interior de ¿por qué diablos no he leído aún esta obra ya solo sea por el dibujo de Alex Ross? Aunque puede existir una clase más especializada que diga: Nunca he entendido realmente porque la Liga de la Justicia no ha triunfado de esta manera si fue el primer grupo de superhéroes creado de la historia.

Tenemos por un lado a Batman, porque cada vez amo más a Batman, así que me imagino que si la gente puede amar a otros superhéroes de la misma manera que yo amo a Batman, entonces claro, tiene sentido que la gente sea gran fan de Superman volando por ahí teniendo aventuras o Wonder Woman y todo su chupi-guay de la muerte. Una potente heroína teniendo aventuras o un hombre que todo lo puede haciendo lo mismo. Personajes muy difíciles de llevar en cualquier caso para cualquier guionista que se precie. Y todos los demás en sus propios microuniversos, cada uno en su propia labor, ciudad, tono y su base de fans detrás. Todo esto tiene sentido porque después salen (o salieron) obras en conjunto que hacen que todos estos universos tengan sentido. Por eso, una buena obra de La Liga de la Justicia, y tremendamente bien dibujada como es Justice, no solo es necesaria, diría que es imprescindible para todo amante del pijameo que se precie.

Justice siempre me ha parecido una obra maravillosa sobre el súper grupo. Una disolución de lo bueno de cada personaje. Estamos tratando con héroes que son fáciles de unidimensionalizar en primer lugar, pero a los que luego pones a todos en la misma habitación y todos necesitan tener una línea de diálogo lógica y mínima, su papelito en el tema para que no desencajen. Y hacer de alguna manera hacer que ese diálogo refleje su carácter. Algo súper difícil para el guionista de franquicias. Pero en Justice se consigue porque Ross bebe de DC como pocos.

Un volumen que comienza con uno de los mejores primeros números de una serie de superhéroes que se pueden encontrar en mucho tiempo en DC. Todos los héroes intentando salvar gente pero todos fracasando estrepitosamente. El mundo en llamas, como si todo se fuera a pique, y ves a cada héroe importante haciendo lo mejor que puede y muriendo… El más triste es Flash, que cree que salvó a la gente, pero obviamente no, e incluso el ¡No entres al agua o morirás quemado!, de Aquaman después de ver a su gente fritos en el agua, impone bastante. Es horrible pero todo esto marca la pauta, y los dos grandes temas a discutir son, quién diablos está dando tanto poder a esos súper villanos, su tiempo para brillar mientras uno por uno eliminan a los superhéroes y/o secuestran y hacen daño a inocentes. La Liga de la Justicia ha dejado de existir. Todo en doce numeracos que trae este nuevo volumen dentro de la colección de Grandes Novelas Gráficas que se está marcando ECC Ediciones.

Ver a los héroes fracasar es a la vez triste e interesante. Pero atrapante, sin duda. Porque es algo que no estamos acostumbrados a ver. Los siguientes números ofrecen una buena historia y una perspectiva interesante de todo ello. Alex Ross, como he mencionado en más de una ocasión, es mi ilustrador favorito desde que lo descubrí en mi amada Astro City, de la que espero integrales como el comer. Pero aquí aporta más. Las escenas de destrucción son increíbles y realmente marcan la pauta. No solo son maravillas idealizadas los personajes. Los miembros de la Liga de la Justicia han tenido una pesadilla en la que son incapaces de evitar una catástrofe nuclear. En principio, no es más que un sueño, pero cuando entra en acción la Legión de la Condena para neutralizar a los héroes uno a uno y se hace realidad… el cómic o miniserie va como un tiro. El guionista y dibujante Alex Ross le da una vuelta a la realidad y acompañado de Jim Krueger y Doug Braithwaite nos cuenta una historia atemporal de La Liga de la Justicia que todo el mundo debería leer al menos una vez en la vida. Y aunque se siente muy similar a Kingdom Come (https://www.cronicasliterarias.es/?p=14741) o Injustice (https://www.cronicasliterarias.es/?p=2720), esta es una mirada más oscura al mundo del pijameo. Una a la que vale la pena echarle un vistazo.

