Reseña: Nocturnos. Volumen 1, de Dan Brereton y VVAA

En nuestro género favorito también existe el despiporre. Se le puede llamar terror gamberro, trepidantes historias que brindan por la acción por encima de todo pero con monstruos leñeros, desafiantes héroes o antihéroes dándolo todo. Y un referente de esto en formato cómic es Nocturnos, la obra de Dan Brereton que acaba de publicar Norma Editorial en nuestro país. Amenazas sobrenaturales de todo tipo y heroicidades descarnadas en un portentoso volumen de lujo para deleite del mejor amante del género. Recordad: el mejor género de todos.

Dan Brereton se ha construido un pequeño mundo genial con todos estos híbridos humanos/animales, espíritus y monstruos lovecraftianos. Brereton realmente sobresale en el diseño de personajes. Ese es su don. Estos son algunos de los mejores diseños de personajes que he visto en mi vida… y he visto muchos. Siendo sincero, las historias se desmoronan un poco en la narración pero mantienen el tipo para que el contraste no sea tan grande como para que solo os destaque el dibujo ynada más. Pero es obvio que haya diferencias porque las ilustraciones que vais a encontrar aquí, en esta obra, son maravillosas. Pocas son las que no pondrías en cuadro en el mejor rincón friki de vuestra casa.

Este primer volumen de dos que recién publica Norma Editorial recoge Planeta Negro, la obra por la que Dan Brereton fue nominado a mejor ilustrador en los Premios Eisner de 1995, así como Cabezas de calabaza, Desfile de bestias y El puente del troll; cautivadoras historias policíacas y de terror, con colaboraciones de Ted Naifeh, Stan Sakai, Arthur Adams, Bruce Timm, Jill Thompson, Kieron Dwyer, Stephen Destaphano, Paul Dini así como grandes consagrados del noveno arte.

Planeta Negro fue el primer arco narrativo, una miniserie de seis números que presenta a todos los personajes principales. El mejor lugar para conocer a Doctor Horror, Niña Halloween, Crepúsculo, Brujo Pistolero, Polícroma y toda una serie de personajes y malos-malutos que luchan contra gángsteres, alienígenas malvados y contra un gobierno que quiere destruirlos. Una historia que presenta gloriosas splash-pages, de un serie original que salió en 1998, creo recordar y fue una edición que se llevó varios años agotada. Imposible de conseguir fuera del mercado de especulación. Pero hay más. Cabezas de calabaza es donde Niña Halloween y su guardián Brujo Pistolero van en busca del puesto avanzado más próximo al Truco o Trato y terminan encontrándose con una bruja malvada y sus secuaces. Estos con cabeza de calabaza, por supuesto.

En Desfile de bestias, Doc Horror desata un demonio interior mientras salda una vieja cuenta con un nido de víboras de científicos perturbados, y donde la famosa niña anfibia persigue a un horror de los mares y Niña Halloween, Brujo Pistolero y Polícroma se topan con un feriantes infernales deliciosos…

Y cierra este primer volumen el arco El Puente del Troll. Una “tierna” historia donde vemos como Niña Halloween ama la festividad que inspiró su nombre, le encanta pedir dulces y, sobre todo, le encanta comérselos. Pero cuando lleva dicha festividad demasiado lejos buscando golosinas en el hogar más remoto que puede encontrar, solo le espera el horror. El horror verdadero, un lugar infernal con portales dimensionales que lleva a… mundos infinitos y espeluznantes, con peligros incalculables y horrorosos escalofríos para la espaldas más rígidas. Una aventura única y especial ilustrada por doce artistas diferentes…, pero qué artistas, madre mía.

¿Una gran lectura y poderoso omnibus a disfrutar en Halloween? Por supuesto. Pero dado que nos queda lejos aún, sobre todo, estamos ante una gran lectura y posesión valiosa comiquera para el buen amante del género de Terror. Sí, no sólo para el amante del buen cómic de Terror sino para el amante del género, en general; valga la redundancia. La obra de arte de Dan Brereton es hermosa, pero en realidad es el mundo de Nocturnos lo que te absorbe con su poderosas ilustraciones. Es básicamente una especie de Halloween para siempre: siempre es de noche (no literalmente, pero dado que los personajes principales operan de noche, narrativamente lo es). Y monstruos y criaturas extrañas, algunas familiares y otras nuevas, que pueblan el paisaje. Hay extraterrestres, fantasmas, monstruos marinos, mutantes, vampiros y zombis corriendo de un lado para otro como en una película pulp. Si te gusta Hellboy, amarás Nocturnos, por ejemplo. Para mí, lo único triste es no tener ya en mis manos el segundo volumen que me hará dueño y señor de la edición completa. Abrazarla…

Reseña: Lejana Estrella Brillante, de Robert Olmstead

La trama de Lejana Estrella Brillante es relativamente simple, y por esa razón probablemente no encontrarás muchos detalles al respecto en algunas reseñas de por ahí. Es tan sencilla que se puede transmitir poca información al respecto a los lectores sin inyectar algún tipo de spoiler. Y también dicen que no es un libro que uno lea por su trama; su verdadero atractivo es la calidad de la escritura del autor. Estoy de acuerdo con eso en parte. Por la calidad escrita, obviamente. Pero acaso (cambiando de género para la comparativa), ¿no es sencilla la trama del episodio cuatro de Star Wars y no deja de ser una maravilla de guión?

