Reseña: Demon. El Infierno es la Tierra, de Andrew Constant y Brad Walker

Para los que somos de seguir a personajes villanos, anti-héroes o malutos que consiguen tener su propia cabecera, la miniserie Demon: El Infierno es la Tierra no era otra cosa que un caramelito para degustar cuando se preciara. Y se preció no hace mucho en nuestro país gracias a ECC Ediciones que la publica en nuestro país en un genial tomito que recopila la miniserie propiamente dicha (Hell is Earth).

Obviamente, esta historia de DC Comics se enfoca en el personaje del demonio Etrigan que si bien es y siempre fue, un personaje de segundo nivel relativamente popular, para algunos de nosotros que siempre le hemos seguido, cada vez que lo vemos lo alentamos a intentar postularse para presidente… jajaj. No os rayéis con mi locura, este tipo de humor negro ya fue tratado en el guion de un cómic de 1992 donde incluso Etrigan presentaba una campaña, escrita por Dwayne McDuffie, con asombrosas similitudes con las payasadas del presidente Donald Trump durante las elecciones presidenciales USA de 2016. Fue una de esas historias que me hicieron amar aún más al personaje y todo lo que le rodea, y no precisamente por ser afín al tontolabas de Trump. No obstante, debo hablar sobre The Demon también, para el que no lo conozca y se haya sentido atraído a la hora de leer esta reseña.

Demon trata sobre una criatura del infierno llamada Etrigan, que ocupa el cuerpo de un humano llamado Jason Blood en lo que sería una posible variante de la idea del Dr. Jekyll y Mr. Hyde. El personaje fue creado por el maestro-dios-del noveno arte estadounidense Jack Kirby en 1972, siguiendo una directiva editorial para crear un título que fuera «algo un poco demoníaco». Etrigan es amarillo, respira fuego y normalmente habla en verso. Me parto el culo. Y con un carácter no siempre altruista, como señalaron cierto críticos. Me parto aún más. El Infierno es la Tierra es un arco que sumerge a los lectores en medio de un sueño, o mejor dicho, una pesadilla experimentada por Jason Blood, quien ahora vive solo en la región del Valle de la Muerte (Nevada, USA). La pesadilla planteada está en perspectiva y en primera persona. Blood se encuentra con una niña que pide ayuda, antes de que la quemen viva… Al despertar, Etrigan riñe a Jason, quien dice estar decepcionado debido a que el sueño terminó antes de que pudiera comerse a la niña…

… y a través de la conversación interna de Etrigan y Jason, se revela que Jason se ha convertido en un recluso que ha evitado el contacto humano y a la población, en general, mientras usa el mecanismo del alcohol para evitar que el Demonio Etrigan se manifieste. Luego, el cómic cambia momentáneamente a otro personaje: la hechicera Madame Xanadu. Otro personaje que fue creado por los grandes místicos guionistas DC, una señorita-señora que se la identifica como Nimue, una hechicera de la mitología artúrica popularizada por Sir Thomas Malory en su novela La muerte de Arturo (Le Morte d’Arthur). Pero otro personaje de la década de los 70 en los cómics de superhéroes, residente de la Gran Manzana y que se le puede encontrar en una tiendecita del Greenwich Village. Pero aquí la vemos montando en moto y con ropa de motera mientras todavía usa su tiara de marca registrada. Aparentemente está buscando algo que la historia revelará más adelante y que nos os pienso contar porque ya sabéis…, de lo chulo, spoilers cero.

Desde la introducción de Xanadu en la historia, la trama cambia. Y empieza a molar un huevo. Un trampolín para la trama. Los lectores no deben esperar demasiada innovación cuando se trata de estas historias que no son otra cosa que puro divertimento. Villanos riéndose de los cuerpos que usurpan, que además se ríen del lector cuando pueden. Este es el modus operandi típico del personaje de Etrigan y que el guionista Andrew Constant ha sabido mantener fiel con el clásico personaje, que todos sabemos como se las gasta.

Tomito muy molón.

Reseña: Haunted Horror, de VVAA

No penséis que en Desde New York – Crónicas Literarias nos vamos a cansar de esto. Nadie se cansa de lo que ama por encima de todas las cosas. El Terror. El buen Terror. El Terror del bueno. Nadie se cansa del jamón de pata negra. Y lo que mola es encontrar una editorial como Diábolo Ediciones que piensa como nosotros. Compañeros y amigos de este mundo lector que hemos decidido tomar muchos, cada uno con un camino en particular, pero que nos junta y nos sienta en el mismo cine de lecturas que nos gusta tener entre manos. Y ahora, Haunted Horror, un nuevo volumen, un nuevo tomo, otro indispensable como son todos y cada uno de los componentes de lo que se ha dado en llamar Biblioteca de Cómics de Terror de los Años 50. Y ahora un décimo volumen ya para adjuntar a esta genial cómicteca que estamos creando muchos, gracias a la tremenda apuesta de Diábolo Ediciones.