Reseña: 100 Balas. Libro 01 (Integral), de Azzarello y Risso

La serie que recomiendo hoy puede ser la única que conozco que le ha gustado a todo el mundo a la que se la conté en su día. Y la recomendaré siempre. Siempre que alguien me pregunte qué serie cerrada es para ti la mejor, de superhéroes o no, probablemente, hasta el resto de mis días, y con permiso de mi amada Astro City (que aún siguen saliendo historias), creo que siempre diré 100 Balas. Y como cuando el río suena, agua lleva, 100 Balas es claro ejemplo de ello. Una historia de la casi siempre magnífica y extinta Editorial Vertigo, que ahora ECC Ediciones recupera en unos magníficos integrales. Un formato genial, vistoso y económico en comparación, de una magnífica trama. Un compendio de historias que forman un todo. Este Libro 01 de cinco reedita por completo la maravillosa serie del guionista Brian Azzarello y el dibujante Eduardo Risso. En este inicio, lleva los números del #1 al #19, una historia breve relacionada que se publicó en Vertigo: Winter’s Edge #3, además de una de sección especial de bocetos del maestro Risso. Pero a ver, tened claro que 100 Balas no es un cómic cualquiera, es un cómic real, con sucesos totalmente creíbles de ahí su grandiosidad. Maneja constantemente la máxima de… si tuvieras la oportunidad de tomarte la justicia por tu mano contra alguien que te ha hecho daño (o a los tuyos) y pudieras salir indemne de ello, ¿lo harías? Los culpables de esta obraza son el norteamericano Brian Azzarello y el argentino Eduardo Risso a los lápices. 100 Balas está muy arriba en la pirámide de los mejores cómics de todos los tiempos. No lo digo yo, es ese agua que suena tanto en el río de las recomendaciones donde el crimen ha surgido con fuerza en libros y cómics en los últimos años porque.., es real. El mundo del crimen, los bajos fondos, la economía sumergida de un país se mueve así. Cada uno ajusta sus cuentas a su manera. Cada cual su pelea. Y hasta que no te toca de cerca…

Antes, por supuesto, estaban las historias de detectives y mafiosos en la década de los 50 y 60 del siglo pasado, pero parece que poco a poco volvemos a literatura…, real. La tan de moda novela negra, los thrillers conspiratorios, los argumentos donde ya no es el protagonista quién investiga sino el asesinato o el modo en que se efectuó lo que nos atrae. Novelas como las de Dennis Lehane o Jo Nesbø entre las más vendidas de un género que no para de crecer. Y es que el regreso de muchos lectores a querer leer a los grandes como James M. Cain, Dashiell Hammett, Jim Thompson, James Ellroy, Elmore Leonard o incluso Patricia Highsmith; marcan que un cómic como 100 Balas sea indispensable. Además, de otros como Criminal o Sleeper, de Ed Brubaker, historias que lo petan en ventas, y que el mundo del cine anda fijándose en ellos. No pasan de moda porque desgraciadamente el crimen nunca pasa de moda.

Y atrae.

100 Balas plantea la premisa de qué pasaría si un agente, cuya vida ha sido arruinada, recibe cien balas irrastreables para que se asesine a quien se quiera. Estas armas son entregadas por el misterioso Agente Graves, líder de una organización conocida como Los Milicianos, una fuerza parapolicial instaurada por la organización clandestina conocida como The Trust. Una serie de miembros que vamos conociendo poco a poco con el paso de las historias, aunque cada argumento se centra en casos particulares de gente medio arruinada por algo que hicieron (o no), o hicieron a medias pero pagaron el pato por completo. La verdadera savia de esta obra: casos que podrían ser perfectamente reales. El Agente Graves se aparece como el que no quiere la cosa en la vida de un hombre marcado por siempre por tener imágenes pornográficas de niños en su ordenador, una mujer cuyo esposo e hijo fueron asesinados, un hombre que ya no es bien considerado en lo que hace por culpa de cierta ««amistad eterna» de un amigo de la infancia… Y más. Graves sabe todo sobre ellos, hasta el más mínimo detalle, lo que hicieron, lo que les sucedió, y luego, los mejores consejos a dar para que el insensato claudique. Un arma y cien cartuchos. Matar a placer. Sin rastro. La venganza por encima de todo. Librarse del rencor eterno. La policía al servicio de Graves, las instrucciones para que esos demonios caigan de inmediato; en una frase. La persona que use este maletín estará, efectivamente, por encima de la ley. Sin daños a terceros. Ni a primeros. Por que como bien se dice ahora, la mejor venganza es vengarse.