Lejana Estrella Brillante se compara muy favorablemente con la Trilogía de la Frontera, de Cormac McCarthy. La narrativa de Olmstead, como la de McCarthy, es hermosa y sobria, casi poética, y su estilo es completamente único. Pinta hábilmente cuadros vívidos del suroeste de Estados Unidos a principios de siglo, transmitiendo las vistas, los sonidos e incluso los olores del lugar con una precisión tremenda. Más importante aún, el autor evoca un perfecto sentido de la atmósfera y transporta al lector en el tiempo hacia esas tierras baldías de Nuevo México, permitiéndole sentirse como si estuviera allí, cabalgando por el desierto rocoso, testigo de su austera y siempre cambiante belleza.

Lejana Estrella Brillante es una maravillosa lectura de apenas doscientas páginas que se devoran en nada. La historia se cuenta desde el punto de vista de Napoleón Childs, un veterano soldado de caballería que se acerca al final de su carrera. El contorno aproximado del personaje es estereotípico (el viejo soldado canoso y bien informado), pero Olmstead le da una tridimensionalidad tremenda al protagonista y una nueva vida a este personaje estándar. Se siente finamente representado; uno siente su sabiduría ganada con esfuerzo, así como su cansancio hasta los huesos de lidiar con la futilidad de su misión y con la chusma de los jóvenes y tontacos que le rodean y quieren llegar a ser algo sin experiencia.

Aclararé que aunque Lejana Estrella Brillante se ha convertido en uno de mis libros favoritos, no gustará a todos los lectores. Estoy seguro de ello. El estilo de escritura del autor puede molestar tanto como atrae, ya que es tan atípico de la mayoría de la prosa actual que algunos pueden considerarlo genial, mientras que otros pensarán que es cuando menos recargado. Más importante aún, el libro contiene escenas de intensa brutalidad que a cierta gente puede no gustarle. Aunque dudo que a los amantes del western o de su hermana mayor la tan de moda novela negra, les pase. En mi caso, ya sabéis. rara vez tengo dificultad para leer sobre personajes (o personas) que infligen daño a otros porque sí. Pero he de destacar que algunos eventos de esta novela son bastante horribles y se representan de manera tan gráfica que los encontré realmente perturbadores, con imágenes en mi cerebro aún, cada vez que pienso en la novela.

Mi veredicto es que Lejana Estrella Brillante no es un libro fácil aunque se lea con suma facilidad. Aporta un golpe emocional que puede dejar al lector sintiéndose agotado cuando llegue al final. El autor también plantea una serie de cuestiones éticas dentro de la narración para las que no proporciona respuestas. Es probable que los lectores se encuentren revisando las ambigüedades morales del libro durante algún tiempo después de que lo terminen. Sin duda, es un libro que da para mesas de discusión y debate.

Bien por Hermida Editores publicando esta joya en nuestro país.

Reseña: Redemption. La Última Esperanza, de Christa Faust y Mike Deodato Jr.

Y más Ciencia Ficción para hoy.

Redemption presenta a los lectores un spaghetti-western de CF post-apocalíptica y está tan llena de acción como cabría esperar. A eso sumad mensajes políticos y personajes memorables. Tiene un gran impacto, sumergirse de cabeza en una historia que permite a los lectores ponerse al día mientras leen. Y es que friends, la fusión entre Sci-Fi y Western si está bien hecha puede llegar a ser como he dicho memorable. Una impresión interesante además desde la primera página es lo que aporta Redemption: La Última Esperanza, el cómic publicado por Panini Cómics en tomito de tapa dura que hará disfrutar de lo lindo a todo amante de las historias del Far West.

Incluso se nos presenta un mundo que muere por ser explorado con detalle. Pero la construcción del mundo pasa a un segundo plano pues ésta es una historia impulsada por los personajes ante todo. Y un trasfondo tan único e inspirado para la historia que es un incentivo adicional para comprar el cómic. Christa Faust sabe cómo escribir una historia interesante y convincente, comenzando con una increíble introducción. En las primeras páginas se nos presenta a una heroína a la que los lectores apoyarán instantáneamente. Cuando la conocemos, el alguacil de la ciudad la está azotando por lo que él considera un crimen atroz: ayudar a una víctima de violación menor de edad a abortar. Es una introducción efectiva. Se presentan las apuestas y el mundo y tenemos un sentido claro de lo correcto y lo incorrecto. Ver al sheriff intimidar a la joven para que acuse al médico de matar a su bebé es horrible e instantáneamente hace que el lector se involucre en la historia. Y todo esto es tan solo en las primeras páginas. Una vez que Faust realmente entra en el meollo de la historia, queda claro que tiene una historia bien realizada en contraste con una excelente construcción del mundo desolado que se visualiza.