Un tomo que recopila los tres primeros números del comic-book Haunted Horror, una revista que surge en USA en el no muy lejano 2012 pero que recopilaba historietas de terror de diversas editoriales de los años 50 y que ahora se ha podido recuperar para su publicación a este lado del charco. Publicada en USA por IDW y Yoe Books y editada por Craig Yoe, ganador de un premio Eisner, con la colaboración de Clizia Gussoni y Steve Banes; culpables de la «vuelta a la vida» de estos cómics, obras, legajos… Esta colección de cómics de terror Pre-Code de la década de 1950 es realmente todo lo que esperas. Tontuna, aterradora, espeluznante, macabra, pero sobre todo DIVERTIDA, con esas historias que se regocijan en esos momentos de las historias de terror en las que dices: En realidad, eso no lo haría nadie… ¿O sí? Mas, pautas que nunca deben faltar en una buena historia de miedo porque si existe un animal bastante gilipollas en los momentos de tensión, ese es, sin duda, el ser humano.

También tenéis que tener en cuenta que son cómics de una época en la que los guionistas aún luchaban por encontrar el equilibrio adecuado entre palabras e imágenes para que no les censuraran… Cosa que en el cine sigue ocurriendo hoy en día. Pero, ¿qué contiene Haunted Horror, tomo espectacular de espectacular portada? Una buena colección de historias de terror con todos los sospechosos habituales: vampiros, brujas, hombres lobo, asesinos en serie, alienígenas, etc. Donde aprenderás a no matar a tu socio empresarial; a temer a las manos cortadas; a pensar en la posibilidad de que tu esposa también tiene opciones de ser una mujer-lobo; a no darle puñetazos a las ancianas en la cara por mucho que quieras hacerte una pipa con su cráneo; a pasar de los insectos y no querer matarlos a todos; a pensar que si un lama tibetano te deja pasar el rato en su templo, jamás intentes llevarte a su sacerdotisa por guapísima que sea… Y muchas historias más.

Cómics de arte chulo a la vez que espeluznante. Lecturas y ejemplares indispensables para todo amante del género de terror que se precie. Súper recomendable para Halloween, pero también para estas noches de tormenta que tenemos encima. Volumen que se completa con un prólogo a cargo de Jerry Only, bajista de The Misfits, y una galería de portadas de las revistas donde aparecieron dichas historietas.

Regalito ideal para esa persona que tenéis en mente, que bien pudieras ser tú.

Reseña: Flinch (Integral), de VVAA

Surgida de las entrañas del extinto sello Vertigo, Flinch se basaba en una premisa poderosa: los comportamientos inesperados del ser humano… Flinch reunió a los mejores autores del mundo del cómic, cuyo talento brillaba en la oscuridad de historias tan alucinantes como perturbadoras y macabras. ¿Pero qué es exactamente Flinch para todos esos que miramos este cómic de reojo algún vez? Una colección de historias de terror, dibujadas y escritas por grandes artistas como Brian Azzarello, Kent Williams, Bill Willingham, Garth Ennis entre otros. Un pelotazo de antología aunque ya os adelanto que hay autores que se nota que no valen para este género y sus historias o dibujos se sienten un poco forzados. O bien que en ese momento de sus vidas no les salieron buenas historias y años después sí. De los que os podría decir, al menos, dos casos. De ahí la irregularidad de esta colección. Pero aun así un tomo recopilatorio bastante interesante que ECC Ediciones vuelve a poner en el candelero.

Tenemos aquí historias espectaculares, buenas, medias y otras simplemente normalitas… en el sentido de pasables. Como cualquier antología de terror que se precie. Y no pasa nada. Tampoco quiero desmerecer el trabajo hecho pero el problema de esto suele venir por tener tramas algunas demasiado cortas -o que se quedan cortas- para el argumento que se propone. Obviamente, hay tramas de terror que necesitan más desarrollo que otras. Y si no se hace, hay que ser “muy maestro” para que salgan bien. Mas, os digo que Flinch es un tomo de dieciséis numeritos que he disfrutado como un cosaco, como un poseso, pues eso, uno que ama el Terror en cualquiera de sus formas desde que tengo uso de razón.

Soy un gran admirador de los viejos cómics de la EC, por lo que extraño la falta de este tipo de cómic en el mercado. Tampoco mucho porque aprovecho para decir que Diábolo Ediciones en nuestro país está rescatando cosicas. Pero también es verdad que hay otro público, otro no tan viejoven, para el que se hicieron las historias de horror que se pueden encontrar en Flinch. De todos modos, la clásica antología de terror de la famosa editorial Vertigo, no son otra cosa que cuentos con giros al estilo Twilight Zone (La Dimensión Desconocida) que incluyen una banda violenta de personas mayores, una hija que encuentra una cura para la enfermedad de su padre enfermo que tiene sorprendentes efectos secundarios, la cadena de violencia generada por una organización criminal y un retorcido asumir para lo que fue el hundimiento del Titanic.

Y mucho más. Porque como bien se anuncia -o fue el lema de esta colección durante un tiempo-, nunca se sabe que momento, anécdota o resquicio hará que una persona explote y veamos su lado más oscuro. Un niño que se pierde y sus padres pierden la cabeza, una puerta de ascensor que se abre en un momento inoportuno o la llamada de un extraño en mitad de la noche. Acciones de emisión u omisión del deber socorrido que rompen la rutina, la paz y tranquilidad del ser humano. Y encienden la mecha. Como toda antología que sí que recomiendo, tenemos bastantes más historias buenas que malas. Algunos de los principales creadores de cómics actuales contribuyeron a esta antología. Las historias a veces se extralimitan y tratan de lograr más de lo necesario, es uno de los problemas. Pero es lo típico de: a quién le mole el gore le encantará y a los que sólo les interese el terror en sus más cortas formas, les apartará. Siempre dije que saber hacer gore del bueno es muy difícil. Frontera complicada de alcanzar.