100 Balas es un cómic de personajes. De historias independientes. ¿Un misterioso hombre que entrega un maletín con cien balas irrastreables? Mr. Sheperd, ¿un Señor de la Guerra, un hombre que se encargó de llevar a cabo el cometido del Trust? Megan Dietrich, ¿una «femme fatale», mujer muy joven, cabeza de la familia Dietrich de la organización clandestina? Los Minutemen, ¿siete asesinos muy habilidosos? El Perro, El Lobo, La Lluvia, El Bastardo, El Santo, el Monstruo, El Puntero… Brian Azzarello es reconocido por el uso de un amplio manejo de las voces de sus personajes. La jerga a la orden del día. Gran cantidad de metáforas, una serie oscura, violenta, acorde a las historias al cien por cien. Y, ¿por qué ofrece esto? Porque es la misma realidad, lo que vemos hoy en día, lo que gusta al ser humano. Tramas que podrían ocurrir fehacientemente, y quién sabe si ocurrirán o no han ocurrido ya. Este es el fuerte de 100 Balas. Una serie ganadora de los Premios Eisner y Harvey. De diez.

Reseña: Batman. Caballero Maldito, de Tim Sale y Jeph Loeb

Una edición que yo por lo menos esperaba con muchas ganas pues estaba seguro que tendría cabida dentro de estas magnificas Ediciones Deluxe que está publicando ECC Ediciones con sobrecubierta transparente. Batman: Caballero Maldito…, que menos que poner a disposición del aficionado en un mismo tomo las tres aventuras escritas por Jeph Loeb y dibujadas por Tim Sale, de este maravilloso tándem creador de El largo Halloween. Tres arcos que sirven como precuela para dicha obra de arte y que, por supuesto, os recomiendo leer antes de poneros con El largo Halloween por primera  vez. Entenderéis ciertos detallitos mucho mejor.

Un tomo que abre con el Legends of the Dark Knight Halloween Special #1 de diciembre de 1993, y que cuenta como Batman viene intentando cazar y capturar al Espantapájaros pero cuando lo consigue, todo se torna en desgracia. Un Halloween durante los primeros años de Batman, donde el Espantapájaros obliga a jugar al Caballero Oscuro a un juego espantoso del gato y el ratón. Y es que ver al Espantapájaros cantando canciones infantiles esta serie pone el vello de punta… Historias de terror. Interesante trama donde los autores nos muestran a un Bruce Wayne turbado por elecciones personales, el equilibrio entre el hombre y el vampiro.

Maldito nos lleva a la víspera de Todos los Santos donde el orejas picudas tiene una cita terrorífica a medianoche cuando se enfrenta al genio retorcido, el Sombrerero Loco. La adolescente Barbara Gordon se mudó recientemente con su tío, el capitán de policía de Gotham City, Jim Gordon. Pero una disputa en la noche de Halloween la lleva a huir… y el horror de Barbara apenas comienza cuando cae en las garras del Sombrerero Loco, uno de los villanos más inquietantes de la galería de pícaros del Caballero Oscuro. Ante una de las peores pesadillas de su vida, la única esperanza de Jim Gordon de recuperar a su sobrina es Batman. Pero los terrores del pasado y del presente persiguen al Caballero Oscuro, y eso puede costarle muy caro a Bárbara…

Después de que el primer especial de Halloween, Batman: The Legends of the Dark Knight, se vendiera tan bien, Jeph Loeb y Tim Sale tuvieron que quemar un poco de cerebro y crear una nueva historia de miedito. Cierto es que el Sombrerero Loco no es un gran villano de la Batman Rogue Gallery, pero le da cierta profundidad -y está muy conseguido aquí-, y es por eso que Batman aquí mola cuando se enfrenta a él. La razón es fácil: Jeph Loeb y Tim Sale escriben con soltura buenas historias del orejas picudas.