El arte de Mike Deodato Jr. es, como siempre, fantástico. Instantáneamente trae a la mente un western clásico pero también un mundo sombrío invadido por la espesa arena e impregnado de elementos fantásticos por no decir futuristas. Lo mejor es que nada se siente fuera de lugar, incluso cuando la mayor parte de la ambientación debiera abogar más por el pasado, funciona bien. También hay una sensación cinematográfica real en algunos de las viñetas que realmente capturan el ambiente occidental y es fácil imaginar varias de estas páginas en un posible film. Los colores de Lee Loughridge son igualmente buenos, todo está coloreado con un amarillo polvoriento que recuerda instantáneamente el escenario del desierto y le da un ambiente post-apocalíptico magnífico. Por lo que tenemos una historia chula dentro de un mundo bien realizado, personajes interesantes en un entorno devastado, un cómic convincente que se devora en nada.

A poco que te interesen los dos géneros mencionados y su mezcla, elige Redemption para una buena tarde de lectura sin preocupaciones y no te arrepentirás. La venganza debe ser evitada pero leer sobre ella atrae al ser humano una cosa mala. Tan claro como el agua que escasea en este mundo…

Reseña: Oblivion Song. La Canción del Olvido, de Robert Kirkman y Lorenzo de Felici

Yo que soy de darle a todos los géneros en cuestión, cuando me llega el punto de la Ciencia Ficción, tengo que reconocer que leo muuuuucha CF. Lo que digo es que pueden pasar por mis manos varios libros y cómics de este género antes de decidir pasarme a otro. Y ahora estoy en ese punto. Por lo que me vino genial ver que ECC Ediciones estaba publicando Oblivion Song en sendos tomos integrales…, una historia del maestro que tenía muchas ganas de leer. Y me vino bien porque quería ver cómo se le daba a Robert Kirkman (sí, el creador de The Walking Dead, Invencible y Outcast y otras muchas), quería ver como se le daba a este archicreativo cuando decidiera meterle mano al género fantástico más leído de todos actualmente como es la Ciencia Ficción.

Y de ninguna manera Robert Kirkman necesita mis elogios. No le voy a dar palmaditas en la espalda por seguir haciendo cómics y todo ese ruido. Es un guionista de los buenos-buenos y se merece estar donde está. ¿Qué después resultó ser un empresario de cojones y él se lo guisa y él se lo come con su propia empresa? En su derecho está. Pero nunca un creativo debe perder valor por ello. Se ha desarrollado a ritmo constante y muy poquitos pueden alardear de eso. Es consistente y en cuanto a sus cómics, sabes que es un autor de personajes y autor de historias que te mantienen enganchado. ¿Su don o táctica? Expectantes giros de guión en las última páginas. Se le da de p… de rechupete. Y en Oblivion Song sucede igual. Establece los personajes, el mundo, la trama y con ciertos giros de trama ya te tiene enganchado. Con una temática que desafortunadamente nada es tan original como se pretende y que parece ser elaborado como un guión de televisión condensado. No me estoy burlando de Kirkman porque haga televisión, se ganó su éxito y, de nuevo, no necesito elogiarlo por seguir escribiendo cómics. Es solo que es obvio que Oblivion Song es un cómic perfectamente elaborado para ser traspasado a la gran pantalla. Y se nota.

Oblivion Song es una buena trama que comienza con Nathan corriendo tras dos personas que huyen de un monstruo. Le dispara a uno de ellos y éste desaparece. Lo que asusta mucho a la mujer que huía con él. Tras esto le dispara a ella y también desaparece. Lo que deja a Nathan y al monstruo a solas para realizar ese “baile de supervivencia”. Ya que presenté a Nathan y sus dotes, sabéis de sobra que sobrevive y la historia continúa. Bien. Una vez que se autoelimina, nos enteramos de que acaba de rescatar a estas dos personas y que estuvieron «allí» durante una década. La historia continúa revelando pequeños detalles sobre lo que es «allí» y por qué Nathan está arriesgando su vida para encontrar/rescatar gente….

Tenemos algo de política, una agenda personal y realmente todas las demás casillas de verificación que necesitas saber sobre la historia, ya se han impuesto. Estamos ante un primer volumen de la serie que recopila los doce primeros números de la colección original, así como material adicional que describe el proceso creativo; por lo que material hay para saber y saber. Con la idea central de que hace una década, 300.000 ciudadanos de Filadelfia quedaron perdidos súbitamente en Olvido. El gobierno hizo todos los esfuerzos por rescatarlos, pero tras muchos años de actuación, se han rendido. Nathan Cole… no lo hará. Emprende viajes continuos arriesgando su vida, para intentar rescatar a aquellos que están perdidos, solos y asustados, viviendo y transitando en ese paisaje desolado y apocalíptico que está al otro lado. Pero quizás… Nathan busca algo más. ¿Por qué no puede resistirse al canto de sirena de la Canción del Olvido?