Un cómic donde las portadas de cada grapa fueron su fuerte. Insisto, amo el Terror en sus más diversas formas por lo que recomiendo pasar por Flinch, al menos, una vez en la vida. Una serie que podríamos comparar con la famosa serie de TV del momento como es Black Mirror.

Reseña: Marvel Omnibus. Ojo de Halcón, de Jim McCaan y David López

Ojo de Halcón es un personaje del que últimamente han salido grandes cómics y se han recopilado a base de bien. Es un personaje que fue secundario durante bastante tiempo aunque ya en los 80, en Los Vengadores de la Costa Oeste (Los Nuevos Vengadores, en nuestro país) comenzó a despuntar gracias a sus dotes de mando y potente personalidad. Y entonces del inseparable compañero y amigo del Capitán América nos enamoramos muchos. Curiosamente, poco después de eso, los 90, dos miles… no hubo una adaptación potente del personaje en viñeta.

Pero se alzó de pronto gracias a la primera peli de Los Vengadores, donde se fue haciendo nuevamente con el cariño de muchos. A lo que sumó bastante más el Ojo de Halcón, de Matt Fraction y nuestro compatriota David Aja (https://www.panini.es/shp_esp_es/marvel-integral-ojo-de-halc-n-de-matt-fraction-y-david-aja-smain020y-es01.html) que lo petó en los Premios Eisner de ese año en que se publicó la serie. Y que Panini Cómics trajo aquí en un maravilloso tomo no hace mucho. Por no hablar del que hizo Jeff Lemire (https://www.cronicasliterarias.es/?p=5639) que también me encantó aunque en menor medida. Y uno que parece ya estar curtido en la revisitación a un personaje que amé por encima de muchos de otros de Marvel en mi niñez (sí, yo era el raruno del grupo que coleccionaba Los Nuevos Vengadores); de cabeza fui a por el integral que salió hace nada, esta vez tratado el personaje por Jim McCann y David López, que Panini tiene los santos cojones de publicar en la misma edición Marvel Omnibus de los anteriores; tapa dura con granulado, formato grande…, delicioso, delicioso, para poner junto a los otros sin desentonar un ápice. Y donde si antes nos habíamos topado con el personaje viviendo la vida del solterón en un barrio de alquileres chungos, llevado por mafiosetes de la Europa del Este, o las aventuras y desventuras junto a su hija; ahora toca un impresionante volumen con todas sus aventuras desde el retorno de Pájaro Burlón, como consecuencia de los acontecimientos de Invasión Secreta; una señorita de armas topar, una pareja a la que se le apodó en USA por su forma a acometer a los malos-malutos, el señor y la señora Smith del Universo Marvel.

Partiendo de las consecuencias masivas de Invasión Secreta comenzamos aquí con un arco de cuatro numeritos (New Avengers: Reunion) que es sorprendentemente introspectivo, particularmente cuando se compara con algunos de los otros cómics que vuelan bajo el estandarte de Reinado Oscuro. Y aunque la trama en sí misma sirve como medio para llegar a un fin, el escritor Jim McCann hace un buen trabajo al explorar la complicada relación Clint Barton/Pajaro Burlón. McCann pasa la mayor parte de su tiempo explorando las complicadas conexiones de Ronin, escribiendo un intercambio muy atrasado con Bucky, antes de cambiar el enfoque a Pájaro Burlón y específicamente el cómo sus experiencias con los Skrulls afectarán su relación con su actual ex-marido. Aquí es donde McCann hace un excelente trabajo al vender la extraña desconexión entre Clint y Bobbi a medida que los personajes se reencuentran tras años de separación. La trama, que involucra a una organización misteriosa escondida en un ala de hospital oculta, toma algunos giros impredecibles y aquí ya estás enganchado del todo a un tomo que propone y da bastante.

Mientras tanto, los lápices de David López se adaptan perfectamente al flujo atractivo de las historias. El artista hace un gran trabajo al enmarcar sus viñetas de manera concisa. También vale la pena señalar que durante las escenas más expositivas, el artista hace un trabajo fantástico al usar expresiones faciales y gestos para capturar el tono argumentativo que busca McCann. Por lo que estamos ante un indispensable para fans de Hawkeye y súper indispensable para amantes de parejas de superhéroes a los que les gusta la acción por encima de todo. La tensión sexual siempre, pero cuando no, la ayuda inestimable de una amiga o un amigo que te tiende la mano.

Se podría proponer como cómic ejemplar de estudio de personajes.

Reseña: Black Adam. Auge y Caída de un Imperio, de Geoff Johns y Joe Bennett

Black Adam: Auge y Caída de un Imperio es un volumen escrito por Geoff Johns y dibujado por Joe Bennett que recopila la parte de la mítica serie 52 que protagonizó Teth-Adam. Después de los eventos de Crisis Infinita, hubo un (largo) año sin Superman, Wonder Woman y Batman… Entonces, ¿quién ascendió al poder del Universo DC? Tejiendo varias historias de un mundo tras esa crisis, Black Adam: Auge y Caída de un Imperio lo cuenta. El protagonista ya lo he dicho, Teth-Adam, más conocido como (sobre todo, ahora con la potente película en vigor) Black Adam. Me dijo un amigo no hace mucho: «Me meto muy poco en el reino de los superhéroes, pero me gustaría que me prestaras algo diferente, que no utilice los personajes famosos de siempre y que cuente una historia fresca sin quebraderos de cabeza». Tras leerlo, le preste este tomo que publicó hace poco ECC Ediciones. Y ahora quiere más. Más de Black Adam. Más de historias que se evaden de un universo conocido, sin alejarse mucho a su vez.