El torturado sueño de Bruce Wayne es violado por cuatro espectros: el espíritu de su padre asesinado, el fantasma del Halloween pasado, el fantasma del Halloween presente y un misterioso fantasma del Halloween futuro. ¿Pero qué quieren del Caballero Oscuro? Bruce Wayne tiene su propia experiencia paranormal en Ghosts. Otro especial para Halloween de este tándem que llevaría a Jeph Loeb y Tim Sale a continuar la trama fraguada que depararía en El largo Halloween, que tomaría trece meses, de Halloween a Halloween. ¿Una visita a lo Dickens para Bruce Wayne? Digno de ver. Más que nada porque este cuento tiene un ritmo diferente a los anteriores y, sobre todo, porque hay un súper emocionante atraco al Pingüino que se vuelve flipante con el paso de las páginas.

Esta edición de lujo se completa con el especial que aborda las consecuencias de dicha miniserie y lo que supuso para el mundo del cómic cada colaboración (y esta fue la última), de esta genial pareja de autores.

Reseña: Blade Runner 2039. Luv, Mike Johnson, Brown y Guinaldo

Después de la impresionante y llena de acción de Blade Runner 2029, volvemos al entorno distópico fundamental con Blade Runner 2039 y, para ser honesto, al leerlo te sientes como si nunca te hubieras ido. Gran parte de la culpa la tiene el equipo creativo original que sigue tras el volante de esta nave. De este mundo-universo donde se están realizando grandes historias de CF basadas en la genial franquicia que partió parcialmente de la novela de Philip K. Dick, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, de 1968. Que a día de hoy, no todo el mundo lo sabe. Un futuro totalmente centrado en los replicantes. A los que se emplea en trabajos peligrosos y como esclavos en las colonias del Mundo Exterior. Y fabricados por Tyrell Corporation para ser «más humanos que los humanos». Luv nos lleva diez años más adelante hacia la distopía que se desmoronaba hasta que cambió. Aunque poco ha mejorado para los habitantes del futuro Los Ángeles, especialmente para los replicantes, los Blade Runners son una fuerza completamente organizada en este momento, y su miembro más nuevo es, de hecho, una replicante: una cazadora fría, calculadora y brutalmente eficiente llamada Luv creada y diseñada para acabar con los de su propia especie.

Cuentan que hace veinte años, la ex-Blade Runner Aahna “Ash” Ashina ayudó a una joven y su madre replicante a escapar de las garras de su sádico padre, el magnate de las finanzas, Alexander Selwyn. Ahora, Cleo Selwyn ha regresado a Los Ángeles desde Arcadia, la colonia del Mundo Exterior, para buscar a su madre, Isobel, que quizá haya sido secuestrada por Niander Wallace…

El «primer ángel» Luv de Niander Wallace (que caza al Oficial K en la película Blade Runner 2049), aparece en esta nueva miniserie donde la premisa y el personaje principal resultan familiares para los amantes de esta saga. El Blade Runner, el estilo visual y la estructura de la historia se perciben como un cómic, una historia, una trama totalmente de la franquicia lo que me pareció genial. Se parece mucho a un nuevo capítulo de la historia anterior, que a su vez se siente como parte de un todo más grande que se ha estado construyendo durante los últimos años. En definitiva, la expansión de este universo que es súper inspirador. Además de ampliar la metatrama.