No puedo ni negaré que es un tema perfecto para enganchar a todo fan del cómic que brinda por la Ciencia Ficción. Los viajes en el tiempo son un tema… un subgénero dentro del género. Y atractivo como pocos. El argumento propio de viajes en el tiempo para el rescate de personas, alterar sucesos que lleven a la raza humana a la extinción y derivados…, sí, es un tema manido. Sin embargo, tenemos a Kirkman aquí, el tío que es capaz de hacer de un tema trillado algo entretenido. ¿O acaso no fue él quien trajo de moda de nuevo a los zombis cuando ya nadie (menos yo) daba un duro por ellos? Eso si, por favor, aunque algunos jóvenes de por aquí lo penséis y lo creáis porque casi empezasteis a leer cómics con cómics, por favor, por favor, por favor, ni de lejos Kirkman inventó nada con mis amados zetas. Únicamente, los puso de moda nuevo. Creó con The Walking Dead una trama larga sobre un grupo de personas inmersas en el apocalípsis zombie y la hizo muy entretenida. Ya está.

No hay nada nuevo bajo el Sol, dice un proverbio japonés. Y es cierto. Pero Kirkman con su don y con Lorenzo De Felici colaborando con él crean en Oblivion Song un cómic que se disfruta bastante. Con unos primeros números que emocionan al lector lo suficiente como para tenerlos enganchados como mínimo hasta mitad del tomo.

Reseña: Pequeños Bill & Bolita, de Laurence Gillot y José Luis Munuera

Cuando me topé con este álbum entre las novedades de Nuevo Nueve, no pude evitar preguntarme si están por llegar (ojalá) cómics como El Pequeño Spirou o Pequeño Titeuf. Por que leñe ya era hora de que se publicara en nuestro país este Pequeños Bill & Bolita, ¿no? ¿Y qué si pueden estar destinados a un público muy joven? Es más de lo bueno y punto. ¿Qué es ser joven hoy en día? La edad solo es un número y muchos no se enteran o no se quieren enterar. Por otra parte, tened en cuenta que muchas veces estos temas (la publicación, casi spin-offs de titulos así) se deben a ciertas razones: el aspecto del marketing, por ejemplo; y no es casualidad que la segunda historia propuesta aquí, y publicada conjuntamente con la primera, tenga como tema la Navidad (Navidad India). Estamos ante un cómic que viene de la colección Carrousel que ofrecía más bien libros ilustrados que tebeos… Pero en fin, a lo que vamos. ¿El resultado? Pues ya me diréis, porque para mí y creo que para todo amante del cómic europeo, este tipo de publicaciones son joyitas que uno/a se lleva a casa alegremente. Ya sea para degustar a solas o con sus hijos.

El dibujo es genial. Los colores se matizan con muchos degradados, la línea es cálida y expresiva. El tratamiento de los personajes es acertado, en general, salvo la pobre Caroline que pone muecas tan graciosas que más de una vez provocarán una sonrisa en el lector. El formato de álbum en tapa dura que saca Nuevo Nueve como siempre es genial y el tamaño de los viñetas es grande-grande para el disfrute del arte en todo su esplendor. Lo que también asegura una lectura rápida; bien para peques, quizás mal para adultos. Pero una lectura rápida enfocada al dibujo que se adapta perfectamente a un público muy joven, en definitiva. Y aunque no lo aclare la editorial, yo estoy aquí para deciros que este volumen es un integral contenedor de las seis historias que se hicieron para este título.

¿Las historias? En principio, simples y sin grandes sorpresas pero con ese buen sabor de boca que siempre aporta como mínimo los titulos que vienen de la BD. Además, en Pequeños Bill & Bolita no encontraremos esa contraposición entre un Bolita bastante sabio y un Bill muy travieso. Los dos son muy traviesos aquí y Bolita suele ser el primero en hacer algo estúpido para hallarse en breve inmersos en un lío. Quizás un lector joven encuentre en esto la parte más molona del cómic.

Otra cosa que me gustó de la edición es el tipo de papel empleado. La dureza de sus páginas es bastante potente. Puedes untar chocolate en sus páginas sin miedo o dejar caer la compota de manzana de tu heredero/a que dificilmente se alterará el álbum. Y esto, para que el disfrute de los más pequeños se alargue, es súper ideal de la muerte, ¿no?

Además, de ser un regalo magnífico.

Reseña: Solo el Fin del Mundo Otra Vez, de Neil Gaiman, P. Craig Russell, Troy Nixey y Hollingsworth

Solo el fin del mundo otra vez fue originalmente una historia fantástica escrita por Neil Gaiman y publicada en 1998. Yendo al grano, es una mezcla del clásico personaje de hombre lobo al estilo Lawrence Talbert de la Universal, la ciudad de Innsmouth de Lovecraft y también -por qué no- tiene cositas que recuerdan a una novela que me encantó en su día como fue A night in the lonesome October (Una noche en el solitario Octubre), de Roger Zelazny.