Sé quién tiene la culpa de que tengamos un nuevo adicto al mundo del pijameo DC. Se llama Geoff Johns. Y es el dios maestro guionista y mucho más, con el que cuenta DC casi para todo. Geoff Johns originalmente es oriundo de Detroit, Michigan. Y ahora como no sé si alguna vez en alguna reseña me paré a hablar de él (¿en algúna de Flash quizás?), quisiera comentaros cositas del maestro. Tras hacer sus pinitos en el cine comenzó su carrera de cómics escribiendo Stars y la JSA (coescrita con David S. Goyer) para DC Comics. Trabajó con el genial director Richard Donner durante cuatro años y lo dejó para dedicarse a los guiones de cómics por completo. Acortando…, con una imaginación asombrosa ha creado contenido para Green Lantern, Action Comics (coescrito con Richard Donner), Teen Titans, Justice Society of America, Infinite Crisis y la exitosa serie experimental 52 para DC con Grant Morrison, Greg Rucka y Mark Waid. Una de estas aventuras es la que os reseño hoy.

Black Adam, nombre real Teth-Adam, es un ex-campeón de la saga Shazam. Después de su caída en desgracia, se convirtió en el archienemigo del próximo campeón, el Capitán Marvel (o el Shazam de toda la vida, como lo conocemos todos), el mismo que también tuvo peli no hace mucho, una muy chula, por cierto, para disfrutar con la familia. Desde entonces, Black Adam ha trabajado para redimirse con la JSA, pero su camino es largo y problemático. Y esto también es algo que se refleja en el film de Dwayne Johnson, un antihéroe de Kahndaq que fue encarcelado durante cinco mil años hasta que…

Antiguo Egipto. Alrededor del año 1200 a.C., Shazam se convirtió en sumo sacerdote del faraón Ramsés II de Egipto. A medida que el mago crecía, buscó un campeón digno de heredar sus poderes. El joven príncipe Teth-Adam de Kahndaq (hijo de Ramsés) impresionó al mago con su justicia y decencia. Pero antes de que Shazam pudiera otorgar sus poderes, su hija Blaze hizo un trato con el dios Set. Cuando Teth-Adam pronunció el nombre «Shazam», en lugar de obtener los poderes del mago, fue bendecido con el poder de seis dioses egipcios: Shu, Heru, Amon, Zehuti, Aton y Mehen. Pero aunque Adam pronuncia el nombre «Shazam», no extrae poder del mago. Teth-Adam sirvió a Egipto durante muchos años como un héroe pero este deber lo alejó de su esposa, la cual, fue asesinada junto a sus hijos por el malvado sacerdote Ahk-Ton usando el Orbe de Ra. Adam, despreciado, continuó sirviendo en la corte de Ramsés y se alió con el príncipe Khufu (más tarde Hawkman) y no mucho después conoció a tres viajeros del tiempo como Hawkgirl, Mr. Terrific y el mismísimo Capitán Marvel del futuro… Adam regresó a Kahndaq y derrocó por la fuerza al gobierno presente allí, nombrándose gobernante y… hasta aquí puedo leer. Porque no solo puedo spoilearos la gran historia que narra el cómic, si no, también gran parte de un tema también tratado en el nuevo film.

A poco que te haya molado la peli, este es tu cómic.

Aunque el orden de los factores, no altera el disfrute.

Reseña: Nightwing. Año Uno, de Chuck Dixon, Scott Beatty y McDaniel

Nunca fui muy de Robin y eso lo sabe cantidad de gente que lee cómics y me conoce. Pero también saben (porque aparte también le ha ocurrido a ellos) que nos hemos tenido que ir callando la boca por obritas que nos han ido llegando de este personaje/reinventado. Obras y arcos del personaje que tienen mucho tirón. ¿Qué no es lo mismo Robin que Nightwing ni Nightwing que cada uno de los diferentes Robins? Quizás el alter-ego haya ido cambiando pero objetivamente son todos el mismo… o no. Y en base a ese pensamiento he podido de disfrutar de cómics, cómics como Nightwing: Año Uno, un tomo publicado por ECC Ediciones de lectura más que recomendable. Recopila los números del #101 al #106 de la serie original. Diría que un reinicio inquietante pero que vale, sobre todo, para ver si te gusta, si entras, si decides hacertela, en definitiva, si el nuevo personaje te puede gustar.

Y es que Robin se apresura, llega tarde, para ayudar a Batman a luchar contra Clayface (Cara de Barro), que busca un bebé. Acabando con Clayface, llevándolo a rastras a la nieve, congelándolo. Mientras Batman discute sobre su tardanza, Clayface les apunta con un arma pero… ¿atina? No atina. Y Clayface sale corriendo y Robin lo persigue hasta una alcantarilla. Allí, Clayface casi derrota a Robin, pero es arrastrado por una tubería abierta. Batman devuelve el bebé, que resulta ser el hijo de Clayface, a su madre que… Ufff, spoilers, no. Pero cuando el dúo regresa a la Baticueva, Alfred le tien guardado a Robin un traje. Sin embargo, el Caballero Oscuro reprende a Robin y lo despide por no ser lo suficientemente devoto a sus ordenes. Furioso, se aleja, dejando atrás el traje nuevo. Pero… el inicio de un nuevo personaje acaba de ponerse en marcha. Acaba de nacer Nightwing.