Blade Runner 2039 es otra exploración emocionante de uno de los escenarios más geniales en la historia de la cultura pop. Luv tiene un primer número fascinante. Un cómic que provocó tras leerlo que me pusiera rápidamente (y, por supuesto, en 4K), la genial película dirigida por Ridley Scott, estrenada en 1982. Uno de los universos fílmicos más inspiradores y recomendables a los que nos ha llevado el mundo del cine.

Reseña: Dragonero. SinAlma. Inframundo, de Vietti, Subic y Francescutto

Puntual como un reloj en diciembre nos llegaba a muchos Inframundo, el noveno volumen de SinAlma, la serie precuela de Dragonero, que con cada volumen avanza con más intensidad en sus tramas. Y es que tras los momentos rítmicos, y por así decirlo, reflexivos del último SinAlma: Tregua, toca volver a la acción más cruda y brutal para la compañía mercenaria que da nombre a la serie, en la que Ian Aranill sigue implicado en sus primeros asesinatos.

Tras la estancia de Los Desalmados en la ciudad de Merovia, cuya paz momentánea fue interrumpida por un acto imprudente por parte de Maadi, impulsada por un deseo de venganza que trascendió su lealtad a sus hermanos y hermanas de armas, la compañía se ve obligada a retomar sus andanzas en busca de nuevos trabajos. Y atravesando la desolación de un campo de batalla, Ian y compañía son golpeados por una sed insaciable que los lleva a buscar agua, búsqueda que termina con una pérdida entre sus filas, compensada en parte por el misterioso Kusuth, que se ha unido a ellos desde su partida de Merovia.

La marcha sin rumbo del SinAlma es interrumpida por el Capitán Greevo, que ha logrado encontrar el nuevo trabajo tan deseado: proteger a los trabajadores durante la construcción de una carretera en el sur, que debería tener como término la ciudad de Lashure. Pero para llegar al lugar de la obra es necesario atravesar el inquietante pantano de Mahlga…

A medida que avanza SinAlma, está demostrando ser una serie bastante versátil en cuanto a temáticas. Logrando presentar momentos con atmósferas siempre diferentes y heterogéneas: terror, suspense, belicismo, mazmorreo… En Inframundo nos encontramos ante una trama que, gracias al estilo y tonos, adquiere todos los rasgos de una historia de fantasía oscura, cuyas implicaciones se ven algo penalizadas por la poca extensión de la historia. Tan solo ochenta y dos páginas trae esta aventura. Un chupito de tequila. Y esta cortesía no nos permite detenernos en el encanto tanto del escenario como del antagonista del momento, dejando la sensación de estar ante un número de relleno hasta que llegas al final y te topas con el nuevo encargo de órdago para el SinAlma.

Algo que me dejó con el culo torcido fueron los papeles de Ian y Siran, a quienes captamos en un momento de intimidad en el último volumen, pero no intercambian una palabra aquí. El único hecho que se recuerda, en varias ocasiones, es la venganza de Maadi (comprensiblemente, considerando que ella interrumpió la tregua que dio nombre al cómic). Y otro personaje que parece más relegado que de costumbre es Avedis, habitualmente bastante elocuente y activo al participar en las vicisitudes de sus compañeros. No obstante, Inframundo salva los muebles enteramente por su lado artístico. En sustitución de Ivan Calcaterra, a los lápices de este volumen está Stevan Subic, un artista serbio que ya demostró su valía y su estilo brutal en El Tercer Día, también publicado por Sergio Bonelli Editore. Los colores siempre siguen siendo los de Paolo Francescutto… ¡Pero qué colores! Los tonos oscuros lo impregnan todo pero de un modo que se puede apreciar cada detalle, amaneceres grises de ceniza pero requetebien hechos. La crudeza de un buen puñado de caricaturas bailoteando por la mugre y hojas muertas. Un diseño para mí fascinante aunque desperdiciado, de algún modo, donde el antagonista del momento logra satisfacer incluso el ojo más exigente.