La historia comienza en pleno invierno en Innsmouth, Massachusetts. Talbot se despierta una mañana con resaca de hombre lobo. Se encuentra mal y vomita la pata de un perro y los dedos de algunos niños… Inmediatamente recuerda lo que sucedió la noche anterior. Se limpia y luego se dirige a su oficina. Cuando llega allí, un hombre gordo está encorvado en la silla junto a la ventana. El hombre habla de esos Profundos que vienen a veces del mar limpiando la orilla de la inmundicia que la habita. Lawrence le pide al gordo que se vaya y luego se da cuenta del letrero de neón que promociona a una psíquica al otro lado de la calle. Se dirige a ese lugar donde se anuncia Madame Ezekiel y esta señora le echa las cartas…

El tarot desvela la carta del hombre lobo, luego una con formas de Profundos por lo que se deduce que se deben hacer sacrificios para que se alcen desde el océano. Luego Talbot todo irritado saca una carta en blanco y otra y otra más. Y esto molesta a Madame Ezekiel que acusa a Talbot de estropear sus cartas y le echa de su tienda. Entonces se dirige a un bar a tomar un trago, el cantinero le sirve, luego toma un libro y procede a leer pasajes sobre cómo cuando la luna y las estrellas están en posición correcta para poder hacerse sacrificios dignos para que los Profundos puedan ser convocados… Se va iniciar el fin del mundo y Talbot, por supuesto, quiere saber cuál es su papel en todo esto.

Después de la lectura, he podido saber que Neil Gaiman escribió una serie de historias como tributo a Roger Zelazny. Y que P. Craig Russell las adaptó a cómics. Aunque la historia es bastante corta, Gaiman no deja de ofrecer como siempre una trama rica, descriptiva, de las que uno siempre quiere más. La forma en que escribe, el aspecto y los olores de este pequeño pueblo pesquero de Nueva Inglaterra provocan que el lector se sienta como si estuviera parado allí con el frío amargo del invierno en su aliento. El amor de Gaiman por H.P. Lovecraft es evidente en muchos de sus cuentos y guiones para cómics, pero aquí es demasiado evidente. Dejando aparte los nombres y lugares, sobre todo, en la espeluznante forma en que toda la gente del pueblo actúa hacia Talbot.

En cuanto al arte, Solo el fin del mundo otra vez desprende una sensación muy retorcida, casi demente. Troy Nixey hace un trabajo realmente fantástico con la atmósfera de Innsmouth; Talbot transformándose en el hombre lobo y luchando contra Madam Ezekiel en las profundidades del mar se dibujan de manera brillante. Nixey también hace un trabajo maravilloso en aquellos detalles lovecraftianos, como tentáculos y cosas resbaladizas y espeluznantes que chocan y hacen ruidos extraños en la noche, como fondo de algunas viñetas. Los personajes humanos tienden a parecer un poco tontos y deformes a veces pero el uso del color de Matthew Hollingsworth los magnifica.

Gracias a Planeta Cómic estamos podiendo hacernos casi cada mes con cómics que parten del consagrado autor del fantástico que es Neil Gaiman. Lo que es garantía de satisfacción. ¿Hombres lobo y Lovecraft? ¿Qué más se puede pedir?

Reseña: Los Poderes Oscuros de Tolkien, de David Day

Lectura rápida con unas ilustraciones preciosas… poco más se le puede pedir a un libro hoy en día. Y, sin embargo, recomendaría este libro a cualquiera que sea nuevo en el mundo de Tolkien, o que haya leído los libros pero no haya profundizado demasiado entre líneas. No obstante, para cualquier estudioso experimentado de Tolkien, este libro puede resultar demasiado básico, y algunas secciones se centran más en volver a contar los acontecimientos que en los poderes mismos. Los errores ortográficos y las conexiones ocasionalmente cuestionables que tuvieron la edición en USA, parecen haber sido solucionadas por Ediciones Minotauro que es quien publica esta chulada este mes en nuestro país. Al tacto, un libro muy agradable (cubierta que parece estar hecha de algún tipo de plástico-piel) y, sobre todo, informativo tanto sobre la palabra de Tolkien como sobre la mitología a nivel global. Se aprende mucho de este libro. Por tanto, ¿otro hermoso trabajo del señor Day? Por supuesto. Si bien no contendrá nada que los fans de toda la vida no sepan, tenemos un volumen más de una colección que son conjunto de pequeños compañeros, donde se describen personajes clave, temas y fuentes de inspiración para con el profesor y su mundo.