La nueva colección de Nightwing es una mezcla de géneros. Aventuras, intriga e incluso politiqueo. También, obviamente, desarrollo y lucha personal. Aunque por encima de todo es un cómic de superhéroes atractivo, de los que nos engancha a muchos. El origen. Un volumen que tiene unos arcos que son puro entretenimiento asi como algunos momentos geniales y escenas de lucha inolvidables. Desafortunadamente, también tiene algunos momentos más centrados en personajes que, pese a que están bien escritos, no se desarrollan todo lo que deseamos. Un fastidio, pero no un problema, ¿quién dijo que aquí se venía a hablar de villanos?

En el guión de Chuck Dixon y Scott Beatty asistimos a la transformación de Robin en Nightwing con los guionistas de Robin: Año Uno y Batgirl: Año Uno; o sea, que algo puestos en esto de los inicios están. Hay un buen equilibrio entre la acción y la historia, pero la mayor parte de la acción no parece tener mucho peso hasta que se desata el horror y la soledad en uno de los arcos centrales. Parecen aventuras de pijameo normales pero con el paso de las páginas las historias adquieren tal profundidad que incluso diría que se convierte en un cómic muy adulto. ¡El recién bautizado Nightwing sale a la calle por primera vez, pero se necesitará una noche de lucha contra el crimen contra lo peor de Gotham, incluido el Joker, para conquistar la opinión de muchos. Encuentros con el nuevo Robin, Jason Todd, Superman, villanos a cascoporro, las malas influencias del siempre misterioso Black Mask… Saber elegir. A las viñetas Scott McDaniel, uno de los dibujantes fundamentales de la historia de Dick Grayson en solitario.

Un volumen notable.

Reseña: La Casa de los Horizontes Perdidos. Un Misterio de Sarah Jewell, de Mike Mignola y Chris Roberson

Simplemente brillante todo este Universo Hellboy como se ha dado en llamar. Sublime siempre Mike Mignola, su Mignolaverse, y todos aquellos autores de los que ha sabido rodearse para crear estas obritas que cómo mínimo recuerdan a Lovecraft y su entorno Arkham. En este caso, la denominada La Casa de los Horizontes Perdidos, no es otra cosa que un spin-off con el que la investigadora Sarah Jewell (Rise of the Black Flame, Witchfinder: The Reign of Darkness) obtiene su propia serie con un misterio asesinato y, por supuesto, un girito de lo oculto. Pues, un asesinato en una habitación cerrada desconcierta a la detective paranormal Sarah Jewell y su socia Marie-Thérèse cuando en un viaje de fin de semana a una isla privada frente a la costa de Washington todo se desvía a lo contrario de lo que conocemos como viaje de placer. Atrapados por una tormenta y rodeados por una miríada de sospechosos que se han reunido para una subasta de objetos ocultos, el intrépido dúo debe desentrañar los misterios sobrenaturales que rodean a los invitados que se encuentran en la mansión isleña. Descubrir al asesino. Pero mientras tanto, los cuerpos siguen acumulándose, se descubren más muertos…, gritos, el horror en la noche tras el sonido de las olas, el misterio de las rocas… en cualquier momento Sarah o Marie-Thérèse podrían ser las próximas.

De vez en cuando llegan una de estas joyitas del maestro Mignola y su grupo, publicadas en nuestro país por la inestimable Norma Editorial. Os puedo decir que raro es, el cómic de este estilo, que no es recomendable para todo amante del género de Terror o el Misterio. Mike Mignola y Chris Roberson regresan al mundo de Hellboy, acompañados por la artista Leila del Duca y la colorista Michelle Madsen. Desde la primera aparición de Sarah Jewell en Rise of the Black Flame (El Origen de la Llama Negra: https://www.normaeditorial.com/ficha/comic-americano/hellboy-2/el-origen-de-la-llama-negra), muchos de los fans andábamos deseando que Sarah tuviera su propia serie. El personaje que está claramente inspirado en la periodista trotamundos Nellie Bly y la exploradora heredera Aimée Crocker, tenía una historia tan amplia que contar más allá de la página, incluso en esa primera historia publicada por Norma. Incluso si no fuera tan friki del Universo Hellboy, estoy seguro que me hubiera enganchado a esta historia porque Nellie Bly fue una de mis heroínas favoritas de la infancia. Por la cual también me inspiré para un relato. Quién no la conozca, Elizabeth Jane Cochran “Nellie Bly” (1864-1922), fue una periodista, escritora y empresaria estadounidense; la primera reportera de periodismo de investigación y pionera del periodismo encubierto. La primera «Iker Jiménez» para que nos entendamos. Y con una anécdota sobre ella. En 1889 rebajó en ocho días el récord de ochenta días en «dar la vuelta al mundo» narrado por Julio Verne en la novela del mismo nombre…

Volviendo a la reseña, tenemos a Sarah Jewell como protagonista ideal de una miniserie que mezcla trama de libro de Agatha Christie con cuento de H.P. Lovecraft. Para que conste, tengo presente lo que se parece esta historia a la de Christie aquella llamada originalmente And Then There Were None y aquí Diez Negritos; en la que los personajes principales son convocados a una isla en circunstancias misteriosas, luego aislados del mundo exterior por una desagradable tormenta y uno por uno los personajes son asesinados. Pero entonces, ¿qué trata La Casa de los Horizontes Perdidos exactamente? Bueno, tiene un montón de personajes atrapados en una isla durante una tormenta y hay un asesino entre ellos y a partir de ahí… toda realidad empieza a cambiar.