Especialmente disfrutable si como lectores de cómics de fantasía aplaudís cuando todo se gira hacia el género de terror. El género que reina en toda esta trama y sólo por eso es un ejemplar muy recomendable.

Reseña: Alien. Deshielo, de Declan Shalvey y Andrea Broccardo

Después de décadas de cómics de Alien bien producidos por Dark Horse, por fin están llegando por estos lares para el disfrute del fan de toda la vida. Panini Cómics trae esas grandes joyitas incluida su Etapa Original (https://www.cronicasliterarias.es/?p=12169), y parece ser que se vienen más. Pero no sé si sabéis que esta franquicia en Marvel Comics tuvo un comienzo un poco difícil. El mandato de Phillip Kennedy Johnson en el título incluyó tres arcos argumentales de seis números (Bloodlines, Revival e Icarus respectivamente) y el one-shot Alien Annual (2022) que, si bien era responsable de introducir algunos conceptos originales en la ya trillada propiedad intelectual, en USA al menos, fueron recibidos con una tibia recepción por parte de lectores veteranos. Por el contrario, Alien: Thaw (Deshielo), este tomito que hoy os reseño del guionista y dibujante Declan Shalvey (Caballero Luna, Deadpool) y la ilustradora Andrea Broccardo (X-Men: Curse of the Man-Thing, Wonder Woman: Agent of Peace) representa una corrección del rumbo muy necesaria para volver a la idea original de lo que representaba Alien. Una esperada continuación a lo molón es la trama Deshielo, cosita que muchos pensamos que jamás podríamos llegar a leer en español.

Un arco de cuatro números en un tomito que se pude degustar de forma independiente. Deshielo nos presenta nuevamente a Zasha Zahn, la cual ahora es una mujer adulta que trabaja para la infame corporación Weyland-Yutani. Y actualmente viajando bajo el seudónimo de Cole, nuestra valiente protagonista de cabello rosado tiene la tarea de regresar al puesto avanzado de Cocito (anteriormente The Keg) en la luna de hielo LV-695. Pues la corrupta compañía está interesada en que ella lidere una expedición de salvamento para recuperar el hundido Conestoga, un buque militar, de la conocida USCSS Boreas. ¿Qué ocurre? Pues que debajo del turbio casco del barco se esconde el lucrativo pero letal xenomorfo que todos conocemos. Uno de esos organismos extraordinarios se encuentra enterrado en el hielo. Y parece que nadie se alegrará esta vez, cuando la primavera traiga el deshielo.

Zahn no regresó a este páramo helado simplemente para cumplir con sus requisitos corporativos. Zahn tiene otras prioridades en mente, concretamente localizar los restos de Dayton, un humano sintético que representa la única familia que le queda. Pero, ¿podrá cumplir dicha tarea antes de que el temido alienígena y su híbrido ártico se acerquen y la maten a ella y a su tripulación? Una historia que comparte uno o dos rasgos con la Prometheus, de Ridley Scott. Una expedición de recuperación dirigida a un planeta alienígena árido, financiada de forma privada por uno de los homónimos de la familia del fundador de la empresa (esta vez Jun Yutani en lugar de Peter Weyland, ambos moviendo los hilos desde los cómodos confines de sus yates espaciales desmontables). El escenario de la historia, un puesto de avanzada nevado rodeado de hielo, también recuerda, por supuesto, a The Thing (La Cosa), de John Carpenter, y me atrevo a decir que incluso hay una pizca de En las montañas de la locura, de H.P. Lovecraft. Nuestra heroína Zahn/Cole funciona notablemente bien como una fusión de Amanda Ripley (que lidia con la ausencia de su madre) y Rebecca “Newt” Jorden (una sobreviviente que se vio obligada a enfrentarse al xenomorfo cuando era niña).

Bajo la firme dirección de Shalvey y Broccardo, la Sulaco, que alguna vez se hundió, ahora traza un nuevo rumbo optimista hacia las estrellas. El dibujo al estilo ameri-manga no me gustó demasiado pero la historia me encantó. Otro cómic chulo para la colección.