De los leídos de Day, Los Poderos Oscuros de Tolkien se acaba de convertir en uno de mis favoritos, ya que cubre algunas de las partes más polémicas, y al mismo tiempo intrigantes, de los mitos de Tolkien como es el Mal y sus manifestaciones. Todo, desde orcos hasta trolls y el propio Morgoth, acompañado de algunas de las hermosas (¡y espeluznantes!) ilustraciones que hacen de esta serie de libros una colección indispensable para todo fan de la Tierra Media que se precie. La portada es hermosa, todo el diseño del libro es brillante y hay docenas de bonitas ilustraciones junto con mapas, líneas de tiempo, etc. Visualmente, el libro es impresionante y puede ser una gran obra para los amantes de Tolkien, insisto, y tengo que admitir que las cosas discutidas en este volumen pueden dar para largos debates…

… empezando por Melkor y llegando hasta la Tercera Edad, Day compara las figuras malignas de las obras de Tolkien con figuras de la mitología griega y nórdica, así como con imágenes judeocristianas. El mayor problema que tuve con esto es, como muchos otros ya señalaron, que no hay suficiente evidencia o se siente un poco exagerado siempre el tema de comparar e intentar evidenciar que esto viene de aquí o de allá. A veces (¡Muchas veces!), las historias emergen de un autor sin haberse inspirado en tal o cual. Salen de dentro de uno/a y ya está. Y, al menos, de forma consciente, no están inspiradas en nada. Lo digo como escritor. Lo hablo de primera mano:

NO SIEMPRE HAY UNA FUENTE DE INSPIRACIÓN

Al menos, no tan directa. Por eso, no me gustó mucho que aquí se intente comparar a Ungoliant con Kali, la diosa hindú, por el simple hecho de tener ocho piernas/brazos. Se siente una comparación forzada. Además, la comparación entre Sauron y Salomón con respecto al anillo… uff. Sin embargo, es interesante ver como muchas veces intentamos (como seres humanos) buscarle tres pies al gato. Pero me pareció muy interesante ver ciertas conexiones y paralelismos a pesar de la falta de pruebas.

David Day se esmera en Los Poderos Oscuros de Tolkien y termina por sacar un libro muy interesante para ese tipo de lector inquieto al que le gusta analizarlo todo. Para ellos, como mínimo recomendable.

Reseña: El Muerto Enfermo de Amor, de Junji Ito

¿Qué decir de Junji Ito que no se haya dicho ya? ¿Qué alabanzas quedan y qué recomendaciones más insistentes para el amante de las historias de Terror hay de decirle que ya tarda en hacerse con todas-toditas-todas sus obras? El enfermo muerto de amor es el nuevo titulo del maestro nipón al que deberíais echar un ojo. Bueno, no nuevo, pero ECC Ediciones acaba de sacar el titulo en una edición flexibook que me parece de lo más maravillosa, en especial, por sensaciones ya sea con su tacto durante la lectura o su visonado para deleite orgulloso una vez puesto en la cómicteca.

Una historia donde Junji Ito regresa para relatar la historia del misterioso chico del cruce, quien atiende la petición de chicas que esperan de él una predicción. Una historia muy Stephen King, muy King de los años buenos. Y una nueva oportunidad para pillar esta joyita de relato que tantas veces he recomendado de palabra. Pues El enfermo muerto de amor entretiene, interesa lo que cuenta, increpa tu tranquilidad y da ideas. Que es lo que yo siempre le exijo a una obra de Terror. Y que recuerde de alguna forma a los grandes autores clásicos.

El enfermo muerto de amor puede ser uno de los relatos más largos escrito y dibujado por Junji Ito. Me refiero a «relato», eh… Consta de cuatro capítulos aunque lo chulo de esta edición es que se aporta un capítulo extra (El chico guapo vestido de blanco) con el que ya si que te quedas con el culo torcido. Y empezamos con una muy buena primera mitad de la trama que se hace extraña y estrechamente entretejida comparable a las buenas historias de miedo tipo Twilight Zone. Ya para la segunda parte de la trama hay más sangre y tripas al estilo gore, una combinación un poco desafortunada pero que ejemplifica a las buenas pelis de Terror. Al principio, nos centramos en un pueblo con una extraña costumbre local, la de pedir a los extraños en una esquina de la calle que te digan tu fortuna, en función de lo primero que les venga a la mente y después de escuchar lo que quieras decirles. El problema es que algunos de los que buscan fortuna han comenzado a suicidarse. Y muchos de ellos supuestamente se han encontrado con ese mismo «extraño de la esquina», un joven que nadie parece conocer. Una vez que combinas eso con la historia de fondo de algunos de los personajes, una mujer extrañamente obsesionada que quiere fortuna y consejos pero duda de todos, y la culpa infantil de un personaje central ahora adolescente; todas las historias empiezan a conjuntarse en una masa tremenda de horror con habitantes de un pueblo en debacle (y esta parte es la que recuerda bastante a los primeros libros de Stephen King). Solo los suicidios sangrientos traicionan el toque de Junji Ito, ya que le gusta incluir muertes espantosas. Pero en fin, son seres con un toque extraño y espeluznante, cuya locura una vez le permitieron cruzar desde el Otro Lado a la vida tal como la conocemos. Y su obsesión por los vivos está en marcha. Así que a sufrir toca.