Cada personaje empieza a ser convincente a su manera. Además de eso, al ser un misterio de habitación cerrada, es importante configurar el entorno, la línea de tiempo y las limitaciones de acceso. Todo esto en un cómic que gracias a la inquietud que provoca, se lee en nada. Y del que, por supuesto, cualquier cosita que cuente fuera de lo ya contado, se convertiría en spoiler. Cuando un personaje sale de una habitación, no solo importa si salió de la habitación, de repente es importante el cómo salió de la habitación. La historia se infla naturalmente con estos datos adicionales y cuando menos lo esperas llega el horror que rompe la tensión.

Disfruté especialmente la escena en que a través de la mirada de uno de los personajes observamos la forma en que observa -valga la redundancia- a los otros.

Michelle Madsen, maestra y ejemplo de como cuidar una paleta de colores.

Como decía, una obra que combina dos de mis tipos de misterios favoritos. Juega con mis intereses a la perfección. Otra joyita para mi cómicteca.

Reseña: Excalibur, de Chris Claremont, Alan Davis y VVAA

Otro Marvel Gold rápido, eléctrico, muy esperado en cuanto a lo que recopila y la sensación de que probablemente en lo que nos queda de vida algunos, por fin, vamos a ver, encontrar y poder comprar todas esas joyitas del cómic que tanto disfrutamos en nuestra niñez. Excalibur, madre mía, lo que disfruté yo con esta serie, una de las que pude coleccionar mes a mes sin tener que luchar mucho por ello porque ya existían buenas librerías especializadas en la ciudad en la que vivía. Lo podía reservar y llegaban grapas sin problema. Pero también una de esas colecciones de cómics que se perdieron en el limbo cuando llegaron las novias, los estudios, trabajos y con “limbo” me refiero a ese agujero negro hacia la basura creado por muchas madres que buscaban espacio en su casa. Pero… ¡El nacimiento de una leyenda!, tal como se anuncia, es un buen modo de anunciar la publicación de este Marvel Gold. Aunque estoy más de acuerdo con que por fin tenemos de nuevo a mano la obra maestra de Chris Claremont y Alan Davis.

En 1987, Marvel ya estaba experimentando con novelas gráficas dentro y fuera de la continuidad, por lo que un one-shot de cartón duro y de gran tamaño con una historia alternativa, o mejor dicho, que no se esperaba dentro de ciertas cabeceras, tampoco era algo tan raro. Por lo que el Excalibur Special Edition nació ese año y fue un exitazo. Y la gente quiso más. Fue similar a la genial serie limitada de Dark Knight de D.C. y también Ronin es de la época. No se esperaban y rompieron la pana. No obstante, era casi obvio pues Marvel dedicó para ello a sus mejores talentos y prometió una importante historia de mutantes después.

Y así abre este tomo con joyita de Especial, obra que da paso a la cabecera de once números iniciales asi como unos cuantos arcos argumentales que también fueron recogidos en volúmenes alternos. El objetivo principal de Excalibur era plegar el «universo» del Capitán Britania en el Mundo X (y poner en marcha otro título X). Por eso, el título que tenemos entre manos lo coloca de inmediato y con firmeza en la continuidad de los mutantes de la época, con Kitty Pryde teniendo un sueño febril diseñado para que las personas que no estaban en el circuito de X-Men supieran que estos «murieron» durante La Caída de los Mutantes (a los efectos de esta pesadilla, Kitty cree que están realmente muertos); y que Rachel Summers también se ha ido, y Kitty y Rondador Nocturno sobrevivieron solo porque estaban convalecientes en Muir Island, lejos de la acción… Pero ella y Rondador Nocturno consultan y descubren que ambos han tenido el mismo sueño. Entonces sabemos que eso no es normal. Vemos que Meggan y su novio, el Capitán Britania, cuya hermana Psylocke murió con los X-Men. Está hablando sobre eso (para muchos lectores, incluido yo mismo, Britania era prácticamente un desconocido aquí, en aquellos años que leímos esto por primera vez), y Meggan era alguien a quien nunca había visto antes.

En este punto la historia toma velocidad. O el tomo, mejor dicho. Despega la colección que ya no te suelta. Tremendo poder de enganche que tiene Excalibur como serie, friends. Y es que si os soy sincero, no recordaba mucho sobre Excalibur y por eso decidí que este Marvel Gold tenía que catarlo sí o sí. Por supuesto, también hypeado por RRSS y con todo lo que se ha hablado por esta vuelta a librerías de una serie que todo el mundo disfrutó en los 90. Pues, justo ahora que empezaba a creer que el pijameo cada vez me gustaba menos, vuelvo a estar ansiado con estas colecciones que llenaron y llenan de buenas sensaciones nuestro cuerpos lectores. Además de una historia de superhéroes mutantes que tiene lugar en Europa. tenía que funcionar para mí. ¿Por qué toda la acción debe estar siempre en mi amada Nueva York?