Aunque los pilares de Ito son obras como Uzumaki o Tomie, hay decenas, si no cientos de historias que el mangaka ha creado a lo largo de los años y que ya representan al mejor manga de Terror de todos los tiempos. Lo ha revolucionado y las publicaciones de ECC Ediciones en nuestro país nos han encadilado a muchos. ¿Cuál es la historia más aterradora que has leído de Ito?, me preguntaron una vez. No supe contestar. No supe quedarme con una.

Reseña: El Gran Libro de Satán, de VVAA

Lo dicho en la reseña anterior me vale para los dos títulos reseñados hoy pero en términos diferentes. Libro y cómic reseñas de hoy con los que empezaré diciendo lo mismo. Pero si uno tiene la virtud/defecto de ser aventura ligera para degustar en una o dos sentadas, con El Gran Libro de Satán sí que decidí consumirlo con una fuerte tranquilidad pasmosa. Más que nada por la simple idea de que cada una de sus páginas son caviar. Lo importa en esto, como en todo hobby que se precie, es disfrutar. Y si uno va predispuesto a pasarselo bien, seguramente se lo pase bien. Si uno tiene entre manos un tomo que pretende disfrutar si o si porque le encanta lo que se propone, os aseguro que las posibilidades de que esto no ocurra pasan a sera ínfimas. Y esto ha sucedido también con este genial volumen publicado por Blackie Books.

¿Qué es El Gran Libro de Satán? Una joyita de la literatura, una antología, un compendio de ideas y escritos que os van a deleitar. Y a los que no, pero les interesa saber qué contiene, os aclararé desde un principio que miedos fuera. Dejaros de ideas preconcebidas e id a por él porque no son textos de adoctrinamiento para que paséis a ser miembros y amantes del Satanismo o cosas por el estilo. Nada de eso. Esto es pura diversión, relatos, poemas, artículos, dibujitos… donde de algún modo se hace mención a El Maligno, pero con la diversión y el Terror yendo de la mano. Una edición de Jorge de Cascante (desde 1999 colaborando en prensa, revistas y fanzines y sus artículos, columnas y cuentos han aparecido en publicaciones como La Vanguardia, El País, Vanity Fair, GQ…) con cuyo humor, sarcasmo y sentido de la ironía, me identifico. Quizás por eso me haya flipado tanto esta lectura que os aclaro que, la estoy leyendo aún por aquello de disfrutar del caviar en pequeñas dosis. ¿Ni siquiera lo he acabado y he decidido reseñarlo? La principal razón es para que no vayáis tarde a haceros con esta magnífica obra… Muy claro tengo que es de los pocos libros que voy a leer y releer en mi vida. La inspiración que esplende es maravillosa.

666 páginas que se inician con un magnífico prólogo de Jorge de Cascante hablando de la edición que Blackie Books le ha permitido hacer; para no perdérselo, pues se indica que todo gira en torno a un criterio muy personal pero con el que te identificas a la hora de tener presente como el ser humano de un modo u otro ha decidido asumir, representar y obtener el concepto ideal de El Maligno. Haciendo referencia también al relato que es la base de todo para que esta edición exista. Jorge de Cascante se refiere a Calma, de Kelly Link, como el principal culpable, cuento que decidí empezar a leer tras el prólogo (si algo tengo claro, es que todo lo que concierne al “demoño rojo” (como dice el chiste) debe ser contradicción…).

¿Cómo definirlo? ¿Qué se recomienda de su interior? Resumen: TODO. Desde el relato El parque infantil, de Ray Bradbury, que os va a cambiar la vida si tenéis hijos pequeños, hasta Posesión, de Emilia Pardo Bazán, que a más de uno o una os va a quitar el sueño, sobre todo, en el pensamiento respecto a los enfermos terminales y sus visiones en el lecho de muerte. Aquí en las historias no se hace ascos a nadie. Relatos de autores clásicos, tanto de consagrados como de autores recientemente llegados al mundo literario pero que tienen mucho que aportar a la visión original sobre lo que es el Diablo, la Bestia que no Debe Nacer. El Gran Libro de Satán es la antología de literatura diabólica más completa que existe en el mundo. Lo dice muy bien su presentación editorial. Este volumen recoge cincuenta y seis piezas largas y más de cuatrocientos pasajes breves de índole perniciosa: poemas, cuentos, ensayos y extractos de novelas con Satán como figura central o secundario imprescindible. Cada texto seleccionado es de un autor o autora distinto (nadie repite), y de toda clase de perversidad literaria: de Iris Murdoch a Sara Mesa, pasando por Clive Barker, Nathaniel Hawthorne, Sharon Olds, Dante Alighieri, Joan Aiken, Kelly Link, Charles Baudelaire, Irene Solà, Ambrose Bierce, Ursula K. Le Guin, Ana María Matute, John Milton, Samanta Schweblin, Ray Bradbury, Neil Gaiman, Elisa Victoria, Michael Chabon, Belén Gopegui, Mark Twain, Karen Russell, Shirley Jackson, Mijaíl Bulgákov y muchísimos más. A eso sumad los diecisiete millones de dibujitos de Alexandre Reverdin incluidos (sí, diecisiete millones) que son maravilla y que si no lo creéis se nos invita a contarlos.