Hay más mundo. Y, el mundo cree que los X-Men han caído, ¡pero esto es solo el comienzo! Kitty Pryde, Rachel Summers y Rondador Nocturno forman Excalibur. El primer equipo de superhéroes del Reino Unido. Y el Capitán Britania liderando la manada con Meggan, amante de los cambios de forma, días de terror con Lobos de Guerra aparecidos por todo Londres y Excalibur respondiendo a la llamada. Y Kitty y Rachel enfrentándose a criaturas metálicas que roban la piel a las personas. Horror corporal. Pero antes de que puedan celebrar cualquier victoria… ¡El Juggernaut ataca! Cain Marko ha escapado de prisión y está causando estragos por toda Europa. Un mochileo un poco raro, ¿no? Y más. La ex del Capitán Britania, Courtney Ross, secuestrada por Arcade. Pero Courtney demuestra que no es la damisela en apuros que Excalibur cree que es. Y todo el súper grupo atrapado en Murderworld, por las extrañas maquinaciones de la mente de Arcade; y el equipo recibiendo una grosera bienvenida en la ciudad de Nueva York, concretamente en mi Empire State Building de mi alma… qué… ¿parece estar creciendo?

Los Vengadores de la Costa Oeste, Mojo, todos los mencionados, el Doctor Doom… Cremita, cremita, cremita. La obra maestra de Chris Claremont Alan Davis ya está aquí.

Reseña: Pelúcidar. En el Centro de la Tierra, de Edgar Rice Burroughs y VVAA

No os podéis hacer una idea la de joyitas buenas en formato cómic que está publicando Diábolo Ediciones. O sí porque estáis muy al tanto como yo. Como un puñal nostálgico hacia el corazón de muchos de nosotros, una obra tras otra que provoca babeos entre para el aficionado al Terror, la Fantasía y el más atractivo pulp que desde los 60, 70 y 80 nos tiene enganchados a la lectura de por vida. A los viejóvenes y polifrikis como yo, el consejo de compra de Pelúcidar: En el centro de la Tierra, puede resultar redundante. Pero a los que nunca tocaron novelas pulp e incluso les da reparo, pero aún así, siempre le llamaron la atención, tenéis aquí el más ligero acercamiento a lo que Edgar Rice Burroughs quiso proponer al mundo con estas aventuras.

Pelúcidar: En el centro de la Tierra es un cómic que recoge en un solo volumen varias de las historias del autor de Tarzán. Un mundo donde se trata la ambientación o el entorno de Pelúcidar, un mundo bajo nuestro mundo, una obraza labrada gráficamente por amantes del género que con los años se convertirían en maestros como son o fueron Len Wein , Dennis O´Neil, Michael W. Kaluta…, artistas míticos del cómic norteamericano, que en los años 70 y 80 adaptaron al noveno arte cantidad de tramas pulperas.

Pellucidar (Pelúcidar) fue un lugar localizado en el interior de la Tierra, imaginado por el novelista estadounidense Edgar Rice Burroughs para una serie de historias de aventuras. En un cruce entre dos de sus series de novelas, Burroughs desarrolló un episodio en el que Tarzán viajaba a Pelúcidar; una historia maravillosa. Aunque las historias publicadas en este tomo implican principalmente las aventuras del heredero minero David Innes y de su amigo el inventor Abner Perry, que utilizan un «topo de hierro» con el que alcanzan una profundidad de quinientas millas hacia el interior de la corteza terrestre, donde encuentran un mundo subterráneo habitado. Posteriormente llevarán hasta allí a distintos visitantes del mundo de superficie, como Tarzán, Jason Gridley o Frederich Wilhelm Eric von Mendeldorf und von Horst…

Señores pulperos de pro, esto tenéis que disfrutarlo. Estamos en una época dorada de publicaciones de retrospectivas de cómics. En USA, IDW y Dark Horse han estado publicando reimpresiones recopiladas de Tarzán y otras propiedades de Burroughs, pero también lo estamos viendo rescatado en cómic europeo o toda la joya clásica de los grandes autores que ese personaje en formato cómic tuvo. En nuestro país están llegando muchas de estas cositas y es el momento de no perdérselo. Al comienzo de la Edad de Bronce de los cómics, DC estaba imprimiendo varios cómics basados en las obras de Edgar Rice Burroughs. Tenían que hacer frente a lo que Marvel también hacía que no era otra cosa que sacar titulo tras titulo, historias rescatadas del tan vendido género de aventuras pulp, donde es un buen ejemplo casi todo lo que escribió Robert E. Howard. Una antología que publicó DC por entonces y que molaría muy mucho ver rescatada por estos lares fue Korak: Son of Tarzan. Tenía 52 páginas, y además del héroe de la portada, tenía dos historias de respaldo basadas en varios personajes de los libros de Burroughs, entre ellos: Pelúcidar, la que inicia este volumen. Esa antología fue renombrada no mucho después cuando se presentó una nueva novela de Tarzán donde iban a aparecer en formato literario estos personajes (¿se les escapó un spoiler?). Libros en los que poco después las sagas de Pelúcidar y John Carter también intercambiaron tramas.

Dark Horse recopiló las historias en un volumen, uno que recupera Diábolo Ediciones y que he podido disfrutar de lo lindo. Las historias están escritas por Len Wein y Denny O’Neill. En el campo de la viñeta tenemos a Allen Weiss, Michael William Kaluta y Dan Green. Grandes bateadores de la Edad de Bronce de los cómics. En la trama, dos exploradores que terminan en un mundo que nunca esperaron, donde se muestra la versión de Burroughs de la teoría pseudocientífica de la Tierra Hueca, esa que dice que existe un área en el centro del planeta, iluminado y caliente, viable para la vida gracias al núcleo fundido en su «cielo». Porque Pelúcidar está gobernado por humanos parecidos a los neandertales, así como dinosaurios y otros monstruos. Y los seres inteligentes que rigen son los mahar, una raza de seres parecidos a pterodáctilos con el don de la telepatía. Con una raza de seres simiescos que actúan como sus ejecutores. A lo largo de las historias, nuestros héroes lideran una revolución contra los mahar e intentarán encontrar el camino de regreso a casa.

Un verdadero pastelito para el amante del pulp. Cincuenta años después, todas estas historietas, son recopiladas en una edición de calidad, tapa dura, que hará las delicias de todos los seguidores del buen cómic de aventuras.

Reseña: Hulka. Empezar de Cero, de VVAA

Tras un muy buen sabor de boca con la serie de TV de She-Hulk en cuyo capitulo final los guionistas se ríen de si mismos, de nosotros y de todo lo sucedido en la serie; algo muy en la línea de lo que siempre se pretendió en los cómics clásicos de Hulka donde el cachondeo con el tema de romper la cuarta pared era tremendo; uno está claro que quiere leer y saber más de la abogada verde. Y si os lo preguntáis (como hice yo) el cómic actual que está más en la línea de lo que promueve la serie de de TV es, sin duda, Hulka: Empezar de cero. Lo dice la sinopsis: «Tiene una carrera como abogada que reconstruir, amigos a los que recuperar, y tal vez representar ante los juzgados, y enemigos que… bueno, quizás no quiera reconectar con ellos, pero ellos están deseando reconectar con la Amazona Esmeralda. Ha llegado el momento de recorrer un camino nunca transitado por ella… ¡y quizás por todo el Universo Marvel!».

Hulka: Empezar de cero es un cómic palomitero de los de disfrutar sí o sí. En especial, si venís directamente de disfrutar el personaje en pantalla. Así es más fácil que os encante. Y si no, no me cuesta nada hacer una especie de guía del personaje y recomendar algunos cómics suyos que, por cierto, gracias al momentazo de la chica verde, se están reeditando gracias a Panini como es toda la saga de Byrne. ¿Quién es Hulka? Su verdadero nombre es Jennifer Walters y es prima de Hulk. Hace mucho tiempo, Jen recibió un disparo de un mafioso y su primo Bruce Banner le hizo una transfusión de sangre para salvarle la vida. Su sangre irradiada con rayos gamma la convirtió en una gran mole verde que aparecía cuando se irritaba al igual que le pasaba y pasa a su primo. Ya habréis visto que el origen no es como se ha visto en la serie de TV. Pero muy parecido, sí. No obstante, no solo esto hace que Jen sea interesante. A lo largo de los años, Jen ha tenido mayormente control sobre su forma Hulk, nada que ver, con la cantidad de mal tragos que ha pasado su primo. Y muy pronto, lista y más espabilada para todo como son las mujeres respecto a los hombres, ella es capaz de transformarse a demanda. Y lo chulo es que empieza a ver que el modo Hulka es en el que prefiere estar casi todo el tiempo. Jen lo elige. Ser Hulka la hace sentir fuerte, segura, confiada, sexy y casi con un chasquido es capaz de ayudar a las personas que la necesitan… Pero esta señorita tan excitante y potentona encima trabaja de abogada y ayuda al prójimo con su intelecto para evadir la Ley con esos resquicios que un buen letrado siempre encuentra. Y es verde como el equipo de moda…

O sea, que lo tiene todo para triunfar. Además, una cosa que me encanta del personaje es que le gusta ser superheroína. Por lo general, no es necesario convencerla. Es una abogada con un verdadero amor por la ley y la justicia pero convertirse en héroe es una extensión natural de sí misma. Porque Jen es buena, pero también es interesante. Y divertida como pocas, de las que saber pasárselo bien. Fue uno de los primeros personajes de Marvel en romper la cuarta pared y esto da pie a todo tipo de bromas con el lector que como mínimo te sacarán una sonrisa.

Autores nuevos como los que tratan este TPB hacen que el personaje se reinicie y se desarraigue. Algunos personajes, como Spiderman y Hulk, impulsan grandes historias de Marvel. Algunos como Hulka suelen ser secundarios. Pero esto ocurría en otras décadas. Ahora podemos disfrutar de aventuras de chicas interesantes como las que se proponen en este tomo, y os aseguro que no son historias feministas, y eso, en mi opinión, que esté conseguido, lo convierte en una dinámica de personaje interesante.

Hulka lucha continuamente por reconciliar su propia identidad y necesidades por el bien común. Es una gran jugadora de equipo, pero cuando se convierte en el centro de atención, es complicada y fascinante. No se me terminan los halagos ante cómics así tan disfrutables.