El Gran Libro de Satán es el ejemplo claro de libro que en mis años mozos mi mamá me hubiera dado un alpargatazo si lo hubiera encontrado entre mis cosas. ¿Por qué? Por lo que os decía al principio; el no saber de su contenido es ignorar la “buena” propuesta literaria que contiene. Eso si, viene de la mano negra esa con forma de pezuña que todos conocemos. Y es joyita disponible en librerías. También dijo una vez Stephen King que el Infierno es repetición. Leer y leer, y repetir y repetir la lectura de este volumen, es mi propósito.

Maravilloso, maravilloso, maravilloso.

Reseña: El Joven Hellboy. La Tierra Oculta, de Mike Mignola, Thomas Sniegoski, Craig Rosseau, Dave Stewart y Clem Robins

Nunca debe ser un problema leer y disfrutar de un cómic o un libro con cierta tranquilidad pasmosa. Lo importa en esto, como en todo hobby que se precie, es disfrutar. Y si uno va predispuesto a pasarselo bien, seguramente se lo pase bien. Si uno tiene entre manos un tomo que pretende disfrutar si o si porque le encanta lo que se propone, os aseguro que las posibilidades de que esto no ocurra pasan a ser ínfimas. Y esto que os comento, por ejemplo, es el modo en el que me enfrenté al nuevo tomito sobre el Chico Infierno que publica nuestra querida Norma Editorial.

El universo de Hellboy ya es conocido por su amplia gama de géneros de aventuras, desde historias de fantasmas, de casas embrujadas, hasta el enfrentamiento contra seres del averno y buenas peleas con ellos tipo Kaiju. Sin embargo, una cosa que no había visto nunca es ver como se introduce a este personaje en un clásico cuento de isla prehistórica al estilo de Viaje al centro de la Tierra.

En El joven Hellboy: La Tierra Oculta, una miniserie de cuatro números del maestro-creador Mike Mignola junto a Thomas Sniegoski, os encontrareis esto precisamente. Con ilustradores como Craig Rosseau, el colorista Dave Stewart y el rotulista Clem Robins, los cuales aportan una visibilidad magnífica a la historia. Una divertida trama de aventuras con dinosaurios y monstruos, pero con el toque adicional de la mitología de Hellboy.

Dice la sinopsis que: “Perdidos en una extraña isla tras sufrir un accidente de camino a una excavación en América del Sur, Hellboy y el profesor Bruttenholm se ven asediados por toda clase de monstruos… ¡Por tierra, mar y aire! Pero una extraña los rescatará y resultará ser una de las heroínas idolatradas para Hellboy… ¡Pero no están tan a salvo como creían! Un antiguo mal confinado en la isla está a punto de despertar…». Y es que contar mucho más que eso sería spoilear a cascoporro. Porque estamos ante una aventura de esas de acción, de peli palomitera en las que no terminan de acabar con un enemigo cuando sale otro.

El guión del creador de Hellboy y vanguardista de este universo Mike Mignola y su coguionista Thomas Sniegoski lo hacen sencillo. Decir lo contrario sería engañarnos. Pero todo enfocado a una aventura divertida y con la perspectiva del niño curioso al estilo del porculero enano que molesta a su padre, todo se vuelve aún más divertido y refrescante de leer. De hecho, muchas de las interacciones que tenemos en Hellboy y la A.I.D.P. (B.P.R.D.) son historias que involucran al joven Chico Infierno y su padre adoptivo, el profesor Bruttenholm; pero aquellas en las que este último está demasiado ocupado por culpa de su cargo. Por eso ver a los dos juntos por una vez en plan niño y padre que van a echar un día de parquecitos juntos y en un entorno al estilo Jurassic Park, es una cosa que mola bastante.

El joven Hellboy: La Tierra Oculta es un gran tributo a las clásicas historias de aventuras en islas misteriosas, aquellas magnificadas por Julio Verne; linaje que se remonta a los libros que tanto disfrutamos los niños de los 80 pero que tan buena fama tuvieron desde principios del siglo XX. Época donde también empezaron a despuntar los cómics de aventuras de la Edad de Oro y Plata, por cierto. Estrellarse con una avioneta en tierra inhóspita con cangrejos enormes deambulando, dinosaurios y simios irritables por doquier, es un tropo clásico y familiar en el género de aventuras, pero algo que para muchos de nosotros nunca va a pasar de moda.

Este cómic ofrece cada una de esas cláusulas pero con los giros relacionados con Hellboy como personaje y el mundo en el que habita. Diálogos simples pero divertidos. Ritmo intrépido. Lo dicho: para degustar con tranquilidad pasmosa.